capítulo IV
Mucho tiempo después...
—Ya pasaron cinco años desde que nuestra niña de fue a Australia
—Pero la vimos un par de veces, además está la comunicación casi diaria
—No es igual menos ahora que dice que se nos casará
—¡Vamos!, Eric es ley de la vida
—Ella es mi niña, mi princesa no la veo hace mucho y saber que viene con su novio francamente no me lo esperaba
—Eric amor, lo mismo me dijiste hace un año cuando nuestro Jacques se hizo novio de Soleil
—Pero ellos son más jóvenes están experimentando la vida, además conocemos a Soleil de siempre, estos muchachos solo oficializaron la relación que empezó como una amistad de pequeñitos
—No veo la diferencia el amor es siempre el amor
—Rose no conozco a aquel joven ¿quién será, cómo conquistó a nuestra hermosa Shantall?, ¡rayos! Me siento inseguro como hace tiempo no lo hacía
—Vamos... hay que darle confianza
—¿Sabes linda Rose? Me siento viejo
—Eric hace mucho que no me llamabas así y no amor no estás viejo estás maduro y por cierto mucho más guapo
—¿Tú lo crees?
—Claro Eric y como te dije me considero afortunada por tenerte en mi vida, por siempre estar ahí; te amo tanto
—Está bien Rose me hiciste entrar en razón, le daremos una oportunidad a ese chico, entonces preparemonos para recibirlos
Días después....
—Llegaron padre
—Marc, recuerda el será un nuevo miembro de la familia
—¿Un hermano?
—Si hijo, algo así
—Está bien padre yo quiero a mi hermana, también querré a su esposo
—Así se habla campeón
En eso...
—¡Papá! !Marc!
—¡Hija mía!
—¡Shantall!
—¡Padre! ¿cómo estás?...cuanto te extrañé verte siempre tan elegante hasta con ropa casual, en serio te eché tanto de menos papito y a ti también Marc hermanito querido
—Estamos contentos hermana
Abrazándoles— ¡cuánto los amo!
—Ya, princesa me vas a hacer llorar y no queremos eso o ya olvidaste que viniste acompañada
—No padre él se quedó atrás con mamá, ¡mira! acaban de entrar
Tomándole de la mano —padre ven el es Jeremy Robinson
—Jeremy ya te presenté a mi madre, pues ahora conoce a mi padre Eric Faure-Dumont
—¡Mucho gusto! señor Faure-Dumont
—El gusto es mío joven Robinson así que es Ud. Australiano
—Si soy de Sydney
—¿Podemos charlar un momento a solas?
—Claro señor, vuelvo preciosa
—Está bien amor
—Mamá creo o mi padre está algo celoso
—Hija que padre no lo estaría y más con una niña cómo tú
—Madre ya no soy pequeña estoy por cumplir los veinticuatro años
—¡Hermana!
—Dime Marc de mi corazón
—¿El será un hermano nuevo? ¿qué pasara con Jacques?
—Con Jacques osea conmigo no pasará nada, el solo será un hermano "adoptado"
—Ohhh!!! Mi Jacques bebé, cuanto has crecido, pero que bien parecido estás no quiero ni imaginar cuantos corazones habrás roto ya
—Hola hermana, en eso te confundes Shantall aquí el rompecorazones es Marc
—¿Marc?...a ver explícame
—Yo no..
—No hagan avergonzar a mi niño
—Mamá iré a traer el pastel que hice para Shantall
—Está bien mi pequeño anda ve y avisa que serviremos la mesa
—Hija tu yo tenemos una conversación pendiente vendré junto a ti a la hora de dormir, por ahora voy a ver a tu padre ¿en que estará con tu novio?
—Si mamita está bien
Una vez que se fue...
—Jacques te veo y parece que estuviese con otra persona, pero cuéntame que estás haciendo por ahora aparte de ir a a la universidad
—Bueno ayudando al padre en la empresa
—Hermanito eres un joven y guapo ejecutivo entonces, cuidado con las secretarias
—Descuida, Mamá las escoge
—Eso debe ser cómico
—Para evitar la tentación, tú sabes la filosofía de nuestra abuela
—Si hermano es una lástima que la gran señora Faure-Dumont ya no esté con nosotros y ¿que sabes de tía Gabrielle?
