Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Parte 13

Comentario: Holis a todos, había terminado hace dos días esta parte, pero no tenia tiempo para corregirlo TvT incluso ahora estoy en estado de procrastinación, espero les guste como quedó, en lo que respecta a mi, me gustó bastante como quedó este capitulo, ya que de aquí la historia podrá ir avanzando mas rápida hasta donde quiero llevarla >: D  y omg que disfrutaré escribiendo esa parte.  -explota-  ok no sé xD , pero realmente quiero escribir esa parte, aunque aun falta, quizás unos 3 caps mas ... si puede ser eso mas o menos (sorry me pongo a pensar mientras escribo) Tengan un bonito fin de semana :> y RIP al trasero de Yagi. 


PD: XD esto parece una tragedia romantica de envi mas que un satanick x ivlis... pero es que amo a esa maldita cabra!!!! >:A .... (los animales favs de nani son los carneros y sus derivados) (caprinos) era imposible que no me encantara esa cabra!! >/////< 

PD2:  todo el mundo pregunta porqué cambié a Ivlis por Ivlin, solo diré que este fanfic es Satanick x Ivlis y tendrán Satanick x Ivlis, solo deben ser pacientes y ver el desarrollo de la historia, para saber mas acerca de los detalles deben esperar unos cuantos capítulos (antes de la parte que quiero escribir cofcofcof) 


-------------------------------------------------

Pasarón dos semanas desde que Satanick se enfermó, la gripe había sido bastante fuerte, Envi había estado ahí todos los días preocupándose de la salud de su señor, colocándole paños húmedos sobre la frente, dándole aguas de hiervas para hidratarlo, sobándole la espalda, entre otras, sin embargo eso le perjudicó directamente en su salud y calló en cama a los pocos días de cuando su señor presentaba una notoria mejoría, al principio disimulaba muy bien sus síntomas, aunque poco a poco se fue notando, más cuando se colocó una mascarilla para no incomodar con su tos, ocultaba la mayoría de su rostro con un mechon de cabello que siempre tapaba la mitad de éste para no mostrar lo palido y afiebrado que estaba, sin embargo Satanick podía parecer distraído, pero no era tonto, así que lo mandó a hacer cama y lo cuidó de vuelta durante el tiempo que debiese hacerlo, hubo un día que Fumus lo vino a buscar, por lo que se sintió muy mal de dejar a su subordinado y amigo sin su compañía, al menos ahora contaba con la ayuda de Medouco la cual era una muy buena empleada, para cuidar de Envi, de esta manera, cuando terminó el día y bajó desde el cielo hasta el inframundo se dirigió directamente a la habitación de Envi para volver a cuidarlo – Envi, ¿estas despierto? –

-Si señor... lamento tenga que ver esta condición tan lamentable en mí-

-No digas eso... yo también quiero ser de utilidad para ti... mira, te traje un regalo-

-¿Qué es eso señor?-

-Es chocolate, acá en el inframundo no se produce, así que es muy extraño conseguirlo, me lo dio Fumus, pero en vez de comerlo quiero que lo tengas tú, no te preocupes, no tiene veneno, y si lo trae es en muy pocas cantidades así que no morirás- dijo feliz el niño sentándose al lado de la cabra y metiéndole el chocolate a la boca – ¿qué tal sabe?- Envi masticó y luego tragó, nunca había sentido ese sabor antes, pero sin duda tenia gran potencial – mmm, la verdad es algo amargo y dulce, no me agradan mucho las cosas dulces así que lo amargo estuvo bien- Satanick sonrió, sabía que Envi no gustaba mucho de cosas dulces, así que al conocer el chocolate pidió el más amargo que tuviesen para traérselo a su subordinado y realmente le había gustado, esto era muy bueno, se sentía muy feliz de haber complacido a su tan querido amigo – me dió mucho gusto que te gustara Envi, la próxima vez que vaya donde Fumus le pediré más, quizás podría averiguar cómo conseguirlo, así podríamos hacerlo aquí en el inframundo ¿no crees? –

-Parace una interesante propuesta señor cofcofcofcof – tosió la cabra para luego desviar la mirada – aunque yo le agregaría algunas otros ingredientes para atenuar esa amargura y además darles distintos sabores –

-¿Cómo es eso? Explícame, yo no sé nada de cocina – de esa manera estuvieron hablando toda la noche, Satanick era feliz, se sentía muy querido, sin duda Envi era su mejor amigo y eso nunca lo podría cambiar.

