Una tarde maravillosamente tranquila, demasiado para el gusto de Apo

Todo había pasado realmente rápido.

Incluso las horas se habían corrido tan rápido que hasta la respiración de Apo parecía ser un poco más rápida que ellas. -Apo - Mile le habló llamando su atención.

Las grabaciones ya se habían terminado por ese día, así que ambos tenían que volver a casa.

El omega no dejaba de pensar en Jeff Satur y lo que le había confesado horas atrás, es que simplemente era algo obvio, pero no podía creérselo todavía. Su mejor amigo y la persona que con la que menos se llevaba.

Una pesadilla.

-Apo -. Le llamó por segunda vez.

-¿Sí?-.

-¿Todo bien?-. Lo tomó de los hombros para mirarlo más de cerca. - Has estado un poco distraído desde que charlaste con Satur- Apo sacudió la cabeza negando y alejándose del tacto. -¿Te dijo algo malo?-.

-No, solo hablamos de algo en lo que debería pensar demasiado-. Se alejó más del alfa para ir por su bolso de mano y regresar a su lado.

-¿Seguro?-.

-Si, no te preocupes por nada-. Le sonrió sintiendo su preocupación en el aire. - Vamos, ya es tarde-. Tomo la mano del mayor para salir de ahí, pero Mile simplemente apretó el agarre, pero no se movió de ahí. -Vamos Mile

-Si...-. Rasco su nuca pareciendo nervioso, cosa que alerto al omega.

-¿Pasa algo?-. Soltó su mano para parase rectamente frente a él de brazos cruzados.

-Te diré algo, pero no quiero que te enfades conmigo, ¿de acuerdo?-. El pelirrosado entrecerró los ojos mostrando su inconformidad.

La última vez que Mile había utilizado esa frase había sido el comienzo de varios desastres y catástrofes en sus vidas. La ultima vez que Mile había utilizado esa frase fue cuando le anuncio su noviazgo con Love

-Habla-. Sus ojos ya no estaban entrecerrados, simplemente lo miraban seriamente, resultando completamente intimidante.

El temblor en el cuerpo del alfa lo
comprobaba completamente.

-Bueno... Resulta que tengo que irme justo ahora a un lugar, pero te juro estar de vuelta a las siete-. Hablo rápido y tomando su bolso.

El omega reviso su reloj de muñeca para ver la hora frunciendo el ceño.

-¿A dónde irías solo media hora y por qué tendría que enfadarme?-. El castaño ya se encontraba dos pasos fuera del camerino, sin querer darle tiempo a Apo de renegar.

-Iré al departamento de Love para ayudarle a ensayar los guiones, adiós-. Salió corriendo sin dejar ni un solo segundo atrás.

-¡¿Qué?!-. Pero ni aunque quisiera, Mile ya estaba saliendo del edificio, no podía ni verle ni escucharle.

Bufo bastante molesto soltándole una patada al suelo. No podía creerlo, que después de tanto estuviera así tras ella.

Dio otra patada hacia algo gris junto a la pared con bastante fuerza.

-Auch-. Una voz le llamo la atención sobresaltándolo un poco.

-Ay lo siento mucho-. Levantó el rostro para disculparse, pero su mirada perdió la sorpresa al ver quien era la persona que había golpeado. -Bible Sumettikul -. Lo miro entrecerrando sus ojos sin un ápice de interés.

-Una disculpa me vendría bien-. Sobo su pantorrilla aun sintiendo el dolor.

-¿Qué te trae por aquí ahora?

-No se que esperabas, soy el manager de la protagonista de esta película-. Dejó de sobar la parte afectada para acomodar su costoso traje negro.

-Ya todos se fueron, no tienes nada que hacer aquí-.

-Tú tampoco-.

-Ah mira-. Se cruzo de brazos mirándolo con superioridad, aunque fuera un asistente frente a un manager.

-En realidad esperaba poder hablar contigo sobre un tema de suma importancia-. Su rostro se mostró serio, como el del alfa imponente que era, pero sin llegar a causar ningún efecto en el omega.

-¿Sobre qué?-.

-Me gustaría que lo conversemos en un lugar más cómodo-.

-No-. Rodo los ojos sin descruzarse de brazos.

-Es que tengo mucha hambre, solo quiero hablar contigo-. Hizo inconscientemente un puchero.

-No lo sé, aun no confió en ti-.

-Fue hace tiempo Apo, fui un alfa idiota y demasiado berrinchudo

Y así era. Hace un par de años, cuando Mile y Apo habían conocido a Love también conocieron a su manager. Bible había caído hasta el fondo por los encantos del omega, terminando con una gran golpiza de parte de Mile, una advertencia de Build y una cachetada de parte de Barcode

Pero no es que fuera un acosador, simplemente quería acercarse al omega de manera amigable, tal vez se le pasó un poco la mano, pero tampoco era como que lo hubiera seguido a su casa o tomardo fotos sin su consentimiento; simplemente había publicado una foto de ellos dos juntos diciendo que eran pareja, volviendo loco al alfa y a su manager.

Era mentira, lo tuvo que aclarar después.

-Si vamos tendrá que ser en mis condiciones-. Advirtió alejándose un poco de él y sacando su celular.

-Como gustes-. Mostro sus manos en modo de desinterés al respecto; no mentía cuando decía que solamente quería almorzar y decirle algo sumamente importante.

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-Pensé que se llevaban mal

-Ve al grano Bible-. Pero el alfa no dejaba de mirar asombrado como Satur devoraba su hamburguesa junto a Apo

-No me mires a mí, vienes a hablar con él

Frunció el ceño siguiendo con su comida.

-Ignóralo-. Apo necesitaba estar con alguien para poder sentirse cómodo, aunque no creía que Bible hiciera otra jugarreta nueva.

-Bien, primero que nada, necesito tu ayuda-. Tomó algunas patatas fritas de su bandeja del pequeño restaurante de comida rápida. Apo no comía pues desde la pequeña "noticia" de Mile se le había revuelto el estómago por completo.

-¿Para qué?-.

-No quiero a esos dos juntos otra vez, es malo para ambos-. Mordió su deliciosa hamburguesa soltando un ruidito de aprobación.

-¿Se refiere a Mile y Love?- Bible asintió.

-Tú sigue comiendo y no te metas

-Decía-Carraspeo un poco antes de seguir. -Tú y yo sabemos cómo es Love de manipuladora y como es Mile de ingenuo y ridículo. Si no cuidas a tu alfa algo va a pasarle

-No es mi alfa-. Bible lo miro como si Apo fuera el ingenuo.

-Claro

-Todos sabemos que si-. Tomó una patata frita y la metió de golpe en la boca del alfa menor.

-Come y calla-. Miro de nuevo a Bible asintiendo. -Lo sé, tampoco los quiero juntos

-Entonces ayúdame, cada vez que quiera juntarse con ella llévatelo a algún lado, invéntale juntas no se

-También tienes que controlarla a ella

-Poo, con ella no hay nada que no haya intentado ya-. Se cruzó de brazos sobre la mesa para mirarlo seriamente. -¿Por qué crees que se acerco a él hasta ahora?-. Dio un largo y lento trago a su refresco de naranja. -Te apuesto que Tong tiene algo que ver, los he visto más juntos de lo normal últimamente, incluso escuche una de sus conversaciones-.

El teléfono celular del omega comenzó a vibrar en la bolsa que había llevado. Miro el identificador dando con el nombre del alfa pelicastaño. Miro la hora y se dio cuenta que ya eran las siete y media de la noche; probablemente le estaría llamando para ver donde estaba y porque no estaba en casa.

Mordió su labio dudoso, luego se decidió en dejarlo sonar.

-Cuéntame más-. Sonrió sumergiéndose junto a los alfas a lo que sería la boca del lobo

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El reloj ya marcaba las nueve de la noche y Apo seguía sin poner un pie en su departamento, ni siquiera contestaba sus llamadas.

El aroma a preocupación se estaba haciendo presente de manera rápida en el lugar.

El cerrojo se escuchó al mismo tiempo que el sonido de acceso cuando abrían la puerta.

-¿Dónde estabas?-. Se acercó rápidamente a el menor. No tardo en fruncir el ceño al sentir un leve olor a alcohol y a alfa.

-Antes que digas algo, no estoy ebrio-. Y es que si se le notaba totalmente cuerdo. Dejo sus cosas en la entrada y se encamino a la cocina. -Fui a cenar con unos amigos y de ahí nos pasamos a un bar por la zona, pero no bebimos mucho porque mañana es día de trabajo y teníamos mucho sueño

Mile lo siguió de cerca olfateando atento para reconocer el aroma. No tardo en reconocer el feo aroma de dos particulares alfas cubriendo el dulce de Apo

-¿Viste a Bible y Satur?-. El pelirrosa asintió sirviéndose como si nada un vaso de agua fría.

-Me lo tope y quería que fuéramos a cenar para charlar, pero para sentirme mas seguro le llamé a Jeff para que me acompañara-. No tenia porque mentirle. Simplemente omitiría la parte donde planeaban lanzarlo de las escaleras si caía nuevamente en las redes de Love

-¿Por qué no me llamaste a mí?

-Estabas ocupado-. Se encogió de hombros sin darse cuenta como hizo sentir a Mile

Pero tenia razón. Mile estaba demasiado ocupado con esa omega.

Su alfa aulló dolido.

-¿Cómo te fue con Love?-. Subía las escaleras con el mayor tras él como si de un perrito callejero se tratase.

-Pues más o menos-.

-Era muy poco tiempo para que realmente ensayaran algo-. Entraron a la habitación cerrando la puerta.

-Repasamos unas cuantas líneas, pero ella se equivocaba mucho-. Frunció ceño viendo como Apo entraba en el baño de la habitación para cambiarse. -Quería que me quedara mas tiempo, pero yo te había dicho que estaría aquí a las siete, entonces le dije que mejor las practicara sola porque yo no ayudaba en nada-. Se tumbó boca arriba en la cama esperando al menor.

Apo salió vestido con un pijama que hacia juego con el celeste que Mile llevaba puesta. La de él era amarilla. Sonrió ante lo verdaderamente estúpido que era el pobre alfa, pero le alegraba que no captara las indirectas de aquella mujer.

-¿Estas enojado conmigo?-.

-No, no tanto-. Confesó con un ligero puchero mientras se acercaba a la cama.

-¿Puedo abrazarte?- Apo asintió acostándose junto al mayor en la cama. Casi inmediatamente sintió los brazos del alfa rodear su cintura y pegarse a él.

Mile se quedó dormido al poco tiempo, dejando que Apo sintiera su pausada respiración en su nuca. En ningún momento había soltado el agarre sobre el omega.

Apo se quedó despierto pensando.

Realmente no quería que Mile volviera a sufrir. No quería verlo llorar.

Pero si intentaba alejarlo de Love y el mayor no cedía no iba a interferir, simplemente se alejaría de ambos sin ganas de aguantar nuevamente las peleas con el castaño por defender a la omega. Y eso se lo había dejado bien claro a Bible

Suspiro cansado de seguir pensando en eso; solo quería descansar bien una noche.

Pero el sonido el brillo de un celular junto a su almohada le hizo girarse.

Se trataba de un texto de Love en el celular de Mile

La curiosidad picaba fuertemente, así que no se resistió en desbloquearlo con su huella digital y leer el mensaje.

Frunció el ceño ante lo que leyó.

Love :)

Gracias por la ayuda de
hoy, pero creo que necesitare
más practica contigo.

¿Podemos salir a comer
mañana y después practicar?

Podemos ir a ese restaurante
italiano que te gusta.