—Ready or not, Shiva, here we go!

El dios cargo de frente a toda velocidad, mientras que el humano alzaba su puño derecho en alto, el cual estaba ahora encendido en llamas.

"PARADO AQUÍ, ME DOY CUENTA..."

Armstrong golpeó el suelo, y una enorme grieta ardiente rompió la roca fundiendo el terreno en dirección a Shiva.

El destructor esquivó el ataque saltando hacia un lado, pero el humano no había terminado aún, y lanzó otro golpe igual.

La ráfaga ígnea golpeó al deva, derribándolo y haciéndolo rodar por el suelo, pero sin ningún daño mayor.

Shiva se recompuso rápidamente y cargo de nueva cuenta, alcanzando al senador y dejando ir sobre él una ráfaga de puñetazos con sus dos brazos buenos. Cada golpe hacia temblar el suelo y enviaba ardientes ráfagas de vientos huracanados hacia las gradas.

Armstrong alzó su brazo una vez más y comenzó a acumular energía, la cual graba alrededor de su extremidad como un torbellino ígneo.

Shiva retrocedió varios metros, esquivando así el puñetazo de Armstrong, que golpeó finalmente el suelo, llenando todo el campo de batalla con brillantes grietas ardientes.

Entonces, sin previo aviso, esas grietas explotaron en gigantescos pilares de fuego. Y de entre las llamas, Armstrong surgió, cargando a toda velocidad contra su enemigo.

—You freak!

El humano lanzó una demoledora patada lateral que el dios bloqueó con sus brazos.

Shiva lanzó una nueva ráfaga de puñetazos, antes de retroceder de un salto al notar como alrededor del senador se había formado una cúpula de energía que se concentraba rápidamente en su puño.

"TÚ ERAS COMO YO, TRATANDO DE HACER HISTORIA"

Armstrong golpeó el suelo una vez más, y desde aquel punto, una serie de gigantescos pilares de fuego comenzaron a surgir del suelo, convirtiéndose en paredes ígneas que dividieron el campo de batalla en secciones más pequeñas.

Entonces, a una velocidad impensable para un hombre tan grande, Armstrong cruzó el campo de batalla de extremo a extremo, llegando hasta donde Shiva y golpeándolo de llenó con una patada lateral.

El destructor fue arrastrado algunos metros hacia atrás tras el golpe. Aún así, volvió la cabeza y sonrió mientras las llamas seguían rugiendo a su alrededor.

—Eso... De verdad... ¿es Shiva?—preguntó Agni conmocionado.

—No... es algo completamente distinto—aseguró Vishnu, cruzándose de brazos—. Un nivel distinto de poder.

—Sin dudas esto demuestra que ese movimiento... Tandava Karma... es jodidamente fantástico—aseguró Indra mientras fumaba un cigarrillo.

Shiva arqueó la espalda hasta casi tocar el suelo, se apoyó en este únicamente con su brazo superior derecho y giró sobre sí mismo a toda velocidad, lanzando una brutal patada lateral encendida en llamas.

Armstrong recibió el golpe de llenó en el abdomen, tambaleándose ligeramente tras el impacto.

Rugiendo con furia, el humano juntó los brazos frente a su cuerpo y comenzó a acumular energía otra vez.

"PERO QUIÉN PARA JUZGAR EL BIEN DEL MAL"

Una explosión sacudió el campo de batalla, mandando a Shiva varios metros hacia atrás, con sus pies dejando marcas en el destrozado suelo.

Geir se inclinó para mirar el combate desde más cerca.

—E-el cuerpo de Armstrong está comenzando a quedar marcado...—murmuró, preocupada—. Sin importar cuanta energía puedan manejar esas nanomaquinas, Shiva está dejando algunas huellas... si la cosa sigue así...

Brunhild asintió, compartiendo la inquietud de su hermana.