De eso pasó una semana y en el mundo de los soles había una niña que se sentía triste, una niña que todos los días pasaba horas mirando por la ventana a ver si alguien venia por ella, no podía negar que sentía curiosidad por ese diablo que decía tener intenciones de desposarla, por unos momentos ese niño la había hecho sentir especial, sentirse importante, nunca nadie la había preferido a ella por sobre su hermana y era obvio, Igls Unth era la perfección creada por el dios, hasta su gran dios lo sabía, ella había nacido para ser perfecta, así que de cierta forma lo extrañaba y se sentía muy mal por haberlo tratado de esa manera tan antipática, no podía negar que se había comportado de una forma muy descortés y arrogante con ese joven, pero tenía mucho miedo de esta situación, todo era tan nuevo, no todos los días llegaba alguien a cortejarte y decirte que desde que ella nació su destino era casarse con él, era aterrador el simple hecho de salir de lo habitual, de perder esa rutina y dedicarse a conocer a alguien del que no se sabe nada, ni siquiera sabe cómo la conocía –De nuevo estas mirando por la ventana Ivlin, ya pasaron casi tres semanas desde que no viene ¿lo extrañas?-

- Yo no lo extraño... ni siquiera conozco algo sobre él –

-Entonces ¿por qué tienes cara de tristeza mientras esperas a que aparezca?-

-E... Eso no es cierto... yo... solo quiero verle la patética cara para... para... -miró al suelo y luego miró apenada a su hermana mayor – ¿crees que se aburrió de mi porque no soy interesante? –

-No digas esas cosas Ivlin, tu eres una niña muy interesante, solo debes darte a conocer más y no ser tan arrogante para esconder esos nervios que tienes –

-Pero... yo no soy tan bonita como tú, la otra vez se enojó conmigo y me dijo que quizás se equivocó en elegirme y te hubiese elegido a ti... -

-¿En serio dijo eso?... no estoy segura si lo dijo pensándolo claramente o fue porque estaba molesto, pero tú eres muy hermosa Ivlin, seguro el volverá, no cualquiera obtiene el permiso de nuestro señor para casarse con su hija ¿no crees? Ese diablo debe estar muy agradecido y dudo que pierda su oportunidad –

-... ¿Crees que vuelva?-

-Estoy segura que volverá, trata de ser más afable-

-Lo... Lo intentaré... pero aún sigo asustada con esta situación –

-Ya va a pasar, solo ten fe en el señor Siralos, si él lo escogió para ti es porque es un tipo que vale la pena-

-Tienes razón hermana, creeré en nuestro señor-

Dos días después el diablo decidió volver al mundo de los soles, debía esforzarse otra vez, dar lo mejor de sí, aunque quería llevarle un regalo y no encontraba nada novedoso que le pudiese llevar a la joven demonio para pedirle perdón por lo que le había dicho la otra vez, pensó un momento ¿y si le llevaba un conejo? ¿Le gustaran a Ivlin los conejos? Seguramente con todas las tareas que tenía cuidar un conejo sería demasiado laborioso, además el conejito no estaría bien atendido y eso era realmente una pena, no sería feliz, en eso recordó a Artamos y fue a visitarlo, por suerte el niño se encontraba fuerte y sano, había superado con éxito la gripe por lo que el diablo se alegró mucho y lo abrazó, luego aprovechando que estaba en el lugar fue a los grandes campos de flores que habían cerca del pueble donde vivía su adorado conejo y sacó una gran cantidad de estas, eran muy lindas y olían muy bien, seguro le gustaran a Ivlin, pensó mientras las admiraba, después de esto volvió al castillo – mira Envi, tengo una gran cantidad de flores, están muy lindas –se acercó a la cabra y amarró una en su cacho, era de color lila, semejante al color de sus ojos – jejeje te vez muy bien así- la cabra solo suspiró –no bromee- dijo acercándose al más pequeño quien solo sonreía – ¿qué hará con tantas flores?-

