—Necesitamos realizar el ataque por dentro, necesitamos que sea uno de nuestros espías, el Licántropo se regenera, pero su naturaleza es frágil ante la mordida de uno de los nuestros, ¿Se imaginan lo que haría la mordida de tres? ¿O cuatro?...

—Gracias por acompañarme en mi paseo por los jardines Yunho, desde que plantamos Orquídeas de Invierno y logramos que florezcan, este es mi lugar favorito.

—Es un placer.

—¿Yunho?

—¿Si príncipe Jaeyoon?

—¿Cuántas veces debo pedirte que no me llames Príncipe? —El Omega lo observa haciendo un puchero, logrando robar una sonrisa al poderoso Beta, que es uno de sus escoltas personales— .Ya he perdido la cuenta, somos amigos desde que éramos unos niños jugando a las guerras, dime Jaeyoon o Yoonie como solías decirme de cariño.

—Lo siento Yoonie, es la costumbre, para mi siempre serás el Príncipe Jaeyoon del Reino Licántropo, el Reino más poderoso de la Tierra Media.

—¿Lo extrañas? ¿Extrañas el que era nuestro hogar?

—Extraño el que es nuestro hogar.

—Mi hogar es al lado de Sunghoon.

—Lo sé, pero tu hogar también es al lado de los tuyos, de tus hermanos, de la Luna de nuestro Reino, de tus verdaderos súbditos.

—No quise decir lo contrario, lo que quiero decir es que, este también es mi hogar, el Reino Vampírico también lo es, mi hogar es donde está mi familia... Sunghoon y este pequeño cachorro que no me deja dormir son mi familia.

—No creo que sea tan pequeño, tu vientre está cada vez más.... Prominente.

—¿Me estás diciendo gordo?

—¡Claro que no!

—Yeonjun dice que se debe a que mi cachorro es mitad Vampiro. ¿Puedes creerlo? Es un milagro de la naturaleza, es un milagro producto del amor que Sunghoon y yo nos tenemos.

—Respeto a Sunghoon y lo acepto como si fuera tu Alfa Yoonie, te ama y te protege como si fueras su tesoro más preciado, porque lo eres, sus amigos Yeonjun y Heeseung y sus compañeros de vida o lo que sea que los Vampiros llamen a sus parejas tampoco me generan molestia, pero no me sucede lo mismo con el resto de los Vampiros, han pasado tantos meses y su estúpido orgullo e ínfulas de grandeza no les permiten aceptarte, ese no es tu hogar, siento como si estuvieras rodeado de enemigos.

—Son Vampiros Yuyu.

El Beta sonríe al recordar cómo lo llamaba el Omega cuando era un cachorrito de tres años corriendo a su encuentro, Yunho siempre tuvo un lado sensible por el Príncipe Omega y a diferencia de los niños más grandes en esa época, jamás lo dejó de lado o permitió que se sienta excluido del resto.

—Ellos viven por la eternidad, algunos de ellos tienen más de quinientos años, tiempo... Tienen tiempo de sobra para aceptarme y acomodarse a los cambios en el Reino.

—Tú no tienes ese tiempo, nuestro poder de regeneración y nuestras habilidades sobrehumanas han prolongado nuestro tiempo de vida, pero no somos inmortales Yoonie.

—Lo seré cuando Sunghoon me convierta.

—Eso es una aberración.

—Una aberración sería dejar a mi esposo, a mi cachorro y a los demás hijos que tengamos solos durante la eternidad.

—¿A los demás? ¿Cuántos más piensas tener?

—Quiero tener media docena de cachorritos ¿Los imaginas?

—Pero Yoonie... Estás sacrificando mucho por los Vampiros y por los Licántropos, no necesitábamos este Tratado de Paz, nuestras fuerzas bélicas eran más que suficientes para frenar cualquier ataque de su parte.

—Mi relación con Sunghoon va más allá de un Tratado de Paz, la Luna Azul de Invierno lo eligió como mi destinado, el es mío y yo soy suyo hasta la eternidad, simplemente estoy cumpliendo con mi destino.

—Entonces yo también quiero que me conviertan en Vampiro, quiero protegerte y a tu "docena de cachorritos" durante esa eternidad.

—Yuyu...

—Si hablas con Mingi te dirá lo mismo, no vamos a dejarte solo Yoonie...

—¡Los estaba buscando!

—Mingi, ¿Sucede algo?

—Necesito que regresemos a la mansión principal, los Guardias Reales ya tienen instrucciones.

—¿Qué está pasando?

—Alguien o algo... Provocó dos incendios, uno al norte y otro al sur, ya instruí al equipo de patrullaje, necesitamos ponerte a salvo en la mansión principal.

Los Betas y el Omega aceleran su paso para retornar a la mansión principal del Territorio de los Park, que dos incendios se hayan producido al mismo tiempo lea resulta extraño, pues el Territorio no tiene una población, solo los guardias y los sirvientes reales.

—Rey Consorte, apagamos ambos incendios, el equipo de patrullaje indica que ambos pudieron ser provocados manualmente, estamos realizando las inspecciones pertinentes en los alrededores, lo recomendable es que permanezca en la mansión hasta que terminen.

—Muchas gracias por la información y por su trabajo.

—Tenemos que enviar mensajes a Lord Sunghoon para informarle la situación. —Mingi le dice con clara preocupación.

—No, no podemos hacer eso, Sunghoon retornó al Reino Vampírico hace un par de días, si le informamos la situación no dudará en regresar a mi lado.

—Pues que lo haga, es su deber como tu esposo permanecer a tu lado.

—Mingi...

—Ya sé, ya sé, los Vampiros son seres vacíos y sin sentimientos que se encargan de deshacerse de sus parejas gestantes... No, mentira, sus parejas gestantes no existen porque por su ego se han vuelto estériles.

—Mingi, es suficiente. —Yunho lo detiene antes de que el Beta continúe con sus duras palabras— .No descargues tu molestia con nuestro Príncipe.

—Lo siento Jaeyoon, no quise hablarte de esa manera.

—Lo sé Mingi, todos estamos un poco alterados...

—Jaeyoon, entiendo tu punto pero tenemos que dar aviso de los incendios, podemos enviar mensajes a Heeseung, para que él como Consejero de Sunghoon, vea si es prudente ponerlo al tanto ¿De acuerdo?

—De acuerdo...

Capítulo 1 de la mini maratón prometida🥰❤️🌻