—Parece que estamos destinados a encontrarnos.

Woon volteó rápidamente después de escuchar su voz, las dos de madrugada y en un lugar diferente al anterior.

—¿Estás siguiendo me?—pregunto nerviosa .

—No, te lo dije ,es el destino.

—Oye no tengo tu tiempo, y no me interesa hablar contigo,así que vete que irrumpes mi trabajo.

—¿No estás interesada en un boxeador? Podría servirte de algo mis habilidades.

—¿Eres estúpido acaso? Tienes un niño que cuidar, no puedes...—guardo silencio cuando se dió cuenta que había soltado esa información.

—¿Cómo sabes eso?

—Yo debo saber todo...no te creas tan importante, ahora sí me disculpas, tengo trabajo que hacer.

Más él tomo su antebrazo,se acercó a ella mirando serio sus ojos—No soy estúpido...dime ¿Para quien trabajas?

—Eso no es de tu incumbencia. Vete, si ven aquí y conmigo tendrás problemas.

Pero no acato su orden, se acercó más aún sosteniendo su brazo, analizó sus ojos tratando de encontrar algo —Siento que te conozco...y a la vez no, ¿Quien eres Bonnie y por qué estoy tan interesado en ti?

—No debes conocerme. Chicos, alejen lo de este lugar.

Sus compañeros lo llevaron lejos de ella pero aún manteniendo su mirada en su cuerpo, por última vez lo miró sintiendo su corazón latir con rapidez.

—¿Todo está bien?

—YoonGi.... sí,no debes preocuparte.

Ella entro al local siendo seguida por su amigo quien aún se preguntaba sobre el hombre que la tenía pensativa.

—Me dijeron que seguirás cuidando al niño, creí que solo esperabas a qué alguien accediera a su custodia para irte.

—Ese era el plan principal.

—¿Y entonces que paso?

—No confío en él, podrá ser su tío pero ni siquiera tiene un trabajo legal.

—Estoy al tanto de tu cariño por ese niño pero ya no es de tu incumbencia si ese tipo lo cuida bien o no, no eres su madre.

—Pero si su tía, Hanse  era mi hermana después de todo.

—¿Crees que pueda entender todo si algún día se lo dices?

—No, me odiara...

—No fue tu culpa.

—Lo fue, no pude protegerlos.

(...)

—¿Que te paso en el rostro?

—Me sentía mal y cuando trate de ir al médico, me caí.

La peor excusa que se le pudo ocurrir pero Jungkook no parecía sospechar.

—¿Ahora estás bien? Deja me ver.

Esa mañana después de dejar a SangJi en la escuela, Jungkook y ella se quedaron a solas, las cosas parecían incómodas pero tenían que hace un esfuerzo para poder cuidar al niño como correspondía.

—Estoy bien —respondio después de que él se acercará, trato de alejarse pero Jungkook la detuvo colocando su mano en su barbilla.

—Fue un golpe muy fuerte...debiste ir al doctor en vez de venir aquí.

—Te dije que estoy bien.

No lo miraba a los ojos, temía que se centrará tanto en los suyos y descubriera su secreto.

—Woon...

Pero siempre caía.

Sus orbes se encontraron, Jungkook recorrió su rostro con lentitud hasta detenerse en sus labios.

—Y-yo...

Su voz lo hipnotizó llamándolo con deseó.

Sus labios rozaron los suyos, ambos se quedaron quietos, Jungkook al darse cuenta de lo que había hecho trato de alejarse pero Woon cegada por la imagen del otro hermano lo encerró entre sus labios pidiendo que siguiera.

Su error la condenaría.