Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 16: Rojo y negro

En algún lugar del país del viento...

Habían pasado unas cuantas semanas desde que Sasuke había recibido la carta de Karin, en todo ese lapso de tiempo había recorrido una parte del país del viento en busca de más pistas, no creía que las coordenadas fueran solamente un lugar en el cual buscar una sola vez.

Durante sus últimos días ahí, el Uchiha había decidido pasar un par de días en Suna antes de continuar su camino, había hecho algunos favores a Gaara y, a cambio, Sasuke había recibido un poco de información al respecto de algunas cosas que estaban sucediendo... como el caso de las desapariciones que se habían estado dando en un pueblo fronterizo con el país del fuego.

Al preguntar un poco más al respecto, al instante supo que el lugar se encontraba cerca de unas coordenadas que había visitado, en su momento no encontró nada, pero tampoco buscó a profundidad, quizás esa sería una pista que encajara con las coordenadas del pergamino... o quizás no, pero valía la pena ir a ver.

En la actualidad

Antes de llegar a la locación, probablemente debía de evitar al equipo que Konoha había enviado a investigar, según Gaara, Suna tomó mucho tiempo antes de siquiera contemplar la misión, el pueblo estaba dentro del país del fuego, pero también estaba cerca de la frontera con el país del viento, así que cuando el kazekage había decidido mandar a un equipo, Konoha ya había tomado la misión, entonces lo mejor era que se mantuvieran al margen y dejaran a Konoha hacer el trabajo.

Lo más probable es que hayan enviado a un equipo de rastreo, un Hyuga, Aburame o Inuzuka serían de bastante ayuda para algo así, algún sensor quizás pero no sería tan efectivo si no se sabía el paradero de las personas.

Dejando de lado eso y mirando un mapa que traía consigo, el pueblo estaba, más o menos, a un kilómetro de distancia. La noche le jugaría un buen papel en investigar sin interrupciones.

...

La pelirroja trató de ignorar el chakra, quizás sería un error... pero lo volvió a analizar una y otra, y otra vez, pero al parecer si era el de Sasuke.

Lo más probable era que estuviese investigando respecto a lo que supo aquella ocasión en que salieron de misión, eso era lo más probable, aunque también podría estar haciendo alguna misión para Konoha cerca de aquí, pero eso no era tan probable.

Al quedarse por unos minutos mirando hacía el techo, Karin decidió, por fin, levantarse del suelo y comenzar a vestirse. No lo interceptaria por el camino, conocía un poco a Sasuke y sabía que su intención no era conversar o algo por el estilo, sino que era, más bien, el ir a corroborar si en verdad había sentido su chakra o solo estaba, de alguna manera, alucinando por el cansancio.

Sin más, la pelirroja se dirigió a la puerta y comenzó a salir lo más sigilosamente posible que podía, no quería despertar a Naruto y Neji, sobretodo porque, bueno, si en verdad se trataba de Sasuke, aquellos dos podían no solo se limitarse a observarlo y asegurarse que es él, sino que tratarían de preguntar demasiadas cosas... y ella todavía necesitaba dormir.

Saliendo una vez de su habitación, Karin puso rumbo hacía donde sintió el chakra del Uchiha, por sus cálculos, Sasuke estaba, más o menos, a casi veinte minutos de ahí. Sería mejor apurar el paso.

...

Era bastante raro un asunto así, desde que las naciones se habían unido no se había visto que varias personas desaparecieran en lapsos de tiempo medianamente cortos y, sobre todo, tampoco se había visto que ninguna de ellas no dejara algún rastro para al menos saber su paradero o una última ubicación.

Esperaba que no tuviera nada que ver con las coordenadas porque, bueno, si tuviese algo que ver, se estaría tratando con algo bastante serio y que, sin duda, necesitaría más ojos encima.

Al mirar de nuevo el mapa, afortunadamente ya faltaban alrededor de quinientos metros para poder llegar... pero algo captó su atención con su vista periférica. Una silueta en uno de los árboles que, al parecer, estaba tratando de ocultarse.

...

20 minutos después

Al llegar a la ubicación, la pelirroja se concentró una vez más solo para sentir que el Uchiha estaba por llegar... cuando, a lo lejos, pudo observar una silueta acercándose, alguien con una capa que le cubría gran parte de su cuerpo.

Definitivamente era él.

–Es bueno verte de nuevo...– dijo la pelirroja para ella misma.

Con rapidez, Karin logró ocultarse en uno de los árboles, lo seguiría hasta donde tuviese pensado ir y, después, volver con aquellos dos, bastante fácil... aunque, de pronto, la pelirroja pudo notar que el Uchiha detuvo sus pasos y miró por encima de su hombro, justamente hacía la dirección en donde ella se encontraba.

Karin solamente trató de ocultarse lo más que pudo para desaparecer de su vista, aunque claro, había olvidado el detalle de la vista casi perfecta de Sasuke.

–Mierda– dijo levemente.

Al parecer las cosas estaban comenzando a calmarse un poco... hasta que logró escuchar una voz.

–Seas quien seas, te sugiero que te muestres, de lo contrario no terminará bien– dijo.

Vaya espionaje de su parte.

Sasuke no perdía de vista el lugar donde había visto aquella silueta, solo para comenzar a mirar que, en efecto, era una persona la que se ocultaba tras el tronco y quien, con suma calma, comenzaba a dejarse ver, hasta que, finalmente, la miró.

–¿Karin?– preguntó, un poco incrédulo.

La pelirroja solamente pudo mostrar una sonrisa leve.

–Es... bueno verte de nuevo, Sasuke– dijo.

El Uchiha solamente mantenía su mano restante sosteniendo la funda en donde guardaba su espada, verla ahí era sumamente raro, pensaba que estaba en Konoha, a no ser...

–¿Tú formas parte del equipo que Konoha envío?– preguntó.

La pelirroja bajó a nivel del suelo, hasta estar a unos cuantos pasos delante de él y habló.

–Kakashi me asignó a un equipo para esta misión, supongo que es la primera misión oficial desde que vivo allí– dijo.

Sasuke solamente retiró su mano de la funda y volvió a cubrirla con su capa.

–Entiendo– mencionó. –A juzgar por tu carta y conociendo a Kakashi, seguro te asignó a la misión junto con Naruto, ¿no es así?– preguntó.

–Sí... bueno, algo así– decía. –Pero eso podemos dejarlo para cualquier otro momento, ¿qué estás haciendo tú por aquí?– preguntó.

El Uchiha solamente comenzó a explicar el como la arena había obtenido la oferta de la misión pero su retraso en considerarla condujo a que Konoha la tomase. Además de explicar que, también, había llamado la atención de Sasuke cuando el kazekage le había comentado sobre qué había tratado la misión en un principio ya que, básicamente, el pueblo estaba cerca de una de las coordenadas del pergamino. Valía la pena investigar un poco, quizás se había dejado pistas la ocasión anterior.

Karin por su lado solamente asintió con la cabeza. A decir verdad, su principal objetivo cuando logró percibir a Sasuke era solamente seguirlo mientras se escondía para mirar qué era lo que estaba haciendo por allí.

–Ya que de igual forma te iba a seguir si no me descubrías, ¿puedo ayudarte a investigar?, al final yo también fuí parte de la misión aquella ocasión, de cierta forma también me corresponde... un poco al menos– dijo.

El Uchiha, quien hace un momento había encarado el camino que tenía delante lo pensó, muy dentro de él sabía que se estaba perdiendo de algo en esos lugares, solo que no podía verlo... o sentirlo.

–Vamos– respondió.

...

En un principio el Uchiha había pensado en caminar hasta las coordenadas, eso sería lento y debía aprovechar el tiempo y también la noche para poder investigar libremente.

Estando saltando sobre los árboles, la pelirroja solamente podía ser testigo del silencio entre ambos, ayudaba en sí que su mente estuviese pensando en la misión y en lo que había por hacer, además de estar más concentrada para no ser tomada por sorpresa como lo que pasó cuando estaba con Naruto, pero le alegraba ver a Sasuke, algo que le produjo una ligera sonrisa.

El Uchiha por su parte solo la miró de reojo y logró mirar esa sonrisa, de cierta forma eso le generaba un poco de curiosidad, aunque ese pensamiento fue invadido al darse cuenta que, al parecer, ahora iban mucho más rápido que en la ocasión en la cual ambos compartieron una misión. Vaya que los entrenamientos le estaban dando frutos a Karin.

Aunque Sasuke pudo ver el ligero cambio en el rostro de la pelirroja, parecía que había sentido o visto algo y, mirando mejor hacía delante se dió cuenta, habían llegado.

–Es ahí– dijo Sasuke.

Ambos procedieron a bajar de los árboles y comenzaron a caminar en dirección a las ruinas.

Algo no está bien...– pensó la pelirroja.

–Como dije, hace unas semanas pasé por aquí y no llegué a notar nada, tampoco encontré nada que llegara a ser relevante... pero siento que, por alguna razón, no estoy logrando ver algo– mencionó Sasuke.

–Este lugar tiene algo raro... no, este no, es cerca de aquí.– decía. –Incluso sin tener que concentrarme mucho puedo sentir pequeñas concentraciones de chakra– dijo.

–¿Sabes de donde provienen?– preguntó.

Sasuke solo pudo observar a la pelirroja cerrar los ojos y comenzar a concentrarse.

–Por aquí, sígueme– dijo.

...

Tras haber caminado unos cuantos minutos, ambos habían llegado a una entrada que había sido cubierta por hojas y ramas de la propia vegetación de alrededor.

–Es entrando por ahí– dijo finalmente.

El Uchiha solamente se colocó frente a ella, mirando hacía la oscuridad del interior.

La pelirroja pudo observarlo desenfundar su espada, para después llenarse con chakra de tipo rayo, eso al menos proveía luz.

–Quedate detrás de mí, eres los ojos en todas las direcciones– dijo.

La pelirroja solamente asintió en respuesta y se concentró, para así ambos comenzar a caminar hacía la entrada.

...

El lugar estaba completamente solo, además de que, al menos juzgando solo por vista, no era muy grande, hasta que ambos llegaron a un pasillo sin salida. No había nada fuera de lo ordinario.

–¿Lograste sentir algo a la redonda o aquí dentro?– preguntó el Uchiha.

La pelirroja solamente negó con su cabeza. Pero había algo que no la dejaba tranquila todavía.

–No hubo nada fuera de lo normal, no del todo– decía. –Pero siento una pequeña fracción de chakra, es bastante diminuta en sí... dejame intentar algo– mencionó.

Sasuke solamente la miró cerrar sus ojos y permanecer en silencio por un par de minutos, solo pudo suponer que estaba tratando de concentrarse lo más que podía... hasta que por fin la miró girar hacía la derecha.

La pelirroja por su parte solamente posó su mano en la pared y la pasó suavemente por ella.

–Aquí– pudo decir.

Al implementar un poco de chakra a través de su mano, al parecer activó algún tipo de mecanismo que logró revelar una habitación la cual, a simple vista, no parecía bastante espaciosa, más bien parecía...

–¿Un laboratorio?– dijo la pelirroja.

Sasuke avanzó hasta ponerse por enfrente de ella.

–Entremos– dijo.

Karin asintió en respuesta y ambos ingresaron al pequeño laboratorio.

No había mucho que ver, al observar como estaban la mayoría de cosas que podrían llevarlo a una pista, parecía que la persona que haya estado ahí, había desaparecido cualquier rastro que pudiera revelar sus planes o, al menos en el mejor de los casos, su paradero. Incluso había ceniza de papeles regados casi por todo el suelo.

–Sasuke, necesito un poco de luz aquí– habló la pelirroja a sus espaldas.

El Uchiha volteó y la observó mirando hacía lo que parecía ser un recipiente, el cual estaba lleno de ropa.

–Alguien abandonó este lugar hace poco tiempo... y todo frente a nuestras narices– mencionó Sasuke.

La pelirroja se agachó hasta tomar una prenda que le había resultado familiar.

Antes de que Katatsu les diese sus habitaciones, Neji les había contado más a profundidad lo que los locales habían hablado con él respecto a las desapariciones. Entre ellos hubo una mujer, la cual había logrado hablar con el jóven Hyuga acerca de la repentina desaparición de su hija. Noche y día la había buscado. La pequeña había desaparecido por la noche, mientras todos dormían y mientras estaba con su pijama... la misma pijama que Karin tenía en sus manos.

–Esta ropa perteneció a una niña del pueblo– mencionó, el Uchiha solamente la miró. –Toda esta ropa debe ser de las personas que han desaparecido de ahí, no hay rastro de ellos, no hay pistas, tampoco testigos, y ahora encuentro sus ropas aquí... quien sea que haya hecho esto debió de haberlo planeado a la perfección ¿pero cómo y por qué?– dijo.

Sasuke, quien estaba echando un segundo vistazo a todo, no paraba de pensar en las posibilidades. El que haya estado haciendo esto no era alguien común, eso era definitivo, además de que sabía que irían, no había caminos que los llevaran a algunas pistas, es como si...

–La misión para Konoha ha terminado aquí– dijo.

La pelirroja lo miró extrañada y preguntó.

–¿Qué quieres decir con eso?– preguntó.

El Uchiha la miró.

–La única pista termina aquí, en ese recipiente de ropa– decía. –No hay ninguna otra pista que nos pueda llevar a diferentes locaciones, es como si solo se hayan desvanecido... con ayuda de alguien– mencionaba.

–¿Ayuda de alguien?– preguntó, confundida.

–La persona que haya estado operando aquí sabía que tarde o temprano vendríamos– decía. –Eres una sensor de gran nivel, pero no puedes ver flujos de chakra, sin embargo lograste captar la mínima sensación en el lugar, en cambio mi rinnegan puede ver flujos de chakra, pero este lugar obstruye, de alguna forma, esa visión, más sin embargo sé que está ahí– mencionó.–Analizando todo lo que hemos descubierto hasta ahora, es probable que estas personas hayan desaparecido por algún jutsu espacio-temporal, no dejaron rastro de donde se los llevaron, tampoco pistas y, siendo sincero, es la única manera que se me ocurre en que pudieron haber desaparecido– dijo.

La pelirroja solamente se mantuvo en silencio.

El jóven Uchiha comenzó a caminar hacía la entrada del laboratorio, era definitivamente preocupante que alguien con ese tipo de habilidades estuviera rondando libremente, aunque si era sincero, le intrigaba más el saber si podía ser un aliado o un enemigo, aunque, bueno, a juzgar por la pinta que tenía todo lo que habían encontrado, un aliado no parecía ser.

Aunque el mirar a la pelirroja lo sacó de sus pensamientos.

–¿Por qué estás llevandote la ropa?– preguntó.

La pelirroja lo miró.

–Porque mi misión era recuperar a sus seres queridos sanos y salvos pero... pero mirando el panorama, alguien debe decirles que ya no volverán– dijo.

Sasuke miró el rostro de Karin por unos cuantos segundos, entendía ese rostro. Sin más, comenzó a caminar hacía la entrada.

–Salgamos de aquí– dijo.

La pelirroja solamente suspiró en respuesta y comenzó a caminar, siguiéndolo.

...

Estando a unos minutos cerca del pueblo, ambos se encontraban caminando de vuelta.

–¿Sabes? no es necesario que me acompañes, tú tienes una misión y sé cuidarme sola– mencionó la pelirroja.

El Uchiha solamente mantenía su vista hacía el frente. Mirándolo en retrospectiva, esa actitud de Sasuke le encantaba antes... pero acababa de saber que las personas que se suponía ella, Naruto y Neji debían traer con vida no regresarían, esa actitud de solamente ignorar no le agradaba del todo.

Karin estuvo a punto de apurar el paso para dejar atrás al Uchiha, pero la voz de éste detuvo ese impulso.

–Has mejorado bastante desde que comenzaste a entrenar con Sakura– decía. –He estado en contacto con Kakashi debido a lo que ocurrió cuando nos dió aquella misión... me alegra saber que Sakura te haya ayudado mucho con lo de tu habilidad curativa– decía, para después mirar las mangas levantadas en la chaqueta de la pelirroja. –Y también con las marcas de tu piel– dijo.

Los ojos de la pelirroja se abrieron en clara sorpresa debido a eso, pero miró sus brazos y notó sus mangas, era, tal vez, algo involuntario que hizo.

Aunque volviendo a lo que había mencionado Sasuke y pensándolo bien, era normal que Sakura le rindiera cuentas a Kakashi, ambos sabían de ello y ambos se habían encargado de ayudarla también.

¿Pero un cumplido de esa magnitud proveniente de Sasuke?

El Uchiha solamente pudo observar una sonrisa en el rostro de Karin, parecía... felíz.

–Aún tengo camino por recorrer, no sé si me tomarán en cuenta como shinobi de Konoha después de esta misión... pero me gustaría concentrarme en mejorar mis habilidades, mejorar en general– dijo.

La pelirroja solo pudo observar al jóven Uchiha cerrar los ojos y emitir una sonrisa ligera, no era una sonrisa amplia, pero estaba sonriendo nuevamente... ¿qué estaba pasando?

–En Konoha encontrarás todo y todas las personas necesarias que pueden ayudarte, confío en que lo lograrás– dijo.

Karin observó al Uchiha detenerse, lo que la hizo voltear su rostro hacía el frente y miró la cercanía que tenían al pueblo.

Era momento de partir nuevamente.

–Mi misión continúa todavía a partir de aquí, es momento de que termines la tuya– dijo.

La pelirroja miró unos instantes hacía el pueblo y suspiró. No sería fácil comunicar algo así, y tampoco sería fácil explicar todo lo que encontró a Naruto y Neji, sobretodo al rubio, teniendo en cuenta de que Sasuke estuvo involucrado en ello.

Aunque la voz del Uchiha la sacó de sus pensamientos.

–Sé lo que piensas, pero él recibirá una explicación– decía, la pelirroja solamente pudo mirarlo con confusión. –Pronto me comunicaré con Kakashi, llegados a este punto, Naruto debe saber lo que enfrentamos también– dijo.

Karin pudo observar el rostro de Sasuke, parecía... pensativo, intrigado más que nada.

–Todo saldrá bien, Sasuke, confío en que así será– dijo.

El Uchiha dió un último vistazo al pueblo y simplemente giró para comenzar su viaje nuevamente, había mucho que hacer, mucho que investigar... pero volteó su cabeza por encima de su hombro una vez más y habló, mientras miraba a la pelirroja.

–Creo que, de cierta forma, hacemos un buen equipo– decía, para después regresar su mirada hacía el camino que tenía delante. –Suerte con lo que te propongas, Karin, tienes todos los medios para lograrlo– dijo finalmente.

La pelirroja solamente podía observar la espalda del Uchiha mientras comenzaba a alejarse.

–Todo eso sonó a que será una despedida bastante larga, ¿no es así, Sasuke?– preguntó, el Uchiha solamente detuvo sus pasos. –Pero... gracias por tus palabras, y tienes razón, también creo que hacemos un buen equipo– mencionó. –Espero que la misión salga bien, hay personas en Konoha que te quieren ver de regreso. Cuídate mucho, Sasuke– dijo.

La jóven Uzumaki pudo observar a Sasuke girar, mostrando así el perfíl en donde tenía su ojo visible.

–Nos vemos, Karin– dijo.

Y así, sin más, el jóven Uchiha giró nuevamente y emprendió el rumbo que tenía por delante.

Serían unos años de búsqueda... pero quizás, si la situación lo requiere, así como en esta ocasión, la buscaría de nuevo. Ciertamente hacían un buen equipo.

–Nos vemos...–

Al mirar nuevamente hacía el pueblo, debía despertar a aquellos dos e informarles sobre lo que había pasado, quizás decirle a Naruto un poco de lo que sabía, explicarle un poco también el rol de Sasuke y pedirle que todo lo consulte con Kakashi cuando lleguen a la villa. Aún había que informar a los locales sobre la ropa que se encontró en las ruinas, no sería algo fácil, y tampoco sería fácil el aceptar que no pudieron encontrar a esas personas.

La pelirroja dió un último vistazo hacía donde miró al Uchiha emprender su viaje.

Suspiró una vez más y comenzó su camino hacía el pueblo.

Vaya noche había sido.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro