Inside the Fire
El cielo por sobre el Valhalla se había oscurecido, trayendo con esa oscuridad una espiral luminosa que rompía las sombras, como si de un gigantesco vórtice se tratase.
Los tres luchadores miraban en silencio a la criatura recién llegada, volviendo sus armas hacia ellas.
Las piernas de Göll comenzaron a temblar sin poder controlarse.
—¿Qu... ¿Qu... ¿Qué demonios es esa cosa?
Brunhild puso los ojos en blanco y calló al suelo de rodillas, sujetándose con fuerza la cabeza y sudando con nerviosismo.
—Yo... ¡¡No sé lo que es!!
Aquellas palabras asustaron a Göll más que cualquier posible explicación que le pudiesen haber dado.
—¡¿Qué?! ¡¿N-no lo sabes, hermana?!
El monstruo miró fijamente a Buda, quien le apuntaba nerviosamente con su espada.
—¡¿Qué le pasó a Zero?!—exigió saber el iluminado.
La criatura guardó silencio por un momento.
—Él ya no está—anunció finalmente, alzando los brazos—. Él desapareció por completo de este mundo. Mi nombre... es Hajun.
Buda frunció el ceño, se puso en guardia y alzó su arma.
—Entiendo, entonces... ¡Dime que quieres! Quiero decir, ¿qué demonios eres tú?
Hajun apretó los puños.
—Eso ni siquiera yo lo sé. Sin embargo, creo que lo que quiero ahora, es poder probar estos poderes...
Mirando todo desde su palco, Loki abrió mucho los ojos.
—Eso me tomó por sorpresa—reconoció—. Oye anciano, ¿qué es lo qué pasa con esa cosa?
Odín no respondió, se limitó a guardar un profundo silencio.
En el palco de los dioses griegos, la situación era similar.
—¡¡Hermes!!—gritó Ares—. ¡¿Esa cosa es realmente un dios?!
El mensajero se rascó la barbilla, mirando sumamente confundido el campo de batalla.
—No tengo la menor idea de lo que es.
Eso tomó verdaderamente por sorpresa al dios de la guerra.
—¡¿Qué?! ¡¿N-ni siquiera tú lo sabes?!
Finalmente, Adamantino habló.
—Eso no es un dios—anunció.
Todas las miradas se volvieron hacia él.
—Eso es el Berserker Legendario del que se habla en el Helheim desde hace tiempos remotos.
Ares casi salta de su asiento.
"¡¿H-H-H-H-H-Helheim?!"
Todas las mitologías comparten la visión de que el mundo se divide en tres partes: el mundo habitado por los dioses y almas, el Valhalla; el lugar que habitan los humanos y animales, Midgard; y... hay uno más...
Conocido como "Infierno", "El Reino de los Demonios", "Ne-no-kuni", la tierra del origen, entre muchos otros.
Es el mundo donde los seres sobrenaturales deambulan...
EL INFRAMUNDO
HELHEIM
La misma tierra sobre la que Hades era rey.
En el campo de batalla, T'Challa apuntó su lanza contra el monstruo.
—¿Pero qué...? ¿Qué es...?
Hades sujetó a Desmos con fuerza.
—En el Helheim existe una leyenda que dice lo siguiente—explicó—: "Al mezclarse la luz blanca y la sombra negra, los cuernos del infierno despertarán, y nacerá una oscuridad eterna"
TAMBIÉN LLAMADO...
—Rey Demonio del Sexto Cielo, Hajun.
Desde su palco, Ares miró impresionado a la criatura.
—R-Rey Demonio del Sexto Cielo, Hajun...
Hermes miró receloso a su tío mecánicamente mejorado.
—En otras palabras, señor Adamantino, ¿tienen usted y el señor Hades algo que ver con todo esto?
El dios de la conquista se apresuró a negarlo con la cabeza, en silencio.
Mientras tanto, en la arena, T'Challa se volvió hacia su rival.
—¿Tú sabías que esto iba a ocurrir?
El dios negó severamente con la cabeza.
—Incluso siendo el gobernante del Helheim, he de admitir que jamás lo había visto antes.
Ares abrió mucho los ojos, escuchándolo todo desde la distancia.
—¿Ni siquiera el señor Hades lo había visto...?
Hermes se cruzó de brazos tras la espalda.
—¿Qué llevó a un insignificante dios del Valhalla a convertirse en el legendario Hajun?
Adamantino frunció el ceño.
—Me hago a una idea...
En el campo de batalla, Buda sujetó su espada con fuerza, con los ojos fijos sobre el demonio.
—Perdóname—le dijo Hajun, mientras alzaba un brazo—. Aún no me acostumbro a esto...
Una enorme cuchilla emergió del brazo derecho del demonio.
—Podría ser capaz de acabar con esto en un instante.
Todo sucedió tan rápido que Buda apenas y fue capaz de reaccionar.
Hajun se abalanzó sobre él con su cuchilla en alto y se dispuso a partirlo en dos.
El iluminado alzó su espada y bloqueó el golpe a duras penas.
La fuerza del choque fue tal que el suelo se resquebrajó y los pies de Buda se hundieron entre la roca.
