Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 19: Nuevos aprendizajes

Algunos meses después

-¿No deberías estar preparándote para la reunión de los kages?- preguntó Kurama.

El rubio, quien se encontraba sentado en forma de loto con sus ojos cerrados, habló.

-Tengo aún un poco de tiempo, será dentro de un par de semanas... o eso creo, así que puedo entrenar libremente- dijo.

Kurama solamente bostezo, para después recostarse a sus espaldas.

-Mantenerte sin oxidar no es entrenar- decía.

El rubio sonrió ligeramente.

-Hasta ahora no he encontrado alguna otra manera de incrementar todo lo que he aprendido... siento que me estoy estancando- dijo.

Naruto se sintió un poco confundido cuando no escuchó al noveno bijū responder.

-Al parecer hoy estás de mal humor, eh- decía.

Kurama solamente abrió uno de sus ojos y miró a su espalda.

-A veces sueles ser muy hablador y eso es irritante, aún sigo sin comprender como es que Sakura se fijó en ti- dijo.

Ahora era el rubio quien abrió sus ojos y volteó a mirar hacía el inmenso zorro.

-Eso es porque soy guapo- dijo, sonriendo.

Kurama lo miró... y lo miró.

-Claro- dijo, para después cerrar nuevamente su ojo.

El rubio solamente lo miró con un rostro de bastante incredulidad. A veces podía ser cruel, a veces amigable. Kurama era todo un enigma para Naruto, incluso en la actualidad, pero era un buen compañero, gruñon y peludo, pero buen compañero.

Al notar que Naruto había vuelto a girar su rostro, Kurama lo miró nuevamente y suspiró levemente, aún había cosas que aprender por parte del rubio... pero si le hablaba sobre lo que se le había ocurrido cuando mencionó que se sentía estancado, bueno, no sabía las consecuencias que aquello podría traer ya que incluso el imponente zorro no sabía de ellas por completo.

Al abrir sus ojos, el joven Uzumaki solamente pudo observar unos cuantos árboles, se encontraba cerca de unos de los campos de entrenamiento, hacía un par de meses que había decidido tomar la palabra de Kakashi y entrenar alguna que otra vez... pero le resultaba un poco difícil.

-Debe haber alguna forma de avanzar un poco... ¿quizás con mis clones?- pensaba.

...

Un poco alejado de allí

-¡No bajes la intensidad, Karin-san, continúa así!- decía Lee.

La pelirroja trataba, con todo lo que había aprendido en todo este tiempo, de poder darle un segundo golpe al joven cejon, hacía un par de meses que entendía de que Lee no era alguien para meterse en un combate, era realmente genial.

Aunque, de pronto, pudo sentir nuevamente aquel inmenso chakra proveniente de Naruto, el mismo que había sentido durante la guerra y el mismo que había sentido fugazmente durante aquella misión de hace algunos meses... algo que la distrajo un poco y, por consecuente, casi recibe un golpe por parte de Lee.

Afortunadamente el joven cejon había detenido su ataque a tiempo.

-Mierda, me distraje- dijo Karin en un tono de voz ligero.

Lee suspiró levemente, recobrando así un poco el aliento, debía admitir que fuera de ese inconveniente, la pelirroja había mejorado bastante en cuanto a taijutsu en casi ocho meses, claro que aún le faltaba mucho por si quería llegar a ser alguien temible en ese aspecto, pero ella no dependía totalmente de ello como él.

-Lo cual es bastante raro en ti, Karin-san ¿sucede algo?- preguntó.

La joven Uzumaki miró hacía la dirección en la cual había logrado sentir el chakra del rubio y habló.

-No fue nada, solo fue un poco de cansancio, estuve toda la mañana con los pacientes que se me habían asignado y, bueno, fue cansado- dijo.

Lee sonrió.

-Eso es entendible- decía. -Pero no te preocupes, Karin-san, todos tenemos preocupaciones y otras cosas que hacer, pero aún con todo lo que llevas haciendo referente al hospital, has mejorado bastante en estos meses, así que, bueno, no hay nada que reprochar- dijo.

Karin miró al cejon y sonrió.

-Gracias por eso- decía, sentándose en el césped. -Escuche que mañana te vas de misión a Iwa, ¿quienes irán contigo?- preguntó.

Lee la acompañó en el césped y respondió.

-El sexto nos asigno a Chōji y a mí para acompañar a Shikamaru a dejar algo relacionado a la próxima reunión de kages, creo que será en tres semanas- dijo.

La pelirroja suspiró.

-¿Sabes? creo que, en sí, lo más tedioso de las misiones es el tiempo de viaje- dijo.

El joven cejon pensó en ello.

-No diría que es tedioso, pero las largas distancias siempre se pueden aprovechar para medir tu velocidad... es decir ¡podrías viajar el doble, triple o el cuatruple de rápido!- decía con bastante euforia.

Karin solo lo miró con un rostro de incredulidad, bueno, era Lee, llevaba ya meses de conocerlo, pero aún le parecía exagerado.

Lee miró hacía arriba y notó que la tarde estaba comenzando a pasar así que, sin más, se levanto del césped, extendiendo así su mano para ayudar a Karin a levantarse, a lo cual la pelirroja accedió.

-Necesito preparar mis cosas para salir mañana, además de descansar un poco, y creo que tú también deberías hacer lo mismo, Karin-san- dijo.

La pelirroja suspiró, Lee tenía razón.

Bastante razón.

-Creo que seguiré tus consejos esta vez también, entrenaremos más cuando regreses de Iwa- mencionó.

Lee sonrió y extendió su brazo, mostrando así su pulgar.

-¡Claro que sí!- dijo.

Y así, sin más, el joven cejon comenzó a retirarse de aquel campo de entrenamiento. Era una buena persona, además de un buen instructor.

Karin solo miró, nuevamente, hacía la locación donde se encontraba Naruto.

Aún podía sentir aquel inmenso chakra.

...

-Bien, supongo que de este modo será algo más desafiante- decía Naruto.

El rubio procedió a hacer el sello en forma de cruz con ambas manos y, de ello, salieron cinco clones. Los cuales solamente se miraron entre sí.

-Bueno, debo entrenar, así que ataquenme con todas sus fuerzas- dijo.

Y es que entrenar con clones normales podía ser beneficioso en sí, pero entrenar con clones que tenían parcialmente tu mismo poder junto al de Kurama ya era un nivel un poco diferente.

Los cinco clones solamente se apuraron y cargaron en contra del rubio original. Debía admitir que su estilo de taijutsu no era el mejor, puesto que no era defensivo en su totalidad, pero le servía para defenderse... aunque servía, bastante además, para la ofensiva.

...

Al estar cerca de la locación, la pelirroja pudo observar a Naruto peleando contra un par de si mismo, además de verlo cubierto con esa cantidad inmensa de chakra, lo cual era algo realmente impresionante mirarlo de primera mano.

Aunque Karin pudo observar que, de un solo golpe, el rubio hizo explotar en pequeñas cortinas de humo a aquellas dos copias.

La joven Uzumaki solamente pudo sorprenderse un poco más cuando miró al rubio hacer nuevamente el sello de cruz, para que, después, otro par de clones aparecieran frente a él.

Naruto solo giró hasta mirar a Karin, al estar combatiendo contra él mismo, había dejado pasar la parte de sensor que le otorgaba ese modo en él.

-¡Karin, hola!- saludó.

La pelirroja sonrió, mientras se acercaba.

-No sabía que entrenabas cerca de aquí- mencionó.

El rubio, quien había optado por regresar a su forma "base" y después de haber disipado a sus otros él, respondió.

-Llevo un par de meses viniendo aquí a entrenar, usualmente usaba el espacio que Lee y tú usan, pero, bueno, ya estaba ocupado- dijo.

Karin abrió sus ojos en sorpresa ante aquello.

-¿Llevas ya un par de meses entrenando cerca de nosotros? ¿en serio?- preguntó.

El rubio solamente sonrió mientras rascaba su nuca.

-No quería molestarlos- dijo.

Karin lo miró, ¿cómo es que nunca sintió su chakra antes? definitivamente necesitaba entrenar eso... aunque había venido por otra cosa.

-Quisiera preguntarte algo- decía, a lo que el rubio asintió. -Ese chakra que cubría tu cuerpo es, bueno, ¿del kyubi?- preguntó.

El rubio asintió.

-Es, bueno, se podría decir que es una fase muy avanzada que hay entre un jinchuriku y su bijū, en este caso, Kurama y yo- respondió.

Karin solo pudo alzar una ceja con un rostro de confusión.

-¿Kurama?- preguntó.

-Así se llama el kyubi- respondió.

La pelirroja solo pudo sentirse un poco confundida cuando miró a Naruto reírse levemente.

Sí, Kurama había suspirado más fuerte de lo normal.

-No sabía que los bijū tenían nombres, eso es extraño, aunque supongo que tiene sentido...- decía. -Pero en fin, yo, bueno, ¿cómo hiciste esas copias tuyas?- preguntó.

Y es que al mirar combatir a Naruto contra él mismo le había dado una idea para poder mejorar su nivel de sensor al no estar concentrada.

El rubio solamente sonrió.

-Es un jutsu llamado clones de sombra, es bastante útil a decir verdad- decía. -Pero así es como lo hice- dijo el rubio, para después volver a colocar su manos con aquel sello de cruz. -Tienes que hacer este sello, después tienes que dejar salir una cantidad considerable de chakra desde tu cuerpo, y ese chakra se moldeará en un clon sólido, ya que tu chakra se distribuirá parcialmente en el clon- dijo.

La pelirroja solo lo miró.

-¿Y ya? eso suena fácil- dijo.

