Capítulo 9: volviendo a donde todo comenzó
Hora: 9:00 PM faltan aproximadamente 1 hora para la cena de navidad.
lugar: casi entrando a la ciudad de Musutafu
Narra Izuku:
bueno creo que pudo salir peor, dijo al final pude hablar con el director Nezu. Para que envié una limosina para Gentle y La Brava para que sean los meseros eso si les dije que no digieran nada de la pelea que tuvimos por los campos de la U.A casi entrando. Él no sabe que todo mi salón me odia a excepción de mis amigos claro está.
También pude hacer las pasas con los Bakugo, debería decirle a Bakugo-Kun que ya no está la orden de alejamiento, aunque él ni sabe nada... neeeee. Aunque algo extraño es encontrarme de la nada con una herramienta de Hatsume-San. Como sea yo estoy feliz de hacer las pasas con los Bakugo también estoy triste no pude pasar navidad con Eri cuando ella me rogó por estar, también mis amigos. No pude estar con ellos, pero prefiero no sentir las miradas de odio y que ellos la pasen bien mientras sonríen.
Creo que a esta hora no voy a alanzar a ver a mi papá. Debí de ir primero a la prisión con lo difícil que fue recolectar, quería que fuera especial por todo esto de la navidad lo cual ambos sabemos que no es la mejor fecha para nosotros, pero bueno hoy no se puedo mañana tendré que ir a primera hora que estén disponibles las visitas. Hablado de visitas, creo que sería buena idea ir a ver a mamá la última vez que la fui a ver fue antes de hacer la competencia de contra la clase B. Pero ahora sé que la señora y señor Bakugo le aran compañía.
Espero que mis compañeros la estén pasado muy bien, tal vez ahora deben de estar decorando el árbol o quién sabe. O cierto Yaoyorozu-San me conto antes de que todos me odiaran como desea que sus padres estén presentes ya que desde que nació nuca los ha visto más que en pintura. Espero y pase ya que es uno de sus más grandes sueños.
Me pregunto si Gran Torino pondrá el árbol de navidad, me acuerdo que tuve que trabajar para mínimo poder comprar unas decoraciones de navidad, tampoco quería ser un Grinch en casa de Gran Torino ya que el como mínimo pone un árbol que le faltan casi todas las hojas, Como sea.
Espero y Iida-Kun no se asusten cuando sepa que no estoy en los dormitorios.
Narra el Narrador:
Midoriya: mou sukoshi dake de ii
ato sukoshii dake de ii
mou sukoshi dake de ii kara —empezó a cantar en medio de la fría/helada noche.
AVE: no supera la película verdad —pregunto ya que lo ha escuchado cantar todas las canciones de la película Your Name o Kimi no na wa.
Midoriya: ni el manga AVE y las canciones... dios siempre me dan ganas de cantarlas —ya se sabe todas las canciones.
Este seguía caminando mientras tarareando muchas de las canciones que ya se sabe y por alguna razón se sintió un poco solo, dijo en las calles de Musutafu no había nadie, ningún rastro de personas, era obvio que todos estaban en sus casas festejando esta fecha navideña.
Midoriya: okey ahora si me siento un tanto solo —dijo un poco sarcástico dejando de tararear canciones, mientras veía uno que otros restaurantes, casas, puestos de comida, etc. Como si estuviera analizado la información atrás con la actual. Además de no sentir tanto frio por alguna extraña razón y eso que esta empapado de nieve.
AVE: ¿Tanto? —respondió saliendo de su modo de camuflaje.
Midoriya: está bien me siento solo, pero no me arrepiento de haber venido AVE, pude hacer las pasas con los Bakugo, ayudé a Gentle y La Brava. Todo genial —sonrió como el solo sabe hacer.
AVE: y lo golpeo un objeto de su amiga la mecánica, perdió el tren que lo lleva cerca de la U.A no pudo ver a su padre, está haciendo mucho frio y usted con un traje elegante...
