SIXTEEN.
-Puedo dejarte una camisa,si quieres,para que durmáis cómodos.-puse una mueca antes de darle un sorbo al vaso de agua.
-Pensaba volver,no he avisado a Alfie y se preocupará.-vi como tensó su mandíbula,sujeté sus hombros con mis manos y le obligué a mirarme.-¿Qué ocurre?.
-Que no quiero esto.-dijo agotado.-No quiero que vivas en ese barrio de pijos,ni que frecuentes a Alfie ni que tengas que recorrer tantos kilómetros.
-Tienes que entender que no puedo quedarme,Thomas,ahora mismo hay demasiado en juego,Alfie es mi socio y estará interesado en velar por sus beneficios.
-¿Tú eres uno?.
-Piensa lo que quieras.-suspiré cansada.-Las apuestas son nuestras,la empresa está a pocos meses de ser legal,el club va genial y no podemos dejar que esto.-nos señalé.-Nos frene.
-Bueno,no hace falta que me enumeres lo que está en juego,todo lo que me interesa está frente a mi.
-Thomas...-me senté en la cama.
-No puedo perderos.-me crucé de brazos.-Si,utilizarás como escudo la manera en que te hablé aquel día pero hay una única norma aquí,no te metas en los asuntos de los Peaky Blinders,quizá no fue la mejor manera de expresarlo.
-Los Peaky Blinders deberían dejar que otros tomen el cargo porque ser cerebro y fuerza bruta debe ser agotador.
-Quizá.-respondió antes de cerrar las puertas del armario.
-Thomas.-se acercó a mi.-Me quedaré pero debes dejarme un teléfono para avisar a Alfie.
-¿Solo hoy?.
-Tengo asuntos que tratar ahí,lo sabes.-suspiró antes de sentarse a mi lado.-Ya veremos qué podemos hacer,¿vale?.
-Vale.-comencé a cotillear en la habitación y sonreí cuando di con su colección de gorros con la cuchilla que los representaba,acaricié el objeto filoso y decidí poner en práctica un viejo truco,lo coloqué en la cadena plateada y lo guardé entre mis pechos,sonreí al ver que tenía al ojiazul hipnotizado,tiré de la cadena y fingí cortar el cuello de alguien.
-¿Me dejarás esa camisa?.
-Si,joder.-sonreí.-Lo siento,sírvete tu misma.
Cogí la primera que vi,a final de cuentas solo dormiría así que no era relevante,precisamente.
-¿Dónde tenéis el teléfono?.-decidió acompañarme ya que igualmente debíamos bajar a cenar.
-En aquella sala.-dijo al llegar.
Narra Pol.
-¿Se quedará a cenar?.-pregunté intrigada.
-Así es.
-Thomas,esa chica tiene algo,por algún extraño embrujo está ciegamente enamorada de ti,ha hecho sacrificios que no cualquiera haría y joder,el caso de Kimber me tiene con las piernas temblando todavía,tiene un alma feroz y un corazón noble.
-Tampoco entiendo qué la hizo quedarse pero lo agradezco.-dijo algo avergonzado.-Pol,ella está ahora con Alfie pero creo que no se sostiene esa relación.
-Que esté con quien quiera,no creo que exista fuerza que logre desvincular vuestros destinos.-miré la taza de té que había preparado para ella.-Vamos a la mesa,la cena casi está lista.
La chica se dirigía a una de la sillas cuando mi sobrino tomó su mano e hizo que se sentara sobre sus piernas,seguramente para molestar a John.
-Estamos de celebración,el bebé está sano.-dijo confundiéndome.
-La muñeca de porcelana dijo que...-me interrumpió.
-Quería alejar a Thomas pero fue al único que no pude engañar,en cuanto al resto..lo siento muchísimo,no era mi intención llegar tan lejos.
-Lo entendemos.-susurró Ada.
Observé cómo Thomas buscó la mano de una Chiara bastante preocupada,la entrelazó con la suya y dejó un beso en el hombro de ésta,sonreí inconscientemente.
-¿Están juntos?.-me atreví a preguntar,ella evitó mi mirada.
-Estamos intentándolo otra vez,quizá sea menos desagradable esta vez,fue un desastre como ya sabéis.
-Voy a ser tío,coño.-gritó Arthur,se sirvieron un par de copas y brindaron,me encantaba ver a mis chicos unidos,desearía que Michael estuviera aquí también.
Narra Chiara.
Seguí a John a las profundidades de la casa,me miró en silencio antes de darme un abrazo.
-Lo sabía.-dijo con una sonrisa.
-¿No estás enfadado conmigo?.-frunció el ceño antes de negar con su cabeza.-Pero te mentí.
-Si,porque quisiste alejar a mi hermano,quien te hizo la vida bastante complicada desde que apareció,creo que estaba justificado pero no vuelvas a hacerlo.-pidió.
-Thomas quiere que vuelva,dice que me necesitáis.
-Él te necesita más que nadie.
-Seguro.
-El día que volvimos de aquella reunión lo vi jodido,no sabía qué ocurría exactamente solo que tenía que ver contigo.
-Te quiero aquí también,todos lo hacemos pero nadie lo quiere más que Tommy,será una situación difícil para mi porque mentiría si dijera que no sigo locamente enamorado de ti pero será bueno que vuelvas.
-John.-me miró.-Thomas es el padre de mi bebé,es la única razón que me haría regresar,por más que intentemos construir desde cero,los cimientos siempre tendrán el mismo desgaste y no podrá sostener todo el peso de la casa en ese estado.
-Lo hará,debe hacerlo.
Suspiré cansada,me hizo una señal para volver con el resto de la familia.
(...)
-Alguien está intentando arrebatarnos las apuestas.-soltó Finn.-Al parecer su apellido es Changretta y la última vez que los vieron fue en las propiedades de Kimber,exigiendo ver a su sobrina.-me miró.
-Habrá que darles lo que piden.-dije sin más,terminamos de recoger la mesa y nos despedimos de los presentes,en cuanto llegamos a la habitación del ojiazul nos tumbados en la cama.
-No te reunirás con ellos.-alcé una ceja.
-Tengo que ir.
-Recuerda como te dejaron la última vez
-Por eso,reprimía mi animal interior pero ahora los conozco y no merecen compasión,si quieren guerra la van a tener.
-No quiero que te arriesgues.
-¿Tienes miedo de que me hagan daño?.
-Tengo miedo de que te aparten de mi.
En sus ojos no pude evitar notar la sinceridad mezclada con preocupación,me acerqué y besé sus labios con necesidad,me alejé cuando sentí un fuerte mareo.
-Será mejor que durmamos un poco.-susurró todavía sobre mis labios,me besó nuevamente antes de apagar la lámpara.
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