Yeon Jun quería hacerle olvidar a Soo Bin el mal momento que Woo Young le había hecho pasar. Es por eso que lo invitó a una cita, su primera cita como "pareja".

— Yeon Jun — lo llamó Soo Bin con esa dulce voz que lo derretía de solo escucharla.

— Dime Binnie — lo miro hipnotizado, lo traia loco.

— ¿A dónde me llevarás? —  preguntó muy emocionado dando pequeños brinquitos en el asiento del auto.

— No sé, tu díme a dónde quieres ir y yo te llevó, es más si quieres que te baje una estrella tu pide me la, si quieres la luna, yo te la compro — le sonrió tiernamente.

— Yeon... — se sonrojo, se tardaría en acostumbrarse a las cursilerías de Yeon Jun.

— Oh ¡Asdfghjkl! ¡¡Un jitomatito kawaii!! —le revolvió el cabello, Soo Bin era tan tierno que moriría por comérselo a besos pero sabía que de controlarse, tenía que esperar hasta que se sintiera mas cómodo.

Después de todo, no quería hacerle recordar cosas que no.

Todo a su tiempo, pensó Yeon Jun.

— ¡No me mires! —  le gritó cubriéndose la cara, se sentía muy avergonzado.

— Si te miro —  lo abrazo, era lo único que podía hacer.

— Vamos a jugar videojuegos — Soo Bin lo miro sin soltarse del abrazó — Quiero jugar contigo — hizo un puchero.

— ¡¡Deja de ser tan lindo!! —  lo abrazo mas fuerte — Iremos a jugar, ganaré muchos boletos para cambiarlos por un regaló para tí, ¿qué quieres que te regale?

— ¡¡Quiero un conejo gigante!!

—  ¡¡Este príncipe enamorado, te conseguirá ese conejo!!.

— ¡¡VÁMOS YEON JUN, GANÁ, GANÁ!! ¡¡Tu puedes!! —  gritó Soo Bin bastante emocionado.

Yeon Jun estaba en el ultimo nivel de un videojuego para ganar los últimos cincuenta boletos, de los cinco mil que necesitaban para poder cambiarlos por el conejo.

— Muere, muere gusano — dijo Yeon Jun sudando sin dejar de jugar. Tenía que ganar si o sí.

No le fallaría a su querido Soo Bin.

— ¡¡Vamos Yeon Jun!! ¡¡Yeon Jun tienes que ga... ¡¡!Aaahhh!!! — soltó un grito de felicidad.

— ¡¡Siiiiii!!! ¡¡Gané!! ¡¡Gané!! — emocionado por el triunfó, se levantó de su lugar para abrazar a Soo Bin. — ¡¡¡Gané!!!!

— ¡¡Felicidades!!

— Ahora, vámos por ese conejo.

El resto del día, Yeon Jun llevó a Soo Bin a recorrer casí todo Busan, lo llevó a comer a distintos lugares, lo llevó tiendas de regalos, le compró algo de ropa, le compró un helado mientras pasaban por el parque y finalmente, lo llevó a conocer la playa de la ciudad, Soo Bin le había comentado que uno de sus sueños, era conocer el mar, y Yeon Jun se lo cumplió, quería que su primera cita fuera inolvidable.

— Sano y salvo, y llegamos antes de las doce — dijó Yeon Jun estacionado en auto frente a la casa de su papá.

— Me he divertido mucho, gracias — abrió la puerta para bajar a su enorme peluche, llevarlo junto a el no había sido una buena idea, apenas y cabían.

— No hay de que, con tal de que núnca dejes de sonreír, me convertiría en payaso si es necesario, te amo tanto Sio Bin — le acarició la mejilla delicadamente

— Y yo a tí...

Pero eso no fue lo hizo que el corazón de Yeon Jun dejará de latir, sino lo que hizo después, Soo Bin le había robando un tierno, pero rápido, beso en los labios.

— Eres el mejor — le sonrió antes de bajar del carro dejando aún moribundo Yeon Jun dentro.

Después de unos segundos, Yeon Jun reaccionó, su corazón volvió a latir, sintió una gran revolución de las famosas mariposas en su estómago, una boba sonrisa se formó en sus labios y, cual si fuera un niño pequeño, comenzó a brincar en su asiento.

— ¡¡Santa madre!!, ¡¡Soo Bin me beso, me beso!! ¡¡Me ha robando un beso!!! ¡¡Aaahhh!! — decía casi desmayándose de la emoción.

Esta primera cita no pudo haber sido mejor e inolvidable, bueno tal vez si, hoy dormiría junto a la persona que ama.

— Binnie.

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¿Les gustaron los dos capitulos? ❤

Espero tengan un lindo día!! ❤❤ Nos vemos mañana con las historias que faltan de actualizar!!! ❤❤