Desaparecida
Marie:
Alguien me ah agarrado por el brazo, su agarre es fuerte, me lastima me arrastra hacía una de las paredes de el salón y me acorrala con su cuerpo empiezo a sentir furia quién es este desconocido y porque me hace esto... Debajo de la capa solo se ven sus labios y colmillos apenas saliendo ¿Me quiere atacar?
— Ya no puedes hacer nada, si te ven correrás peligro tú y él— los gritos de terror se escuchan en la sala Agni ha clavado la estaca en el estómago de Marcus siento como las lágrimas caen por mi mejillas no puedo más lo tengo que ayudar.
—Quitate—digo decidida, siento como el poder corre por mis venas.
— No— dice decidido ¿Quién es este ser?.
— No sere responsable de las consecuencias sino te quitas.
— Uy que amargada —cuando estoy preparada para mostrar todo mi poder, él se quita la capa ,me quita la mía por fin veo su cara desearía que no fuese tan hermoso, es un elfo tiene una cabellera blanca que le llega a las orejas y sus ojos son un color agua, cada parte de su cara es perfecta parece un ángel o algo parecido, su cara me quita toda la ira y me quedo embobada con sus bellos ojos no quiero pero algo me dice en susurro que los mire, pero no puedo miro,otra vez a Marcus y duele,su toga blanca se ha teñido de un color carmesí Agni saca la estaca de el estómago de Marcus y el cae; un grito de tristeza y furia sale de mí todos los presentes se me quedan mirando, en ese momento el elfo con sus manos mueve mi cabeza para que no siga viendo y me besa... Quedó atónita, no me lo esperaba, trato de separarlo de mí pero una luz dorada nos cubre y desaparecemos de allí.
***
Casemiro:
Miro a Evelia y se lo que dice su mirada, tiene miedo, es difícil verlo pero no solo yo lo sentí cuando ví esa estaca traspasar a Marcus, los guardias se lo llevan y todos se empiezan a preparar para el banquete, se quitan las togas y la reina se sienta su trono, perece que no le importa tener un poco de sangre en la falda de su vestido en cambio Evelia se retira de la cena para cambiar el vestido... Todos los invitados empiezan a hablar y la música inunda el salón invitando a bailar con una hipnotizante melodía, no se que se hizo Marie pero espero que no esté muy lejos, veo a Diane que me da la señal, que significa que Evelia está en posición los calabozos como el de Marcus están bajo tierra, salgo de el salón y dejo a Sam vigilando es hora de bajar a la acción...
(Mientras tanto en el instituto Cristallo)
—Señor Christian esta carta fue encontrada en la caja fuerte de la señora Stelle en ella se encuentra el nombre de quien es el padre biológico de los jovencitos Marie y Marcus— el abogado de la señora Stelle se pasea por la sala de la casa esperando con interrogación la respuesta de Christian pero este solo está sentado sin decir palabras sumergido en sus pensamientos, no ha abierto la carta pero tiene miedo de saber quién es el padre y que se los vallan a quitar, es algo importante un proceso legal que lo podría alejar completamente de ellos, recordó a Marie con su coraje y a Marcus la primera ves demostró sus poderes, en esta carta estaba escrito prácticamente el destino de los dos chicos, se encontraba entre la espada y la pared, decidir abrirla y descubrir una verdad o dejarla y que el abogado decidiera, este solo es un tutor legal, este no influye nada en las decisiones del estado, ellos decidirán después de abrir esa carta, él la abre lentamente — La carta está formada por dos partes la prueba del ADN y la segunda es algo escrito especialmente para el padre usted se está enterando principalmente de todo y si puede decidirá— Christian por fin decide abrirla completamente y la respuesta lo deja mudo...
Marie:
—Alejate mal parido ¿Por qué me besas?— me limpio con el antebrazo y doy unos pasos hacia atrás y siento como mi cuerpo por la gravedad cae pero la mano de este ser que no conozco me detiene, una raíz de árbol fue la que hizo tropezar estamos en un ¿Bosque?.