Midoriya: ya entendí AVE, pero por alguna extraña razón no siento tanto frio, me puedes decir a cuantos grados estamos —la interrumpió mientras sacudió un poco la cabeza en señal de entender mientras levantaba su brazo para ver mejor su pantallita.
AVE: -6 grados centígrados o 21 grados Fahrenheit amo además de que está cayendo nieve y hay fuertes ventiscas de aire, aproximo de que vagaremos unos 3 grados más —dijo poniendo sus manos atrás.
Midoriya: tanto frio hace y yo solo con un traje elegante, y en la mañana estaba casi desnudo por la pelea con Chispitas y se supone que estoy en riesgo de un refriado máximo o congelarme y ando aquí como si nada enserio debo estar loco, pero yo me siento bien —dijo con un poco de ironía dada la situación AVE dio una ligera risita, no tenía idea de porque no sentía tanto frio, ni tenía activo el One For All —además a medida que avanzo menos decoraciones o algo de espíritu navideño veo, aun ni llego al lugar en donde crecí ya que los Bakugo Vivian cerca de casa luego se cambiaron un poco más lejos.
AVE: estamos a solo 10 minutos de...
Al fin Santa Claus me dio un gran regalo, y valla regalo
Un grito algo ¿lascivo? Se escuchó en un callejón qué estaban por pasar además de ¿forcejeos? Y sollozos apenas audibles, obvio que eso hizo que acelerara el paso.
Lo que vio no le gusto, aunque batallo un poco ya que las corrientes de aire sumado a la poca luz lunar y nieve cayendo no le permitió ver bien. Pero lo poco no le gusto. Básicamente era un hombre encapuchado sometiendo a una chica tal vez de su edad semidesnuda la cual por obvias razones estaba temblando del frio y miedo y estaba llorando en el frio piso cubierto de nieve.
Hombre: dicen que el calor corporal es mejor que los calentadores o el calentamiento físico y que hacer relaciones sexuales baja más calorías que hacer ejercicio por dos semanas, ahora si me permites feliz navidad para mí —su voz sonaba ansiosa y un poco de baba callo en la espalda de la chica provocando que suelte un gran grito, el cual casi ni se escucha debido a que tiene cinta en la boca, ella lloraba y trataba de gritar, ahora mismo se arrepiente tanto de no haber asistido a clases de defensa personal, además de que su Quirk no le ayudaba mucho que digamos.
Midoriya: CUIDADO CON LA ARDILLA —corrió gritando a una gran velocidad y eso que no tenía activo su Quirk logro llegar en pocos segundos al hombre el cual sin voltear a ver contesto...
Hombre: ¿Cuál ardilla? —pregunto aun viendo el trasero de la chica que tenía algo de nieve.
Midoriya: LA QUE TE PEGA CON LA RODILLA—dando un gran golpe con su rodilla lo cual hizo que se le fuera el aire al criminal y lo algara mucho— *demonios justo ahora no tengo nada que la caliente como una sudadera o algo y por como veo las cosas no va a aceptar un abrazo o que me acerque, después pienso en eso ahora... a pelear y mantener seguro a la chica* —pensó.
No le gustaba que vieran su cuerpo, por algo usa ropa muy grande por dos cosas; uno porque se siente cómodo y dos porque no le gusta que vean sus cicatrices, mucho menos la de los brazos y cuello. Pero no es momento para esto ahora tiene que mantener a salvo a una persona la cual aún seguía ahí.
Tal vez era por el medio o porque hacia demasiado frio y estaba cayendo nieve combinado a la ahora gran ventisca fría. Ella trato de levantarse, pero fue sorprendida cuando sintió un pequeño calor en su espalda cubierta de nieve.
Midoriya: descuide, soy un aspirante a héroe, ya todo está bien ya paso el peor escenario ahora yo me encargo del segundo escenario —lo dijo de una manera muy calmada y la chica por alguna razón sintió un poco de paz, su corazón le decía que no tiene malas intenciones por esa voz. Pero no quería caer en el mismo juego, porque gracias a eso está en esta situación.
Ella estaba temblando... demasiado y teniendo casi nada de fuerza logro levantar su mirada y encontrarse con una persona en una pose de pelea. Tenía miedo, con la poca luz lunar que llegaba a ese lugar y las farolas. Vio a un adolescente muy alto, marcado, una musculatura perfecta. Una gran quemadura en su brazo derecho al igual que unas cicatrices en los dedos y en la mano. Pero la que más resaltaba era una del cuello la cual apenas se podía ver.
Midoriya: si puede empiece a hacer ficción en con sus manos así ara un poco de calor no me tardo —dicho y hecho corrió lo más rápido que puedo al señor que seguía recuperando el aire— *no lo actives no lo actives no lo actives no lo actives* —pensaba y repetía eso una y otra vez.
Ahora la chica se había puesto de pie sintiendo más frio en sus pies, casi se volvió a caer y como puedo se puso esa playera de mangas cortas, la camisa de botones y una corbata roja y con todas sus fuerzas solo lanzo un grito ahogado.
Chica: a-ayu-ayuda...me —se dejó caer en la fría pared mientras sus temblores disminuían.
Midoriya se alteró por eso. Y dejándose de juegos fue directo hacia él y le dio un gancho a la mejilla con su mano derecha, luego con la izquierda para finalizar con una patada a la mejilla izquierda.
Midoriya: no hay tiempo AVE, empieza a marcar a Tsukauchi-Kun —dicho y hecho la I.A empezó a escribir un mensaje donde mandaba la ubicación en donde estaba, aunque era muy probable que no vengan por el —*en serio debo de estar loco en hacer esto*, sabes que cancélalo AVE tengo una idea medio loca —dijo un poco alterado y aun estado sin camisa no sentía tanto frio.
AVE: ¿Qué ida tiene? —pregunto eliminado el mensaje a medio terminar.
Midoriya: es obvio que no van a venir por él, como esta inconsciente puede acabar congelado o que una parte se le quede congelada, no me lo perdonaría, sé que intento abusar o mejor dicho abuso de esta chica, pero no puedo hacerle esto abandonarlo a su suerte así que...
AVE: no me diga que...
Midoriya: el también viene con nosotros, sé que no tengo dinero para estar en una posada (hotel o lugares donde pagas para quedarte mínimo un día) según recuerdo, pasamos por un restaurante que conozco de niño, y sin mal no recuerdo. Estamos a 30 minutos de las zonas departamentales donde antes vivía. Podemos pasar la noche ahí —termino de explicar.
AVE: pero, am... Izuku, este hombre *basura, bastardo, tonto, pervertido* casi hace algo individuo con esa pobre chica, y esto no sería como un secuestro —dijo entre enojada y preocupada de que esto no se malinterprete.
AVE vio como a Midoriya ya había activado su Quirk en las dos personas, aunque no fue el One For All sino sus látigos negros, Quirk que despertó en los enfrentamientos entre la clase B, enrollando por completo al hombre y levantado a la chica, procedió a quitarse sus clásicas zapatillas/tenis rojo y se las puso con cuidado a la chica. Lo cual esperando que tal vez funcione ya que vio cómo sus pies se empezaban a ver azules.
Midoriya: si lo sé, este bastardo intento hacer algo individuo con ella, por eso lo mantendré en este capullo o hasta donde aguante y lo vuelva a noquear, mientras tu desbloqueas el teléfono de la chica y me pasas el número de sus padres, espero y no me vean como un ladrón o alguien malo... ahora a llegar rápido a donde una vez viví *One For All Full Cowling 20%* —pensó lo último mientras unas maracas rojas y unos rayos verdes empezaron a rodear su cuerpo, eso y que el suelo en donde estaba empezó a agrietarse y de sus ojos verdes se podían ver unos 15 rayos.
Dio un gran salto mientras llevaba a esas dos personas con sus látigos negros, dando pequeños saltos en edificios o casa. Generando unas pequeñas ráfagas de viento y pequeñas grietas en partes de edificios. Y en ocasiones se columpiaba con otro látigo negro, pero esta vez más difícil.
