____:El bar cierra tarde, así que podemos pasarnos un rato después a beber algo.

Debido a la inesperada galopada para resguardarnos de la tormenta, mi cuerpo comenzaba a demandar una cerveza bien fría, aunque para esta horrible noche realmente estaba dispuesto a beber cualquier cosa que me ofrecieran.

Matt:Claro, me encantaría, pero antes me gustaría que conocieras a mi nueva compañera.

Matt busco de entre sus pertenencias una de sus pokeball, y tras asegurarse de que era el pokemon que quería mostrar, la lanzó contra la alfombra de la habitación para que se abriera. De ella, y ante mi sorpresa, salió otro enorme lycanroc casi tan grande como Rubí, aunque esté presentaba una tonalidad plenamente azulada en su pelaje.

____:Espera...

Comenté atónito

____:¿Está es Añil?, La última vez que la vi era todavía una pequeña rockruff shiny.

Matt:Si, ¿te acuerdas?

Matt me hizo recordar aquella noche que nos encontramos con la que decidió bautizar como Añil. Fue una noche donde acampamos en las frías montañas del norte, donde encontramos a una herida y moribunda rockruff, probablemente debido a algún enfrentamiento territorial salvaje con otro pokemon. Decidimos llamarla Añil por su tonalidad azulona, propia de un ejemplar shiny de su especie, y tras cuidar de sus heridas y ganarnos su confianza, decidimos que fuera Matt el que se quedara con ella porque yo en ese momento ya tenia a Rubí en mi equipo.

____:Pero hay que ver cómo ha crecido también, es flipante. Me alegra ver lo bien y sana que está.

Matt:Sí, la verdad es que evolucionó bastante rápido hace unas pocas semanas. Por eso aún no es consciente de su nueva fuerza, pero poco a poco conseguiremos dominar su nueva fuerza y sus nuevas habilidades, ¿Verdad que sí, Añil?

Sabía que Añil era algo más joven y rebelde que Rubí. Me acordaba porque yo mismo le sacaba a Matt un par de años de diferencia, y nuestras personalidades eran muy similares a la de nuestros propios lycanroc, curiosamente.

Añil en ese momento mostraba un comportamiento mucho más activo y salvaje, tanto que comenzó a rodear el cuerpo de su entrenador Matt, como si estuviera pidiéndole algo a su entrenador que yo era incapaz de descifrar.

____:Vaya, nunca antes la había visto así. Parece muy alegre.

Matt:Sí, creo que ella quiere que tengamos sexo esta noche.

Dijo asi, sin mas.

____:Mmm... ¿Qué?

Dije un poco atónito y sin creermelo del todo.

Matt:Sí, eso he dicho.

____:Pero tío... ¿Hablas de... tú, con tu pokemon?

Oír aquello me generó un enorme desconcierto, que tuve que dejar pasar unos segundos para asegurarme que mi amigo estaba hablando en serio y no se trataba de una de sus bromas pesadas...