Parte 59
Vicky----tu no me vas a quitar el placer de ver a la persona causante de estos moretones morir viéndome a los ojos------conteste----Jeymen, aquí me tienes, adelante, hazme tuya----este tomo su trago por completo acercándose como un lobo que logro acorralar a su presa.
Jeymen---- mi plan era ser rudo, pero por lo visto tendré que contenerme-----me fascina cuando mi presa tiene mirada de cazador.
Vicky---- te aseguro que no tienes que hacerlo-----sonreí ante su duda----deseo ser poseída, deseo olvidar, deseo sentir cada parte de ti, que me envuelvas en esta oscuridad que nos rodea.-----Jeymen se detuvo un instante, sus ojos fijos en los míos, como si buscara la verdad detrás de mis palabras. La tensión en el aire era palpable, una mezcla de deseo y peligro que me hacía sentir viva. Pero lo que este no sabe y no puedo decir, es que lo que mas deseo es olvidar a Jimin, aunque sea un instante. Jeymen se acercó aún más, su aliento cálido rozando mi piel. La intensidad de su mirada me atravesaba, y en ese momento supe que estaba a punto de cruzar una línea de la que no podría regresar.
Jeymen----¿Olvidar? ----susurró, con una sonrisa ladeada que denotaba curiosidad----. ¿Qué es lo que quieres olvidar, Vicky?---- Su pregunta me hizo dudar, pero sabía que no podía detenerme ahora. Jimin ya no era parte de mi vida, al menos no de la forma en que lo había sido.
Vicky-----Quiero olvidar el dolor, las promesas rotas —respondí, sintiendo que cada palabra era un eco de mi sufrimiento—. Quiero perderme en algo que no me recuerde a él-----Jeymen asintió, su expresión tornándose seria, pues mis labios revelaron la existencia de otro.
Jeymen----Entonces, déjame ser el olvido que buscas. ----Su voz era un murmullo profundo, casi hipnótico.
Sin pensarlo dos veces, me incliné hacia él, y en ese instante nuestras vidas se entrelazaron. Sus manos encontraron mi cintura, y el mundo exterior se desvaneció. Todo lo que quedaba era el calor de su cuerpo y la promesa de una noche sin ataduras.
Mientras sus labios se acercaban a los míos, una chispa de adrenalina recorrió mi cuerpo. En la oscuridad que nos rodeaba, dejé atrás a Jimin, solo era el personaje de Vicky que me habían impuesto y Jeymen, el cordero con mirada de lobo que algún día tendré que matar.
¿Como podría describir su apasionada forma de besar?
La forma en que Jeymen me besó fue como una tormenta que estalla en medio de la calma, un torrente de emociones crudas y poderosas. Sus labios eran firmes y exigentes, como si reclamaran cada parte de mí, mientras el mundo a nuestro alrededor se desvanecía en un susurro distante. Cada roce era un fuego que se encendía en mi interior, avivando un deseo que había estado dormido por demasiado tiempo.
Cuando nuestras bocas se encontraron, fue como si el tiempo se detuviera. La intensidad de su beso me envolvía, despojándome de las cadenas del pasado, llevándome a un lugar donde solo existía el ahora. Sus manos, firmes en mi cintura, me atraían hacia él, haciéndome sentir como si flotara en un mar de placeres prohibidos. La manera en que exploraba mis labios, con una mezcla de urgencia y ternura, era un baile que hablaba de pasiones ocultas y secretos compartidos.
Aquel beso era un acto desesperado para que olvide por completo a la persona que ocupa un lugar en mi corazón y solo pueda pensar en el, que solo lo pueda desear a el. Mis pies dejaron el suelo, mis brazos se encontraban alrededor de su cuello, Mi mano derecha en la parte posterior de su cabeza, mis dedos enterrados en su cabello, su brazo izquierdo alrededor de mi cintura, y su mano derecho en mi trasero.
Vicky---- Quiero tu lengua recorriendo mi cuerpo-----revele dando un leve tirón de su cabello.
Jeymen---- se te olvida que esta vez yo tengo el control----reí por ello siendo depositada en la cama, lo observe detenidamente desnudándose por completo---- se una perra buena y lamelo----ordeno, ¡Por Dios! me palpito el clítoris de solo escucharlo, así que gire en la cama caminando a gatas hasta la orilla, abrí la boca y saque la lengua----¡Diablos! no tienes idea de como me pones----aseguro metiendo lo en mi boca sin esperar un segundo mas, chupar, lamer, succionar y todo sin dejar de verlo directo a los ojos por mas de un segundo----no muerdas----ante esas palabras no me dio el tiempo de reaccionar y me tomo del cabello, llevando su virilidad hasta mi garganta, he sido entrenada para no ahogarme teniendo un pene en la garganta, así que solo lo desafié aun mas con mi mirada.-----¡Carajo!----exclamo sacando su pene vertiendo su semen en mi rostro--- me disculparía, pero te vez tan hermosa cubierta de mi esencia---ante esas palabras, lleve mi mano derecha a mi rostro, tomando un poco de su semen con mi dedo y luego lo lamí, asqueroso como siempre pero la emoción en su rostro es simplemente perfecta.
Vicky-----tu lengua en mi vagina, ¡Ahora!...............
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