Las calles eran tranquilas a esas horas de la madrugada. Apenas y encontrabas a una o dos personas que trabajaban muy temprano.

Algunos mortales podrían disfrutar de un gozo completamente si madrugaban, un ejemplo claro es aquella fanática que se tomaba una foto con el famoso Mile Romsaithong, quien se dirigía junto con su asistente al gran compuesto de oficinas para recibir una junta sumamente importante.

Apo sonreía mirando como el alfa aceptaba amablemente tomarse una foto con la chica, quien de por sí parecía algo cansada y estresada, la vio sonreír en grande al darse cuenta que veía a Mile en persona.

-Muchas gracias, lo admiro muchísimo Phi-. La joven, que se podía oler a omega, hizo una reverencia en muestra de respeto hacia la estrella.

-¿Si?-. La chica asintió con rapidez sin borrar ni un segundo su sonrisa. — Muchas gracias por tu apoyo-. La mujer se despidió de Romsaithong y también de Apo, pues cualquiera que supiera quien era aquel alfa, sabía la existencia de su mejor amigo y asistente, quien siempre estaba cual garrapata pegado a él.

-¿Te he dicho que te ves muy lindo tratando así a la gente?-. Lo tomó del brazo para que ambos retomarán su caminata por las frías calles de Bangkok.

-Hay personas que merecen ser bendecidas con mi amabilidad-. Se dio envuelto en aires de grandeza. La tierna risilla de Apo lo hizo salir de su complejo de superioridad para mirar
sonriente al menor.

-Alfa tonto

Caminaron juntos las pocas calles que faltaban para llegar al edificio, pues dentro de una hora tendrían una reunión con productores, abogados, directores y Build para arreglar el contrato de Mile para participar en la película.

Llegaron al lugar viendo en la recepción solamente a la asistente, pues era demasiado temprano aún para los demás trabajadores.

-Los odio a todos-. Habló el alfa mientras escondía su roja nariz entre la bufanda roja que llevaba en su cuello.

-Ahh yo también-. Suspiró el menor mientras desabrochaba los primeros botones de su abrigo, siendo detenido por la mano del alfa, quien enojado y hablando entre dientes volvía a abrochar correctamente los botones. - Aqui no está haciendo tanto frio-. Se quejó tratando de quitar las grandes manos de su prenda, pero el gruñidito que le había lanzado el alfa había hecho que se detuviera y bufara descontento.

-Debes estar loco-. Sonrió satisfecho al ver el abrigo completamente cerrado, ahora comenzando a acomodar la bufanda celeste del menor para que no inhalara el aire frío. -Aqui adentro también está helando-. Le dio un pequeño toque a la chiquita nariz de botón del omega.

Mile comenzó a caminar feliz de su trabajo, hacía la oficina de su manager, pues antes de la junta hablarían con él.

Apo lo seguía de cerca, pero a cada paso que daba se quitaba un poco más la bufanda, y después quitaba poco a poco su abrigo.

-Tenemos que poner los requisitos de siempre ¿si?-. Preguntó el alfa aún sin voltear a ver a Apo

-Claro, siempre lo hacemos, pero hablaré con P'Build de todas formas-. Respiró estando cómodo ahora sin tantas prendas encima.

El edificio contaba con calefacción, así que no era necesario andar como Mile  decía por todos los pasillos, simplemente el alfa exageraba un poco.

-Bien, después de la reunión desayunamos-. Ya estando en la puerta de Build, Mile se giró para ver con uan sonrisa al omega, sonrisa que se formó una mueca de enojo y reproche al verlo en tal condición, expuesto al frío del edificio, obviamente frío inexistente. -¿Por qué no estás abrigado?-. Formó un tierno puchero en sus labios que hizo a Apo reir bajito; en ocasiones no podía creer que ese hombre fuera un alfa.

-Ya te dije que estamos bien, no hace frio-. Pasó del mayor directo a la oficina del manager, sin si quiera molestarse en tocar la puerta.

-¡Hey chicos!-. Saludó desde el enorme ventanal en su oficina. - ¿Listos para la reunión?-. Mile asintió emocionado cerrando la puerta tras de sí, en cambio Apo solamente lo ignoró y tomó asiento en el sofá de la oficina, aventando en el camino su abrigo y su bufanda hacia Mile

-Vamos Apo, no te enojes con tu "Phi" -. Se burló el mayor, recibiendo un pequeño gruñido de parte de Apo en respuesta.

-Apo, ya lo hablamos, este es un excelente papel para Mile-. El pelirrosa le regaló una mirada llena de indignación y volteo su rostro.

Mile reía bajito ante la actitud de su
amigo.

De manera disimulada y totalmente ajena a los demás presentes en la oficina; tomó su bufanda hecha a mano y la quitó de cuello, colocándose en su lugar, la bufanda color celeste del menor, aspirando el gratificante aroma de sakuras y fresas, siendo un aroma bastante relajante para él.

-Manhattan era también una excelente opción para él

Y es que se trataba de nada más y nada menos que una película de suspenso y misterio, de las favoritas de Apo, y más cuando el protagonista era su amigo, por eso odiaba en esos momentos a Build

-No lo era-. Rodó los ojos ante el comportamiento infantil del asistente.– Mile ya aceptó el papel, hay que firmar los contratos y ponernos en acción para acomodar los horarios-. Ahora Apo rodó los ojos.

El menor miró al alfa suplicante, pero el castaño solamente se encogió de hombros y retiró su mirada pues estaba seguro que Apo lo mataría con la mirada.

-Bien-. Suspiró viendo como Build le sonreía mostrando sus hoyuelos.

-De acuerdo, vamos yendo a la sala de reuniones-. Apo se levantó de su lugar para tomar sus cosas; se colocó lentamente el abrigo color beige para después colocarse su bufanda, sin darse cuenta que ahora tenía en su cuello una bufanda color rojo inundada del aroma del alfa. Puede que tal vez estuviera inhalando profundamente el delicioso aroma de lirios y café mascabado.

Salieron los tres personajes directamente a la sala de juntas.

La reunión estaba a punto de llegar a su final, los productores y directores estaban completamente satisfechos al tener confirmado al mismísimo Mile Romsaithong como su estrella principal.

El elenco completo no había sido definido aún, pues apenas estarían terminando de acomodar todo legalmente para en un par de meses comenzar la filmación. Aunque claro que tenían a un par de ideas para los demás personajes de la historia, así como la coestelar de ésta; pero en los demás personajes algo secundarios tendrían que hacer audiciones.

-Quiero ser el primero en enterarme sobre el reparto completo-. Decretó el alfa castaño haciendo que todos asintieran y anotaran cada detalle. El porte de Mile en esos momentos era de total autoridad, Apo incluso se atrevía a decir que era muy atractivo mandando gente y con su rostro serio y concentrado, aunque personalmente él siempre prefería al Mile divertido y tierno que era fuera de ese edificio.

Apo rodó los ojos ante el comportamiento que tenían por complacer al actor totalmente.

Mile se acercó a él para susurrarle algo en el oído.

-¿Agregaste mi carrito de café diario?-. Apo se reía un poco llamando la atención de varias personas importantes quienes los veían entre confundidos y algo molestos al pensar que era por ellos la risa.

-Agregué todos tus caprichos, no te preocupes-. Le dejó un pequeño toque en la nariz haciendo que Mile  sonrierá mostrando sus rosadas encías.

-Gracias-. Se recostó en su hombro sin importarle mucho las demás cosas que se hablarían, pues ya serían asuntos más serios.

Varias personas los miraban con curiosidad, pero ambos ni siquiera se dieron cuenta de ello. Siempre han sido empalagosos y melosos entre ellos, así que estaban bastante acostumbrados a ese tipo de miradas, así como también estaban acostumbrados a tener que aclarar ante el público que solamente mantenían una relación de amistad y laboral, nada más.

-Bien Mile Romsaithong-. Habló uno de los productores de la película, haciendo que el alfa se enderezara rápidamente en su asiento. Bienvenido a nuestro proyecto de Las leyes del Corazón-. Estrecharon sus manos con una sonrisa enorme.

Apo sonreía de igual manera, aún al no estar del todo de acuerdo con aquel filme.

El contrato estaba hecho, pronto anunciarán que aquel alfa protagonizará esa historia romántica. Pronto se escogería al reparto a formar, y en tres meses todo estaría listo para comenzar la grabación.

-¿Tres meses no es mucho?-. Preguntó el pelirrosa un poco alto para ser escuchado entre los gritos y festejos en la habitación.

-Se irán volando Apo, no te preocupes-.

Y la verdad es que tres meses si pasaban bastante rápido.

Demasiado tiernos son estos chicos.
Muero de amor ✨🌺