•°{Capítulo 7: Primer caos}°•
Al día siguiente, Genobeba y Hortencia desayunaron en casa de las primas, y ahora tenían que ir a trabajar, Segis y Rogelia primero tenían que hacer unas cosas, por lo que ahora mismo Genobeba y Hortencia conducían en dirección a la zona de los buzos.
–Deberíamos comprarnos un celular–
Habló Hortencia primero una vez tomando la carretera.
–¿Para qué?–
–Que tal si necesitamos llamar a Segis por alguna cosa–
La rubia, que ésta vez iba de copiloto, le dió la razón.
–Cierto–
Después de estar todo el día de ayer con Segismunda, habían aprendido que absolutamente todos los autos tenían un GPS incluído, así que Genobeba se encargó de desmarcar la zona de buzos para marcar la tienda de teléfonos que quedaba de paso.
–Vayamos por uno entonces–
Fueron unos minutos cuando finalmente llegaron a la tienda de celulares, procefiendo así de comprar uno cada una.
–¡Tenemos celulares!–
Dijo con total ilusión Hortencia, que admiraba su celular de funda roja.
–¿Y cómo funcionan?–
–Pues con este botón prende–
Estuvieron unos minutos averiguando como funcionaban los celular, pues nunca habían tenido uno en su poder.
–¡Ya entendí! Mira, dame tu número–
Hortencia miró con una sonrisa a Genobeba.
–¿Dónde se ve eso?–
–En los ajustes–
Minutos después ya se tenían mutuamente, ahora era momento de ir a trabajar.
Entraron al auto marcando nuevamente la zona de buzos, hoy estaban dispuestas a trabajar duro para obtener lo más que puedan de dinero, pues querían comprarse cositas, y si era posible un auto, no podían robar uno a cada rato.
[•••]
Al llegar a la zona de buzos y colocarse el equipo, caminaban directamente a la zona de las lanchas para tomar una e iniciar su día de trabajo.
–Hombre, chicas–
Ambas voltearon, encontrándose con Trujilla.
–Hombre, Trujillaaaa–
Dijo Genobeba.
–Que tal–
Le siguió Hortencia.
–Todo bien por el momento–
–¡Chicas!–
Las tres dirigieron su vista al lugar donde daban los equipos, encontrando a Segismunda que corría hacia ellas.
–Ya llegué, que terminando lo que teníamos que hacer Rogelia insultó a una policía y nos fue persiguiendo hasta que los perdimos–
Explicó rápidamente acomodando sus lentes de buceo.
–Hola Trujilla–
Saludó al ver a la chica que habían conocido ayer.
–Hola–
–Bueno, a trabajar chicas, que el dinero no cae del cielo–
Genobeba comenzó a dirigirse a una lancha, siendo seguidas por las otras tres.
[•••]
–De puta madre–
Festejó Genobeba al recibir su paga.
–¿Ya cobramos todas?–
Preguntó Hortencia.
–Si–
Dijeron a la vez.
–Bien, deberíamos hacer algo juntas, ¿Qué les parece la idea?–
Propuso Hortencia, pues nunca había hecho algo entre amigas, siempre habían sido Beba y ella atrapadas en aquella mafia que controlaba la ciudad de El Pueblo.
–Tengo una idea de que podemos hacer–
Dijo con una sonrisa malvada en su rostro Segis, llamando la atención de las otras tres chicas.
[•••]
Hortencia y Genobeba corrían al lado de sus nuevas amigas escapando de la superintendente Jackeline Conway.
¿Qué había pasado?
Bueno, la gran idea de Segismunda fue el fingir ser atacadas en una casa que ellas mismas habían rentado para la ocasión, invitando a una chica que encontraron buena onda por ahí, inculpandola de disparar dentro de la casa.
¿Cómo consiguieron el arma?
Al parecer se las arreglaron entre Genobeba y Hortencia para comprarla al encontrar a una chica argentina dónde la misma zona de los buzos ofreciéndoles "carne de ballena".
Pero todo salió mal cuando la presión las comenzó a invadir al haberse metido realmente en un problema del cual la superintendente llegó a arreglar, la puta jefa de la ciudad estaba frente a ellas.
Después de sentir la presión de ser descubiertas escaparon con las mismas motos de policía con las que habían llegado al lugar, siendo seguidas por coches patrulla y obligadas a abandonar las motos una vez perdidas las patrullas, pero al escuchar las sirenas nuevamente relativamente cercanas comenzaron a correr en picado por la montaña a la que habían llegado, y alguna desgracia tenía que pasar al correr una bajada empinada como esa llena de piedras, ramas y arbustos.
-¡¡¡Mecagowendios!!!-
Se escuchó a Segismunda, siendo que la chica amante de las cabras se tropezó con una piedra comenzando a caer rodando por el resto de montaña que les faltaba.
Genobeba se comenzó a reír a todo pulmón junto a Trujilla, mientras Hortencia quería guardar la compostura, pues su amiga se había casi matado y tenían a la policía cerca.
||||||||||•°•||||||||||
Capítulo 7 listo!
A partir de aquí esto se pondrá algo más movidito! Los capítulos anteriores fueron como el calentamiento, la típica introducción antes de comenzar con lo bueno (。•̀ᴗ-)✧
Y aquí el intento de dibujo de éste capítulo!
Huyendo de la policía! (. ❛ - ❛.)
Así que como siempre, nos veremos el Jueves para el siguiente capítulo!
Tal vez...(. ❛ - ❛.) La escuela me mandó a sacar una e.firma para el título y al ser menor de edad es todo un desmadre el que debo de hacer para sacarla, ando estresada, pero en fin u,u
Nos vemos (◍•ᴗ•◍)
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro