Misuk

"Boca llena, corazón contento"

No entendí a lo que se refería con lo de que mi boca iba a sufrir mucho, pero lo que se me pasó por la mente no me pareció ni tan malo ni tan bueno.

Y cuando el señor Jeon cogió mi rostro entre sus manos para besarme, borró cualquier tipo de pensamiento que cruzara por mi mente. En mi cabeza solo sentía sus suaves labios acariciando los míos, su lengua enredada en la mía y lo bien que me hacía sentirlo tan cerca de mi.

Se separó de mi jalando mi labio inferior con sus labios, haciendo un sonido húmedo al soltarlo para luego mirarme con una intensidad que me hizo temblar al instante.

—Ponte de rodillas —demandó, yo lo miré con inocencia.

Y de una cosa me había dado cuenta, y era de que entre más inocente me comportara con él, más aumentaba su autoridad y morbosidad hacia mi. A él le gustaba que yo me comportara de esa manera.

Me puse de rodillas unos segundos después, algo que no me resultó del todo fuera de lugar, estaba acostumbrada a arrodillarme al rezar todas las noches junto a mi cama, era muy común, y podía estar horas de esa manera si así lo requería.

Pero cuando miré al frente, y el miembro del señor Jeon cubierto por la tela del bóxer quedó justo frente a mi cara, todo me cuadró.

Mi boca, de rodillas, su miembro.

Y me puse tan nerviosa que comencé a temblar como si estuviera haciendo un frío descomunal y a mi me estuvieran lanzando agua fría encima. Simplemente no podía controlarlo.

El señor Jeon quería que yo le diera placer con mi boca y yo no tenía ni idea de lo que podría hacer, y no quería hacerlo mal y fracasar a la primera.

Miré al señor Jeon desde abajo intentando hablarle con mi mirada, intentando decirle que no tenía idea de lo que tenía que hacer justo ahora.

Él pareció comprender, acarició mi cabello con cariño, lo que me hizo relajarme un poco. Luego se bajó los bóxer y su intento por relajarme no sirvió de nada, porque enseguida estuve temblando e incluso peor que antes.

Tenía su miembro sin ningún tipo de capa que lo tapara justo delante de mi cara, estaba erecto, y podía apostar mi vida a que estaba duro, porque se mantenía levantado como si nada. Sin embargo, siempre pensé que los miembros de los hombres no iban a hacer tan atractivos, pero el señor Jeon tenía uno que no era para nada feo, al menos, no me provocaba salir corriendo, todo lo contrario, me provocaba seguir mirándolo, ver como si color blanquecino se distorsionaba en algunas partes por las venas que sobresalían por todo el largo, y como su punta era roja y brillaba tanto que no quería apartar la vista. Y no era para nada un miembro pequeño. Tenía un tamaño considerablemente aterrador.

—Es bueno saber que te gusta mirarlo, pero me sentiría feliz si también lo tocas con tu mano —mencionó el señor Jeon al verme atónita repasando todo su miembro.

Yo tragué saliva y levanté una mano, me temblaba mucho, pero terminé cogiéndolo con mi mano derecha tocándolo por primera vez, estaba caliente y luego pude sentir que tenía vida propia, porque palpitaba y se agitaba. Estaba claro que nunca había visto ni sentido nada de esto en mi vida.

—Puedes mover tu mano de adelante hacia atrás, Misuk —me dijo, yo lo miré durante unos segundos y asentí para luego volver mi vista a donde estaba anteriormente.

Hice lo que él me indicó, moví mi mano de adelante hacia atrás, acariciando su largo. El señor Jeon se tensó y tembló a la vez y supe que aquello le había gustado mucho, por lo que continúe haciéndolo más seguido.

Miré al señor Jeon, y pude ver cómo se mordía su labio, además de que tenía la cara y el pecho sonrojado, se veía tan hermoso justo ahora, que si me hubieran dicho con antelación que esta era la imagen que iba a ver la primera vez que masturbara a un hombre, sin duda alguna la hubiera adelantado.

Luego algo se me alumbró en mi cabeza. Él había mencionado mi boca, y si él me hacía sexo oral con su boca, yo también podía hacerle sexo oral con mi boca. No había que ser tonta para imaginarse cómo hacerlo. Como si su miembro fuera una... Paleta. O una chupeta.

Quise adelantarme a sus peticiones e imaginé que mi lengua iba a lamer algún caramelo largo, acerqué mi rostro, detuve mi mano, y antes de que el señor Jeon pudiera protestar por haber parado, pasé mi lengua desde abajo hasta su punta, la cual cubrí con mi boca y succioné. No me esperaba sentir el sabor de algo salado en la punta, pero tampoco me importó mucho, no era desagradable y yo estaba concentrada.

El señor Jeon simplemente se quedó en shock por mi atrevimiento, y tembló tanto que pensé que le había dado algún calambre. Mi yo interior quiso saltar por el triunfo de haber hecho algo bien sin su ayuda, pero me propuse verlo mucho más mal de lo que estaba ahora.

Por lo mismo, mirándolo desde abajo, me metí su miembro en mi boca hasta donde pude, algo que hizo que el señor Jeon se fuera para atrás y se recostara contra la pared del baño, cerré los ojos por el esfuerzo que estaba haciendo, ni siquiera pude abarcar todo su miembro, pero tampoco podía hacer más. Lo saqué lentamente, dejándolo embadurnado de toda mi saliva, algo que cuando moví mi mano, hizo mucho más fácil y resbaladiza la caricia.

Moví mi mano mucho más rápido, no tanto como para que se me cansara el brazo, solo siguiendo un ritmo constante, e incluí todo lo aprendido, mientras mi mano trabajaba lamí su punta varias veces, sintiendo su sabor varonil en mi paladar, para nada desagradable. También succioné varias veces, algo que hacía que el abdomen del señor Jeon se contrajera con frecuencia.

El señor Jeon estaba totalmente hecho un desastre, e incluso lo sentí gemir gravemente en algunas ocasiones, algo que me volvió loca, y que me gustó tanto que deseaba escuchar muchas más veces, todas las veces que fuera posible.

Cuando decidí introducir su miembro nuevamente en mi boca, esta vez el señor Jeon cogió mi cabeza y no dejó que me moviera, lo miré con ojos llorosos y él simplemente no hizo ninguna expresión que me ayudara a descifrar lo que haría.

Luego alejó sus caderas saliendo un poco de mi boca, para luego, cuando estuviera casi afuera, volver a introducirlo hasta que su punta tocaba mi garganta, tuve arcadas y muchas ganas de llorar, pero no hice amagos de apartarme, dejé que él moviera sus caderas continuamente de adentro hacia afuera de mi boca.

—Dios —su rostro se arrugó de una manera divinamente placentera.

Mi boca estaba sufriendo, y mi garganta hacía que las ganas de llorar aumentaran, pero luego el señor Jeon presionó mi rostro con su miembro hasta lo más profundo de mi garganta, y luego sentí como un líquido caliente se regaba por toda mi boca. Mi saliva me corría por el rostro, y sentí muchísimo alivio cuando el señor Jeon salió de mi boca. Su miembro dejó de ser erecto como antes, y supe que se había corrido.

Una parte de mi lloraba por dentro por el dolor de mi quijada, y la otra saltaba de alegría por haberlo hecho feliz, o al menos así lo creía yo, tragué todo su líquido, algo que no sabía tan bien, pero tampoco tan mal.

Luego me ayudó a ponerme de pie y me miró, llevó una mano a mi cuello para darme pequeñas caricias que me reconfortaban mucho.

—Vamos a acabar de ducharnos, Misuk —me dijo.

No tenía que decírmelo con palabras, pero yo podía sentir en su mirada y su semblante, de que yo había sido de mucho ayuda para él, y mi corazón estaba demasiado contento con eso.

Yo era feliz, si el señor Jeon lo era.

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Me estoy poniendo poética con los temas de los capítulos 😅😅.

Pero si, regañenme por tardarme tanto, creo que ahora va a hacer así, capítulo cada mil año. Lo estoy intentando, créanme que de verdad lo estoy intentando muchísimo, pero es complicado seguir un ritmo que hace rato perdí, y que ahora se me hace imposible volver a conseguir.

Pero bueno, espero no tardarme tanto para el próximo capítulo, no prometo nada la verdad, pero tengan fe, como la Misuk, recen para que yo actualice con más frecuencia.

Bueno, el tan anelado capítulo ya llegó, y déjenme decirles, que a pesar de que se me hace complicado poner momento y erección en vez de polla, porque así de sucia soy, debo decir de qué me gustó mucho como quedó el capítulo, sucio pero a la vez llevando las palabras que la Misuk sin duda diría. Es que no veo a la Misuk diciendo polla por el momento, pero hay que enseñarla, claro que se le enseñará.

Bueno, yo no doy más lata, porque me extiendo y no acabo nunca.

Lxs extrañaba muchísimo, no saben cuánto, nos vemos, no se cuando pero espero que pronto, déjenme dicho en los comentarios todo lo que piensan de la historia, que les pareció el capítulo y cualquier cosa que quieran comentar que yo los estaré leyendo sin falta.

Lxs Sarangheo ❤️