—Sigue su vida en Italia con su familia
—Y ¿cómo marcha lo de Yvette?
—Soleil, la llamo por ese nombre
—Está bien Soleil
—Ella es el sol que ilumina mi vida
—Poético al mismo estilo de los Faure-Dumont
Alguien atrás estuvo escuchando
—Si yo soy tu sol, tu eres el aire que necesito para respirar, Hola amor
—Soleil vaya que rubia más espléndida
—Shantall ¡cuanto tiempo! y que gusto verte en serio te ves tan chic
—¡Gracias! lo heredé de mi padre así como veo que tu heredaste lo mejor de los tuyos pero que hermosa te volviste Soleil con razón mi hermanito tiene solo ojos para ti
—Ya no es para tanto,. Así que lo mejor de mis padres no??
—Sabes tus padres nos robaron el show cuando se comprometieron en la fiesta de cumpleaños mía y de Marc
—¿Así?
—Otro día ya te contaré los detalles según mi punto de vista
—Si claro, tengo curiosidad por conocer esa anécdota
—Niños vamos el almuerzo nos espera
Durante el almuerzo los novios
comunicaron que se iban a casar por ceremonia religiosa dentro de quince días ahí para estar juntos con ellos porque ya se habían casado por civil, esta noticia no le cayó del todo bien a Eric pero después de hablar con Jeremy vio que el amaba realmente a su hija por eso le permitió aquello
Quince días después
—El gran día llegó hija mía
—Madre perdóname si no me caso en la mismas condiciones que Ud.
—Hija cada pareja escribe su propia historia de amor
—Pero sin duda Ud.y mi padre fueron de casi las últimas parejas románticas de estos tiempos
—Hija estas hermosa me vas a hacer llorar
—Si madre te quiero tanto prometo que convenceré a Jeremy para ver la forma de mudarnos más cerca a Uds.
—Está bien amada hija te amo
—Hija mía estás lista
—Si padre, vamos
—Padre te amo, recuérdalo siempre tu serás el primer gran amor de mi vida siempre
—Princesa Shantall, yo....
—Papito mío —ambos se abrazaron
—Disculpa a este viejo ridículo
—No padre, descuida seré feliz por ti y por mi ¿si?
—Suspirando — vamos hija
Así el padre entregó a su hija adorada al novio en el altar, la ceremonia transcurrió de manera normal rodeada de mucha gente, todo era algarabía ese día, ya en la fiesta
—Suegro venga, recién llegaron mis padres su vuelo tuvo un atraso y te los quiero presentar olvidé decirle mi madre también es francesa
—¡Que casualidad!...
—Padre, el es Eric Faure-Dumont, padre de Shantall
—Mucho gusto Tobías Robinson para servirles
—El gusto es mío, al parecer las señoras ya se conocieron
—Si y parecen muy entretenidas
En otro ambiente
—Yo te conozco, de algún lado
—Disculpa que no te pueda reconocer
—Yo si eras aquella muchacha la de la lluvia, claro fui yo quien advirtió de tu presencia a Eric, vaya esto si que es una sorpresa
—Tú eres la famosa...
—Si soy Claudette Lemaire, al menos ese era mi nombre de soltera, ahora soy la señora Robinson
—Estoy muy sorprendida con las vueltas de la vida
—De igual manera yo pero eres realmente hermosa Rose, quien hubiera pensado que realmente el destino los hubiera unido a Eric y a ti
—Si Eric es tan maravilloso
—Si buen hombre, se merecía toda la felicidad del mundo y veo que lo consiguió, a estas alturas ya debes saber lo de nuestro pasado
—Sólo lo necesario, nunca más ahondé en detalles
—Claro además nunca fui la novia oficial, lo quise como el mejor de los amigos más nunca pude amarlo, como si amo a mi esposo a pesar que tuvimos un inicio muy tormentoso, muy difícil aquí estamos ahora celebrando la unión de nuestros hijos que por cierto mejor elección no pudo hacer mi adorado Jeremy
—A mi lo único que me importa es que se comprendan, que ambos escriban su propia historia de amor,personalmente no me meteré en sus vidas no es correcto hacerlo, salvo algún excepción quizás
—Claro ellos deben aprender por si solos
En eso llegaron Eric y Tobías al encuentro de sus esposas
—Ud. Debe ser Rose Faure-Dumont
—Si señor Robinson
—Un placer conocerla
—El gusto es mío
—¿Claudette?
—Eric, viejo amigo
Ambos se dieron un abrazo fraternal
—Sin rencores Eric
—Despreocupate Claudette, más bien te debo las gracias porque por ti conocí al gran amor de mi vida
—Yo te lo dije
—¿Uds. Se conocen? Claudette
—Querido más tarde te contaré los detalles solo debes saber por ahora que Eric es un amigo que creí perdido
Al grupo se unieron los recién casados
—Veo que nuestros padres se llevarán bien mi amor
—Así parece
—Padres, suegros nosotros ya nos vamos
—Tan pronto
—Si suegro deme permiso para llevarme a la novia
—Ya sabes Jeremy solo haz feliz a mi princesa cómo lo prometiste en tus votos ni más ni menos
—Por cierto cuñado acá estaremos al tanto siempre no lo olvides
—Vamos Jacques no seas celoso
—Sabes mi sol siempre quise decir eso
—Claro como no tengo hermanos que cómodo es hablarlo a otros
—Shantall hermana siempre te querré
—¡¡Oh!! Marc mi gemelo adorado...y yo, nunca lo olvides hermanito
—Bueno yo quiero pintarlos en un cuadro
—Claro tío François
—Pero hasta eso yo les tomo las fotos, así que pongan sus mejores caras
—Esta bien tía Melanie
—Madre enfoca bien
—Yvette ya te olvidaste quien te enseñó
—Y así todos pasaron un rato mas,
Finalmente los novios se fueron, los invitados también se iban de a pocos
Acabó la fiesta Rose
—Si Eric
—No estés triste, mi compañera de vida ¿en que piensas?
—En todo lo que pasamos en que son casi veinticuatro años juntos, en todo lo que pasamos lo de nuestro niño, el desfalco que sufrimos en la empresa
Pero la florería que nunca quisiste dejar nos ayudó mucho por aquel entonces, amor es hora de disfrutar
—¿Cómo dices?
—Le dejé todo a cargo de Jacques, el demostró ser muy capaz, él se parece mucho a mi padre tiene un liderazgo natural, sé que hara bien el trabajo
—Tienes razón, pero también tiene mucho de tí
—El se parece mucho a ti linda Rose
—Físicamente a mi padre que en paz descanse, tienes razón Eric
—Vámonos amor ahora mismo, llevaremos a Marc, nos espera un crucero
—Crucero ¿a dónde?
—Es sorpresa ya lo verás
—Eric amor de mi vida
—Vamos.
Más tarde
—Finalmente solos mi sol
—Jacques...
—Dime
—¿Tú crees que podamos seguir el ejemplo de nuestros padres?
—Claro
—Pero a veces peleamos
—Pero ese es el combustible que necesitamos para seguir juntos
—¡Que masoquista!
—No lo digo en ese sentido
—Pero ¿que sería de nosotros en una relación perfecta?
—Monótona y aburrida
—Tú misma tienes la respuesta
—Nuestro amor está como este pequeño árbol aún en formación solo depende de nosotros que su tronco crezca derecho
—¡Oh! Jacques siempre me dejarás sin palabras, me convenciste
—Mi sol, eres tú la que me enamoraste siempre, te adoro
—Y yo
—Una oportunidad Señorita Garnier
—Si joven Faure-Dumont una oportunidad por una rosa.
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Fin
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