-No lo sé aun, quería hacer algo lindo para llevar al mundo de los soles, pero no se me ocurre nada – la cabra se acercó y tomó una de semejante color a la que Satanick le colocó en su cuerno y para pronto colocarla en el bolsillo del terno negro que estaba usando el mas pequeño – este color combina con el hermoso tono de sus ojos – Satanick se sonrojó por un momento y luego sonrió – no es para tanto Envi jajajaja, ven ayúdame a hacer algo lindo con esto-

Pasada media hora Satanick tenía un hermoso ramo de flores adornado con un papel transparente y un listón, además que estas fueron tan bien acomodadas que los tonos de las flores se veían muy llamativos tal como un arcoíris que surcaba el cielo– quedó hermoso, muchas gracias Envi, eres muy bueno con estos detalles, si algún día encuentras a alguien a quien amar, estoy seguro que serás muy detallista y esa persona será muy feliz de tenerte – sonrió gentil mientras abría el portal para retirarse – nos vemos a la tarde.

-Adiós señor... - una vez se cerró el portal Envi apretó su mano fuerte, su corazón no paraba de palpitar, tenía ganas de romper nuevamente esa pared, pero el soporte estaba débil, suspiró frustrado, por lo que fue a caminar un momento por Pitch Black, no quería rendirse con su señor, pero ya su corazón no lo soportaba, mas era su dolor al saber que estaba ayudando a su señor a conquistar a esa tal Ivlin, lo estaba perdiendo y no hacía nada por evitarlo, necesitaba olvidarse de ese sentimiento, quizás si alguien lo tomara podría adquirir sentimientos por ese demonio, quizás si eso ocurría podría enamorarse de otro ser y borrar este sufrimiento, sin saber cómo, llegó a la casa de Yagi quien estaba ordenando unos papeles – Yagi, dame algo de alcohol – habló la cabra al patear la puerta y abrirla dramáticamente, tenía la mala costumbre de entrar de esa manera a algunos sitios, el más alto casi se murió del susto, ¿que se supone que estaba haciendo entrando de esa manera tan brusca? – ¿qué rayos te pasa Envi?, estoy trabajando –

-Necesito olvidar algunas cosas, solo dame el maldito alcohol-

-Está bien, no te alteres, tengo algunas botellas en ese mueble, pero ¿por qué andas tan gruñón?-

-Eso no te incumbe – dijo el de apariencia menor, quien se puso a buscar las botellas de alcohol en el mueble, encontró cuatro, eso sería suficiente, pensó, las dejó sobre la mesa en la que trabajaba Yagi para pronto decir – saca estas porquerías y cierra la puerta, vas a tomar conmigo- le dijo serio a la cabra más alta quien sudaba frio de tan solo ver a Envi con ese mal genio, era mejor hacerle caso si no quería que se enojara de verdad y por consiguiente sufrir una muerte dolorosa- sí, sí, ya voy, pero que carácter- dijo mientras sacaba las cosas de la mesa y las dejara sobre el estante en que solían estar, vió a la cabra que buscaba vasos y los dejaba sobre la mesa – oye Envi... ¿por qué tienes tantas ansias de embriagarte? El diablo estará de regreso en algunas horas ¿no crees?-

-...-

-Envi ¿estás bien?- el de pelo gris lo miró con ojos asesinos mientras servía el primer shot y se lo tomaba sin dejar nada en el pequeño vaso – oye... no vayas tan rápido –

-Deja de hablar tanto y siéntate, quiero conversar sobre algo contigo y debo estar muy ebrio para eso... siéntate te dije-

-Insisto que tienes un carácter de mierda –

-... - la cabra lo ignoró y le sirvió un vaso de alcohol mucho más grande a Yagi – tómatelo –

-¿No crees que es demasiado para empezar?-

-Solo hazlo- el más alto suspiró y comenzó a tomar, no es como que no le gustara, simplemente encontraba estúpido embriagarse obligado sin siquiera saber por qué lo quieren embriagar. Veía como la cabra tomaba y tomaba un trago tras otro, el recién iba en el segundo y no podía evitar estar impactado por notar que la primera botella ya se había terminado, vió a Envi parar de tomar y le ofrecía una mirada seria- vas a mantener esta conversación y lo que pase en silencio por el resto de tu vida ¿entendiste?-

-... ¿A... A que te refieres, que quieres hacer Envi?-

-... Tu... ¿Tú te has enamorado de alguien?-

-... - Yagi abrió los ojos como plato, ¿en serio Envi estaba enamorado y necesitaba consejos de amor? Pero... pero era Envi, Envi era el ser más frio que conocía, el ser con menos emociones que conocía, ¿cómo alguien como él se enamoraría?, ¿esto era una broma?... pero... pero Envi no sabía bromear, ok esto era malo, tragó saliva y miró al más bajo – la verdad hasta el momento no he conocido a nadie que me cause ese sentimiento –

-Pero una vez me dijiste que habías tenido sexo con alguien, yo creí que solo podían hacerlo cuando se enamoraba de alguien –

-Pfff ¿me estás diciendo que eres virgen Envi? –se rió eufórico el más alto.

-¿Te estas burlando de mí?- tras escuchar esto dejó de reír y tragó saliva para pronto volver a tomar otro trago de licor – ¿es normal entre los demonios tener sexo sin amarse? ¡Contesta!-

-Sí, la verdad si, dudo que haya alguien quien realmente ame a otro ser aquí, la verdad es que es muy divertido hacerlo, muchos demonios lo hacen obligando a otros... a veces las situaciones se ven bastante descontroladas –

-... Oh... ya veo –Envi recordó cuando casi obliga a su señor a hacer cosas que no debía- ¿tu... lo harías conmigo?-

-... Espera ¿qué?-

-Te estoy preguntando si lo harías conmigo-

-Envi, ¿ya te embriagaste lo suficiente para estar diciendo esas tonterías?-

-No estoy ebrio, vine a tu casa por este motivo-

-¿Per...pero por qué yo?... tienes una hermosa sirvienta en casa –

-Si no quieres me veré en la necesidad de obligarte-

-¿¡Qué!? –

-Tu dijiste que era algo muy común en los demonios, uno mas no creo que implique nada- la cabra más alta tragó saliva y lo miró dubitativo, esto se está descontrolando, realmente era demasiado para él pensar en Envi de esa forma, aunque no podía negar que era muy atractivo, y su rostro era bastante adorable para esa actitud de mierda que tenía, sin embargo él... él nunca lo había visto con esos ojos, ¿aunque por qué no?, volvió a tomar un trago y se quedó viendo la copa, ahora entendía por qué Envi quería emborracharlo, esperen, ¿no estaba Envi enamorado? ¿será que ese amor no es correspondido?, miró a la cabra con algo de lastima, así que era por eso que quiere acostarse con él, quiere lastimarse para olvidar, aunque él no sepa mucho de amoríos sabía que esas cosas no sirven, solo se hará más daño y tendrá más peso en la conciencia, ¿cómo decirle eso a un ser tan cuadrado? en fin, era responsabilidad de él las consecuencias de sus actos, después de todo ya era un demonio... esperen, Envi aún no es un demonio adulto, lo miró con una sonrisa nerviosa, ¿Qué se supone que debe hacer?... meditó unos cuantos minutos mientras sentía una rojiza mirada asesinándolo, pronto suspiró y sonrió, no se perdería esta oportunidad, no todos los días alguien golpeaba la puerta para buscar esa clase de diversión con él, y menos la segunda entidad más importante de todo el inframundo – está bien, está bien, no te hará muy bien esto, sin embargo lo haré... solo déjame embriagarme lo suficiente para estar de ánimo –

-Opino lo mismo, no eres nada lindo, además tu pelo es blanco y tus ojos son feos... -

-... Gracias... - dijo sarcástico el más alto tomando mientras Envi habría una nueva botella para comenzar a beber directamente de esta.

Mientras tanto en el mundo de Siralos, Satanick llegaba al palacio, lo que no sabía ese diablo era que a una demonio de rojos cuernos se le iluminaron los ojos cuando lo vio aparecer ante la vista que tenía desde su ventana, una sonrisa se formó en su rostro y corrió hasta la puerta de entrada, aunque estuvo unos minutos tratando de mantener la compostura y adoptar su típica cara seria, fue entonces que abrió la puerta como si fuese una total casualidad toparse al diablo afuera – ah ¿estabas aquí? Pensé que ya no vendrías mas- Iglis Unth observaba a su hermana desde arriba de la escalera y se reía por lo linda que era, Ivlin jamás podría ocultar sus sentimientos, estaba muy emocionada de ver a ese niño quien venía a cortejarla y se le notaba demasiado – I... Ivlin... quiero decir señorita Ivlin –

-¡Ja! Me parece bien que te hayas acordado como tratarme adecuadamente –dijo seria y lo miró a los ojos – ¿piensas quedarte ahí parado como bobo todo el día?-

-Claro que no... es que antes quería darte esto- le hizo entrega del racimo de flores a Ivlin la cual quedó sorprendida – lamento lo que dije el otro día... fui un estúpido, yo... solo lo dije porque estaba enojado, yo no me arrepiento de haberte elegido- a la niña le comenzaron a tiritar los labios y sus ojos se pusieron brillosos – ¿so...son para mí?- su corazón bombeaba, realmente, realmente ese diablo la prefería a ella, realmente ella podía ser la numero uno para alguien más– yo... gra... gracias...- dijo mientras tomaba el racimo entre sus manos para apreciarlas de cerca- están muy lindas...- sonrió gentil y en ese momento fue cuando Satanick se enamoró completamente de la demonio, no la había visto sonreír desde que la conoció, una sonrisa tan bella que deslumbró sus ojos e incendió parte de su ser, fue como si las piezas de su engranaje interno por fin se hubiesen acomodado y su vida comenzara a correr desde este mismísimo instante, así que sonrió y se puso rojo hasta las orejas- ¿pu...puedo pasar?-

-Cl...claro pasa...- lo dejó entrar y cuando el diablo hubo dentro susurró tímidamente -yo... yo la lamento haber sido muy antipática contigo...-

-¿Dijiste algo?-

-¿Por qué diría algo?... – dijo terca, el diablo solo la miro y sonrió otra vez, estaba muy feliz porque la niña ya no lo odiaba, fue una buena idea traerle flores –Ivlin... ¿hay algún tipo de flor que te guste más?- dijo inocente tratando de buscar una conversación – la... la verdad es que hay una flor que me gusta mucho... no es como que no me gusten las que me trajiste, están muy lindas, pero esas flores son mis favoritas- dijo escondiéndose entre el racimo y colocando la voz casi inaudible – no... no te escuché... ¿podrías repetir la parte final?-

- ¿¡Eres sordo!? Te estoy diciendo que... se... señor Siralos, buenas tardes, es un honor para mí verlo llegar, ¿está usted bien?-

-Hola cariño – le dijo Siralos mientras entraba glamuroso por ese gran portal, iluminando todo el palacio con sus destellante presencia – oh... pero que tenemos aquí... has vuelto pequeño, ¿por qué has demorado tanto en volver? ¿eh?

-Yo... estaba enfermo... quería volver pronto, pero no quería enfermar a Ivlin también- la niña se puso aún más roja y escondió por completo su cara tras las flores.

-Oh, con qué era eso –le desordenó el cabello y sonrió – fue mejor que te recuperaras y luego volvieras, mis niñas nunca se han enfermado, sería contraproducente que lo hicieran – dicho esto siguió avanzando por el pasillo mientras sus cabellos volaban por el aire, Nick miró su caminata hasta que la flameante figura del dios desapareció cuando entró a una de las habitaciones, después de eso enfocó su vista a Ivlin quien lo miraba algo molesta –¿sucede algo? – preguntó el de ojos violeta sin embargo no hubo respuesta, tan solo vio caminar hacia algun lugar a la demonio de fuego, Satanick tragó saliva, no sabía que rayos le pasaba, de repente estaba de buen humor y de la nada se enojaba, así que cuando la vió llegar a la cocina se extrañó aún más – ¿qué... qué vas a hacer? – la niña lo miró y luego lo ignoró para sacar un jarró y llenarlo con agua, posteriormente puso las flores dentro y salió caminando hacia otra dirección, Satanick la siguió, tenía mucha curiosidad de qué estaría pensando la niña, pero simplemente dejó las flores en su cuarto justo frente a su cama, encima de la cómoda que guardaba su ropa y era decorada con algunas fotografías y peluches de ambas hermanas, la niña se veía feliz aunque tuviese esa cara seria, él podía sentir que realmente la había hecho feliz al llevarle flores así que sonrió sintiendo que el estomagó se le llenaba de mariposas –saca tus alas – escuchó de pronto.

