=Y/n's POV=

Tras mi directa confesión, las chicas se mostraron sorprendidas.

Saqué mi pistola 9mm y se las mostré. Acariciando el gatillo con los dedos.

Ellas entraron en pánico sus rostros lo decían. A excepción de la pelirosa, maldición ¡ella nunca me decepciona! Jajajaja.

Ruler me disparó con su cetro.

—Ruler— ¡Atención, Y/n! ¡Ven y dame esa arma!

Lo recibí de lleno, sin embargo, comencé ejercer peso sobre su brazo a medida que mis pies se movían solos hacia Ruler.

Ruler tenía una mueca de cansancio.

—Ruler— ¿Qué... qué rayos? ¿Por qué me cansé tan rápido? —murmuró. —¡Idiotas! ¡Ayúdenme!

Ejercí toda mi gravedad sobre su brazo, y cayó, junto con su cetro.

—Yo— ¡Hola~! —la saludé, a centímetros de su incrédula cara.

Rápidamente tomé su centro y salté unos metros hasta atrás. Distanciándome de las cinco chicas.

—Ruler— ¡Devuélveme eso! —me exigió, muy enojada.

Todas me observaban incrédulas por como desafié a Ruler. No queriendo que me vieran como su amenaza. Arrojé el cetro devuelta a los pies de Ruler.

También guardé mi pistola.

Ella recogió su cetro.

—Ruler— ¡¿Cómo te atreves a desafiarme?! ¡Mi brazo se cansó en segundos! ¿Mentiste sobre el alcance de tu poder?

—Yo— Sí. No soy ningún aficionado. ¿Cómo crees que sobreviví a una confrontación con Calamity Mary? Por lo visto muchas de ustedes le tienen miedo, incluida tú, Ruler, o debería decir... ¡sobre todo tú! —la provoqué tal como ella hizo conmigo hoy.

—Ruler— ¡Lárgate! ¡No eres bienvenido! ¡No te quiero en mi grupo!

—Yo— ¡No me quieres! ¡Pero sabes que me necesitas! —puse una mano en mi pecho, enalteciendo mi ser y mis habilidades. —¿Qué mejor que un asesino para vencer a Calamity Mary?

Intento entrar en su mente, sé muy bien que esta tonta está más traumada con Mary que yo.

Ruler no contesta nada.

—Yo— Formaste este grupo para enfrentarla. Pero lo más seguro es que mueran todas antes de hacer algo al respecto. ¡Necesitas a alguien con mi experiencia y habilidades!

—Ruler— ¡Pero tú eres un insolente! ¡No me obedeces!

—Yo— No sería fuerte si no pensara por mi propia cuenta. —probablemente eso que dije resonó en las demás miembros del grupo. —Pude haberte hecho daño, pero te devolví tu cetro.

—Ruler— ¿Y eso qué? —ella se muerde el labio.

—Yo— Mejor tenerme de aliado que como tu enemigo, pero que te quede claro, no soy tu vasallo. —mi confianza la irrita, pero sabe que tengo razón, soy más poderoso que ella. —¿Socios?

—Ruler— ¿Qué harás después de matar a Calamity Mary? —me pregunta, expectante y en alerta en todo momento.

—Yo— Volver a mi vida, abandonar este juego para siempre. No será difícil, solamente dejaré de recolectar candies y me sacarán eventualmente. Así que, tienes un aliado poderoso por tiempo limitado, piénsalo.

Soné tan razonable como pude.

Las chicas miraron a Ruler, quien tras unos largos segundos que parecían minutos, tomó una decisión.

—Ruler— Muy bien. Acepto tu alianza. —su mirada hacia a mí es seria. —Sin embargo, una vez eliminemos a Calamity Mary del juego, tú tendrás que irte por cuenta propia.

—Yo— Acepto... —mi amplia sonrisa lo decía todo.

Obviamente no voy a renunciar a estos poderes, ella debe saberlo, seguramente intentará tramar algo contra mí, pero no la voy a dejar, pondré a sus aliadas en su contra, será difícil ahora que me ven como un monstruo, pero incluso un monstruo como yo podría ser más respetable y un mejor líder que estas chicas. Ya veré que otros usos puedo darles. 

Podría incluso... tener mi propia mafia de bobas mágicas. Será luego de deshacerme de Ruler, quiero dominar este juego por completo, y para eso, he de eliminar a las más fuertes.

—Tama— Que alivio... pensé que ibas a hacernos daño... —Tama se llevó las manoplas de perro a la cara.

—Yo— No tengan miedo, nunca lastimaría a chicas indefensas. —le di mi mejor sonrisa, levantando mis manos.

