Los sábados, son los días más solitarios para mí, él no está presente, es su día libre...bueno el único día en que uno puede respirar del ajetreo en el que vive allí.

Cada vez que llega ese día mis pensamientos comienzan a extrañarlo, mi corazón no se acelera, pero se siente un poco solitario...pesado sería la palabra, y mi imaginación está en las nubes, en donde él y yo estamos juntos.

Sólo unos pocos días alcanzan para caer en la red del amor o... ¿tal vez del gusto? A mí realmente me atrae pero... ¿Es amor?

No lo sé.

Y es mejor no saberlo. Por lo menos, no ahora.

Tengo cosas en las que pensar además de eso. Mi madre me necesita y yo necesito que ella esté saludable...tal vez un día de estos él y yo...no sé; ¿volvamos a salir?, pero quisiera que solo fuéramos los dos, solos, sin terceros.

Creo que así sería mejor, para ver si nuestros labios se pueden tocar, al menos una vez.