El rubio sonrió.

-Bueno, todo suena fácil al decirlo, pero la práctica es diferente... ¿pero por qué te interesa? ¿quieres aprenderlo?- preguntó.

Naruto solo observó a la pelirroja sentarse en el césped. Debía admitir que el entrenamiento con Lee había sido cansado, llevaba unos meses entrenando con él y aún le costaba un poco seguirle el ritmo... y lo menos que quería ahora era un entrenamiento extra.

Pero también necesitaba incrementar su capacidad de concentración, así que algo como eso le vendría bien.

-Necesito ser capaz de detectar chakras aún sin estar concentrada del todo- decía. -Cuando me concentro puedo cubrir un radio bastante amplio, pero sin concentrarme estoy un poco vulnerable... entonces necesito entrenar eso, así que, bueno, creo que ese jutsu me vendría más que bien- dijo.

El rubio suspiró y habló.

-Bueno, inténtalo, aunque debes conocer los límites- decía. -Este jutsu puede ser usado siempre y cuando sea con una cierta cantidad de clones, ya sabes, el maximo que puedas crear porque sino podría ser algo incluso mortal- mencionó.

La pelirroja lo miró.

-¿Y qué pasa si quiero crear bastantes más clones de los que me da mi límite?- preguntó.

-Bueno, tu chakra caería a un cero total y morirías- decía, aunque recordó algo bastante obvio. -Pero tú eres una Uzumaki, al igual que yo, entonces eso quiere decir que tienes mucho chakra, al igual que yo, lo cual nos da una cierta ventaja- dijo, sonriendo.

Karin, al escuchar aquello, se levantó del césped y habló.

-¿Qué quieres decir con eso?- preguntó.

-Yo soy capaz de crear poco más de mil clones si uso mucho chakra, pero eso es en solo casos extremos, además de que me resulta fácil por la misma razón de que poseo mucho chakra, entonces no me canso inmediatamente después de hacerlo- dijo.

La pelirroja asintió... aunque observó al rubio comenzar a caminar nuevamente hacía donde estaba antes.

-Bien, entrenemos- decía Naruto. -Tú puedes comenzar con practicar tus clones y yo seguiré en lo mío- dijo.

-Bien, entendido- dijo.

Al colocar sus dedos con aquel sello que Naruto le había enseñado, la pelirroja pudo observar una vez más al rubio entrar en ese modo que lo cubría con chakra... vaya que era inmenso el poder de su bijū, era la segunda vez que había podido sentir un poder así, la primera contando al hachibi del hermano menor del Raikage, pero aún así, la cantidad de chakra con la que Naruto cubría su cuerpo era superior.

-Bien... concentrar chakra y después expulsarlo- pensaba.

Al cerrar los ojos para concentrarse un poco, efectivamente podía sentir su red de chakra comenzar a trabajar con ayuda de aquel sello... aunque el resultado que salió fue un clon de ella demasiado moribundo. La pelirroja solamente pudo mirar aquella cosa con un rostro de mucha, demasiada incredulidad. Era obvio que aún habría un poco de camino por delante.

Aunque al mirar nuevamente hacía Naruto, realmente era algo bastante asombroso de ver. Había aumentado el número de clones y cada uno de ellos se movía a una velocidad un poco alta, aunque el rubio original no se quedaba atrás, era veloz, bastante veloz.

Al deshacerse del último clon, Naruto miró detrás de él y pudo observar a la pelirroja mirando su entrenamiento... aunque también miró al primer clon que había hecho, era normal, era la primera vez que implementaba ese jutsu.

-Supongo que habrá que entrenar un poco más- decía el rubio, sonriéndole.

...

-¿Entonces me estás diciendo que a ti te tomó solo una noche en aprenderlo?- preguntó, incrédula.

Había caído la noche en la villa, ambos se encontraban caminando de vuelta a sus hogares. Había sido un largo y cansado día.

-No fue realmente difícil, es decir, claro que reprobé el exámen de graduación dos veces, además de que tuve que leer algo prohibido y, sinceramente, creo que hacer eso fue lo difícil, pero aprender el jutsu como tal después de haber leído la información del pergamino, no- dijo.

La pelirroja lo miró.

-¿Pergamino prohibido?- preguntó.

Naruto asintió.

-Era, bueno, un pergamino que contenía jutsus prohibidos y de bastante importancia para la villa, un "maestro" de la academia me engañó para robarlo y entonces lo hice- dijo

Karin solamente pudo sudar un poco ante la naturalidad con la que mencionó eso Naruto.

-¿Y nadie te persiguió para recuperarlo? ¿o al menos se dieron cuenta?- preguntó.

El rubio tocó su barbilla, tratando de recordar.

-Mmm, bueno, en sí no recuerdo muy bien cuánto tiempo se tomaron en darse cuenta, pero lo que si recuerdo es que tenía a varios jounins tras de mí después de eso, no me siento orgulloso de haberlo hecho, pero vaya que fue una hazaña y solo con doce años- dijo, riendo un poco.

