—¿En serio? Paulette ¿quieres dejar los cargos? —pregunta Carlos preocupado

—No lo sé... No quiero hablar de eso ahora, Carlos.

—¿Por qué? ¿No planeabas contármelo?

—No es eso, es solo que no estoy preparada ahora ¿si?

Carlos asiente

Llegamos hasta donde está abuela

—Amá, Carlos y yo nos vamos, Predicaremos un poco más y nos vamos a la casa ¿ok? —le aviso a la abuela

Tuve que mentirle porque si le digo que no predicaré más, se forma un lío

—Bueno, tengan cuidado. Nos vemos en la casa, Paulette.

Carlos y yo empezamos a caminar. Cuándo salimos del campo de vista de la abuela, relajamos más el paso.

—¿Sabes? Últimamente he estado hablando con tu mejor amiga... —comenta Carlos

—¿Ah si? ¿Desde cuándo? —lo miro incrédula

Suelta una risita —No te estoy mintiendo, es en serio. Estamos hablando más o menos desde hace un mes aproximadamente

—¿Si? Ella no me ha dicho nada —comento extrañada

¿Que esta pasando aquí?

—Ella no te quería decir, por eso decidimos que te lo iba a decir yo.

—¿Por que no me quería decir ella?

—Hmm ¡Estem! Es complicado —está nervioso

Ojalá no sea lo que pienso

No puedo negar que tengo miedo

Para despejar mi mente, saco mi móvil de la cartera al igual que los audífonos y coloco Stitches de Shawn Mendez  y le doy una sonrisa de disculpas a Carlos

Necesito pensar en algo más, así que me concentro en la letra de la canción aunque no la entiendo.

Al poco tiempo ya me estoy moviendo al ritmo de la canción, meneo mis caderas y muevo mi cabeza al ritmo de la canción. Allí es cuando acaba

Y Shower de Becky G empieza a sonar

—"Eres mi amigo, mi amor y mi home" —comienzo a cantar más para Carlos que para mi — "Me pongo a saltar, me pongo a cantar, cuando conmigo estas no paro de bailar" —empiezo a "bailar" a lo loco alrededor de él

Aunque no puedo escuchar nada fuera de la música, puedo ver como ríe fuertemente y se sostiene la barriga. Allí es cuando yo, empiezo a reír.

La canción acaba y puedo escucharnos a los dos un rato antes de que empiece otra canción. Nos calmamos y seguimos caminando, dirigiéndonos breves miradas de complicidad.

Miro alrededor, estamos en una calle rodeada de zonas verdes. Es hermoso ver la cosas mientras escuchas música, le dá un toque de magia a todo... Magia y diversión.

Amo la música, los libros y lo bella que puede ser la vida cuándo está acompañada de estos... Incluyendo a nuestros mejores amigos

Me dejo llevar por la felicidad que siento ahora.

Varias canciones pasan y yo ya no me acuerdo de dónde estoy

Hasta que Carlos me quita los audífonos

—Hey, ya llegamos —me dice Carlos

Miro alrededor para confirmar

—Bien ¿vas a entrar conmigo? —le pregunto

—Sip

Juntos entramos a la casa donde se encuentran mamá y papá

—Hola, chicos —mamá aparece en la cocina —Paulette... Un chico vino a visitarte, dice que estudia contigo.

—¿Si? ¿Como dijo que se...? ¡Oh! Hola, Luis —saludo a mi amigo que sale de la sala de estar

Miro a Carlos que se ve relajado

Bien, gracias

—Hola, Pau —me saluda éste

—¿Necesitabas algo? No fuiste el viernes a clases

—Si, quería saber si me prestabas tus cuadernos para anotar lo que dictaron lo profesores ese día

—Claro, ya te los traigo

Entro a mi habitación en busca de los cuadernos que tocaron ese día de clases

Me inclino frente a la biblioteca, dónde tengo mis cuadernos en la última planta porque las demás están llenas de libros

Doy un brinco cuándo siento unas manos frías en mis caderas

—Ash, Carlos, deja de hacer eso ¿si? —me giro hacía él —sabes que me—

Sus labios impactas con los míos rápidamente, la primera vez que él me besó fue mi primera vez, por eso no supe responder como se debía. Pero ahora, no dudo un segundo en responderle el beso, me impresiono a mi misma al ver lo bien que lo hago. El beso esta lleno de deseo y hambre, es rápido, un beso extremadamente acelerado, Carlos abre paso con su lengua y empieza a explorar mi boca, y... Allí es cuando tengo el valor de morderlo, lo muerdo con ganas y un poco fuerte, a lo que él gruñe y me empuja dejándome atrapada entre la biblioteca y él, pasa sus manos por mi cintura y abdómen, haciéndome temblar ante su tacto y... Él sube sus manos hasta mis pechos, masajeandolos y apretandolos levemente. Cometo el error de gemir en su boca... Y digo error porque allí fue cuándo Carlos perdió el control y me cargó hasta la cama.

Me asustó, me asustó demasiado, yo no quiero perder mi virginidad aún, no estoy segura...

Las manos de Carlos tocándome me hacen olvidar lo que estaba pensando, su boca baja a mi cuello y deja un rastro de besos húmedos por todo mi cuello

Empieza a subir mi vestido y me alarmo.

—C-Carlos... No... ¡No! ¡Para! —levanto un poco la voz pero no de rabia, sino de miedo

Él alza su cabeza y me mira, el deseo puro en sus ojos empezando a desaparecer

—Carlos, yo no quiero... Esto no... —Carlos empieza a mirar todo alrededor y a mirarme a mi, volviendo la razón a su cabeza

Se levanta de encima de mi desesperado, pasa su manos por su cabello, me mira y sigo acostada en la cama

Nuestras respiraciones aún agitadas y mi corazón a mil por minuto

—L-Lo siento, Paulette, no sé en lo que estaba pensando —dice y sale disparado de la habitación

Sigo sin entender bien lo que acaba de pasar, miro mi vestido el cual esta ahora arrugado y levantado

Me levanto de golpe y empiezo a ordenar mis pensamientos, así como también camino al espejo de cuerpo entero y comienzo a acomodarme

Mis labios aún hinchados por el beso, pero obviamente no se nota

Cuándo mi respiración se calma, busco los cuadernos y salgo de la habitación.

Carlos ya no está y todos me miran confundidos

¿Que pasó?