—Sí... Shiva se las arregló para comenzar a hacer daño a su oponente—dijo—. Pero, por lo menos, Armstrong viene menos dañado y más descansado que Shiva. Si la batalla sigue como lo hace, las posibilidades están de nuestro lado...

Desde su palco VIP, Ares suspiró con resignación y se dejó caer entre los escombros.

—Si el humano sigue atacando así, tendremos una derrota asegurada, ¿cierto?

Hermes bajó la cabeza.

—Lo veo posible—admitió—. Ese movimiento es la técnica secreta de Shiva. Parece que él estimula la fuerza de su propia alma casando que combustione. En ese estado... ¿No crees que eventualmente se consumirá?

Hades se rió sin gracia.

—Vuelvan a mirar—dijo—. Quizá Shiva esté peleando una guerra contra el tiempo. Pero gracias a su Tandava Karma, ahora está a un nivel de fuerza, resistencia y velocidad capaces de plantarle cara a ese tal Armstrong. Y aunque el humano es más poderoso, su habilidad, técnica y experiencia en combate no son nada al lado de las del destructor del Svarga. Todo se definirá por una sola pregunta: ¿Será la habilidad de Shiva capaz de superar la fuerza del senador?

Zeus se rascó la barba y no dijo nada, con la vista fija en el campo de batalla.

El destructor de mundos volvió a alzar su guardia y cargó contra su rival, dejándole caer encima una nueva sucesión de golpes y patadas.

"CUANDO NUESTRA GUARDIA ESTÁ ABAJO, CREO QUE LOS DOS ESTAMOS DE ACUERDO"

Armstrong flexionó las piernas, extendió los brazos y se abalanzó contra su enemigo, tratando de atraparlo en un abrazo mortal.

Shiva esquivo el ataque de un salto y golpeó al humano por la espalda con una patada, seguida de varios golpes, haciendo que el senador perdiera el equilibrio y diera varios traspiés mientras se bamboleaba torpemente.

—Okay. Now I'm mad.

Armstrong se abalanzó contra Shiva una vez más, sujetándolo por fuerza por los hombros antes de mandarlo a volar con un rodillazo. Acto seguido, mientras el dios volvía a caer, el humano lo atrapó por el cuello, para terminar dandole un fuerte cabezazo que dejó al deva en el suelo.

Armstrong se mostró imponente frente al dios, quien respondió poniéndose de pie de un salto y volviendo a alzar su guardia.

El humano lanzó un gancho ascendente con su brazo derecho, el cual Shiva bloqueó con un golpe propio, aunque no sin ser obligado a retroceder ligeramente.

El senador trató de volver a atacar con una patada lateral, siendo esquivado por Shiva, quien tras evadirlo desató una nueva tormenta de puñetazos sobre él.

Enfurecido, Armstrong volvió a cargar energía sobre su puño izquierdo, y mientras Shiva retrocedía de un salto, cargó contra él a toda velocidad.

El dios bloqueó el puñetazo con sus brazos, y ambos enemigos comenzaron a forcejear entre un mar de llamas.

—That's the best you got?—preguntó el humano, antes de mandar a Shiva hacia atrás al presionar con más fuerza.

Aprovechando la sorpresa del dios, Armstrong se abalanzó contra él con un potente derechazo, el cual Shiva detuvo con un derechazo propio. Y mientras ambos brazos se debatían por sobre la cabeza del destructor, el deva comenzó a golpear furiosamente el costado del abdomen del senador con su puño izquierdo.

"LA VIOLENCIA ENGENDRA VIOLENCIA"

Armstrong retrocedió levemente, momento que Shiva aprovechó para asestarle una bofetada a puño cerrado con su brazo derecho.

Armstrong gruñó y cargó su puño derecho de energía, antes de lanzar un gancho encendido en llamas.

Shiva se lanzó contra él al mismo tiempo, esquivando el puñetazo, el cual pasó a centímetros de su rostro, e impactando su propio golpe directamente en la mandíbula del senador, quien fue mandado a volar un par de metros hacia atrás, aterrizando con dureza en el suelo.

Armstrong se carcajeó y golpeó el suelo mientras se reincorporaba:

—That one hurt!

Armstrong se irguió en toda su altura antes de volver a cargar su puño de energía y golpear el suelo con un ataque descendente, haciendo temblar todo a su alrededor.

Shiva trató de acercarse para atacar, pero fue obligado a mantear las distancias cuando su enemigo trazó un arco ígneo con el puño.

Habiéndolo evitado, Shiva trató de atacar otra vez. Sin embargo, Armstrong se le adelantó esta vez, golpeando el suelo con su puño y levantando ráfagas ígneas que impactaron al dios y lo mandaron a volar antes de derribarlo sobre el suelo.

"PERO AL FINAL, TIENE QUE SER DE ESTA MANERA"

El destructor se levantó de un salto, más motivado que nunca, justo a tiempo para esquivar una carga del senador, quien se había lanzado con una patada lateral sobre él.

Armstrong, entonces, se retiró dando un monumental salto, alzándose sobre el campo de batalla en uno de los grandes pedazos destruidos de lo que alguna vez fue el Metal Gear EXELSUS.

El humano levantó por sobre su cabeza una enorme cantidad de deshechos metálicos de magnitudes titánicas y los arrojó contra su enemigo.

Shiva se mantuvo firme en su sitió, y sin usar nada más que sus golpes y patadas, redujo a pedazos todo aquello que el senador le arrojó.

Entonces, después de pulverizar el último gran trozo de metal, el destructor fue sorprendido por el senador, quien se había abalanzado sobre él desde las alturas, con el puño derecho en alto.

A una velocidad increíble, Shiva lo golpeó con una patada en el rostro, alterando su trayectoria.

El humano cayó sobre el dios, quien lo envolvió con sus brazos buenos, giró sobre sí mismo y luego arrojó con violencia al senador contra los escombros, los cuales le cayeron encima como una ardiente avalancha.

"DESVIÉ MI PROPIO CAMINO"

Los escombros volaron por los aires cuando, con un gritó de furia, Armstrong se reincorporó en medio de una gran explosión de energía.

—You know what? Fuck this war. I just want you dead!

El destructor se puso en guardia una vez más, listo para un nuevo asalto.

Armstrong flexionó las piernas y extendió los brazos nuevamente, listó para cargar.

Shiva esquivó su embate con un quiebro hacia la derecha, pero antes de poder tan siquiera atacar, fue mandado a volar por una nueva explosión de energía proveniente del senador.

El dios respiró trabajosamente, sus brazos heridos finalmente se consumieron y se cayeron al suelo medio hechos cenizas.

—El cuerpo de Shiva... se desintegra...—murmuró Agni.

—Maldición... ya casi llega a su límite...—gruñó Brahma.

—Lo mismo podría decirse de ese humano—bufó Vishnu—. Véanlo, está muy golpeado.

—En otras palabras...—añadió Indra, sacándose el cigarrillo de la boca—. Esta batalla será decidida por el que se quiebre primero...

Una lluvia de puñetazos lanzados al aire llamó su atención.

—¡Shiva! ¡Shiva! ¡Shiva! ¡Shiva! ¡Shiva!—gritaba Rudra a todo pulmón con cada poderoso puñetazo que soltaba—. Sin importar que... ¡¡Más te vale que no pierdas!!

Su voz hizo eco por todo el estadio, y sus puñetazos creaban poderosos choques y ráfagas de viento que llegaron el ardiente cuerpo de Shiva como un soplo de aire fresco.

—¡¿Quién es ese?!—preguntó un dios en las gradas.

—¡¡Whoa!! ¡¿Rudra, la tormenta?!

En la arena, Shiva sonrió.

—Heh...

"Rudra..."—pensó—. "Demandando cosas alocadas como siempre..."

El dios se lanzó con una enorme y amplia sonrisa de lado a lado, con las llamas de su cuerpo iluminando el cielo entero y el fuego ardiendo intensamente.

"¡¡Supongo que no tengo elección!!"

El dios se lanzó de frente a una velocidad imposible, embistiendo al senador con un puñetazo ardiente, y luego otro, y otro más.

"Y TÚ SEGUISTE TÚ IRA"

Armstrong cargó su puño izquierdo con energía.

Shiva retrocedió y alzó sus brazos para protegerse, pero su guardia fue obliterada por el puñetazo de Armstrong, quien lo mandó al suelo e golpe.

El senador dio un gran saltó, tratando de aplastar a su rival.

El dios reaccionó a tiempo, balanceando su cuerpo y golpeando con una doble patada el costado del abdomen del humano.

Armstrong voló por el suelo antes de caer con dureza y rodar entre el fuego.

El humano volvió a ponerse de pie, en pose de luchador de sumo, y rugió a los cuarto vientos.

Una poderosa luz verde esmeralda envolvió el cuerpo del humano, con una corriente de energía que venía desde los escombros del EXELSUS impactando directamente en la espalda del senador.

Las heridas y los golpes que Armstrong había sufrido comenzaron a curarse y regenerarse, al mismo tiempo que recargaba toda la energía perdida.

—Yo no lo creó...

El dios se apresuró a colocarse a espaldas del senador y trató de lanzar un puñetazo. Sin embargo, sin previo aviso, Armstrong se giró sobre sí mismo y atrapó el brazo del dios, tomando impulso así para mandarlo al suelo de un puñetazo.

"PERO QUIZÁ SEAMOS AMBOS EL MISMO"

Shiva se recompuso, giró alrededor del humano y le conectó una patada en el punto exacto por el que aquella energía ingresaba a su cuerpo, interrumpiendo el proceso de regeneración y causándole un terrible daño.

Armstrong se tambaleó desequilibrado, momento que Shiva aprovechó para atacar con aún más violencia.

Inclusive, el dios conecto una patada en el rostro del senador que lo mandó a volar de espaldas y estrellarse contra el suelo. Y sin importar nada, Shiva seguía atacando.

Armstrong se puso de pie de un salto y golpeó a Shiva con una patada, haciéndolo encorvarse de dolor.

—How d'ya like that?

Shiva rodó por el suelo, se puso de pie una vez más y alzó su guardia a tiempo para bloquear un nuevo puñetazo encendido de su rival.

—I'm gonna knock you out!

El senador se lanzó de frente una vez más, siendo derribado por una patada en el rostro, cortesía del destructor de mundos.

El humano se reincorporó una vez más mirando a su oponente.

—Me agradas, Shiva. Así que voy a darte otra oportunidad.

—El tiempo de negociar ya pasó, senador.

Armstrong gruño:

—I'm gonna crush you!

Armstrong golpeó el suelo, levantando una nueva serie de paredes de fuego. Acto seguido cargó de frente, lanzando un puñetazo.

"EL MUNDO HA GIRADO, Y TANTOS HAN ARDIDO"

Shiva detuvo el golpe con los brazos, siendo arrastrando unos cuantos metros hacia atrás.

—You're going down!

El senador golpeó el suelo dos veces, lanzando dos ráfagas de fuego contra el dios, las cuales fueron evadidas con un par de precisos saltos.

Uno, dos, tres, cuatro golpes. Armstrong lanzaba un ataque tras otro, pero todos eran certeramente detenidos por el dios de la destrucción.

"PERO NO HAY NADIE A QUIEN CULPAR"

Shiva comenzó a girar alrededor de su oponente, golpeándolo desde todos los ángulos y retirándose cuando Armstrong lanzaba alguna explosión de energía, comenzando a abrumar una vez más a las nanomáquinas del humano.

El dios lanzó una serie de poderosas patadas sobre la cabeza del senador, quien comenzaba a notarse cansado y aturdido.

—That ain't gonna work.

Luchando por su nación, cargando con los ideales de la supervivencia del más fuerte y la lucha por lo que verdaderamente se cree. El Senador.

Luchando por los camaradas por los que una vez luchó, cargando con el orgullo de todos los 1116 dioses de la India en su espalda. El Destructor.

Con ambos hombres cargando con tantos ideales, y sus almas encendidas, fueron capaces de tener la mejor lucha de sus vidas.

"ESTÁ RASGANDO A TRAVES DE ESTA TIERRA MUERTA Y SIN VIDA"

La humanidad entera, los dioses, los devas de la India, la familia de Shiva, aquellos que fueron derrotados por el destructor, Brahma, Vishnu, Agni, Varna, Rudra, Ares, Zeus, Hermes, Brunhild, Geir, todos gritaban a todo pulmón, apretaban los puños y se inclinaban sobre sus asientos ante la intensidad de los golpes.

Zeus bailaba animadamente, Ares se puso de pie y apretó los puños, Hermes sacó su violín y empezó a tocar una frenética y poderosa canción a todo volumen, extasiado y casi en trance.

Un golpe, otro más, una patada, otra más. Decenas, centenas, millares, golpe tras golpe, patada tras patada, la batalla se acercaba más y más a su final. Shiva rugía mientras atacaba sin parar y recibía de lleno cada golpe del humano.

"SIENTO QUE NUEVA VIDA PODRÍA NACER ENTRE LA ARENA MANCHADA DE SANGRE"

Armstrong se rodeó de energía y se lanzó de frente una vez más. Shiva esquivó el embate, sujetó al humano con fuerza, giró sobre sí mismo y arrojó al senador de cara contra el suelo.

El humano se puso de pie una vez más.

—This is the greatest fight of my life!

SIN EMBARGO...

EL MOMENTO FINALMENTE LLEGÓ

Armstrong miró al cielo, extendiendo los brazos mientras rugía a todo pulmón.

"LA TIERRA MANCHADA DE SANGRE"

El suelo tembló y se resquebrajó. Enormes ráfagas de poder giraron a su alrededor, concentrándose en su puño, el cual brillaba con una poderosa e intensa llama.

Zeus, sentado en los escombros de su palco, miró con más atención el campo de batalla. Sus ojos destellaron con un nuevo interés.

—Aquí viene...

Shiva sonrió de oreja a oreja, se puso en guardia y bailó emocionado en su sitio, sin quitarle los ojos de encima a su oponente.

—¡Ven por mí!

Ares se inclinó para mirar desde más cerca.

—¡¿V-va a recibirlo de lleno...?!—exclamó—. Eso es absurdo... ¡¿De verdad es necesario recibirlo de esa manera?!

Hermes sonrió, sin dejar de tocar su violín.

—Claro que no... pero bueno, supongo que Shiva podría...

El destructor alzó sus extremidades quemadas y preparó su brazo, con la música y ritmo del mismo universo reproduciéndose desde lo más profundo de su alma. Armstrong alzó su puño derecho, y su cuerpo se iluminó, al rojo vivo, por última vez.

Armstrong lanzó un gancho derecho, lanzándose disparado a toda velocidad.

Shiva no tuvo tiempo de reaccionar, fue golpeado en el rostro y estrellado contra el suelo.

El dios trató de reincorporarse, pero el humano cerró su puño izquierdo alrededor del cuello de su enemigo, dándose así la vuelta y levantándolo en alto.

Shiva se retorció, giró sobre sí mismo y alrededor del brazo de Armstrong, conectando así una patada en el rostro del senador.

El humano retrocedió varios pasos, mientras que Shiva caía al suelo de golpe.

El destructor trató de reincorporarse débilmente, mientras que el senador cargaba un nuevo puñetazo ardiente.

Armstrong lanzó un gacho derecho. Shiva respondió con una patada ascendente lateral.

El humano retrocedió, tomó impulso y cargó un siguiente ataque, ahora con el brazo izquierdo.

Shiva volvió a lanzar una patada, repeliendo al humano de nueva cuenta.

Los brazos de Armstrong, así como todo su cuerpo, relucían por los golpes y rasguños que había recibido.

El humano levantó la mirada, sus ojos rojos relucieron con odió mientas miraba a su rival.

Con un rugido, el senador extendió ambos brazos y se lanzó de frente en un último y desesperado ataque.

Shiva giró sobre sí mismo y lanzó una última patada con todas sus fuerzas:

¡¡¡DEVALOKA: DANZA DE LLAMAS IMPORTANTE!!!

El pie del dios atravesó el estomago de Armstrong de extremo a extremo, bañando el suelo con los chorros de sangre del humano.

Armstrong retrocedió, bajando los brazos con cansancio.

Shiva lo observó fijamente, bajando su guardia.

Pero el senador, lejos de simplemente morir, rugió al cielo y cargó una vez más contra su rival.

Ambos enemigos forcejearon frente a frente, empujando con sus brazos contra el otro, en un último intento de sobreponerse a su enemigo.

Shiva retrocedió levemente, para de inmediato lanzarse con un cabezazo que le quitó al senador de encima.

Armstrong estaba allí parado, aturdido y sin fuerzas.

Shiva levantó la pierna derecha y golpeó el pecho de Armstrong, justo a la altura del corazón.

Finamente, el dios se lanzó de frente con su brazo derecho extendido, atravesando de lado a lado el cuerpo del humano, bañándose con su sangre.

Armstrong se encorvó, rendido.

—Bien hecho, Shiva...—murmuró.

Shiva presionó con más fuerza su brazo, arrancándole un quejido de dolor al humano.

—Tu sueño mure contigo.

El dios retrocedió, pero fue detenido por Armstrong, quien lo tomó por el hombro con su brazo izquierdo, jalándolo hacia él para así poder hablarle al oído.

—Tal vez no...—musitó el senador—. Has garantizado que el status quo continue en mi mundo. For un poco más, al menos... la guerra continuará como una institución... como industria... los hombres lucharán por razones que ellos no entienden... Causas por las que no creen...

Armstrong se encorvó y tosió sangre, apenas sosteniéndose del cuerpo de Shiva para no caer al suelo.

—Pero... quizá... haya dejado un buen sucesor contigo...—gruñó el humano—. Tú creaste tu propio camino, usando cualquier método que fuera necesario... No dejas que algo de mierda legal se interponga en tu camino, ¿no es así? Y si cuesta algunas vidas... que así sea...

Shiva le dió un par de palmaditas en el hombro.

—Te agradesco, Steven Armstrong, por darme la mejor pelea de mi vida—dijo el dios—. Pero nada más por eso.

Con un tirón, el destructor de mundos le arrancó su corazón cibernético, aun latiendo débilmente.

Y con un apretón de su puño, lo hizo pedazos.

Armstrong quedó tumbado en el suelo, riendo con dolor.

—Muy adentro... somos espíritus similares... tú... y yo...

Shiva observó el cuerpo de su enemigo en el suelo, con las llamas rugiendo a su espalda salvajemente.

El senador Steven Armstrong se deshizo en polvo, en medio de un resplandor verde esmeralda, llevándose consigo a la tercera hermana valquiria, Þrúðr.

Saliendo de su conmoción, Heimdall volvió a hablar:

—E... EL GANADOR DEL ROUND CINCO DEL RAGNAROK... ¡¡ES SHIVA!!

El destructor de mundos le dio la espalda al lugar en donde estaba su oponente y alzó su brazo derecho al cielo en pose de victoria.

Shiva vs Steven Armstrong

Duración: 26 minutos, 16 segundos

Golpe decisivo: Devaloka

Ganador: Shiva