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1| Especial navidad

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Si miras por la ventana más próxima del carro bomba, se podía observar la llamarada de fuego que había al pie de las montañas, consumiendo todo el pasto seco y las casas de madera que se encontraba a su paso. La tripulación de la compañía sólo consistía en tres bomberos, el Capitán Min Yoongi, el Teniente tercero Park Jimin y Jeon Jungkook, el chico nuevo que había ingresado hace un par de días e iba a su primera emergencia. En el volante, iba el conductor autorizado del carro, el señor Kim Choihoon

Los habían despachado al incendio forestal a las 20:00hrs el día 24 de diciembre, eran los únicos bomberos que estaban en la estación en ese momento. Aún no llegaba la nieve a donde estaban, algo bastante extraño considerando la época en la estaban, sin embargo, aún así hacía bastante frío y las temperaturas estaban cerca de los grados bajo cero.

—Teniente Park, necesito que arme una línea de ataque con mangueras de 50 mm, coloqué al novato al frente —dijo Yoongi bajándose del carro una vez llegaron—. Luego arme la suya, los necesito a los dos atacando, debemos detener la propagación y proteger las casas.

Jimin asintió, haciendo lo que se le pidió. Jungkook estaba bastante nervioso, no sabía muy bien qué hacer ni tampoco como ayudarlo, se movía de un lado a otro sin hacer nada. Cuando tuvo lista la armada, Jimin la colocó sobre las manos del novato, lo dio vuelta y lo envió directo hacia el pasto que se quemaba—. Sostenla con fuerza, con tu cuerpo hacia adelante —le dijo. Levantó la mano en dirección al señor Kim para que diera el agua.

Le dio un breve vistazo a Yoongi mientras este hablaba por la radio con la central. Tenía su casco rojo de capitán sobre la cabeza y la chaqueta estructural abierta. Jimin se mordió el labio al ver la imagen, su capitán era alguien bastante atractivo cuando estaba a cargo de un incendio. Aunque aún no entendía como no lo quitaban si casi nunca cumplía los protocolos de seguridad básicos como, por ejemplo, cerrarse la chaqueta.

—¡Teniente! —se giró hacia Jungkook cuando escuchó el grito y lo vio en el suelo, luchando contra la presión que tenía la manguera.

Corrió hacia Jungkook y cerró el paso del agua antes de que también lo mojara a él—. Levántate, novato —lo tironeó de un brazo hasta colocarlo de pie. Tenía todo el uniforme ignífugo mojado, incluso desde el casco caían gotas de aguas—. ¿Qué pasó con tu entrenamiento? Practicaste durante dos años antes de jurar como bombero ¿No te acuerdas de nada, novato?

—E-eh, si me a-acuerdo, mi Teni-teniente —balbuceó, Jimin solamente comenzó a reírse en su cara. Jungkook tragó grueso y se abrazó a la manguera—. Es que me tropecé con una piedra, Teniente Park.

Jimin le golpeó el casco—. Que no vuelva a suceder —lo ayudó a posionarse nuevamente, mirando directo al fuego y bajándole la visera para que no se quemara los ojos y pudiera ver donde pisaba—. Aún nos queda mucho trabajo.

Se fue hacia el carro y comenzó a armar su propia línea de ataque, no era usual que los tenientes trabajaran, por lo general estaban en terreno solo supervisando que se cumplan las órdenes dadas por el capitán. Pero en este caso particular, como eran tan pocos bomberos, incluso Yoongi tendría que trabajar.

Se posicionó frente al fuego, seis metros lejos de Jungkook, sintiendo el calor abrazador del elemento. Se bajó la visera y antes de que que pudiera abrir el paso de agua, sintió una mano posarse en su hombro—. Nosotros nos encargaremos del área alfa del incendio solamente, vienen refuerzos en camino para atacar el área beta y delta.

Jimin vio el rostro sudoroso de Yoongi—. Conforme, mi capitán.

Yoongi sonrió—. Así me gusta, Teniente. Que me obedezcas —miró hacia Jungkook para ver que no estuviera mirando en su dirección y le dio un beso fugaz en la mejilla a Jimin—. Iré a hacer mi línea de ataque.

Jimin continuó con su trabajo, y una sonrisa traviesa surcó sus labios. Abrió el paso de agua y comenzó a apagar el fuego. Los tenientes estaban un cargo por debajo de los capitanes, pero al ser pareja, Yoongi no era un capitán tradicional con él, le daba ordenes, y lo retaba cuando debía hacerlo, pero fuera de la estación era el novio más dulce y cariñoso que existía, jamás le había dado una orden. Bueno...dejemos de lado en el sexo.

Se subió la bandana que le cubría hasta por debajo de los ojos y comenzó a caminar entre el fuego, sintiendo el humo colarse por su nariz, haciéndole cosquillas. Debería estar ocupando un equipo de respiración autocontenido para evitar aquello, pero estaba tan acostumbrado, que si algun día debía morir, que fuera haciendo lo que amaba. Llevaba siete años siendo bombero, un poco de humo en un forestal a cielo abierto no le haría daño importante. A lo lejos sintió las sirenas de las otras compañías acercándose, los vio bajarse y armas sus líneas de ataque por el otro extremo del cerro.

A la espalda de donde estaban trabajando habían casas, debían frenar la propagación del fuego para evitar que se incendiaran y miles de familias quedaran sin hogar. La compañía que llegó se posicionó en el área beta, atacando desde ahí. La otra se posicionó en el área delta.

Luego de tres horas de trabajo arduo, bastante sudor y algunas caídas por parte de Jungkook al no estar acostumbrado al terreno deforme, pudieron tomar un descanso a la sombra del carro—. Falta una hora para navidad, hijos —el señor Kim cerró una cajonera que tenía abierta y se sentó junto a ellos. Tenían botellas de aguas a sus pies y unas cuantas barritas de cereal.

—Estás negro de hollín, Jungkook —se burló Jimin. El rostro del novato adquirió un color rojizo por debajo de la negrura—. Y estas lleno de pasto seco.

—Al menos él si trabajó en su primer incendio —Yoongi le dio un mordisco a su barrita de cereal. El señor Kim se rio por lo bajo.

—¡Hey! —protestó Jimin—. Eso no es justo.

Jimin recordaba perfectamente su primer incendio, se fatigó de tan solo ver el fuego envolviendo la casa por completo y comenzó a vomitar al lado del carro bomba. El señor Kim lo asistió, dándole agua y un paño para que se limpiara la boca, no pudo trabajar durante todo el tiempo que duró el siniestro, temblaba de miedo de solo pensar en entrar a la casa. Luego de eso jamás pensó que podría llegar a ser teniente algún día, porque ellos necesitan mucha destreza en todas las emergencias, pero con el tiempo adquirió la experiencia suficiente para llegar al cargo que ostentaba ahora.

Todo lo que sabía sobre apagar incendios, ayudar a la gente y salvar vidas, se lo había enseñado Yoongi, quien en ese entonces era ayudante, lo estaban preparando para ser un futuro teniente y luego un capitán.

Yoongi tiró la botella de agua y arrugó el envoltorio de su barrita de cereal—. Teniente Park, necesito hablar con usted —se levantó de su asiento y fue hacia la parte trasera de carro, donde nadie los viera. Jimin miró al señor Kim pidiendo auxilio, pero él solo levantó las manos.

—Que dios te acompañe, hijo.

Jimin siguió a Yoongi. Estaban solo con la jardinera y la chaqueta puesta, ya habían hecho su parte de la emergencia, solo estaban a la espera de que los demás equipos les informaran si necesitarían ayuda o podían retirarse. Faltaban solo unos pocos minutos para navidad.

—¿Que sucede? —preguntó al llegar.

Yoongi abrió los brazos, y Jimin se acercó a su cuerpo para que este lo rodeara—. Sé que no es la navidad que te prometí este año, mi amor —se aferró a la camisa de Yoongi y apoyó su mejilla en el hombro, sintiendo el olor a humo emanar del pelinegro—. Pero aún así me alegra estar contigo. Aunque sea en estas circunstancias.

Llevaban cerca de cinco años de relación, en la estación y en las emergencias, solo eran compañeros de trabajo. Pero habían momentos como estas fechas, donde no podían evitar expresar lo que sentían. Trataban de que nadie los viera, porque en muchas compañías una relación entre compañeros de trabajo no era bien vista.

—No te preocupes, hyung —Jimin se separó de su cuerpo, sostuvo las mejillas del mayor y le dio un beso fugaz en los labios—. Aún podemos pasar el año nuevo juntos, en la casa de mis padres.

Muchos decían que Jimin era teniente solo porque Yoongi era capitán, pero aquello no era cierto, Jimin se ganó su cargo como cualquier otro oficial, a punta de esfuerzo y perfección, absorbió toda la información que pudo, estudió, trabajó y entrenó. Solo así había llegado a donde estaba. Ambos compartían la misma pasión por ser bomberos, llegaron por vocación hace muchos años atrás, han tenido la vida de sus compañeros en sus manos, e incluso la vida del otro.

—Solo no vuelvas a estar a punto de morir —susurró Jimin, divertido al recordar cuando Yoongi cayó de un techo hasta el primer piso envuelto en llamas hace solo un par de días antes de mavidad—. Me da miedo no estar ahí para ayudarte. Para salvarte.

Yoongi le acarició el cabello, estaba sucio, lleno de hollín y transpiración, ambos habían visto la faceta más sucia y más limpia del otro, y aún así se amaban—. Somos bomberos, Park —le respondió—. No me puedes pedir eso, lo sabes.

Jimin suspiró, tomó la mano de Yoongi y la besó—. Lo sé.

Realmente lo sabía.

—¡Capitán! —gritó jungkook desde donde estaba con el señor Kim—. Van a ser las doce. Y alguien lo busca.

Rodearon el carro, ahí había una señora anciana con una niña pequeña de la mano. Los estaba invitando a cenar a su casa, una de las casas que evitaron que se incendiara.

—¿Podemos ir, mi capitán? —preguntó Jungkook con ojos anhelantes.

Yoongi tomó su radio—. Voy a consultarle a la central si es que debemos hacer algo más —miró en dirección hacia donde estaban las demás compañías, no quedaba fuego que apagar, ya habían controlado la emergencia—. Pero lo más seguro es que sí podamos. Sería una navidad un tanto inusual.

La señora les hizo una reverencia—. Feliz navidad, chicos, los espero en mi casa con los brazos abiertos.

—Feliz navidad para usted también —le dijo el señor Kim.

Jimin miró la hora en su celular, ya eran las 00:00 hrs del 25 de diciembre—. Feliz navidad, Capitán Min —miró el rostro de Yoongi a su lado. El rostro del hombre al que más amaba y por el que daría la vida en un incendio.

—Feliz navidad, Teniente Park.

Jimin estaría esperando su celebración de año nuevo, y ya tenía una idea un tanto lujuriosa para eso.

Holis!

Vengo a avisar que en esta misma historia el próximo capítulo será un OS de especial de año nuevo, si desean leerlo, guarden esta historia en su biblioteca. Jimin y Yoongi continuarán siendo bomberos, pero en año nuevo tendrán una celebración solo ellos en la casa de alguno de los dos.

Disfruten esta noche buena ♡ y en caso de que estén trabajando, estudiando, o lejos de sus seres queridos, les envío un abrazo gigante a través de esta historia.

Esperen el próximo capítulo!

Nyx ✨️

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