La pelirroja solamente lo miró con un rostro de incredulidad.

-Doce años... robar un pergamino importante y tener a jounins tras de ti, bueno, con justa razón es bastante poderoso- pensaba.

-¿Podría entrenar contigo hasta que Lee vuelva de su misión?- preguntó.

El rubio la miró con una sonrisa.

-Claro, así sirve y también practicamos con el clones de sombra y taijutsu, me vendría bien- dijo.

Ambos se detuvieron un poco antes de llegar al centro de la villa.

-Bueno, tengo que ir a casa, nos veremos mañana para entrenar- dijo el rubio.

La pelirroja asintió.

-Igual. Saluda a Sakura de mi parte- dijo.

-Seguro- dijo, sonriendo.

Y así, sin más, ambos siguieron distintos rumbos hacía sus hogares.

...

Naruto solo pudo oler desde la puerta principal el aroma que venía desde la cocina. Debía admitir que olía exquisito.

-¡He llegado!- avisó el rubio.

La pelirosa solamente hizo su cabeza un poco hacía atrás y lo miró, sonriendo.

-Me alegra que hayas vuelto- dijo.

El rubio se acercó hasta ella y miró lo que estaba preparando.

-Realmente estás mejorando más rápido que yo en la cocina, Sakura-chan, aunque debes admitir que yo aún tengo mejor sazón- dijo.

Sakura lo miró con una ceja levantada, para después sonreír.

Naruto solamente pudo sonrojarse ligeramente cuando la pelirosa rodeó su cuello con ambos brazos solo para, después, darle un ligero beso.

-Verás que pronto el mío será mejor- dijo, sonriendo.

Aquel ligero sonrojo solo se pudo extender un poco más en las mejillas del jóven Uzumaki.

Le encantaba eso.

...

-Lo mejor fue que aquellos dos pequeños me dijeron lo importante que era la clínica para ellos- dijo la pelirosa.

Naruto solamente sonrió en respuesta.

-Le ha cambiado la vida a varios niños en estos últimos meses, realmente fue una idea brillante crearla, Sakura-chan- decía.

-Tú e Ino también me han ayudado mucho en eso, y Karin hace apenas un par de meses- dijo.

El rubio solamente movió con ligereza su cabeza hacía ambos lados con una sonrisa.

-Hemos ayudado en lo que podíamos, Ino incluso más que yo pero, al final, el mérito es totalmente tuyo- dijo.

La pelirosa lo miró con una sonrisa de bastante sinceridad.

-Gracias, Naruto- dijo.

El rubio sonrió, para después estirarse un poco.

-Hoy ha sido un día realmente cansado, aunque debo admitir que siento un poco de curiosidad por saber cuánto ha mejorado Karin desde que entrena con Lee con respecto a taijutsu- decía. -¡Cierto! casi se me olvida decírtelo, pero Karin ha comenzado a entrenar conmigo, Sakura-chan, oh, y también te manda saludos- mencionó.

La pelirosa se extrañó un poco de ello.

-Es bueno saber eso, pero ¿no entrenaba con Lee?- preguntó.

El rubio asintió.

-Sí, pero entrenará conmigo hasta que Lee regrese de su misión en Iwa- dijo, Sakura solo asintió en respuesta. -Me pidió ayuda con los clones de sombra, cree que le pueden servir para entrenar su habilidad sensorial- decía.

Sakura solamente sonrió ante ese comentario. El rubio lo notó, era una sonrisa que demostraba... orgullo, al menos en su totalidad.

-Vaya que si se ha tomado en serio todo esto- decía. -¿Sabes? siendo sincera, al inicio dude mucho en tomar la responsabilidad de entrenarla cuando Kakashi-sensei me lo pidió- comentaba. -Pero al pasar los días supe que había determinación en ella... y me alegro mucho que este yendo más allá que solo quedarse conforme con una sola cosa- dijo.

El rubio sonrió.

-Además de lo que me has platicado, he escuchado que se ha comenzado a hacer un nombre entre el cuerpo médico- mencionó.

La pelirosa asintió.

-Se está ganando muy bien su lugar, definitivamente tiene mucho potencial... aunque me preocupa la reunión- dijo.

Naruto solamente miró hacía su plato de comida, para después sonreírle. Una sonrisa que inspiraba seguridad.

-Kakashi-sensei sabe que es algo delicado, pero ya es parte de Konoha y no hay nada que puedan hacer para cambiar eso... además, los crímenes quedaron saldados hace tiempo- dijo.

La pelirosa lo miró.

-Aún así...- decía, antes de ser interrumpida.

-Todo saldrá bien, Sakura-chan- dijo.

El rubio estiró un poco una de sus manos para sostener la de Sakura. Ella solamente lo miró y pudo ver una sonrisa.

Le encantaba esa sonrisa.

...

-Un poco más...-

Tarde por la noche, la pelirroja se encontraba repasando un poco lo que había aprendido con Naruto, salvo que, nuevamente, apareció uno de sus clones moribundos.

Karin solamente deshizo el jutsu, para después suspirar.

-Supongo que a este paso me tomará unas semanas más en perfeccionarlo, definitivamente me será útil- dijo.

Al estar bastante sumida en su pequeño entrenamiento, miró hacía su reloj y ya venía siendo hora de dormir. Aún había que entrenar mañana, además del trabajo en el hospital. Entonces, sin más, la pelirroja arregló todo para acostarse finalmente en su cama, mientras que la ligera luz de la luna iluminaba un poco la habitación.

Al pensar un poco antes de caer rendida, mentiría si dijera que la reunión de kages no le ponía un poco nerviosa, no estaría presente, pero siempre recordaba lo que había hablado con Kakashi hace solo un par de semanas... eso había sido suficiente para mantenerla al tanto.

-Adelante-

Karin ingresó a la oficina del sexto, había sido mandada a llamar hace unos minutos en el hospital.

-¿Querías verme?- preguntó.

Kakashi la miró con su típica mirada de aburrimiento, mientras terminaba de firmar algunos papeles y habló.

-Es algo que no debería decirte, porque los asuntos de este tipo no se comparten más allá de los altos mandos y claro que con las personas que me ayudan... pero puedo decir que eres discreta para este tipo de cosas, entonces puedo confiar en que lo mantendras así- decía, algo que sorprendió a Karin, aunque también asintió en respuesta. -Bien, la misión que tuviste con Sakura cerca de Kumo hace una semana llamó la atención del Raikage, tanto que ayer por la noche me llegó una carta de él... supongo que debes saber el motivo de ello- dijo.

La pelirroja asintió, sabía por donde iba el asunto.

-Imagino que es por lo de aquella ocasión... tengo entendido que él ha sido el único en negar la libertad de Sasuke por, bueno, lo que pasó en la reunión del país del hierro y por lo de su hermano- mencionó.

-Exacto- decía. -Tú formaste parte de aquellos ataques en ese entonces también, por ende que te hayan visto con una bandana de Konoha y siendo compañera de Sakura llamó la atención de muchas miradas- dijo.

Karin suspiró ligeramente ante aquellos últimos comentarios.

-Sé a lo que quieres llegar- dijo.

Kakashi solamente la miró.

-No pueden hacer nada porque ya formas parte de nosotros, pero han añadido tu caso a los temas que hay por tratar en la reunión que está por venir en Kiri... entonces solo quería avisarte de ello, creo que mereces saberlo- mencionó.

La pelirroja solamente bajó levemente su mirada hasta fijar el piso. Todo había ido bastante bien que se había olvidado de un tema así. Claro que había personas quienes no olvidaban.

Aunque, después de unos cuantos segundos, el sexto pudo mirar a Karin alzar su mirada, sonriendo ligeramente, algo que, siendo sincero, le sorprendió.

-Sé que todo saldrá bien- dijo.

Kakashi solo pudo responder con una sonrisa, mientras cerraba sus ojos.

-Esperemos que así sea- mencionó.

Al mirar nuevamente hacía la luna, Karin solo pudo sonreír nuevamente.

En verdad esperaba que todo saliera bien.

...

Unas semanas después

-¡Realmente Lee te ha enseñado un taijutsu decente, Karin, me sorprende que no lo hayas entrenado mucho antes!-

No había pensado mucho en la resistencia que el ser una Uzumaki pura le otorgaba. A comparación de Lee, ella podía seguir entrenando un poco más debido a su cantidad de chakra y sus reservas inmensas... era algo que le había permitido seguir entrenando con Naruto, aún cuando el joven cejon había llegado de su misión hace un par de días.

Pero, a pesar de la velocidad con la que la pelirroja atacaba, para Naruto era todavía fácil leer y bloquear todos los golpes que provenían de la joven Uzumaki, la diferencia de experiencia en ello y además los años de entrenamiento se notaban

Aunque un pisotón en uno de sus pies lo hizo perder el balance, solo para después ser empujado algunos pasos hacía atrás con una patada en el estómago... algo que lo hizo perder un poco el aliento.

-¡He-hey! ¡¿qué ha sido eso, Karin?!- decía el rubio.

La pelirroja solamente pudo reír ante la reacción de Naruto.

-¿No te esperabas eso, eh? pues bien, en un combate todo se vale, deberías saber eso- mencionó, orgullosa.

Aunque al parpadear un par de veces, el rubio había desaparecido frente a ella... solo para después encontrarse en el piso a causa de un barrido de pierna por parte de Naruto.

El rubio solo la miró, con una sonrisa, mientras se encontraba en el suelo.

-Realmente el entrenamiento con Lee está yendo por bastante buen camino, el problema es que bajaste tu guardia y creíste que no atacaría más por la reacción que tuve- decía. -Es por eso que un ninja siempre debe mirar a través del engaño- dijo, orgulloso.

La pelirroja solo lo miró con un rostro de incredulidad.

-Presumido... pero tomaré ese consejo- dijo.

Naruto suspiró y se sentó en el piso, al lado de ella. Algo que la pelirroja hizo igualmente.

Había sido un buen entrenamiento.

El rubio miró confundido a Karin cuanto esta suspiró.

-¿Qué sucede?- preguntó.

La pelirroja solo podía fijar su mirada en el paisaje que tenía frente a ella.

Todo ese verde, la brisa fresca del día...

-Hoy irán hacía la reunión de kages, eso me tiene un poco preocupada- dijo.

El rubio miró igualmente hacía el frente.

-Así que es eso...- decía. -No te preocupes demasiado por ello, supongo que Kakashi-sensei también te lo dijo, pero ellos no pueden hacer nada para prohibirte formar parte de Konoha, ten por seguro que es un tema el cual será tratado con mucha precaución- dijo.

-Me gusta pensar en eso... espero acepten la decisión de Kakashi- dijo.

El rubio sonrió, algo que confundió a Karin.

-Nosotros te aceptamos, Karin, ellos no te conocen y solo se han quedado con el pasado pero... pero ten por seguro de que te aceptaran también- dijo.

Karin sonrió con ligereza y lo miró.

-¿Sabes? llevamos meses de habernos conocido, y ya casi llego al año viviendo aquí, pero realmente no sé mucho de tí- decía. -¿Cómo era tu vida aquí? creo que para ser un shinobi tan excepcional debió haber sido fácil- dijo.

La pelirroja solo pudo mirar a Naruto fijar su vista, una vez más, hacía el paisaje del frente.

-Las cosas han cambiado de unos años hasta ahora- mencionó. -Mi vida en Konoha fue... regular, hasta que logré graduarme de la academia, creo que convertirme en shinobi me salvó de cierto modo, sino, bueno, no sé qué habría sido de mí- decía. -La vida tratando de sobrevivir desde niño y solo... bueno, no es para nada fácil- dijo.

Karin lo miró, comprendía aquella mirada en el rostro de Naruto, aunque debía admitir que hablo antes de tiempo.

-Yo, bueno, perdona por sacar conclusiones tan apresuradas- decía la pelirroja. -Aunque te entiendo, la vida de esa forma es una completa mierda... pero al final te forja, de cierto modo- dijo.

Naruto la miró.

-¿Cómo fue tu vida antes de Konoha y de conocer a Sasuke?- preguntó.

La joven Uzumaki, después de escuchar aquella pregunta, decidió recostarse en el césped y observar así el amplio cielo azul. Naruto, de cierta forma, le generaba una confianza que ninguna otra persona le había generado, así que no tendría problema en contárselo, además, aquellos quienes han experimentado un dolor similar pueden entenderse mejor que nadie.

-Bastante mala- decía. -Mi madre murió a causa de los propios shinobis de mi villa, ella era, bueno... ella me salvó durante un tiempo, pero después de que murió, fue mi turno de tomar su lugar como "sanadora"- dijo.

El rubio quedó un poco confundido ante esas palabras, pero logró recordar la ocasión en que miró a Sakura estudiando una 'habilidad' especial que sanaba a las personas... una que se transmitía por mordidas, la cual se enteró, después de un tiempo, que pertenecía a Karin.

Aunque decidió guardar el comentario que había llegado a su mente sobre preguntar si aún era una niña cuando aquello sucedió... eso era algo que no podía imaginarse sin sentir que su estómago se revolvía.

Así que, después de un suspiro, continuo.

-Tu mamá tenía la misma habilidad que tú ¿no es así?- preguntó.

La pelirroja solamente asintió.

-Después de ello, los años pasaron y la villa cayó, estuve vagando durante un tiempo, hasta que Orochimaru me rescató de unos tipos... desde ese momento me convertí en su secuaz, y él me otorgo protección, así que acepté- dijo.

El rubio la miró.

-Creo que todos tomamos las oportunidades que se nos dan, incluso para sobrevivir... así que no te juzgo, jamás lo haré- decía. -Pero, al final, hemos terminado en buen camino, sino, bueno, claramente no estaríamos hablando ahora- dijo.

Karin volvió a sentarse nuevamente, para solamente sonreír en respuesta.

-Ni que lo digas- decía. -¿Sabes? me agradas bastante, Naruto, eres un gran amigo- dijo. -Sakura y tú me aceptaron sin importar el pasado, y eso es algo de lo que siempre les estaré agradecida... además de que me hicieron un poco más fácil el adaptarme a la villa- mencionó.

La pelirroja miró al rubio y este solo cerró su puño y lo extendió un poco hacía Karin.

-Somos familia después de todo ¿no es así?- preguntó, sonriendo.

Naruto pudo mirar una sonrisa y un brillo peculiar en los ojos de Karin.

-Si... así es- respondió, chocando ambos puños.

...

Habiendo finalizado el entrenamiento y volviendo a caminar nuevamente en la villa, ambos detuvieron sus pasos.

-Bueno, es momento de que me reuna con Kakashi-sensei y Shikamaru, pero antes iré a despedirme de Sakura-chan, serán varios días los que me iré- mencionó.

Karin asintió en respuesta.

-Cuando vuelvas deberías enseñarme más jutsus, ya estoy mejorando más con el clones de sombra- decía.

El rubio pensó.

-Eso dependerá de tu naturalidad de chakra ¿sabes cuál es?- preguntó.

La pelirroja solamente lo miró con un rostro de vergüenza.

-Eh, bueno, no- dijo.

El rubio solamente sonrió.

-Entonces podría enseñarte eso también una vez que regrese- dijo.

Karin solo suspiró de manera ligera.

-Vendrá bien- decía. -Suerte con la reunión, igual para aquellos dos- dijo.

Naruto asintió en respuesta.

Y así, ambos comenzaron a tomar distintos rumbos... aunque el joven Uzumaki detuvo sus pasos para girar y mirar nuevamente a Karin, llamando su atención.

-Todo saldrá bien, Karin, verás que así será- dijo, sonriendo.

La joven pelirroja lo miró y sonrió también en respuesta.

-Lo sé-

...

Después de haberse despedido de la pelirosa (y después de un par de besos de despedida también), el rubio había puesto rumbo hacía las puertas de la villa... aunque una voz habló desde su interior.

-Mocoso, ¿en verdad aún planeas entrenar volviendo de la reunión?- preguntó Kurama.

El rubio ciertamente quedó un poco confundido por esa pregunta, además de la actitud del bijū.

-Claro, se lo prometí a Karin, además de que me vendrá bien entrenar todavía más- decía. -¿Por qué esa pregunta tan repentina?- mencionó.

Naruto solo pudo sentirse aún más intrigado por el silencio del zorro, un silencio que parecía, más bien, servir para contemplar algo.

-Hay un método que podría romper las barreras de tu poder y el mío. El único problema es que no sé qué tan peligroso o dañino pueda ser... y con eso me refiero para ambos- dijo.

El rubio contempló esas palabras y preguntó.

-¿Sobre qué se trata?- dijo.

-Es un modo... o se podría decir que es una fase, por decirlo de alguna manera, la cual va más allá del poder que obtenemos cuando combinamos nuestros chakras- decía. -En pocas palabras, el poder que surge de ambos no es total con nuestra conección actual... a comparación si fundimos nuestros chakras totalmente- dijo.

El rubio mantuvo el silencio por algunos segundos, hasta que habló.

-Antes de todo eso mencionaste que no sabías qué tan dañino podía ser para ambos... ¿a qué nivel puede ser dañino?- preguntó.

-Probablemente un daño severo en tu red de chakra o la muerte... de ambos- decía.

El joven Uzumaki solamente mantuvo el silencio ante ello. Su mente solo se podía llenar de recuerdos de aquellas personas que amaba, de lo que podía ser el futuro... algo que debía proteger a toda costa.

Naruto solamente sonrió después de ello

-Bueno, es 'probable' que haya un daño con mi red de chakra, eso quiere decir que no es del todo posible que suceda... así que habrá que entrenar la manera de entrar en ese modo, ¿aunque por qué no lo mencionaste cuando combatimos contra Kaguya o Madara en la guerra?- preguntó.

-Porque en el transcurso de la guerra apenas estabas aprendiendo a dominar la combinación de ambos chakras- dijo. -Además de que entrar en este modo necesita de entrenamiento previo, ya que si se entra de golpe, no serviría de nada e incluso sería menos o nada efectivo en batalla, ya que debe haber una fusión exacta y precisa de tu chakra y el mío- comentó.

-Entiendo, entiendo- decía. -Bueno, volviendo de la reunión hay que entrenar, con todo lo que supimos hace meses es mejor estar preparados- dijo.

Kurama solamente analizó esas palabras.

Debía admitir que las agallas de Naruto le seguían sorprendiendo incluso hasta día de hoy.

...

Casi por la noche...

A pesar de haber entrenado un poco con Naruto antes de que este partiera junto a Kakashi y Shikamaru hacía la reunión, la pelirroja había decidido terminar un poco de trabajo pendiente que había en el hospital. Su turno había acabado hace un rato ya.

Cuando comenzó su entrenamiento con Sakura, los venenos habían llamado la atención de la joven Uzumaki, aunque con todo lo que había ocurrido y con lo que tenía que hacer se había olvidado de ello un poco, pero nunca venía mal aprender sobre eso en algún punto.

Así que, sin más, Karin tocó un par de veces en la oficina de Sakura.

-Adelante- se escuchó.

Aunque la pelirosa sonrió cuando miró a Karin entrar.

-¿Karin? que sorpresa, pensé que tu turno había acabado ya- dijo.

La pelirroja solamente sonrió.

-Hace un rato, sí, pero decidí quedarme a terminar un poco de trabajo pendiente- decía, algo que hizo sonreír a Sakura. -Pero me gustaría pedirte algo prestado- dijo.

-Claro, con gusto- respondió.

-¿Recuerdas que hace un par de meses te mencioné acerca de los venenos? bueno, en esa ocasión me mostraste un libro que hablaba sobre ello, así que pensé en si podías prestarmelo- mencionó.

La pelirosa solo asintió y comenzó a buscar aquel libro.

-¿Sabes? no muchas personas aprenden sobre venenos voluntariamente, no es difícil en sí, pero muchos colegas del cuerpo lo encuentran tedioso- decía.

Karin suspiró.

-Bueno, creo que lo veo de una forma en que puedo aprender más... y si tengo la oportunidad y el tiempo, entonces está bien- dijo.

Sakura solamente sonrió.

-Aquí está- decía, mostrandoselo. -No te preocupes en devolverlo pronto, tómate el tiempo necesario- dijo.

La pelirroja sonrió y tomó el libro.

-Gracias, Sakura- decía, la pelirosa solamente devolvió la sonrisa. -Eh, a todo esto ¿tú también no deberías haber salido ya?- preguntó.

Sakura solamente sonrió con un poco de vergüenza.

-Tenía trabajo que terminar, igual que tú- decía. -Y Naruto se fue hoy, entonces no hay mucho que hacer volviendo a casa- dijo.

Karin pensó.

-Bueno, ya que no hay trabajo, entonces sugiero que caminemos un poco por la villa entonces- dijo.

La pelirosa solamente sonrió.

...

-Naruto me comentó que entrenaste con él- mencionó Sakura.

Karin la miró.

-Eso solo porque había sentido su chakra cerca de donde Lee y yo entrenamos, pero más que nada porque se cubrió con el chakra de su su, eh... ¿cómo dijo que se llamaba su bijū? ¿Kumara?- decía.

Sakura solamente rió un poco ante ese nombre, si era sincera, por las pocas ocasiones en que Naruto hablaba de las reacciones que tenía Kurama, el noveno bijū tenía poca paciencia con las bromas. Definitivamente se habría molestado si hubiese escuchado a Karin no poder recordar su nombre.

-Se llama Kurama- respondió la pelirosa, aún conteniendo su risa.

Karin solamente sonrió con un rostro de clara vergüenza.

-Exacto, sí, Kurama- decía. -Debo admitir que nunca antes había sentido una cantidad tan grande de chakra... y mucho menos había visto a alguien que la controlara con mucha precisión. Naruto es realmente alguien en otro nivel- dijo.

Sakura sonrió.

-Definitivamente lo es- decía. -Estoy segura de que podrá enseñarte algunas cuantas cosas que te ayudarán a incrementar tu arsenal como shinobi- dijo.

La joven Uzumaki solamente suspiró.

-Espero que sí- respondió.

...

Al recordar la conversación que tuvo con Naruto la noche anterior, Sakura no pudo contener su pregunta. Quería saber cómo se encontraba la pelirroja.

-¿Cómo te sientes respecto a la reunión, Karin?- preguntó.

La joven Uzumaki solamente miró hacía el frente y suspiró.

-Lo hablé con Naruto antes de que se fuera pero... no lo sé, un poco nerviosa, supongo- dijo.

La pelirosa solamente pudo observarla mientras que, a su vez, le sonreía ampliamente.

-¿Po-por qué la sonrisa?- preguntó.

-Porque confío en Kakashi-sensei, es el Hokage y uno de los shinobis más respetados que hay... el que una persona así te respalde es un gran acierto- decía, algo que logró captar bien la atención de Karin. -Después está Naruto, él ha convivido mucho tiempo contigo e incluso han comenzado a entrenar juntos, todos los kages le tienen un respeto muy grande e incluso mantiene una gran amistad con Gaara- mencionó. -Y, por último, Shikamaru. Si bien su relación no ha sido la mejor, mucha gente, incluída yo, lo consideran una de las personas más inteligentes que hay, además de un excelente estratega... y fuera de ello, él te sugirió para tu primera misión como voto de confianza, además de que sale con Temari, la hermana de Gaara- dijo.

Karin solamente analizó esas palabras, Sakura tenía su punto.

–Entonces, mirando todo eso, tenemos una probabilidad muy grande de que en la reunión no pase a nada más... tengo el presentimiento de ello– dijo.

La pelirroja solamente volvió a mirar hacía el frente, también con una sonrisa amplia en su rostro y habló.

-Tienes razón- dijo.

Confiaba en ellos.



































Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro