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De nuevo el despertador sonaba recordándole que comenzaba un nuevo día, alargo el brazo y lo apago. Suspiro contra la almohada y consciente de que no tenía tiempo para vaguear se incorporo en la cama.

-Shawn –llamo a su marido.

-Umm –El se removió en la cama.

-Es la hora –Bostezo y salió de la cama, descalza entro al abaño y abrió el armario para sacar la toalla, después abrió la ducha, se quito el pijama y se metió bajo el agua templada. Como cada mañana se ducho con prisa, después se arreglo y se peino, dejo la ropa y la toalla en el cesto de la ropa sucia y volvió a sacar una toalla del armario para dejarla sobre el lavabo -Shawn ya tienes todo listo para ducharte –camino por la habitación hasta la mesa de noche de él, la abrió y cogió su ropa interior, la dejo sobre el sillón que había en la esquina, después abrió el armario y saco la camisa y el pantalón y chaqueta y lo dejo sobre el mismo –Vas a llegar tarde, voy a despertar a los niños.

-Vale –el se removió entre las sabanas –Prepárame un café.

Camila salió de su habitación, camino por el amplio pasillo hasta la puerta del fondo y abrió la puerta.

-¡Chicos arriba! –miro a sus dos hijos, que dormían en una litera –Alex, Matt, arriba, venga.

-Va mami –Alex, de seis años bufo molesto.

-Jo –Matt de cinco se tapo con la sabana

-Venga, los quiero abajo listos en quince minutos –Camila sonrió y cerró la puerta, después entro en la habitación de al lado –Buenos días cariño –se acerco a la cuna y cogió al pequeño Damián entre sus brazos -¿Cómo esta mi príncipe?.

-Mami –Damián, que tenía dos años abrazo a su madre bostezando.

-Es hora de ir al cole cariño –Camila dio un beso a su hijo y después se dedico a cambiarle y vestirle, le peino y bajo con él a la cocina –Aquí –le sentó en la sillita y después se dedicó a preparar el desayuno.

Se movió por la cocina con una agilidad increíble, encendió la cafetera, sirvió la leche en las tazas y las puso a calentar, entrego a Damián su zumo y puso el pan a tostarse.

-¡Ya estoy mama! –Alex entro corriendo a la cocina y se sentó a la mesa.

-¡Yo también! –Matt llego tras su hermano.

-Venga –Camila sirvió el cola cao en las tazas y se las entrego a sus hijos, después les puso las tostadas en un plato, se sirvió algo de café en una taza y otro en otra para su marido.

-¿Qué hora es? –Shawn entro a la cocina y cogió su taza.

-Las ocho y media –Camila bebió un poco de café y siguió preparando los bocadillo de los niños
-Mierda, voy a llegar tarde –Shawn suspiro molesto.

-¿Puedes acercar tu a Matt y Alex? Tengo una reunión importante –Camila termino de envolver los bocadillos.

-Acabo de decirte que llego tarde ¿Es que no me oyes? –Shawn dejo la taza sobre la mesa y camino hasta el otro lado de la cocina para coger las llaves del coche –No sé a qué hora regresare.

-Adiós –Camila suspiro mirando la puerta –Venga niños, tenemos que irnos –cogió a Damián en brazos y le dejo en el suelo, fue a el salón y tomo la mochila de cada uno, Como cada día llevo a Matt y Alex al colegio y a Damián a la guardería, después se dirigió al trabajo a toda prisa, aunque sabía que no podía remediar el llegar tarde.

Aparco el coche rápidamente en su plaza de trabajo y entro al edificio rápidamente.

-¡Buenos días Mila! –La recepcionista la saludo como de costumbre.

-¡Hola! –Siguió corriendo para poder entrar al ascensor antes de que se cerraran las puertas y lo consiguió por poco –Uff –se arreglo la falda y la camisa. Y cuando las puertas del ascensor se abrieron, y el ruido del que era su mundo inundo el ascensor.

-¡Modelos a la derecha!

-¡¿Alguien ha visto al fotógrafo?!

-¡¿Quién lleva la entrevista de Simón?!.

-¡Buenos días chicos! –Camino por el lugar con una sonrisa -¡Reunión en veinte minutos! –entro a su despacho –Hola Nora ¿Qué tenemos para hoy?.

-El jefe pregunta por la exclusiva de esta semana –Nora miraba la agenda –Ah, y la portada de operación biquini.

-Vale, organiza todo para la reunión –Camila suspiro y tomo el teléfono de la oficina, marco el numero y espero.

-¿Qué necesitas? –Sofia respondió rápidamente.

-¿Por qué das por hecho que necesito algo? –Frunció el ceño.

-Porque siempre que me llamas por la mañana es para eso –Ella respondió como si fuera evidente.

-Está bien –Camila llevo la mano a su frente -¿Puedes recoger a los niños del colegio y llevar a Matt y a Alex a su entrenamiento de futbol?.

-¿Y no puede hacer eso tu maridito? –Sofia hablaba molesta –Ah no claro, que está muy ocupado.

-Si no puedes no pasa nada –Cansada de oírla hablar en contra de Shawn llevo la mano al teléfono para colgar.