Claro que el vio unas casas decoradas y en unas que tenían patio se podía ver como estaban unos en una fogata la cual por extraño que parezca no se apagaba, supuso que era debido a un quirk, esa familia estaba charlando y compartiendo risas. Eso le saco una sonrisa a Midoriya. Ver a las personas felices le causa una gran alegría. Por eso quiere ser un héroe, para proteger esas sonrisas, que no pasen por lo que el paso cuando era niño, dar apoyo, y sobre todo... cuidar a las personas tanto física como mentalmente.
Llego a la zona departamental en menos de 8 minutos saltando y columpiándose de edificio en edificio. All llegar obvio hizo un gran ruido debido a lo brusco que cayo, Pero se las arregló para caer bien y dejar un pequeño cráter en el medio de la zona departamental, aunque se llevó una gran sorpresa... estaba todo apagado, no había ningún rastro de luz como si ya todos estuvieran dormidos o que no allá nadie, la nieve le daba un tono triste, de hecho, en donde el esta se veía una gran capa de nieve.
Midoriya: recordaba esto más alegre —dijo con algo de nostalgia, luego sintió como algo empezó a moverse en uno de sus capullos. Como estaban encerrados en esos capullos genero un poco de calor pensó que era la chica —no es momento de estar triste.
Sintiendo un poco de cansancio por tener dos quirk activos empezó a caminar hacia las escaleras para llegar al piso dos del edificio que está al lado izquierdo, pero algo lo estaba advirtiendo y por alguna razón sintió un ligero coquillo en su cabeza. Por reflejo se puso en una posición de pelea viendo hacia todas partes, pero era difícil debido a la poca luz en general.
Midoriya: es difícil ver y porque siento una extraña sensación en mi cabeza como si me estuviera diciendo cuidado...
No supo cuándo o como paso, solo su cuerpo reacciono por sí solo, además tener ese sentimiento de alerta, el peliverde había esquivado un ¿Tornillo? Alguien le había lanzado un tornillo a una gran velocidad, de repente abrió viene sus ojos para dar un mortal hacia atrás moviendo también sus látigos negros, al aterrizar sintió como uno atravesó su piel en la zona de la rodilla, lanzado un quejido de dolor.
Midoriya: *siento que me dio en el Tendón del cuádriceps, pero como yo conté 2 tornillos cuando lanzo el 3* —pensó adolorido.
???: tienes buenos reflejos niño, pero no los suficientes —dijo sombrío arrogando ahora 4 tornillos, los cuales Midoriya no alcanzo a esquivar debido a que ahora fueron mucho más rápidos solo puso su brazo para que los tornillos se quedaran encajados en su piel. Saltando un poco de sangre.
Midoriya: e-eso dolió poco, e-escucha no quiero problemas s-solo quiero entrar al departamento en donde una vez crecí, hay una persona que necesita calor urgentemente —explico con poco dolor.
???: enserio crees que voy a caer en ese truco barato —dijo de una manera muy amenazante —lárgate de aquí y di que fui amable contigo.
Midoriya: ya le dije que no puedo, tengo que llegar al apartamento 318 para poder ayudar a esta persona a que tenga un poco de cal... —no termino de hablar ya que más de 10 tornillos lo rodearon el cuello él sabía que con activar el One For All puede salvarse de esto, pero ahora no sentía tanto peligro por alguna razón y eso que ya tenía como 5 tornillos en su cuerpo.
???: como sabes de ese apartamento —ahora sonó muy sorprendido porque casi nadie de afuera sabía de quien era el apartamento 318.
Midoriya: porque ya se lo dije, yo vivía en ese apartamento hace como 10 años o 8 años, vivía con mis padres Midoriya Inko y Midoriya Hisashi —eso hizo que los tornillos se cayeran y una luz le dio directo en la cara— ¿está bien?