— Señorita Marie es un placer conocer a la libertadora de mi reino— él hace una pequeña reverencia — fue un honor sacarla de allí al parecer estaba pasando por un mal momento, de parte de todos los elfos le agradecemos el gran labor que está haciendo.
—¿Ah?— lo miro con interrogación— Ser precioso necesito que me lleves nuevamente al salón de banquetes— él levanta a una ceja interrogante y se queda allí sin decir palabra alguna.
—Creo que no puedo cumplir su petición señora.
—¿Por?—digo una voz más chillona de lo normal— Necesito estar allí Cas me necesita, Marcus lo tengo que sacar y necesito irme.
—No entiendo.
—¡Yo no entiendo porque me trajiste aquí!— grito.
— Si hacías que la reina te viera su plan no iba a funcionar y talvez fuese matado y cocinado completamente a tu querido hermano así que agradece más bien que te saque allí— cruzo los brazos.
— yo jamás te lo pedí.
— Pero lo necesitabas.
—Claro que no, yo pude haberlo hecho sola, pude haber controlado la situación.
—¿Tú? Querida eres tan débil como una oveja alejada de su pastor.
—¿Quien eres?
—¿Quien eres tú?
— Ahs ¿Por qué no me respondes de una vez por todas?—digo sin paciencia alguna.
—¿Por qué lo debería hacer?
— Solo llévame otra vez al palacio —digo molesta y cansada de este wey.
— Como usted quiera mi señora— él me agarra por la mano y nuevamente aparecemos en el salón ya toda la gente se ha quitado sus capas y yo todavía tengo la mía.
—¿Por qué me besaste si facilmente pudiste haberme agarrado por la mano la primera vez?—lo miro con cansancio.
— Porque no quería desperdiciar la oportunidad de besar a un bombón, además tenía que callar de una forma tus labios — siento el calor subir a mis mejillas por fin responde una de mis preguntas pero esta no tiene la respuesta que quiero, él toma el botón de mi capa y lo desabrocha dejando al descubierto mi vestido rojo, sus ojos se iluminan— Hermosa— con unos de sus dedos me toma por el mentón y alza mi cabeza— No me valla a decepcionar mi señora—el sonríe.
—¿Cuál es tu... — y antes de decir "nombre?" Ya ha desaparecido— Dios no puedo con tanto— digo en susurro miro de reojo a la derecha y veo a Cas salir por unas de las puertas que llevan al calabozo ya es hora...
Evelia:
Ya eh hecho lo que faltaba, controlar a los guardias fue fácil... Más fácil de lo normal la sangre de Marcus me dió más poder de el que quería y del que necesitaba, bajo las escaleras y me encuentro con Cas...
—¿En dónde está?— pregunta un poco atemorizado.
— Solo tienes que seguir derecho cruzar a la derecha bajar las escaleras y llegarás fácilmente—sus ojos me dicen todo está preocupado yo igual Marcus está peor de lo que lo quería dejar este no era el plan, se que Marie desaparecido de la nada y todo se está saliendo un poco de control— se que todo estará bien— digo para calmarlo, pero ni yo me lo creo.
—¿Eso creés?
— Lo sé— y lo beso, talvez nuestro último beso, me separó de él y lo miro—¿Nos vemos pronto?
—Nos vemos pronto— él se va por su camino y yo me voy por el mío, subo rápidamente a mi habitación y me cambio el vestido en tiempo récord y bajo nuevamente a mi pequeño trono y me siento en el. Mi madre me mira interrogante y su pequeña sonrisa se desvanece, me ha descubierto...
—Traidora por eso jamás te amé...—me agarra por el cabello y me levanta un dolor horrible recorre toda mi cabeza,quiero luchar pero su magia me deja sin movilidad se ha vuelto más fuerte nunca me debí haber metido en esto,algo se rompe es mi cráneo impactando con el gran trono de mi madre, nada me duele ¿así se siente morir? toda mi visión se empieza a llenar de una nube negra y sol veo a los invitados con una cara de horror, solo puedo escuchar los gritos de mi madre diciendo ¡Atrapenlos! Por último veo la cara de Cas y en un susurro le digo...
—Corre..
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