Capítulo 4
En la heladería yo no había hablado ni un poco, cada uno tenía a su "pareja" para hablar. Hablaban de a dos, a veces los demás intercambiaban palabras pero después...
Tom se quedó con Savannah quien lo miraba intensamente, pero le era indiferente. Jessie se quedó con el helado y un poco con Cameron que quería hablar con ella. Alexandra con Daniel, hablaban como si fueran amigos de toda la vida, claro si Alex hablaba de un tema que le gustara mucho se podía quedarse hablando por horas, y al parecer Daniel empezó uno.
Silvia con Zane también hablaban entre ellos. Yo en cambio elegí el asiento contra la pared y apoyé mi cabeza en esta, cerré mis ojos y disfruté de mi música, pero solo hasta que vino el helado y lo tomé junto con mi música la cual era mi pareja.
Forever Alone, so sad.
Miré mi celular y vi la hora, eran las diez de la noche y yo ya quería irme, irónico ¿No?
Yo era la que insistía para salir y al final soy la primera en querer regresar y temprano además. En fin...
Suspiré y me levante.
- Chicos yo ya me voy, si quieren quedarse más tiempo chicas, las espero en casa - Dije y ellas asintieron.
Ni mire a Zane, solo salí de allí y comencé a caminar hacia la casa, las calles estaban oscuras y silenciosas. Eso era muy tranquilo para mi y me gustaba. Me coloqué mis auriculares nuevamente y puse mi música.
Pero decidí seguir caminando, sabía donde había un muelle y quería ir allí. Al llegar pude notar una isla grande un poco lejos pero no tanto. Se veía increíble y misteriosa, eso me dió el indicio de que esa era la isla por la cual vinimos... Despertaba bastante curiosidad en mi...
Suspiré un poco, aspiré el aire el cual se mezclaba con el aroma a mar. Cuando ya creí haber estado suficiente tiempo, eran las la una y media de la mañana, y decidí volver a casa.
Abrí la puerta con la copia de la llave y entré para luego encontrarme con las chicas caminando de un lugar a otro.
- ¿En dónde nos deshacemos del cuerpo? - Pregunté divertida y cuando la chicas me vieron corrieron hacia mi.
- Aún no hay cuerpo, pero si vuelves a desaparecer así te mato - Dijo Alex y yo me reí, pero empecé a bostezar.
- Lo siento, pero... me voy a dormir, si quieren les recompenso yendo al parque de diversiones, mañana - Dije y ellas sonrieron y asintieron satisfechas.
- Perfecto, vamos a decirles a los chicos para que vengan - Dice Alex y yo ruedo los ojos, pero solo me dispongo a irme a mi habitación.
Entré, me tiré en la cama y cerré mis ojos para después caer en un sueño profundo.
***
***
- ¡Arlene ya despierta! - La voz de Alexandra hace que me sobresalte y caiga de la cama consiguiendo que ella se mate de la risa.
- ¡Auch! - Me quejé asomando mi cabeza por el borde de la cama - ¿Qué mierda te pasa? - Pregunté molesta.
- Prometiste llevarnos al parque de diversiones - Dice ella haciendo un puchero y yo ruedo los ojos.
- ¿Y para eso me tenías que despertar como salvaje? - Pregunté levantándome.
- Si - Respondió sonriendo, rodé los ojos de nuevo. A este paso me quedo vizca.
- Esta bien, me cambio y bajo, dile a las chicas que si alguna no está preparada cuando yo baje no nos vamos - Advertí y ella sale corriendo.
Pude escuchar su grito llamando a las demás para que se vistan o no nos íbamos. Reí por aquello.
Yo fui al armario y saqué mi ropa la cual consistía en unos pantalones holgados y camuflallados, unas botas y un top negro. Fui al baño para asearme y arreglarme mejor el cabello antes de bajar y ver a las demás ya listas.
- Ay pero que guapas - Dije al estar junto ellas, las cuatro reímos y nos abrazamos como saludo.
- Igual tú - Dijeron.
Comenzamos a caminar hacia la salida.
- Los chicos dijeron que nos esperarán en la entrada del parque - Dice Alex.
- Okay - Decimos nosotras.
Comenzamos a caminar hacia el parque que estaba cerca, vimos muchas personas en la entrada así que tuvimos que empujar a varias personas para entrar.
Buscamos a los chicos, yo solo por no ser descortés, porque si era por mí me iba sin más de aquí y seguía disfrutando de la vida por mi cuenta, pero se nota que amo a mis amigas tanto que hasta sacrifico mi tiempo por ellas.
- ¡Hey Arlene! - Escuché que gritaban a mi lado, doy la vuelta mi cabeza y veo a los chicos haciendo señas en nuestra dirección.
Yo miré a las chicas y les hice una seña para ir junto a ellos pero vaya la grata sorpresa, (Sarcasmo please), de que Silvia también estaba allí, y que mejor asiento que el regazo de Zane.
A estas alturas estoy pensando que Zane solo es un mujeriego y que quería que fuera su polvo del día.
- Hola chicos - Saludan las chicas mientras yo me quedo callada.
- Hola - Saludan ellos sonriendo, me miran y yo solo les dedico una media sonrisa algo forzada y saludo con la mano.
- Bueno chicos no sé ustedes pero yo quiero subirme a algo ahora en lugar de esperar aquí - Dije comenzando a caminar, pero para mi desgracia Zane abrió su boca.
- Te acompaño -
- Igual yo - Responde ella.
Rodé los ojos molesta pero sonreí un poco, al menos podría molestarla un poco...
- Esta bien, si ustedes quieren... pero yo quiero ir a la casa del terror. Aunque... si ustedes quieren subirse a otro juego no hay problema... - Dije intentado hacer que se vayan pero al parecer no funcionó.
- Yo voy, a mi me gustan ese tipo de cosas - Dijo Zane.
Genial, ahora tendré que subirme a ese juego que me da mas miedo que mi mamá con la chancla... nah ni tanto como eso, pero si da miedo.
- Y..Yo también voy - Dijo Silvia con la voz temblorosa, le daba miedo y lo sabía, era de lo más obvio.
Esto será divertido y tenebroso para mi...
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