-¿Qué?-

-Que saques tus alas – el diablo la miró confundido por un momento, la vió acercarse y tomarlo de la mano para correr con el hasta fuera de la casa y emprender vuelo, entonces Satanick sacó sus alas rápidamente o se caería – ¿a... a dónde vamos?-

-¿No es obvio?-

-Claro que no es obvio... ¿hacia donde me llevas? –esbozó una sonrisa mientras esperaba una respuesta.

-Si no te das cuenta por ti mismo hacia dónde vamos no te lo diré... -dijo terca la niña, aunque esto hizo reír al mayor quien estaba feliz de volar tomado de la mano de la niña que le gustaba, su corazón estaba agitado y lleno de gozo, sin duda este día sería memorable.

Pronto llegaron a una montaña, e Ivlin comenzó a rodearla, era bastante grande así que se demoraron algunos minutos en bordearla y aterrizar en parte de ella – aquí es...-

-Espera... ¿me trajiste a una montaña?- se puso nervioso y sus mejillas se tiñeron de color carmesí mientras sus ojos se agrandaban y sus pupilas se dilataban – ¿acaso... acaso tu querías estar a solas conmigo?- Ivlin abrió los ojos sorprendida por el pensar de Satanick y pronto le soltó la mano lo empujó, su cara se tornó enojada por la vergüenza, pateó el suelo logrando que se partiera y su pelo se tornó rojizo – ¡eres un idiota! ¡Claro que no quería eso!... ¡tonto!- le gritó muy avergonzada empuñando sus manos, pronto le señaló el paisaje con una de sus manos, indicándole que tenía que ver hacía esa dirección – wooow ese lugar es muy bello- dijo el niño olvidándose del carácter de la demonio quien sonrojada se acercó tímida para acertar con la cabeza- eso era lo que te quería mostrar... e... esas son mis flores favoritas –

-Espera... me trajiste a un campo lleno de esas flores, pero esas son las mismas flores que están en el palacio-

-Crecen en todas partes, necesitan del sol para vivir, y como sabrás este mundo está lleno de ellos, pero... este lugar es mi favorito, no hay un lugar más lleno de ellas que éste... -

-Entiendo... realmente es muy lindo, ¿cómo se llaman las flores?-

-Se... se llaman girasol... -

-Tiene mucho que ver con tu mundo fufufufuf, ven vamos a verlas más de cerca –el diablo iba a emprender vuelo, pero fue detenido por las pequeñas manitos de la demonio – ¡no!... espera... yo... yo nunca he ido directamente a esos campos-

-¿Por qué? Si son tan bellos-

-Me gusta admirarlos desde acá...- dijo algo triste.

-No te ves muy convencida, ¿hay algún motivo por el cual no quieras acercarte?...- la demonio acertó con la cabeza con una expresión triste –¿por qué esa cara triste?-

-Hace unos años... yo no podía controlar bien mis poderes y... a veces cuando camino genero llamas desde mis pies... yo... yo no quería hacerlo... pero sucedió... quemé parte del jardín de mi señor... fue muy duro para mi... pensé que me odiaría... yo realmente no quería lastimar a esas flores... y menos que el señor Siralos se defraudara de mí, Igls Unth se había esmerado tanto en hacerlas crecer tan lindas y yo... así que entrené muy duro para controlar mi fuego... no quiero quemar el campo por un descuido-

-Espera... ¿me estás diciendo que puedes generar fuego desde tus pies?-

-Si... a muchos les molesta eso-

-¡A mí me parece genial! nunca he visto a alguien con ese poder ¿¡puedes mostrármelo!?-dijo muy emocionado Satanick, la niña lo quedó mirando por un instante, nunca nadie se había interesado en sus poderes, tragó saliva y su cara de angustia pasó a ser una linda sonrisa – está bien, pero no te vayas a impresionar demasiado – dijo divertida mientras comenzó a sacar fuego desde sus pies – woooooow, esto es lo más genial que he visto ¿puedes sacar fuego desde otro lugar? –

