Por un momento, te sentí, aquí en mi cama.
Pero cuando me volteé a abrazarte me conseguí con la nada.
Por un momento sentí como la alegría se apoderaba de mi cuerpo.
Pero al descubrir la verdad, fueron más oscuras y dolorosas las penas que me embargan esta noche.
Siento como juegan conmigo los espíritus malignos de la noche.
Siento como se burlan de mis sentimientos.
Y la forma en que perturban mis pensamientos.
Buscan hundirme en el fango de la desesperación, mientras deseo de tí un último beso.

Jonathan Cordero.
18 de septiembre 2020