Desearía no sufrir por personajes ficticios como si fueran reales.

Bueno, esto es un poco ambiguo XD

En el fondo me gusta que en mi cabeza sean como personas de verdad (aunque eso luego me duele cuando pienso que son ficticios), hablar de ellos como si existieran, celebrar sus éxitos, sufrir con ellos, preocuparme, dejarme sorprender y aun así pensar "eso es muy suyo" (esta frase la uso mucho con Jace XD) e incluso felicitarles los cumpleaños cuando me acuerdo.

Sin embargo, acabo de terminarme Seis de cuervos (o six of crows) y estoy preocupadísima por cierto personaje que se ha tomado la droga esa que querían interceptar y ahora tiene un síndrome de abstinencia que podría matarle...

Y a otro personaje le han secuestrado, y otro se ha puesto a hacer cada tontería (pero con su estilo. Sigo preguntándome cómo ha logrado robarle la hebilla de los zapatos) que me estoy poniendo histérica!

Y ahora mismo lo que quiero es que el primer personaje no se muera por el síndrome de abstinencia ;-;