—¡Esto aún no se acaba!— Issei que había aterrizado lejos del gigantesco monstruo desefundó su brazo dragonico. —¡Una de las 5 habilidades de Magic Man concentrada en una sola mano!— Colocándose en cuclillas tocó con la palma de su mano de dragón el suelo. —¡Destrucción de hielo!—

Estacas de hielo emergieron del suelo teniendo el largo de 5 metros, la nube de polvo que no dejaba ver con claridad al ciempiés se dispersó en todas las direcciones gracias al ataque del castaño dejando ver al gran animal de cien patas elevado en el aire al ser traspasado por todas partes.

—Jeje, lo logré...— Dijo aliviado. —Las estacas de hielo lo detien...— Antes de terminar sus palabras el ciempiés abrió su boca mostrando sus filosos dientes como los de un tiburón, no pasó mucho para que una extraña energía dorada se empezará a concentrar y sin previo aviso fuera disparada al superhéroe. —¡Mierda!— La sorpresa de Issei fue notoria, nunca se espero un ataque sorpresa pero nuevamente [Aceleración del pensamiento] y [Repartición de mente] le salvaron el trasero.

Dos de sus habitaciones mentales estaban en sorpresa, las últimas dos trabajaban con [Aceleración del pensamiento] para deshacer esa impresión y lo ayudaron a reaccionar a tiempo.

—¡Una de las 5 habilidades de Magic Man!— Issei imbulló su puño en magia y reforzó sus piernas para lanzarse a la masiva bola de poder dorada a gran velocidad desatando una ráfaga de luz azul por el rastro de Praná. —¡Destello destructivo!— Finiquitó en un grito a la vez que golpeó el ataque.

El lugar fue iluminado por una intensa luz azul y dorada, el gran choque alteró la topografía del suelo inmediatamente a la vez que olas de viento fueron disparadas por todos lados mandando lejos árboles, autos junto a escombros.

—¡¡¡¡Grrrrr!!!!!— El gruñido de Issei fue a causa del dolor, sus huesos se hacían mierda instantáneamente a la vez qué sentía como su piel era quemada junto a su traje de Magic Man. —¡Aaaaarrrrkkkk!—

El ataque del ciempiés estaba arrasando con el pobre castaño, los pies de este hacían surcos en el suelo cuándo la bola de poder lo arrastraba hacia atrás con una gran fuerza y presión sobre él, rápidamente quiso apartarse de la trayectoria de la esfera de energía pero su cuerpo no le respondía.

[No puedo detenerlo.]

[Es muy fuerte.]

[¡No puedo morir!]

[¡Voy a desaparecer!]

Las cuatro habitaciones mentales de Issei estaban gritando del pánico por tener a la muerte enfrente, no había manera de que pudiera devolver el ataque, simplemente la jodida fuerza arrolladora de está lo aplastaba como si fuera algo insignificante.

—¡¡¡MALDICIÓOON!!! [¡PRANÁ BOOSTER 102%!]—

Sus Circuitos brillaron intensamente, el calentamiento de los mismos aumentó de manera bestial por él sobre esfuerzo de usar tanta magia para reforzar su cuerpo, además, con el inmenso calor que generaba la bola dorada simplemente Issei quería morirse por el gran sobrecalentamiento de los Círcuitos Mágicos que lo cocinaba lentamente cómo pollo dentro de una olla a presión.

Lo otro fue su brazo, había golpeado con su puño dragonico, y aúnque este  contaba con las resistentes escamas azules a la vez que liberaba grandes cantidades de aire congelado tanto que podría llegar a una temperatura de 5 centígrados, tan frío que podría congelar el agua en unos instantes, aún así la bola de poder no parecía ser afectada.

—Maldición...— El ataque empezó a devorar su antebrazo de dragón y siguió su camino hasta consumir al superhéroe. —No puedo morir... Oka-san... Oto-san... Ayuda...—

Booomm!!!

Issei salió volando para luego estrellarse duramente contra un árbol que detuvo su recorrido, parte de su traje estaba quemado al igual que su piel producto del ataque que estuvo apuntó de mandarlo al otro mundo de no ser porque uso toda su magia para reforzar su cuerpo y órganos salvando al castaño de una muerte segura.

—Joder.—

El estado del ojo miel no era el mejor, apesar de sobrevivir gracias a que logró reforzar su cuerpo con toda su magia esto también terminó siendo contraproducente, sus Círcuitos Mágicos estaban tan calientes que si intentará hacer algún hechizo seguramente se terminaría dañando alguno de sus 52 Círcuitos, lo cuál, no fue muy conveniente a largo plazo. También habría que tomar en cuenta el gran desgaste mágico acusa de usar tanto Praná, se sentía sin fuerzas. Aún así su mirada no vacílo o mostró resignación a la muerte, tenía que buscar una manera de sobrevivir fuera como fuera, "el no quería morir".

Usando [Gradation Air] se imaginó no sólo una espada sino el método de creación de está de principio a fin, sumado a tener en cuenta los materiales del arma como si fuera un plano de construcción que lo guiaba para el resultado final.

Sólo fueron unos segundos, pero cuándo la construcción de Praná se convirtió en una espada uso una magia simple de [Refuerzo] para que el arma no desapareciera de la nada y fuera más duradera como poderosa. Apesar de este hecho Issei no estuvo muy convencido del todo, no era seguro que le hiciera daño al gran ciempiés con esto puesto que sólo era un sencillo objeto creado con Maná él cuál no sería muy eficiente que digamos.

Al parecer el gran ciempiés no iba a esperar ni un minuto más y se lanzó al castaño con vehemencia dispuesto a devorarlo de un bocado. Issei por su parte no esperaría que eso sucediera y sin consultarselo por segunda vez lanzó la espada creada en su mano mismo que fortaleció con todo el [refuerzo] posible logrando que está apuñalará uno de los cuatro ojos del gigante bicho.

—Funcionó.— Dijo con esperanzas. —Pude lastimarlo pero fue necesario imbuir la espada de tanto refuerzo que termine por agotar las últimas gotas de mis reservas mágicas.—

El ciempiés se retorció cuándo el dolor lo invadió por haber sido apuñalado en uno de sus brillantes ojos, Issei aprovechó este momento y se puso de pie aúnque fue más fácil decirlo que hacerlo, sus piernas temblaban tanto que hasta parecían gelatina por lo mucho que se movía, el ser estrellado contra el árbol había hecho bastante daño a su columna vertebral algo que ciertamente lo inquietaba por el miedo de quedar inválido, pero mientras siguiera sintiendo su cuerpo de la cintura para abajo supuso que todo debería estar bien.

Usando un árbol como ayuda para no caer de nueva cuenta empezó a alejarse del enorme ciempiés que seguía creciendo, al dar unos pasos sus piernas perdieron fuerza cayendo sin más al césped, aún así usó sus últimas fuerzas arrastrándose por el suelo de forma lamentable intentando huir. La espada clavada en el ojo de ese monstruo debío detenerlo por los menos unos minutos, momento que no iba a desaprovechar por ningún motivo, este era su oportunidad.

—Arg...—

Logró alejarse unos metros del ciempiés, la adrenalina del momento ciertamente le estaba siendo de mucha ayuda en ese instante ayudándole a no sentir tanto los daños en todo su cuerpo, pues su concentración estaba puesta en sólo huir con vida de ese lugar. Para su desgracia el gigantesco monstruo pareció acostumbrarse al dolor y agitando su cabeza mando lejos la espada que se encontraba enterrada en uno de sus ojos.

La expresión de Issei al notar esto fue de horror, sin fuerzas para ponerse siquiera de pie era presa fácil para el gigantesco ciempiés que se encontraba enojado, las esperanzas de salir con vida se esfumaron casi cómo padre abandonando a su hijo más o menos así, simplemente no podía evitar su inevitable muerte por más que quisiera.

—Mai... Peter...—

Ya en su lecho de muerte la imagen de las unicas personas que podría considerar su familia apareció en su mente cómo un consuelo o misericordia  ante su cruel destino. Simplemente lamentable. A su corta edad tuvo que experimentar que era vivir sin padres y en un orfanato dónde lo molestaron al igual que sus amigos mismos que al final terminaron muriendo frente a sus ojos por un brutal terremoto que en retrospectiva cambió su vida haciéndole conocer la magia.

—[Supongo que morir no sería tan malo].— Se dijo así mismo en su pensamiento.

Por otro lado el gran Ciempiés se acercó lentamente al castaño quién se arrastraba por el césped de forma lamentable, Magic Man había sido derrotado, algo que irónicamente nunca sucedía con los héroes de historietas y cómics en los cuáles era imposible pensar quel villano de turno lograría derrotar al superhéroe.

—Grrrrrrr....— Fue el gruñido del gigantesco monstruo.

Estaba molesto con Magic Man por el daño que le había provocado, mirándolo fijamente con esos cuatro grandes ojos dorados que petrificarían a más de uno Issei no fue diferente. Él sólo era un estúpido que quería fama y reconocimiento siendo un héroe, apenas hace unas cuántas semanas se empezó a tomar ese trabaja en serio pero todavía no estaba preparado, simplemente cuándo alguna situación lo sobrepasará el se encontraría perdido cómo las manecillas de una brújula enloquecidas.

—Sigo en la línea de fuego, todavía no puedo morir.— Se dijo así mismo.

El castaño con sus últimas fuerzas se puso de pie aúnque con esa acción sus oídos captaron con claridad el sonido de huesos agrietándose al instante, aún así decidió que lo mejor era huir sin importar qué o quién se lo impidiera. Mandando a la mierda su preocupación por sus Círcuitos Mágicos los volvió a activar, estaban jodidamente calientes, tanto que alguno terminaría por dañarse pero un huevo le importó, podría quedarse sin Círcuitos si así fuera pero primero era su integridad, con vida cualquier cosa se solucionaría después y su sentido común le dictó eso mismo.

La cuestión aquí es quél mago superhéroe ya no tenía más Praná para convertir en Maná por medio de sus Círcuitos, y eso simplemente mandó sus esperanzas de salir con vida a la mierda, aún así una idea se le vino a la cabeza cómo una epifanía, hasta casi pensó que tenía [Aceleración de mente] y [Repartición del pensamiento] activas sino fuera porque recordó que su fuerza vital estaba en cero.

—[¿Y si recargo mis Círcuitos Mágicos tomando el Maná de ambiente?].—

No hubo tiempo para cuestionarse o debatirse si estaba en lo correcto o no, simplemente el gigantesco ciempiés se dirigía a él ha gran velocidad, no se lo pensó dos veces y decidió ejecutar ese método de acción el cuál no era muy diferente a como apostar en la lotería. Rápidamente tomó una boca nada de aire frío para concentrarse lo más que podía, aunque fue más fácil decirlo que hacerlo cuándo un jodido monstruo que seguía creciendo a pasos ridículos te acechaba destruyendo los árboles que se le atravesaban en el camino.

Para su fortuna terminó por funcionar, sin Praná que alimentará los Círcuitos Mágicos estos tuvieron que buscar otra fuente de alimento que les permitiera hacer su trabaja de convertir la fuerza vital en energía mágica.

Issei no perdió tiempo y usando su confiable [Praná Booster] a toda su capacidad reforzó su cuerpo tanto como un globo apuntó de estallar, sin pensárselo mando toda su magia a sus piernas, potenciando cada fibra, tejido muscular, tendones y huesos independientemente si eran diminutos o no ninguno se escapó del hechizo de refuerzo.

En un instante el ciempiés terminó por devorar al castaño o eso era lo que parecía porque este último fue tan rápido quel gran monstruo ni siquiera se percató de cuándo el oji miel se había movido de su lugar, y sólo lo vio rodando por el césped al esquivar el ataque del bicho. Poniéndose de pie rápidamente Issei siguió sustentado su magia de refuerzo usando el proceso de tomar Maná de ambiente que recargaba sus Círcuitos Mágicos.

—[Puedo vencerlo].— Se dijo en su pensamiento.

Preparando su brazo dragonico estuvo listo para derrotar y salir con vida de este lugar a toda costa fuera cuál fuera el precioso apagar.

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Con Netami Hoshi.
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Con mi hermanastra en mis brazos caminé sin rumbo en un amplió bosque, no sabía en dónde me dirigía en lo absoluto cuándo mi mirada estaba puesta en Kagi usando la Sacred Gear en todo momento para detener el tiempo de está evitado que muera. Por lo pronto debo buscar un hospital o un lugar en el cuál ayuden a mi hermana.

Mientras caminaba sin despegar mi mirada de Kagi pensaba en que era ese monstruo ciempiés que había aparecido de la nada, aúnque sentía una extraña sensación que me decía qué tenía algo que ver pero no supe el "qué". Intentaba refrescar mi memoria para recordar los momentos anteriores a lo sucedido, llámenme loco pero podría decir con seguridad que tuvo que ser algún experimento de mi hermana que se salió de control o una situación parecida.

—[Espera un momento, cuándo me levanté e intenté salir del laboratorio de Kagi deje caer algo de una mesa].— Fue su pensamiento. —[No estoy seguro ¿pero eso tuvo algo que ver?]— Se preguntó en su cabeza.

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Horas anteriores.
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—Kagi Nee-san...—

En una sala de paredes blancas y mesas de investigación se encontraba en una camilla acostado Netami Hoshi con vendas blancas manchadas de sangre envueltas en su tórax descubierto.

—Netami Nii-san, ¿ya despertaste? ¿Qué te pasó? ¿Porqué llegaste así?—

—¿Dónde estoy?—

—Sobre eso, estamos en mi laboratorio. Llegaste todo herido.—

El ojos heterocromáticos se pudo relajar, dejando escapar un suspiro los recuerdos frescos de su pelea contra Peter llegaron a su cabeza rápidamente, de inmediato en su espalda un escalofrío lo recorrió, sino fuera por su hermanastra hubiese muerto en esa lucha sin duda alguna asique ahora que tenía la oportunidad decidió agradecerle a Kagi.

—Gracias.—

—¿Eh? ¿Y porque?— Confundida alzó una ceja.

No entendía el porqué su hermano le había dado las gracias y fue una sorpresa para ella principalmente cuándo sabía de primera mano que Netami raramente daba las gracias por algo.

—Si no me fueras dado esa jeringa con el líquido llamado no se qué, seguramente fuera muerto.—

—¡¿Muerto?! ¡¿Y porqué?!— La preocupación y la ansiedad la invadió.

—Bueno.— Intentando levantarse un dolor inmenso lo invadió de inmediato. —Grrr...— Con un gruñido de dolor cayó de nueva cuenta en la camilla mientras unas lágrimas se asomaban por los rabillos de sus ojos. —Me siento cómo la mierda, me duele el cuerpo.—

Kagi no pudo evitar dar unas risitas por lo gracioso que fue ver a su hermano en esa situación, fueron pocas las veces en la que veía actuar a Netami de forma graciosa a sus ojos pero entendió que este quería despreocuparla por su estado.

—Jaja, Nii-san si que eres gracioso.— Dijo limpiándose las lágrimas de diversión que se asomaban por los rabillos de sus ojos. —Te lo agradezco de verdad. Pero ya no te sobre esfuerces más, no se porqué lo haces pero no me importa, quiero estar con mi única familia.—

—¿Kagi Nee-san?— Netami alzó una ceja.

¿Porqué su hermana había dicho eso? ¿A qué se refería? Acaso....

—[No puede ser].— Fue su pensamiento.

Metiendo su mano en el bolsillo de su pantalón buscaba algo desesperadamente pero al no encontrarlo lo comprendió.

—Ka... Gi... Nee-san...—

—No te preocupes, yo me encargaré de Magic Man, y después de que todo eso ocurra me dirás dónde están las personas a las que secuestrastes.— La resolución en los ojos de la castaña paralizaron a Netami de siquiera decir una palabra.

Ella descubrió su duelo con Magic Man y que tenía a personas secuestradas gracias ha que había tomado su celular el cuál recordó unos días antes que le mostró a ésta la contraseña del mismo. Ahora entendió porqué casi toda la población mundial nunca daban a conocer algo tan privado como la clave del teléfono así fueran familiares.

—Kagi Nee-san, olvídate de eso y no hagas ninguna tontería.— El pelinegro intentó persuadir a su hermanastra la cuál ya estaba decidida.

—Muy tarde, ya le envié la dirección de este lugar a Magic Man. Lo convenceré para que te deje en paz.—

Con decisión la castaña de 13 años de edad se dirigió a una de sus mesas de trabajo tomando un revólver, la piel de Netami se erizo como nunca preguntándose dónde demonios su pequeña hermana había conseguido un arma así, hasta que recordó que se lo había dado cómo protección por si alguna vez lo necesitará para salvaguardar su vida. Por parte de Kagi está nunca se imaginó que se le ocurriría usarlo contra un superhéroe cómo lo era Magic Man y ciertamente el nerviosismo al igual que la ansiedad invadió su cuerpo.

—Si no me equivocó él ya debería estar aquí. Regresaré pronto Nii-san.— Saliendo de su laboratorio dejó a un impactado Hoshi sólo.

Para el ojos heterocromáticos el imaginarse a su hermana con las manos manchadas de sangre lo aterro, no quería que su hermana pasará por algo así teniendo que vivir con la carga de haber asesinado, aúnque sólo había dicho que intentaría persuadir a Magic Man para qué lo dejará en paz estaba inseguro, ¿ese idiota aceptaría algo así después de todo lo qué él hizo? Eso era imposible. Levantándose de la camilla con pura fuerza de voluntad camino tambaleando hacia la puerta, debía evitar que Kagi hiciera una locura, pero de la nada sus piernas perdieron fuerzas y cayó sobre una de las mesas de trabajo.

—Cof Cof...—

Tosiendo un par de veces abrió sus ojos lentamente viendo el daño que había causado, todos los matraces sobre la mesa se habían hecho pedazos dejando regado por todo el suelo los líquidos correspondientes de cada uno, y para los que no supieran que era un matraz pues básicamente son recipientes generalmente de vidrio qué presentan en varias formas en una amplia gama de tamaños, pero se caracteriza por un cuerpo ancho y cuello estrecho, utilizándose en laboratorios para hacer mezclas o medir líquidos.

—Maldición.— Maldijo el pelinegro.

Preocupado por el desastre que había hecho recordó que su hermana era más importante asique se obligó ha ponerse de pie para luego salir del laboratorio sin percatarse que los líquidos de los diferentes matraces se habían mezclado  en el suelo, y un ciempiés que estaba encerrado en una caja de vidrio antes de que está cayera haciéndose pedazos fuera liberado, el pequeño bicho se encaminó a la mezcla y probó un poco de la misma.

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Actualidad.
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Plash!!!

Issei había sido estrellado contra un árbol producto de una ráfaga de poder por parte del ciempiés, el choque hizo crujir sus hueso pero afortunadamente logró congelar su espalda con ayuda de su antebrazo de dragón reduciendo el daño considerablemente. Sus Círcuitos Mágicos brillaron con más intensidad al momento de usar [Aceleración de mente] y [Repartición del pensamiento] para encontrar una idea el cuál le permitirá ganar.

El enemigo seguía creciendo a niveles titánicos, técnicamente el gran gusano de cien patas tenía ventaja gracias a su tamaño que le proporcionaba una fuerza abismal igual al dé un demonio de clase media a mitad de camino o un ángel de 2 alas, simplemente por mucho refuerzo que usará no lograría igualarlo pero todo cambiaba si se hablaba de velocidad, con [Praná Booster] a su máxima capacidad podía igualar la rapidez de un diablo caballero, sinceramente algo muy bueno en su situación ya que gracias a eso a logrado sobrevivir a los brutales ataques del gigantesco bicho.

—Usaré mi velocidad y atacaré.—

Con eso en mente uso [Gradation Air] para crear una espada y usando todo el refuerzo en sus piernas atacó en múltiples direcciones a una velocidad tremebunda la cuál el gran ciempiés no pudo seguir con la vista. Issei era tan rápido que lo único que se pudo ver de él fueron sus Círcuitos Mágicos que por la rapidez a la que se movía eran borrones de luz que golpearon arriba, abajo, derecha, izquierda y por todos el cuerpo del titánico gusano de cien patas.

El ciempiés pareció abrumado por la lluvia de ataque que también fueron acompañados por lo que parecían Kunais de hielo que se clavaron en su cuerpo, soltando un gruñido lamentable el castaño vio esto como una oportunidad y a una gran velocidad uso su espada para herir los cuatro ojos del bicho quitándole la visión.

—[Ahora no puede ver. ¡Debo aprovechar este momento!]— Fue su contundente pensamiento.

Aterrizando en el suelo vio su espada creada por su magia de [Gradation Air] la cuál fue cuestión de segundos que se hiciera pedazos al no haber soportado el duro cuerpo del Ciempiés, se deshizo del arma para luego apuntar con su mano dragonico al gran animal. Iba a terminar esto, sus Círcuitos Mágicos se estaban calentando cómo el carajo al punto de que si los esforzarba un poco más uno se dañaría, no de hecho ya alguno se tuvo que haber dañado, alejando las dudas junto a esos pensamientos de su cabeza Maná envolvió el antebrazo de dragón.

El cuerpo de Issei emana vapor como agua hirviendo por lo caliente que estaban sus Circuitos, inclusive el castaño tuvo la necesidad de caer al mundo de los sueños por el dolor insufrible que sentía al punto de ser inhumano. Tragando sus docenas de dolores exprimió su fuerza de voluntad por vivir pase lo que pase, sólo tenía que acabar con el maldito bicho gigante el cuál sin duda quería devorarlo lenta y dolorosamente algo que él obviamente no permitiria.

—Aquí voy.—

Poniéndose de cuclillas tocó el césped con la palma de su mano y sólo bastaron segundos para que estacas de hielo de 10 metros emergieran del suelo atravezando al ciempiés que quedó suspendido en el aire. La sangre violeta del gran bicho salpicando en múltiples direcciones no se hizo esperar y al tenerlo inmovilizado se acercó al gran gusano de cien patas. Desde niño Issei siempre quiso decir unas palabras que lo marcaron en el orfanato producto una serie animada, y ahora que tenía la oportunidad no la iba a desaprovechar por nada en el mundo importandole menos sus heridas tan graves cómo para matarlo desangrado o la situación tan precaria en la que estaba.

—Eres un ser increíble, diste lo mejor de ti y por eso te admiro. Pasaste por varias transformaciones, fuiste tan poderoso que todos nosotros te odiamos. Espero que renazcas como un buen tipo, te estaré esperando para pelear.— Camino hasta estar a centímetros del ciempiés. —Aúnque bueno, lo de que renazcas olvidado mejor.—

Tocando con su mano la enorme cabeza del ciempiés bombeo por última vez Maná a su antebrazo de dragón para empezar a congelar de manera abismal al gran bicho que sin poder moverse por las gigantescas estacas que lo atravesaban fue convertido en una estatua de hielo literalmente antes dé al segundo siguiente hacerse pedazos como si fuera cristal.

Issei por su parte se pudo relajar, apagando sus Círcuitos Mágicos el pensamiento de que pudo salir muerto lo invadió aúnque apartó esas cosas de su cabeza, mirando ahora su antebrazo dragonico lo observo anonadado, el increíble poder de este era indudable, sólo con un poco de Maná logró potenciar de forma bestial su maldición al punto de congelar a un monstruo con ese tamaño así nada más, definitivamente era su As bajo manga que lo había salvado en múltiples ocasiones.

—Ahora lo que quiero es un buen baño.— Dijo con cansancio.

Su traje de Magic Man estaba vuelto girones como si fuera estado en una licuadora, bañado por la sangre del Ciempiés se sentió pegajoso y asqueroso a la vez. La adrenalina del momento se esfumó para desgracia del Castaño que empezó a sentir las consecuencias de la batalla, su cuerpo estaba tan dañado al punto de que si se ponía de pie sería un milagro, sus huesos estaban hechos mierda en el mejor de los casos y el simple hecho de respirar era una agonía para el pobre Issei que cayó en el mundo de los sueños.

Fin del capítulo.

Hola gente, espero que les allá gustado el capítulo de hoy. No tengo más que decirles, se despide su servidor ZanDiosBlack_Fic_666 y nos vemos hasta la próxima.

Palabras escritas: 4000
(Si que me costó.)