—¿Está seguro de que no prefiere que el Duque Yeonjun venga mi Lord? Si me permite enviarle un mensaje, en un par de días contaremos con su presencia y podrá absolver todas sus dudas.

Su Consejero Real no quiere dejar al Rey de los Vampiros sin su compañía y protección en el Reino Licántropo; si bien, gracias a que su propuesta de matrimonio con el Príncipe Omega Jaeyoon ha sido aceptada y en consecuencia, los Licántropos consideran a Lord Sunghoon como su huésped de honor y cuenta con la protección del Rey Alfa Licántropo, Heeseung no cree que sea una buena idea retornar al Reino Vampírico sin su soberano.

—Estoy completamente seguro Heeseung, Yeonjun no sólo es el encargado de los asuntos médicos, es uno de los miembros sobrevivientes de la Realeza antigua del Reino, gracias a su antiguo linaje es muy respetado y es uno de mis súbditos más confiables, necesito que permanezca en el Reino hasta que retorne con Jaeyoon como mi esposo, no confío en algunos miembros conservadores del Consejo Real, pedirle a Yeonjun que venga sería darles la libertad de que hagan lo que se les antoje en mi ausencia, no podemos correr ese riesgo, mucho más ahora que regresaré con mi esposo, como su nuevo Rey.

Lord Sunghoon le explica, la seriedad en su tono de voz, no pasa desapercibida para su Consejero Real, "¿Nuevo Rey?", piensa Heeseung asombrado del título que Lord Sunghoon ha elegido para nombrar a quien será su esposo.

—¿Tienes algún problema con el título que he utilizado para mi prometido? —le pregunta molesto; por su puesto, Sunghoon no necesita esforzarse de más para leer los pensamientos de su Consejero Real, su sangre pura y Real de linajes antiguos le otorga un poder sobrenatural incluso sobre Vampiros considerados poderosos como es el caso de Heeseung— .Jaeyoon será mi esposo, mi compañero de vida por la eternidad, eso lo hace merecedor de llevar el título de Rey.

—No mi Lord, yo no tengo ningún problema con el título que ha elegido para referirse a su prometido, el momento en que ustedes contraigan matrimonio será su derecho llevarlo; sin embargo, es mi deber aconsejarlo acerca de las consecuencias que la utilización de ese título puede acarrear. Como usted sabe, los miembros más conservadores del Consejo Real fueron disidentes respecto a concretar una unión matrimonial entre usted y un miembro de otra Raza, no les importó que sea un miembro de la realeza. El Príncipe Jaeyoon es un Licántropo, nuestro enemigo natural, ni ellos ni sus súbditos estarán de acuerdo con que un Licántropo tenga un título de nobleza que por tradición le corresponde sólo a un Vampiro.

—Jaeyoon será un Vampiro cuando lo convierta, los herederos que me dé tendrán mi sangre y linaje, nuestros hijos serán mis herederos y sucesores directos a la corona. Entiendo tu lógica Heeseung pero, también debes entender la mía, Jaeyoon no es sólo mi prometido, Jaeyoon no sólo será mi esposo, Jaeyoon es mi razón, la única razón que tengo de seguir con vida.

—Lo entiendo mi Lord y a pesar de eso, le reitero que quizás sea mejor no utilizar ese título, al menos hasta que usted convierta al Príncipe Licántropo y tengan sus primeros hijos, eso tranquilizará los ánimos de sus súbditos y sus disidentes en el Consejo Real, eso asegurará el bienestar de su compañero de vida, piense en su integridad, no lo exponga.

—Supongo que tienes razón en esa última parte, lo más importante ahora, es el bienestar de Jaeyoon, los Licántropos me están confiando su integridad y su vida al permitirme unirme en matrimonio con él, precisamente por eso necesito que mi gente de confianza mantenga control y sobretodo la paz de todos mis asuntos en mi Reino durante mi ausencia; además, fuera de las consultas que tengo para Yeonjun, necesito que me hagas un favor.

—¿Un favor?

—Necesito que retornes con las joyas de mi madre, el medallón de diamante rojo, quiero que sea mi regalo de cumpleaños para mi prometido, también necesitaré su anillo de compromiso.

—Pero mi Lord, las Joyas de la Realeza han permanecido custodiadas desde la muerte de su madre. —Heeseung le recuerda nervioso y preocupado ante las consecuencias que pueda generar el deseo de su Rey— .Pensé que usted evitaría hacer uso de ellas al tratarse de...

—¡¿Al tratarse de un Licántropo?! ¡¿Al tratarse de un matrimonio arreglado?! ¿Acaso eres un hipócrita o te gusta cambiar de parecer como el día y la noche? Te recuerdo que fue tu consejo darme una oportunidad de conocer al Licántropo con el que compartiré el resto de mis días, te recuerdo que fue tu consejo que comparta y que trate de entablar una relación con quién será el padre de mis hijos. Mi matrimonio con Jaeyoon va más allá de un Tratado de Paz o una desesperada solución para evitar nuestra extinción como Raza, mi matrimonio con Jaeyoon es una unión de amor, va más allá de todo y de todos, quiero que Jaeyoon tenga todos los honores que merece aunque no sea un Vampiro, quiero darle los mejores regalos y cortejarlo, quiero que Jaeyoon no se arrepienta de haberme elegido por encima de su familia y de su Reino, quiero que Jaeyoon se sienta orgulloso de su destinado y que le agradezca a su Diosa Luna por habernos unido ¿Es tan complicado de entender?

