Esa noche los miembros de Akatsuki tuvieron que dormir en la sala, ya que Ren se rehusó a la idea de que compartieran cuartos con sus niños.

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A la mañana siguiente Itachi fue el primero en levantarse, se cambió de ropa para colocarse la capa blanca junto con su máscara en forma de lobo.

Pasó por los pasillos donde Ren en su forma de lobo lo esperaba ansioso.

-¿Estás listo?- preguntó el mayor emocionado.

-Claro- sonrió el Uchiha para ir directo a la salida, pero una presencia los detuvo.

-¿A dónde van?- preguntó el hombre con apariencia de tiburón.

"Que rápido nos percibió" pensó la comadreja colocándose al lado del lobo.

-Mi cachorro y yo vamos a ir a recolectar leña- contestó Ren no muy contento.

Poco a poco el espadachín se fue incorporando hasta levantarse del mueble.

-Los acompañó, me gustaría explorar un poco estás montañas- sonrió Kisame para acercarse al dúo.

Ren de un salto se colocó enfrente de Itachi, enseñando sus dientes a modo de amenaza.

A pesar de que el padre del año se veía bastante intimidante, el ex ninja de la niebla no retrocedió, sólo estiró su mano hasta el lobo esperando a que éste lo examinara.

Ren olfateó con cuidado al tipo de piel azul, y cuando Kisame lo consideró apropiado dejó caer su mano sobre la cabeza del mayor.

El Uchiha no salía de la impresión.

Luego de unas caricias, Ren se apartó para regresar con su niño.

-Me agrada- soltó el guardián de las montañas antes de salir de la cueva.

-Eso fue impresionante- admitió Itachi, haciendo que Kisame soltara una fuerte risa.

-Mi chakra le da cierta tranquilidad a los animales tercos y complicados, así fue como pude domar a Samehada- explicó el más alto.

Itachi sonrió para luego dejar su hogar y seguir a Ren.

Los primeros minutos del camino ninguno dijo nada, los chicos solo veían como Ren exploraba, tratando de ver cuál pino podrían derribar.

-¿Por qué llevas eso puesto?- preguntó Kisame señalando el pelaje.

-Este es el atuendo que los antepasados de Ren solían vestir para salir una batalla, nos pide usarlos para que las personas identifiquen que somos sus aliados y también su familia- contestó el portador del sharingan.

-Debe ser difícil para ti-

-¿De qué hablas?-

-Estar en este sitio, sin poder visitar a tu gente- aclaró Kisame

-¿Y quien dijo que no he ido a Konoha?-

Esa oración dejó en shock al bijuu sin cola.

-¿Qué?- el mayor no podía creerlo.

-Bueno, supuse que Yahiko no le diría a las cinco naciones sobre nuestra deserción, ya que eso provocaría un gran escándalo, así que hace unas semanas baje de las montañas para ver a mi familia y me quede con ellos unos días, claro que tampoco les comente nada del asunto-

Kisame se llevó una de sus manos a la cara, ahora comprendía la tranquilidad de aquel chico.

-Jejejejeje me sorprende que ese loco sobreprotector te dejara ir- dijo el espadachín señalando al guardián.

-No estamos atados Kisame, podemos irnos cuando queramos, además, Ren y yo no somos tan cercanos-

-¿En serio?, pero si se ve que mataría por ti-

-Sabe que tengo un padre, y eso lo respeta, no puedo quererlo como él me quiere, pero igual no me gusta apartarlo, es agradable estar a su lado-

Kisame al escuchar tomó de los hombros al Uchiha para luego juntar sus frentes. Y claro que esa acción puso muy nervioso al más bajo.

-Es tan típico de ti, Itachi-san-

-¿Eh?-

-Siempre estás cuidando los sentimientos de todos, dejaste la base por ayudar a tus amigos, sales con este frío para darle un poco de alegría a ese lobito y me diriges la palabra como si el pasado no importara- explicó el espadachín.

-¿Y-Y eso es malo?-

-Para nada, ese gran corazón es una de las cosas que siempre me han gustado de ti- sonrió Kisame sorprendiendo al poseedor del sharingan.

Itachi quiso hablar pero los gruñidos de cierto animal hicieron que la pareja se separara para ver que a unos cuantos metros Ren los observaba claramente disgustado.

-Si ya terminaste de coquetear con mi hijo te pido que vengas aca y me ayudes con este tronco-

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En la pequeña cocina de esa cálida cueva, Kakuzu y Hidan tomaban café.

-Tengo que preguntar, ¿por qué ese imbécil los trata como si fueran sus hijos?-

-Los primeros días solos nos decía "cachorros" o "niños", pero nos tomó tanta confianza que decidió adoptarnos como sus hijos- dijo el creyente antes de darle un sorbo a su bebida.

-¿Y eso no les pareció raro?-

-Un poco, pero al pasar el tiempo nos acostumbramos a eso jajajaja- confesó el jashinista.

Kakuzu sonrió por esa reacción, nunca imaginó que extrañaría tanto la voz y la risa de su compañero.

-Te agrada mucho, ¿no es así?, de otra forma ya lo hubieras asesinado, Deidara y tú no son personas de mucha paciencia- señaló el moreno recordando como Tobi tardó en ganarse el cariño de los chicos escandalosos.

Hidan dejó su bebida a un lado para responder.

-Si, admito que a veces me dan ganas de usarlo como sacrificio, pero, ese amor tan sofocante y pegajoso que nos da día tras día, no lo sé, creo que me gusta- dijo Hidan con una sincera sonrisa.

El avaro frunció el ceño al ver la expresión de felicidad en el rostro de Hidan, definitivamente el tipo de afilados colmillos sería un gran problema.

-Maldito perro manipulador y llorón- susurro Kakuzu llamando la atención del jashinista.

-¿Eh?, no te escuche bien, ¿que dijiste anciano?-

-No es nada- soltó el mayor de mala gana.

"¿Por qué está tan molesto?" pensó Hidan tomando de una de las repisas varias piezas de pan.

-¿Acaso creciste?- comentó el avaro comparando las alturas.

-Ohhh, te diste cuenta, si, en estos meses crecí 3 centímetros- dijo el religioso con aires de grandeza.

-Eso me recuerda, pronto será tu cumpleaños, me alegra haberte encontrado antes de eso, desde que nos conocimos siempre lo hemos celebrado juntos-

Aquello hizo que Hidan se sonrojara.

-S-Si, es verdad-

Kakuzu sonrió para luego acariciar la mejilla del chico de los rituales.

-¿Te confieso algo?, jamás me ha molestado gastar dinero en ti, eres la única persona en el mundo por la que dejaría todo-

"¿Por qué me está diciendo esto?" Hidan no entendía lo que estaba pasando.

-No puedo creer que estás por cumplir 24 años, te prometo que haremos algo especial-

El menor estaba por hablar cuando notó que la cara del castaño se deformo, dando paso a un quejido.

Hidan inclinó un poco la cabeza para ver como su padre mordía con fuerza la pierna derecha del moreno.

-¡REN!, ¿¡PERO QUÉ CARAJOS ESTÁS HACIENDO!?-

-¡TE SALVÓ DE ESTE PERVERTIDO!-

-¡SUÉLTALO YA!-

Lo siguiente que pasó fue que Kakuzu endureció su brazo con la intención de moler a golpes a ese padre tan sobreprotector.

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En uno de los cuartos, cierto pelirrojo le enseñaba a su estudiante la nueva forma de su brazo.

-Es sorprendente, Sasori no Danna, hm- dijo el rubio, sin poder creer que su superior por fin había dado el primer paso para llevar a cabo su sueño de transformarse en arte.

-Gracias, solo ha sido esta parte de mi cuerpo pero te aseguro que encontraré la forma de completarlo- dijo el marionetista.

Deidara en el fondo se sentía triste por aquella decisión.

-Eres un gran artista Danna, incluso la textura de tu brazo se siente como piel, hm- señaló el chico de la arcilla.

Sin aviso el marionetista tomó la mano del chico, haciendo que esté se sobresaltara.

-Puedo sentirte, se que te estoy sujetando, lo único malo de esto, es que ya no siento tu calor- se sinceró el artista.

El rubio apretó el agarre entrelazando los dedos con Sasori.

-Si que es decepcionante- comentó el hombre de ojos claros para después jalar al menor y darle un fuerte abrazo.

-¿¡Danna!?-

-Por favor quédate así, quiero sentirte, necesito guardar esto en mi memoria-

Deidara sin saber cómo reaccionar, rodeó a su maestro, era la primera vez que el marionetista le daba esa clase de afecto.

Todo era mágico, hasta que de golpe la puerta se abrió.

-¡MI BEBÉ, NUNCA CREERÁS CÓMO ENCONTRÉ A TUS HERMANOS, ELLOS...- Ren se quedó en blanco al ver cómo el pelirrojo tenía a su pequeño cachorro.

Deidara se apartó para dirigirle la palabra a su padre.

-O-Oye, cálmate, esto no es lo que parece, hm-

Y como siempre el hombre lobo no escuchó nada.

-¡SUFICIENTE, QUIERO A ESOS MALDITOS BASTARDOS PERVERTIDOS FUERA DE MI HOGAR Y LEJOS DE MIS TIERNOS CACHORRITOS!-

Aquí les traigo el capítulo nwn espero les guste ✨❤✨❤✨❤✨❤✨❤✨❤

Y antes de que digan que me equivoque con las edades, pues no es así. En el capítulo "Tobi" los chicos ya tenían un año en la organización, luego pasaron otros tres años ✨⭐

Hidan va a cumplir 24, Itachi 23 y Deidara 21 ❤