CAPITULO 6

Me quedé completamente sorprendido ¿Qué demonios hacia él en mi departamento? ¿me estaba vigilando? No entiendo nada.

─¿Y en dónde está?

─Afuera, no se ha movido de aquí para nada ─ sonrió visiblemente agradecida.

─¿Hum? ¿de verdad? ─ Mi mamá de nuevo frunció el ceño.

─¿Quieres que lo haga pasar?

─Yo...bueno, si supongo que debo agradecerle. ─Era lo menos que podía hacer después de salvarme la vida, nada menos que dos veces ya.

─Esta bien, kookie, le diré que venga ─ Me dio un beso en la frente y salió. Las manos comenzaron a sudarme, no sabia que le diría. Solo lo he visto una vez y no lo traté nada bien, y ahora el me salvó la vida.

Que fastidio, odio estar en deuda con la gente, sobre todo con extraños.

Me acomodé el cabello para que no me viera tan horrible. Llamaron a la puerta.

─Adelante ─ mi voz aun sonaba terrible, pero ni modo.

La puerta se abrió, dejando ver a un Alfa, de cabello rubio, alto y con una mirada calma. ─ Hola. ─ se detuvo en el umbral de la puerta.

─Hola, pero pasa─ El hizo los pasos que faltaban para entrar, cerró la puerta detrás de si y acto seguido se acercó a mi cama.

─¿Cómo estás? ─ Tomó asiento junto a mí. Su voz era cautelosa y profunda.

─Jodido, pero vivo─ el agachó la cabeza─ gracias a ti, por cierto ─ mascullé apenas audible.

─Fue una verdadera tontería ¿Por qué lo hiciste? ─ me cuestionó, se que esa pregunta le ronda por la mente desde que me conoció.

─Porque...bueno tenía mis razones ─ No quería ponerme a explicar nada, no tenía por qué. Si, me salvó la vida, pero por lo demás no lo conozco de nada. Le daría las gracias y él podía irse a seguir con su vida y yo con la mía.

─Las que hayan sido, no son suficientes ─ se pasó una mano por su cabello rubio despeinándolo un poco. Posó sus ojos en los míos.

─Ya lo sé, bueno lo sé ahora, gracias por salvarme y...─ me quedé pensando─ Un segundo ¿Qué hacías afuera de mi departamento?

─¡Oh!, si bueno...eso ─ se rascó la cabeza.

─¿Me espiabas? ─No terminaba de comprender.

─¡No! No vayas a creer que soy un acosador o algo así ─ levantó las manos en señal de promesa.

─¿Entonces? Dime porque si ando pensando algo así. ─ me tapé un poco más con las mantas en señal de protección. Sí estaba agradecido, pero necesitaba respuestas.

─Bueno, me dejaste muy preocupado, el pensar que estabas dispuesto a saltar del Golden Gate, pensé que tal vez podrías hacer algo más y mira que no me equivoqué.

─¿Y por cuanto tiempo estuviste ahí?

─Varios días─ admitió ─ fui y vine sin decidirme a tocar tu puerta, ya que como te habías enfadado de que frustré tu suicidio anterior, pensé que no me querías ver, pero después me decidí y fue aquel día cuando toqué varias veces pero nada, el portero me dijo que no habías salido de casa, así que supuse que debías estar ahí dentro. Y después escuché el ruido de tu ventana romperse y supe que algo malo ocurría y como seguías sin abrir, tuve que romper tu puerta.

─¡Oh! ─ masculle sorprendido ante su relato.

─Pero no te preocupes que ya la mandé a arreglar, está como nueva─ hizo un ademan de suficiencia.

─Gracias─ no supe que mas decir, me encontraba abrumado.

─No creas que soy un acosador, de hecho...─ se quedó callado, lo miré con el ceño fruncido ─ es la primera vez que hago algo como eso. ─ sentí en su voz algo parecido al dolor, no sé cómo describirlo.

─Una vez más gracias, mi lobo y yo te agradecemos todo lo que hiciste por nosotros, no solo esta vez, también la del puente, aunque esa noche no parecía que lo estuviera. Me alegra que estuvieras ahí, Taehyung. Ya puedes volver a tu vida normal, yo intentare volver a la mia y trataré de vivir lo mejor posible.

─¿Por qué lo hiciste? ─ insistió una vez más.

Respiré profundo, ¿Por qué no lo dejaba ir y listo? ─ ¿Nadie te lo ha dicho? ─ cuestioné un tanto fastidiado.

─No, nadie, supongo que respetan tu privacidad. ─ Me respondió encongiendose de hombros.

─Solo digamos que la vida no ha sido muy buena conmigo, se llevó al amor de mi vida, mi Alfa murió de Leucemia o cáncer en la sangre, como quieras verlo. — A ver si esto lo hace sentirse mal por estarme jodiendo con querer saber.

─Yo lo lamento en verdad, pero no es motivo suficiente para tratar de matarse.

─¿Tu que sabes? ─ Le espeté molesto ─ No creo que hayas pasado por algo así.

─¿Y tu que sabes? ─ me respondió de la misma manera. ─ Das por hecho algo que no estás seguro ¿Qué te hace pensar que la gente a tu alrededor no sufre? Pues te tengo una noticia; si lo hace, todos lo hacemos. Pero en lugar de ir por la vida maldiciendo y sintiendo auto compasión. Uno trata día a día de sobre vivir y de hacerlo lo mejor posible, por nuestra familia y por nosotros mismos. ─ se levantó de su silla sin mirarme para dirigirse a la puerta ─ y para tu información si he vivido cosas así, nadie mejor que yo te puede entender. ─ se fue sin decirme nada más. No se que haya pasado este hombre que me ha salvado, pero tal vez si fui un tanto brusco, aunque realmente Kim Taehyung no es mi prioridad ni me importa.

El resto del día transcurrió lo más normal posibles, después de lo ocurrido con Taehyung, supongo que se fue a su casa o que se yo, de todos modos, me da absolutamente igual, ya le agradecí lo que tenia que agradecerle, me acomodé en la cama dispuesto a volver a dormir, de todas maneras, no había demasiado que hacer.

─¡Eres un estúpido! ─ Escuché en la puerta.

─Jimin, cálmate ─ respiré cansadamente, se que mi amigo estaba ahí para darme el sermón de la vida y de lo estúpido e increíblemente egoísta que fui.

─Estas de broma ¿no? Mírate, idiota, eres un imbécil ¿Cómo pudiste hacer esto? ─ sus ojos se llenaron de lágrimas.

─¿Te acabas de enterar?

─Por supuesto que no, tarado, pero como no habías despertado me estaba guardando mis insultos para este momento.

─Lo siento, pero estoy bien ─ sonreí tratando de calmarlo.

Se acercó a mi y me dio un golpe en la frente con la palma de su mano ─¡tarado! Arrímate para allá. ─ me moví y se tumbó junto a mi ─ ¿Y qué se siente?

─¿Qué se siente qué?

─Ya sabes, cortarse las venas─ me agarró las muñecas vendadas.

─Duele mucho.

─Obvio ¿Qué más?

─El olor a sangre es muy penetrante, olía como a hierro, mis muñecas ardían como si me hubiese prendido fuego.

─Que fuerte, eres un temerario. ─ me miró más que molesto.

─No te burles, estaba desesperado, pero no volveré a hacer algo así.

─¿Me lo juras?

─Sí, además... sé que es muy loco y eso, pero...Jeff me lo pidió. ─ No levanté la mirada para ver a mi amigo, seguro piensa que estoy loco.

─¿Jeff? ¿y como fue? ─ Pero no se escuchaba sarcasmo, si no curiosidad.

─En algún punto entre la vida y la muerte, supongo que desvarié con él y me pidió que no lo volviera a intentar, que tenia mucho porque vivir, aun no es mi tiempo y no pienso defraudarlo.

─Es tan de película, pero por lo menos funcionó para que desistas de tus idioteces. ─ Jimin me tomó la mano.

─Exacto, lo que no se es que haré, es decir; en que voy a trabajar y todo eso, pero ya lo veré a su tiempo.

─Yo te voy a ayudar ─ me dedicó una sonrisa de autosuficiencia, ─ aunque...tendrá ser cuando vuelva.

Lo miré sin entender ─ ¿A dónde te iras?

Sonrió feliz ─ Al fin la banda hará una gira, no te emociones demasiado, aun no es nada super importante, pero es un comienzo. ─ Me miró alarmado ─ Pero si tu me dices que me quede contigo lo haré, tú eres más importante que cualquier cosa.

─No, no nada de eso, me da mucho gusto por ti, se cuando han luchado para conseguir esto, ve tranquilo que yo estaré bien. ─le sonreí ─ ¿Y mi hermano?

─Bueno, el quiere ir conmigo. Aunque probablemente lo mejor es que se quedé contigo y tu mamá.

─No es necesario, yo estaré bien, pero si algo sucediera les llamaré ¿está bien?

─¿Lo prometes? ─ Jimin acarició mi cabello, mas como querer quitarle los nudos.

─Seguro, quiere que me traigas muchas cosas de tus viajes, fotografías y videos de todos tus conciertos.

─Perfecto, eso haré. ─ Le iba a preguntar a Jimin, si Taehyung continuaba afuera, pero
seguramente no, ya lo habría mencionado. Además, como ya dije antes, seguramente ya se habría ido después de lo que nos dijimos.

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Los días pasaron, un par mas fueron necesarios para que mis signos vitales se estabilizaran y evidentemente un psicólogo me visitó para hablar acerca de mi intento de suicidio, odio tener que hablar con gente desconocida acerca de mi vida, pero era necesario para que me dieran el alta. Me encuentro guardando mis cosas personales como; cepillo de dientes, cepillo de cabello y varias cosas más que mamá me llevó para no pasarla tan mal. Me encontraba listo para irme, solo esperaba por mi madre para irnos a su casa.

Llamaron a la puerta.

─¿Se puede? ─ Esa voz, me encontraba de espaldas a la puerta, no pude evitar sentir algo raro en mi interior.

─Si, claro. ─ Él entró quedándose parado justo en la entrada de la habitación. ─ Hola, Taehyung.

─Hola, Jungkook ─ Me extendió la mano con forma de saludo y yo la estreché, sentí un cosquilleo muy raro, así que quité mi mano inmediatamente. ─ ¿Listo para irnos?

─¿Irnos? ─ odiaba responder una pregunta con otra pregunta, pero me desconcertó.

─Sí, me ofrecí a llevarte a casa de tu mamá.

─Oh─ me iría a casa de mi mamá en lo que superaba todo y podía estar nuevamente en mi departamento sin hundirme en mi depresión. ─Gracias, pero no es necesario.

─No te preocupes por eso ¿nos vamos? ─ Tomó mi maleta al tiempo que me ofrecía una sonrisa amable.

─Bueno, gracias entonces. ─ Salimos del hospital, me subí a su auto y el condujo a casa de mi madre. El camino fue silencioso, casi no cruzamos palabra. ─ Taehyung ¿Por qué sigues aquí?

─¿La verdad? No lo sé ─ giró a mirarme con una sonrisa muy curiosa.

─Que elocuente eres ─ Ambos comenzamos a reír─ No, de verdad, yo me he portado tan mal que no merez...

─Mira, no importa nada de eso, ¿Qué te parece si lo olvidamos?, te propongo algo.

─¿El que?

─Que seamos amigos ¿te parece?

─¿Amigos? ─Me lo pensé un poco─ Yo no sé si...

─Vamos, no perdemos nada─ se encogió de hombros─ solo dos extraños que conviven pasan tiempo juntos y se vuelven buenos amigos.

Me pase la mano por el cabello, tal vez no es tan mala idea, me vendría bien un amigo ahora que Jimin se va de gira y estará lejos por algún tiempo. Además, supongo que le debía esto al chico que me salvó la vida dos veces.

─Está bien, Taehyung, seamos amigos. ─el me volvió a extender la mano y yo la volví a estrechar.

El pacto de amistad estaba sellado.

CAPITULO 6

BUENO, YA SON AMIGOS...ALGO ES ALGO XD

¿QUE LES PARECIÓ? DEJENME SUS COMENTARIOS.

BESITOS MORADOS💜💜💜💜💜💜💜