-Claro que puedo, tu solo observa- la niña comenzó a lanzar fuego desde sus manos y su nariz, se sentía entusiasmada así que tomo más confianza- mira, mira esto, aléjate un poco y observa – dijo más que contenta, nadie más que ella adoraba hacer esto, nadie más que ella se emocionaba tanto cuando se hablaba de fuego, realmente lo amaba y estaba disfrutando este momento, se agachó y se concentró cerrando sus ojos, tomó aire esperó unos cuantos segundos y abrió la boca lanzando una llama gigante desde su interior, Satanick estaba sorprendido y admiraba esa capacidad, era algo que jamás había imaginado ver, esa chica era tan increíble y tan poderosa, sin embargo su cuerpo era tan pequeño y delicado, era un lindo contraste, su corazón latía cada vez más rápido –esto... esto es sorprendente... ¡eres genial Ivlin!-

-Cof cof cof – tosió un poco de fuego y humo para luego sonreír- lo soy, gracias – Satanick la abrazó y giró con ella – eres genial, me impresionó esa llama, realmente fue muy grande –la niña estaba roja por la cercanía del más alto con ella –eee... si... gra... gracias... ya puedes soltarme... yo-

-Acompáñame – dijo abriendo sus alas y comenzar a volar en dirección al campo de flores mientras mantenía abrazada a la demonio para no dejar que escapara –no... ¿para dónde me llevas? ¡No! ¡Espera! Puedo quemarlo... no, en serio para... por favor...- el diablo no paró, afirmó a la menor lo más fuerte que pudo para que no se escapara y pudiesen llegar al campo de girasoles, una vez en él, dejó a la demonio en el suelo, se veía afligida, tenía miedo de quemar ese lugar – tranquila, me mostraste que tienes gran habilidad y manejo de tus poderes, yo a tu edad no tenía tanto control sobre los míos ¿sabes? –

-¿Qué edad tienes?- le preguntó la niña ya más tranquila y curiosa, no sabía nada del diablo y ahora le estaba diciendo que había una gran diferencia de edad, pero si se veían de la misma, el diablo se rascó la cabeza y le pidió a la chica que se sentase junto a él para hablar – siéntate –así fue como ambos niños se sentaron entre las flores para conversar – bueno, yo pertenezco a otra época, actualmente debería tener casi 400 años, sin embargo vengo desde el pasado para poder estar contigo-

-¿Qué?... ¿es decir que puedes viajar por el tiempo?-

-sí que puedo–

-Espera... ¿si puedes viajar en el tiempo entonces por qué te demoraste tres semanas en volver a venir? pudiste haberte mejorado y volver al día siguiente –

-Viajar en el tiempo tiene sus desventajas

-¿Como cuáles?-

-Solo puedo viajar el mismo día en el que me encuentro, si hubiese querido volver al día siguiente, debería haber esperado un año y un día para poder viajar al día siguiente y eso era mucho esperar... -

-... Pero que técnica tan mala... aun no me dices que edad tienes entonces-

-Bueno, mi apariencia es de 13 años, aunque en realidad por ser un diablo y el crecimiento es más lento tengo casi 40 años –

-Oh ya veo... yo también crezco lento, cada vez necesito de más años para verme más vieja- sonrió al decir esto y el diablo también, después de todo eran de especies similares, fue cuando se quedaron mirando sin saber que más hablar, Ivlin tenía muchas preguntas, pero no se sentía con la suficiente confianza para preguntar, así que se mantenía sin decir una palabra, Satanick tampoco sabía que decir así que para romper el hielo le tiró de la cola y salió corriendo – ¡oye! ¡Eso me dolió! ¡Imbécil! ¡Ya me las pagaras! – Ivlin corrió por todo el campo de flores persiguiendo al otro, no podía negarlo, era entretenido perseguirlo en medio de esas grandes flores que eran más altas que ellos dos, estuvieron corriendo unos cuantos minutos y una vez lo encontró, se tiró arriba de él y ambos rieron – ¿ves?, si eras capaz de jugar en el campo de flores y no quemarlas – la niña miró hacia atrás y luego miró a Satanick, se sentía indefensa, no había notado que el niño la había hecho correr por el campo con ese propósito, se sentía feliz y confundida – yo... yo... gra... gracias- dijo con la voz tímida.