—Mi Lord yo...

—Es la primera vez en toda mi vida que siento que no estoy vagando en un vórtice en soledad y sin sentido Heeseung, es la primera vez que me siento vivo y es todo gracias a ese Licántropo, ese Príncipe Omega que no puedo ni quiero sacar de mis pensamientos y de mi corazón.

—Hasta antes de tu llegada a mi vida, me molestaba la idea de convertirme en mayor de edad y mucho más de que algún Alfa del Reino pretenda cortejarme y pedir mi mano en matrimonio y que deba aceptarlo por el bienestar de mi Reino, pero todo eso ha quedado atrás, ahora cumplir dieciocho años y poder casarme contigo es lo que más ansío. —Sonrojado, el Príncipe Omega le confiesa a su prometido, Lord Sunghoon sonríe y deja un dulce beso sobre su frente. —Mi caso es similar, cuando fui ascendido como Rey, sabía que mis responsabilidades se harían cada vez más grandes y que eventualmente toda acción o decisión estaría guiada sólo para preservar los intereses y necesidades de mi Reino y para su bienestar, de nada servirían mis opiniones y mucho menos mis deseos; sin embargo, todo eso pasó a un segundo plano, la noche en que te conocí.

—Entonces se puede decir que ambos somos la salvación del otro. —Jaeyoon suspira ante su afirmación.

—¿Salvación?

—Sí, de vivir bajo reglas y parámetros impuestos sólo por haber nacido en una familia privilegiada.

—De ser esclavos de nuestro destino. —Lord Sunghoon responde al pensar en todas las responsabilidades y cargas que le atribuyeron cuando fue ascendido como Rey.

—Pero nuestro destino estaba decidido. —Jaeyoon le responde frunciendo el ceño.

—Que mi destino esté unido al tuyo jamás podría considerarse como esclavitud o como un castigo, es todo lo contrario Jaeyoonie.

—¿Lo prometes?

—Lo prometo.

Lord Sunghoon lo toma por la cintura y une sus labios en un dulce beso —¿Continuamos con la lección? —Jaeyoon se separa sonrojado y mirando nervioso hacia su alrededor, no quiere tener problemas con su hermano mayor por las inevitables muestras de afecto entre él y su prometido.

—Está bien continuemos.

—Éstas flores pequeñas y blancas tienen el nombre de manzanilla y sus infusiones ayudan a aliviar los problemas estomacales como los cólicos e infecciones, también  ayudan a relajarse.

El Rey de los Vampiros le presta completa atención, Jaeyoon es una prueba perfecta en vida de la evolución de la Raza Licántropa, sus miembros han aprendido a valerse de las bondades de la naturaleza en un perfecto equilibrio, su evolución va de la mano y no es destructiva.

Atrás quedaron sus conceptos sobre los Omegas, no son seres cuyo único fin es engendrar vida y someterse a las decisiones y el poder de su Alfa, su instinto maternal los hace conocedores empíricos del uso de las flores y de las plantas, su instinto va más allá de lo perceptible, realmente pueden considerarse el núcleo de la sociedad Licántropa.

Tomados de la mano, recorren los jardines del Reino Licántropo, Lord Sunghoon le promete a su futuro esposo que tendrá su propio jardín y herbario en su Reino, le promete que tendrá acceso ilimitado a todos los libros y documentos que sean de su interés para seguir cultivando su conocimiento.

Lord Sunghoon está enamorado, puede sentirlo con cada momento que pasa con el joven Príncipe Licántropo y Lord Sunghoon puede sentir que su amor es completamente correspondido sin la necesidad de leer los pensamientos de su amado, pues Jaeyoon se lo demuestra hasta en la mínima oportunidad y en especial cuando lo mira con devoción y admiración.

—Ya quiero que seas mío para toda la eternidad. —Susurra en su oído haciendo que el Omega de un brinco ante las corrientes de energía que atraviesan por todo su cuerpo.

—Ya lo soy, soy tuyo desde el primer momento en que nuestros caminos se unieron.

—Si no tomamos en cuenta el siglo de vida que Lord Sunghoon tiene por encima de nuestro Yoonie, cualquiera diría que son un par de adultos jóvenes viviendo su primer amor. —Seokjin comenta con una dulce sonrisa mientras observa al par de enamorados desde el balcón de su habitación.

—Pero el Rey Vampiro ha vivido y tiene más experiencias que tú y yo juntos cariño. —El tono grave de voz del Rey Alfa Licántropo retumba en las paredes de mármol blanco de su habitación— .Aún me cuesta aceptar que pronto se llevará a mi hermano a un Reino desconocido y lleno de viles chupa sangre como él.

—Lo ama, puedo percibir que está dispuesto a dar su vida por él, ambos lo hacen. —Seokjin intenta tranquilizar a su esposo. —Aveces el amor no es suficiente cariño, confío en el Rey Vampiro; sin embargo, no confío en su gente.

—Debemos confiar en ellos y apoyarlos, grandes responsabilidades vienen de la mano de su unión, ambos Reinos confían en los beneficios y ventajas que surgirán, el momento en que unan sus vidas en matrimonio Lord Sunghoon formará parte de nuestra familia, será un miembro más de nuestra manada.

—Lo sé, es un gran honor y espero que nos falle.

—No lo hará amor de mi vida y si lo hace, que sea maldecido por la eternidad y hasta su último suspiro...

Que tengan un buen inicio de semana besties.

Gracias por leer y apoyar la historia  ❤️🌻🥰