-Está bien –Sofia suspiro –Yo me encargo.

-Gracias –sonrió levemente –Te debo una.

-Me encanta estar con mis sobrinos Que tengas un buen día, nos vemos en la tarde –y la llamada se corto.

-Bueno –Camila se levanto de su asiento –Comencemos el día –y salió del despacho y se dirigió a la sala de reuniones –Buenas a todos.

-Ey jefa –Jeremi la saludo con su habitual sonrisa.

-A ver, para hoy –Camila cogió su agenda –Fran encárgate de las fotografías de las modelos de bañadores.

-Encantado –El sonrió feliz.

-Andrea y Bárbara –Señalo a cada una –La entrevista con Simón, la quiero lista esta tarde –tacho algo en la agenda –Manu sigue investigando sobre el paradero del actor Lucas Jones –levanto la vista hacia todos –Y los demás repartance los artículos de relleno, pero por favor consigan algo interesante -cerro la agenda y se apoyo en la mesa –Venga ¡A trabajar!.

Y rápidamente todos salieron de la oficina con sus papeles, haciendo llamadas y preparando todo.

-Sigue impresionándome como llevas todo –Nora la miro con una sonrisa –A pesar de que lleva haciéndolo cuatro años

-Cuatro años –Camila se quedo pensativa.

Hacía cuatro años ya que la habían nombrado directora de la revista, que llevaba adelante su trabajo y su vida de casada ¿Una vida perfecta?.

-¿Estas bien? –Nora frunció el ceño.

-Si –ella le sonrió levemente –Estaré en mi despacho –salió de la sala de reuniones y volvió a encerrarse en el despacho.

Así entre reuniones, papeleo y ajetreo paso al completo su mañana, tras una comida importante con varios socios de la revista paso a revisar el trabajo que habían hecho sus empleados. Y al fin a las seis de la tarde fue libre para irse a casa, donde su hermana la esperaba con los niños.

-Adiós Nora –Se despidió de su secretaria y entro al ascensor.

-Que tenga un buen fin de semana–Nora le sonrió cálidamente.

Cuando entro a su coche se tomo unos minutos para relajarse y después arranco dirigiéndose a la casa. Puso el manos libres y llamo a su marido.

-Empresa Aguas Broters SL ¿Dígame? –Contesto la secretaria.

-Hola Vanesa ¿Puedes ponerme con mi esposo? –Hablo mientras conducía tranquilamente.

-Un momento señora Mendez –la chica dejo la llamada en espera –Lo lamento pero su marido está en una reunión ¿Desea que le de algún recado?.

-No, gracias –colgó la llamada y suspiro
Al llegar a la casa aparco el coche en el garaje y nada más cruzar el jardín Cuper salió corriendo hacia ella.

-¡No! ¡Cuper! –Por más que grito al perro este se alzo sobre sus patas traseras y apoyo las delanteras en su falda manchándola de tierra -¡Ah! ¡Dios! –le acaricio la cabeza y lo aparto con cuidado. Después camino hacia la entrada.

-Uf –Su hermana abrió la puerta y la miro con desagrado –Pensaba que habrías mejorado tu vestuario.

-¿No vas a dejar de quejarte de mi ropa? –Camila entro a la casa –Hola cariño –Cogió a Damián y lo abrazo. –Llevas viéndome años.

-Vistes como una amargada –Sofia cerró la puerta y camino hacia el salón.

-No, visto como una mujer de treinta años, casada y con hijos que trabaja en una revista y lleva su casa. –Dejo su bolso sobre la mesa y soltó a su hijo en el suelo -¿Y Matt y Alex?.

-En el cuarto, haciendo los deberes –Sofia se encogió de hombros –Y estar casada, tener treinta años y tener hijos no te obliga a vestir así.

-Déjalo ya –Camila se dirigió a la cocina y se sirvió un poco de agua –Tengo que poner un lavadora.

-¿No tienes asistenta? –Sofia frunció el ceño.

-Si, pero ella solo tiene que recoger la casa –Camila la miro molesta -¿Qué te pasa?.

-Me pasa que me molesta verte así –Sofia la miro de arriba abajo –No sé donde esta mi hermana.

-Han pasado ocho años, he madurado –camino por la casa –Deberías probar

-¿Y dejar que un hombre me convierta en una amargada? –Sofia camino hacia la puerta -¡No cariño! ¡Adiós!.

-Adiós –Camila se paro ante el mueble y miro su reflejo ¿Amargada? ¿Era eso en lo que se había convertido?
Dejo a un lado sus pensamientos y se dedico a sus hijos, baño y puso el pijama a Damián y después ordeno a Matt y Alex que hicieran lo mismo mientras ella preparaba la cena.

Una cena que como muchas otras noches compartiría solo con sus hijos, ya que su marido tenía demasiado trabajo. Y como muchas otras noches se quedo esperándole, hasta que se quedo dormida.
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Por favor Si ven algún error con los nombres avisen por favor ya que se me puede pasar y no me gusta equivocarme y este Mál la adaptación.

Y Gracias por sus comentarios y votos del inicio

Es Lauren G!P