Después de eso volvieron al castillo donde fueron regañados por el dios, ya que era muy tarde y ambos volvieron muy sucios, los mandó a bañar y luego cenaron todos juntos, sin duda ese día había sido magnifico, Satanick volvió a su mundo con una sonrisa enorme y con el corazón alegre, notó el lugar muy oscuro, ¿dónde estarían todos? Se preguntada, fue cuando vio a Envi entrar por la puerta, su cara no era de muy buenos amigos, al parecer había estado bebiendo – Envi... te he dicho que no salgas a beber, te hace mal –

-Jejejeje – se rió la cabra de una forma extraña – ¿por qué no sales con un amigo? quizás Yagi podría salir contigo para distraerte de otra manera –

-Jajaja vaya que nos distraemos bastante bien con Yagi- dijo aun riéndose, aunque después miró al suelo algo triste – ¿en serio te divertiste con Yagi? ¿Ves? podrían salir más seguido ustedes dos, quizás mañana puedan ir a otro lugar, aunque sin embriagarse, no me gusta verte así–

-¿Mañana? Pfff dudo que Yagi pueda salir de su cama o incluso ponerse de pie-

-¿A que te refieres? ¿Se pelearon? ¿Golpeaste muy fuerte a Yagi?-

-... Algo así... en un principio no quería, pero se dejó-

-¿Y te sientes feliz de haber hecho eso? –la sonrisa de la cabra desapareció y sus ojos comenzaron a nublarse, calló al piso y empezó a sollozar, la ebriedad lo hacía actuar débil, negó con la cabeza mientras algunas lágrimas se asomaban por sus ojos, Satanick se acercó preocupado donde su amigo, aunque lo único que consiguió fue que éste se pusiera a llorar fuerte mientras lo abrazaba y le pedía perdón, él no sabía por qué Envi le pedía perdón, no creía que él pudiese hacer algo malo, sin embargo la cabra sabía perfectamente que ese perdón se lo estaba pidiendo a sí mismo, se sentía herido y la única culpa la tenía él mismo, pensó que tal vez hacerlo con Yagi le quitaría un poco el amor hacia su señor, si su cuerpo le pertenecía a otro quizás podría adquirir sentimientos por éste, pero todo fue un fraude, no podía, simplemente no podía y sufría por lo que había hecho, no había podido parar de pensar en Satanick mientras estaba con Yagi, había sido realmente una tortura para él, no obstante dicen que el dolor endurece el corazón y si necesitaba endurecerlo para no sentir más esta frustración de no poder tener el amor de su señor, de no poder decirle cuanto lo amaba, de no poder tenerlo entre sus brazos, se entregaría a cuanto demonio fuese posible para evitar que ese sentimiento doliese, esa era su triste realidad, ese era su destino, fue llevado por Satanick hasta su habitación y ahí permaneció llorando hasta el amanecer.

De este día pasó un año, muchos eventos habían pasado en este tiempo, Yagi no quería ver más a Envi y menos dejarlo que se embriagara delante de él, se sentía utilizado por la cabra así que comenzó a usar una máscara para que no lo reconociera a simple vista, aunque era inútil, era el demonio más alto de todo Pitch Black, y difícil de no darse cuenta de su presencia, por otro lado Satanick e Ivlin habían desarrollado una gran amistad, Satanick no iba todos los días, sin embargo trataba de ir tres veces a la semana, después de todo debía administrar su mundo que poco a poco se había salido de control porque él casi no pasaba en él y porque Envi se había perdido en su dolor.

---------------------

Comentario: Muchas gracias a todas las personas que se dan el tiempo de leer esta historia y a todas esas personas que comentan, realmente me hace muy feliz  que les guste lo que escribo y que al menos sirva de entretención para alguien mas  UvU <3   realmente aprecio mucho eso, gracias  

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro