LA VIDA DE HOLLY BRIGHTWELLL se había tornado complicada desde el día en que reprobó por primera vez y con tan solo diecisiete años el examen nacional para ingresar a la universidad. Siempre alegre intentó mantener su actitud positiva frente a esta situación, y se atrevió a intentarlo una segunda vez fallando nuevamente. Luego realizó una tercera creyendo que era la bencina y cuando llega la cuarta "F" decidió dejar de intentarlo.

Pero a pesar de ello su actitud alegre y positiva prevalecían con fuerza en su personalidad.

Creía con firmeza que si trabajaba duro y ahorraba mientras disfrutaba del presente podría tener una vejez tranquila y con una pensión digna, así que desde el momento en que obtuvo una rotunda "F" en el examen nacional se colocó manos a la obra buscando trabajo y dando en lugares que son totalmente de bendición. Durante la mañana se esforzaba laburando en "Ma'c diner restaurant" donde ejercía como mesera, mientras que por las tardes realizaba aseo en una clínica veterinaria que pertenecía a una cadena de gran renombre que abarcaba gran parte del país Americano y otros del medio oriente.

Le gustaba en demasía lo que realizaba: poder atender con una sonrisa a los clientes, aunque muchas veces la insultaban y denigraban, no tenía precio. Y la parte del día que más le encantaba era cuando debía ir hasta el hospital de animalitos para poder laburar como limpiadora y poder disfrutar haciéndole mimos cuando los profesionales no estaban presentes.

Pero en la vida de Holly no todo era alegría.

Tenía la mala suerte de cargar con una madre inoperante que estaba totalmente sumergida en el alcohol luego de que su padre las abandonase por otra mujer más joven y bella cuando ella tan solo tenía diez años. La mujer que la engendró comenzó a despreocuparse de la pequeña y a despreciarla sin razón alguna, aunque muy en fondo sabía que era porque la mas joven de los Brightwell se parecía al hombre que les había roto el corazón.

Y aquello no quedaba tan solo ahí.

Tuvo que ser criada por su abuela materna y mientras crecía se fue dando cuenta que las mujeres que conformaban su familia estaban destinadas a sufrir por amor.

Su abuela vivió gran parte de su vida siendo agredida en todos los sentidos por su abuelo.

Su pobre tía quedó plantada en el altar.

Y su madre quedó totalmente desolada por el abandono de su esposo.

Así que ella se hizo una promesa y era que no dependería ni sufriría por ningún hombre. Sería libre, independiente y no se dejaría pisotear por nadie.

Aunque ni siquiera era capaz de concretar una relación y sabía que era producto del miedo que sentía de poder salir dañada y terminar igual que las mujeres de la familia Brightwell.

Durante su adolescencia paso desapercibida ante los ojos masculinos debido a su poco interes en arreglarse y por supuesto que por su peso. Y ahora que ya era una adulta de veintiún años esa situación seguía casi igual.

Casi porque conoció el maquillaje, los tintes y todo lo "femenino", y quedó totalmente cautivada.

Y porque por primera vez sentía una atracción real por alguien.

Y ese alguien era el medico veterinario Damian Wayne: un hombre demasiado hermoso, perfecto, pulcro y exitoso como para fijarse en ella.

Porque la rubia tenía contada las veces en que Damian se volteaba a mirarla.

Pero que equivocada estas Holly Brightwell.

Demasiado equivocada.

¡Hola! Estoy muy emocionada por esta historia ¡Espero les guste tanto como a mi!

Cuéntenme ¿Qué expectativas tienen para esta historia? ¿Hay algo en particular que esperan ver? (Les ruego que contesten) 

Cuídense y feliz año 2025. Nos leemos pronto.