—Ruler— Lo dice un sicario. ¿Cómo confiar en alguien que mata personas? —Ruler me cuestiona.

—Yo— Tú misma lo dijiste. Soy un sicario, no un asesino en serie. —explico una diferencia.

Las gemelas que antes parecían impresionadas ahora tenían una sonrisa nerviosa.

Swim tenía su rostro tan inexpresivo como siempre.

Tama tenía las manos juntas.

Y Ruler solo me veía con los ojos en blanco.

—Ruler— Un asesino es un asesino.

Como si tú no quisieras ensuciarte las manos, hipócrita. Pero ya no quiero pelear contigo, juro que te mato aquí, frente a ellas si me sigues molestando.

—Yo— Bueno, ha sido una noche muy intensa. Volveré cuando se calmen las aguas. No quiero incomodarlas ni asustarlas.

Ruler sonrió, irónica.

—Ruler— Muy tarde para eso. Ya, saca tu trasero de aquí.

Ruler... te reemplazaré pronto.

Me fui del templo, dejándolas con sus dudas de mí.

Sé que fui muy extremo, pero así he dejado claro que no soy un sumiso con ellas, no soy débil, soy más fuerte, y sé que podría matarlas a toda si quisiera, pero sería un desperdicio. Y podría tener problemas con las demás chicas mágicas... probablemente.

Tengo que conocer al resto, eso haré. Para saber cómo piensan. Cuál de ellas podría añadir al grupo ¿por qué conformarse con un simple dúo? Con un grupo más grande, podría tener mayor influencia sobre los demás. Podemos abusar de estos poderes tanto como no nos descubran, es más o menos lo que Fav me dejó en claro.

Miré la herida de bala que me hizo Calamity Mary.

Miserable. No quisiera quejarme, pero me duele cada que levanto el brazo, me tiene más irritado de lo normal. Me lo tengo que aguantar como hombre.

Me puse la capucha, y comencé a correr y saltar un edificio. Me siento como un superhéroe, Ruler tenía razón. Soy como el enmascarado de esta ciudad.

Jamás me imaginé combatiendo a otros criminales y colaborar con su arresto, en lugar de ser yo quien los mate para eliminar competencia delictiva.

Mientras voy saltando de edificio en edificio, veo a otra chica mágica haciendo lo mismo, unas decenas de metros más adelante.

Es la ninja que sólo he visto en la sala de chat. La seguiré~

Voy dando saltos más largos que los suyos, acortando la distancia entre nosotros con cada edificio que saltamos.

Ella se dio cuenta que la seguía, dio un vistazo atrás y siguió saltando.

¿Por qué huyes, nena?

Seguimos así por un rato. Hasta que ella se detuvo en la terraza de un edificio, y se camufló en la puerta que da a las escaleras que conducen al interior.

Está esperándome con un ataque sorpresa~ Interesante.

En lugar de llegar por los lados, o por arriba, tuve una idea mejor.

Llegué sigilosamente por las paredes del edificio, me sostuve por la cornisa, con tan poco peso que ejercí, mi sigilo fue infalible.

De un salto subí a la terraza, el viento casi juega en mi contra por tan poco peso que tenía, podría salir volando como una bolsa plástica si no supiera redistribuirlo bien. En cuánto a mi cuerpo, ya lo tengo casi dominado, pero la parte difícil es usarlo a metros de mí.

Ella estaba esperándome por cualquier otro lado, menos al frente.

Decidí llamar su atención con un silbido coqueto.

Instantáneamente, ella entró en alerta y me miró con enojo.

—???— ¿Qué diablos quieres? —preguntó, con una estrella ninja en cada mano, lista para atacarme.

Ay cariño, ya me olvidé tu nombre.

—Yo— Te vi volar por ahí, yo estaba haciendo lo mismo y pensé: "¡que coincidencia!". —mi tono obviamente iba en burla. —Mejor la acompaño, se ve que está muy solita.

—???— No necesito tu compañía. ¡Lárgate!

¿Por qué las mujeres son tan desconfiadas? Hahaha.

—Yo— Pensé que era una buena oportunidad para conocernos. Seguro tú me conocen, Heavy Storm, soy prácticamente una tendencia, pero puedes llamarme Y/n.

Ella pasó de mirarme con ira, a poner los ojos en blanco.

—Yo— Y tú, bueno, no sé cómo te llamas, pero si tuviera que adivinar... seguro te llamas "la última tentación", porque estás muy buena.

Su expresión se volvió inentendible, pero está claro que la dejé sin palabras.

—Yo— Le atiné ¿verdad? —sonreí con picardía.

En respuesta, ella me lanzó dos estrellas ninjas que terminaron por rapar aún más los costados de mi cabeza.

Me costó procesar lo rápido que pasó todo, y en como hubiera muerto si hubiera hecho algún otro movimiento hacia un costado.

—???— Mi nombre es Ripple. No te hagas el tonto con tus apodos estúpidos. O te haré tragar tus palabras... —me amenazó mientras sostuvo tres de esas estrellas en una mano.

Ella en serio me prende, más de lo que podría enojarme su ataque.

—Yo— ¿Cómo se llaman esos juguetes que tienes en la mano? —intento dar conversación, pero realmente no sé como se llaman esas porquerías.

—Ripple— Se llaman Shurikens. Y más te vale alejarte de mí, ahora. Porque te juro que te los lanzaré directo a tu cara.

La miré con gracia.

—Yo— Preciosa ¿cómo estás tan segura de que no puedo simplemente esquivarlos? —me crucé de brazos.

—Ripple— Simple, no puedes. Mi habilidad hace que todos mis lanzamientos tengan un impacto garantizado. Morirás antes de intentar algo contra mí.

Abrí los ojos con interés, con mi boca incluida.

Ripple sonrió un poco.

—Ripple— Así que si tienes pensado coquetearme, atente al riesgo que conlleva, casanova de quinta. —sacó más shurikens.

—Yo— Hahaha... —Me reí entre dientes.

Esta chica... y Swim Swim, las dos tienen que ser mías.

—Yo— Oye, bombón japonés, ¿ya tienes equipo? —sonrío con confianza.

—Ripple— Tengo una compañera. Y no me llames por esos apodos estúpidos, te lo dije. —volvió a ser amarga.

—Yo— Lo siento, mi error, es que te ves tan... bien.

Ripple pone los ojos en blanco.

—Ripple— Deja de desnudarme con la mirada.

Ugh, ¿leerá la mente también?

—Yo— ¿Y no preferirías hacer equipo conmigo? —vuelvo al tema anterior.

—Ripple— ¿Qué tú no estás en el grupo de Ruler? —levantó una ceja.

—Yo— Sí, lo estoy. Pero fácilmente podría dejarla por una mejor candidata.

Ella lleva sus manos a las caderas, poniendo los ojos en blanco.

—Ripple— Déjame adivinar, yo.

Asiento, con un pulgar arriba y guiñando un ojo.

—Yo— ¿Aceptas?

—Ripple— Incluso si fueras más fuerte, yo paso.

—Yo— ¿Tú pasas? —la miró con la misma expresión de decepción.

—Ripple— ¿Para que me andes mirando todo el tiempo? Eres un cerdo. Tengo suficiente de eso en mi vida, eres como todos los hombres.

—Yo— Todavía no te he contado mi poder...

Esperanzado, intento convencerla.

—Ripple— No me interesa. Vete ya, antes que te lastime. —volvió a amenazarme, lanzando otro shuriken directamente a mis botas que con suerte no me rebanó los dedos del pie.

Hago una mueca, apretando mis dientes en una sonrisa.

No quería irme, y menos con una mujer pidiéndomelo, pero no tenía más opción, no creo que una herida de Shuriken sea buena para mi cuerpo real...

—Yo— Tú te lo pierdes, babe. —con mi orgullo herido, la dejé sola.

Volví a casa para comer una bolsa grande de papas fritas que tenía guardada, y analicé mi situación.

Veamos, todas las tontas del grupo de Ruler, incluyendo a Ruler, son débiles, por eso no pudieron conmigo hoy. Pero Ripple en cambio, podría matarme si quisiera, incluso ella sola es mejor que todo mi grupo de 5.

Hubiera sido una mejor aliada contra Calamity Mary...

No, ¡claro que no la necesito!

¿Realmente necesito la ayuda de una mujer para matar a otra? ¡Es absurdo de sólo pensarlo!

Seguiré con Ruler y su equipo, a menos que una aliada poderosa me acepte como su compañero, continuaré con estas chicas y me volveré su líder, Ruler sobra, yo puedo inmovilizar a varios sujetos a la vez, y sin cansarme, con esos bracitos debiluchos que tiene. Jajaja.

Y Swim Swim... seguro eres menos problemática que Ripple, además de ser más "enorme"...

Me relamí mis salados labios por las papas que estuve comiendo, imaginando todo lo que quiero hacerle.

Entrar a este juego fue la mejor decisión que he tomado. ¿Cuántas chicas me quedan por conocer? Estoy más interesado en esto que antes.

Ahora mismo son las 2AM.

Saqué mi Magical Phone y revisé la sala de chat, solamente Nemurin estaba en línea.

Nemurin... ¿qué clase de chica mágica eres, y cuál es tu poder?