El demonio se inclinó para quedar cara a cara con su oponente mientras ambos seguían forcejeando.
—Lo bloqueaste...—murmuró—. Estoy sorprendido.
Buda retrocedió con un salto, sin dejar de apuntar con su arma.
—¡No suenas muy convincente con esa cara de imbécil que tienes!
Hajun se abalanzó sobre él nuevamente, dejando caer una brutal lluvia de ataques sobre el iluminado. Buda se paró firme en su sitio, desviando los ataques con su espada tan rápido como podía, comenzando una nueva danza mortal.
—Wow... su velocidad es una locura—se sorprendió Göll, obligándose a adoptar una sonrisa—. P-pero... Buda estará bien, ¿verdad? Porque es capaz de ver cualquier ataque con anticipación, ¿verdad?
Brunhild parecía absorta en los horrorosos pensamientos de un posible futuro no muy lejano.
—No...—contestó finalmente—. Si tuviera que decirlo, no es capaz de verlos.
Todo el optimismo de Göll se derritió de golpe.
—¿Huh?
—No hay nada más que mera oscuridad saliendo de Hajun—explicó Brunhild—. Una oscuridad inmune a la luz.
—¿Qué quieres decir con eso?
Brunhild se agarró la cabeza com fuerzas.
—Para explicarlo de una manera más técnica, la "Octava Conciencia" de Buda es capaz de ver las fluctuaciones del alma...
Cada vez que una persona decide sobre una línea de acción, su alma, o voluntad, se mueve antes que su cuerpo. Con ver el resplandor de su voluntad, con ver los movimientos de las almas de todo ser viviente, Buda es capaz de saber lo que sucederá después.
En otras palabras, sin siquiera un mero rayo de luz que venga de él, el alma de Hajun se vuelve invisible.
Göll miró con preocupación al iluminado.
—No puede ser... entonces, eso significa que... ¿no puede usar su Visión Futura?
La danza mortal de Buda y Hajun continuaba sin interrupciones, y las cosas no se veían bien para el ex-humano.
El demonio consiguió asestar un tajo en el brazo izquierdo de Buda, salpicando un gran chorro de sangre.
—¡¡H-HAJUN, QUE HABÍA SIDO ZEROFUKU, LANZA UNA FEROZ RÁFAGA DE GOLPES!!
El demonio alzó su brazo en alto, con su cuchilla curvándose mientras lo hacia.
La criatura desató un poderoso tajo descendente, el cual Buda detuvo interponiendo su espada por sobre su cabeza en el último segundo.
Luego, el iluminado pateó el pecho del berserker de los infiernos, impulsándose así para salir del rango de su enemigo.
Buda se volvió a acomodar los lentes y apuntó al demonio, sudando por el esfuerzo.
—Eres un monstruo...
Hajun miró su mano izquierda, sin prestarle demasiada atención al ex-humano.
—Increíble...—la criatura se volvió hacia Buda, adoptando una pose de batalla—. Bueno, supongo que tendré que pelear usando mi máxima potencia.
El brazo derecho del demonio comenzó a retorcerse sobre sí mismo una y otra y otra vez.
Hajun miró directo a los ojos de su oponente, con sus orbes reluciendo con maldad.
—Castigo Divino.
El demonio se abalanzó sobre su oponente, al tiempo que su brazo comenzaba a girar a toda velocidad, ahora en sentido contrario, convirtiéndose en un demoníaco taladro que perforaba el cielo.
¡¡¡MAKAI TENSHO: CICLÓN PANDEMONIO!!!
Buda vio venir el ataque cuando ya estaba a menos de un metro de su craneo.
Su espada relució con luz dorada mientras él gritaba a la desesperada:
—¡¡Gira, Seis Reinos!!
ROKUDŌ: BÁCULO DE LOS SEIS REINOS
CUARTO REINO: MUNDO ASHURA, PODER AVALOKITESVARA DE ONCE CARAS
¡¡¡AHISMA: ESCUDO DE LAS SIETE DIFICULTADES!!!
—Él... ¡¡Ha sacado el escudo a tiempo!!—se emocionó Göll.
El choque de poderes sacudió el universo, mientras terribles ráfagas de poder eran despedidas en todas direcciones, azotando a los espectadores de la arena.
Quienes, a pesar del caos, fueron capaces de apreciar la terrible realidad que yacía frente a sus ojos.
Gotas de sangre salpicaron el suelo, y al despejarse el polvo, todos fueron testigos de como Hajun se alzaba imponente sobre su oponente.
—Oh No, Oh No...—murmuró la criatura, mientras retraía su cuchilla cubierta de sangre—. Oh No, Oh No, Oh No, Oh No, Oh No, Oh No, Oh No, Oh Noooooo...
El escudo dorado de Buda había sido perforado limpiamente de extremo a extremo, dejando un perfecto y redondo agujero en él, justo a la altura de la cabeza de su portador.
El iluminado gruñó de dolor, mientas retrocedía sangrando. Su ojo izquierdo había sido completamente destruido.
Una enorme y retorcida sonrisa se apoderó del rostro del demonio, mientras este comenzaba a desternillarse de risa.
—¡Owww, que mal!—se burló.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro