Apenas Jungkook había entrado al auto con sus dos mayores sintió su celular vibrar en sus manos y no lo revisó sino hasta que estuvo bien sentado en los asientos traseros con el cinturón de seguridad rodeándole.

Tragó saliva con nervios al ver que era la dirección del alfa que acababa de conocer y que además aparecía en cada uno de sus sueños húmedos.

No recordaba haberlo visto de alguna parte, por ello es que no le parecía normal que realmente existiera.

¿Si soñaba que ganaba la lotería también se haría realidad? Sería genial que si fuera posible.

Sin embargo ya no pudo pensar más, la voz de Jimin lo sacó de su trance.

—Uhh, ¿El alfa bonito te mandó su dirección? —Escuchó a Yoongi gruñir y por ello ambos rieron por lo bajo—. Amor, tu eres diez veces más guapo para mí.

Jungkook volvió a reír y asintió a la pregunta del Omega mayor.

Se sentía afortunado de haber ido con él, puesto que luego de ese encuentro ambos buscaron ropa, zapatos y un buen vino para llevar a la cena.

Finalmente el auto llegó a su destino, la casa que Jimin y Yoongi compartían, luego bajaron del auto y así entraron sin más.

—Hyung... Hay algo que aún me tiene inquieto, ese alfa aparece constantemente en mis sueños. —Jimin dió un sorbo a su café y miró a Yoongi, este ya se encontraba mirando a Jungkook a pesar de que no estaban hablando con el.

—Ah, bueno, lo más raro aquí es que lo mismo me pasó con Yoonie, ¿Verdad, amor? —El susodicho asintió y terminó su café de un trago.

—¿Cómo dijiste que se llama el chico? —Por primera vez en mucho rato el pálido hablo, en realidad era normal en él.

—Taehyung, Kim Taehyung. —Se vió pensativo al mayor tras la respuesta, como si analizara lo que iba a decir. Y así vino la respuesta que ninguno de los omegas esperaba.

—Lo conozco. —Y al ver las caritas sorprendidas y curiosas solo siguió—. Los hermanos Kim, Seok-Jin y Taehyung, los conozco porque eran de la misma zona que yo, en Daegu, fuí a la escuela con Jin.

Jimin tragó su café con algo de pesadez.

El claramente sabía la "condición" demoníaca de su novio, pero no esperaba que aquel chico que conoció Jungkook fuera un demonio también, puesto que "Daegu" era el código para "Infierno" entre la pareja.

—¿Son buenas personas? Quiero lo mejor para mí pequeño dongsaeng. —Respondió Jimin preocupado, recibiendo un beso por parte de su hombre.

—Lo son, son muy amables y cálidos, no hay de qué preocuparse, Tae es un muy buen chico. —Un nuevo beso hizo sonreír a Jimin.

Y Jungkook suspiró sonriente, quería un amor así de hermoso, y aunque aún no lo sabía, lo tendría.

[Por la noche]

—Tae, cariño, es la décima vez que te acomodas la corbata en lo que va de hora.. —Su hermano mayor regañó con una risita haciéndole suspirar—. Te ves muy guapo, de seguro lo enamorarás muy rápido.

Taehyung enrojeció y bajó la mirada. Estaba nervioso, su hermano podía ver sus manos temblar.

—¿Tu crees, Hyung? —El susurro apenas fue perceptible, pero el mayor logró escucharlo, a ello asintió con determinación.

—Pero claro que sí, ¿Cuando te he mentido? ¿Hm? —El alfa sonrió y su hermano siguió—. Me tienes como hermano, además eres simpático, gentil y un gran chico, Jungkook va a caer por tu hermoso corazón.

Una sonrisa cuadrada apareció y antes de poder decir algo el timbre sonó.

Su ansiedad volvió hasta que sus manos fueron tomadas por las de su hermano mayor.

—Escucha, tranquilo... Namu y Seokie van a abrirles, tenemos unos minutos más —Trató de calmar el omega—. Todo estará bien, solo respira y recuerda estar seguro de ti mismo, verás que todo saldrá excelente.

Él asintió más tranquilo, sonrió en grande y abrazó a su hermano.

—Gracias Hyung... Eres de gran ayuda, realmente no sé qué haría sin ti. —Tras aquello buscó el calor de su hermano mayor, siendo correspondido en un fuerte abrazo de oso—. Entonces... ¿Cómo me veo?

Seok-Jin rodó los ojos y Taehyung rió por lo bajo.

El mayor de los dos dió un pequeño retoque a sus cabellos y le sonrió ligeramente, algo melancólico, su pequeño hermanito había crecido, ya era hora de verlo ser feliz con la persona que estaba destinada para el.

—¿Listo para bajar? —Al recibir el asentimiento por parte del pelirrojo tan solo abrió la puerta de la habitación y le dió acceso para que saliera.

Ambos bajaron las escaleras, siendo el menor quién tenía la delantera, pronto estuvieron en la amplia sala principal siendo recibidos por los visitantes.

Alfa y Omega enlazados por la luna sintieron la electricidad llegar a sus cuerpos, desconectandose del mundo que los rodeaba y solo teniendo su entera atención en la persona que estaba frente a sus ojos.

—Eres precioso, pero sin duda está noche te ves... Radiante, sencillamente encantador. —Sin pensar las palabras brotaron de la boca del Alfa pelirrojo, haciendo que el Omega azabache se sonrojara y soltará una tímida risita.

El mayor entre los dos tomo la delicada mano de su omega en la suya, solo para levantarla y dejar un beso en sus nudillos como saludo cariñoso.

—Tu también te ves muy bien, Hyung. —Entre su timidez fue lo único que pudo responder sin trabarse, sin embargo para Taehyung eso era muchísimo más que suficiente.

Mientras tanto los demás presentes se miraban entre si, con sonrisas casi cómplices, y fue allí cuando el mayor de todos notó algo realmente sorprendente.

—¿Yoongi? ¿Min Yoongi? —El castaño abrió su boca con sorpresa pero luego tan solo sonrió con emoción.

—El mismo en persona. —Correspondió su sonrisa con otra y se acercó solo para saludar con un fraternal abrazo—. No creí que algún día los vería por aquí.

—Ah, hombre, los tiempos cambian... Además, Tae no podía esperar más para venir. —Con curiosidad miró al pequeño Omega que estaba tras de Min. Sonrió ligeramente para el—. Si no me equivoco tu debes ser el novio de Yoongi, vaya pero si eres una cosa preciosa, mi nombre es Seok-Jin.

Jimin no tardó en sonrojarse por las palabras del chico que apenas conocía, parecía tomar confianza rápido, se veía muy amigable, por eso extendió con timidez su manito.

—Jimin, mi nombre es Park Jimin. —Al ser tomada y estrechada por el mayor le sonrió.

—Tienes un nombre bonito, una cara bonita, ¿Cómo es que terminaste con un gato amargado? —Yoongi frunció el ceño—. Cuando íbamos juntos a la escuela y a la preparatoria eras un limón.

—Ah, ahora es una tierna masita. —Jimin habló, el Omega mayor de todos se sorprendió—. Ya sabe, dicen que los omegas podemos ablandar hasta las piedras más duras.

Seok miró a sus alfas, los cuales hablaban entre si en su propio mundo, suspiró enamorado y asintió de acuerdo.

Por otro lado Taehyung y Jungkook sostenían una conversación por su parte, era agradable pues el Alfa conocía mucho del Omega, pero al contrario Jungkook no sabía nada de él.

—Yoongi-Hyung me dijo que los conoce, ¿Son de Daegu también? —Taehyung volteó a dónde estaba el mayor recién nombrado, era una sorpresa tenerlo allí. Volviendo la atención al chico que robó su corazón asintió brevemente.

—Es un lugar un tanto aburrido, algo me dijo que venir aquí sería una gran idea. —Relamiendo sus labios lo observó, analizó su delicado y bonito rostro. No pudo evitar sonreír— Tenerte frente a mi me hace saber que fue la mejor idea que se me haya ocurrido jamás.

Jungkook enrojeció por completo, tan solo bajó la mirada y pasó un mechón de cabello tras su oreja.

Si, algo cliché, pero a ojos del Alfa era sencillamente etéreo incluso algo tan simple, y eso era por el simple hecho de que lo había hecho el amor de su vida.

Ese apenas el inicio de la velada y sus lobos ya aullaban a la luna que marcaría un nuevo año y el inicio de algo hermoso.

-Moon.