Ya que la luz de una lámpara le dio directo en el rostro apenas y vio a un hombre de tal vez 40 años, pero que aparentaba ser de 30 años, con un cabello rojo largo, ojos de color rejo una mirada seria.
Midoriya: ¿lo he visto antes? —ignorando el poco dolor que tiene debido a los tornillos, pero muy preocupado por la chica.
???: ¿Izu...ku? —dijo atónito, sin creer que volviera a ver al pequeño Izuku.
Lo confirmo más cuando vio los mechones verdes oscuros o cabello, las pecas en ambas mejillas y unas pasaban por la nariz, y sobre todo que se parece demasiado a Hisashi, menos en los ojos esos son los Inko.
Midoriya: ¿lo conozco? —pregunto con mucha duda.
???: no mucho, pero conocí a tus padres y lo siento por ser muy agresivo contigo Midoriya-Kun —extendiendo su mano para ayudar a que el peliverde pueda levantarse. Midoriya estaba muy confundido por el repentino cambio de personalidad.
Una vez estuvo de pie y que le sacudiera un poco la espalda desnuda. Hay el hombre de cabello rojo se dio cuenta que el chico estaba casi desnudo, solo llevaba un pantalón y ya.
???: demonios debes de tener mucho frio —ahora sonó un poco preocupado y lo empezó a arrastrar hacia un departamento.
Midoriya: la verdad yo... —se dio cuenta que no le prestó atención, aunque un lado positivo es que la chica ya estaría en un lugar caliente o eso esperaba ya que toda esta situación le pareció muy extraña.
Una vez llegaron a un departamento con el número 279 que por alguna razón a Midoriya le trago uno que otro recuerdo sin terminar eran más bien fragmentos de su infancia que su cerebro no le permitía recordar al 100%
???: como están tus padres —pregunto, una vas que toco tres veces la puerta del 279.
Midoriya: bien... están bien —no quería decirles la verdad por alguna razón AVE seguía escuchado todo.
Cuando la puerta se abrió se pudo ver ligeramente un poco de luz y una que otra risa a dentro del departamento y ahora que lo veía mejor... sintió que si lo vio antes.
???: siempre si viniste Kenjil-Kun, me alegra mucho —dijo una mujer de una gran cabellera blanca con algunos toques grisáceos unos hermosos ojos color amellan, una mujer muy hermosa para tener 38 años.
(La fotografía no es mía y nose quien es el autor si alguien sabe me puede decir para darle créditos)
Midoriya sintió que ya había escuchado ese apellido antes, pero no recuerda el momento exacto en donde lo escucho.
Kenjil: no es que quiera venir Suzuki, solo trague a un gran invitado para intentar romper las malas rachas de navidad —dijo con una media sonrisa, logrando sonrojar a la mujer Suzuki.
Suzuki: *que atractivo* —pensó mientras se mordía el labio y sacudió su cabeza— q-quien es el invitado especial —adentro había como 20 personas desde adolescentes a adultos muy pocas ya que la zona departamental tiene entre 800 a 1000 habitaciones.
Kenjil: porque no te presentas chico —dándole una señal para que estuviera a la vista de todos.
Con un poco de timidez empezó a acercarse a la puerta. Debía de admitirlo, en su niñez casi no vio a sus vecinos, normalmente se quedaba en su cuarto o salía cuando no había nadie afuera. Además, han pasado casi 8 o 10 años desde que se fue de Musutafu, podría ver nuevas caras y otras algo conocidas para él. Una vez que ya estuvo en frente de la puerta, muchos se sorprendieron y unas pocas mujeres se sonrojaron al ver que el chico estaba sin camisa y sumamente marcado con algunas cicatrices en su pecho, una de las más notorias era de su pelea con chispitas como él le dice, esta vez sí se veía la del cuello. Pero una señora de tal vez 60 años veía su cabello verde oscuro recodándole a alguien.
Midoriya: hola... sé que es raro que me presente estando sin p-playera por favor no piensen mal de mí, solo ignoren esto. Me llamo Midoriya Izuku, un placer conocerlos yo vivía aquí cuando era niño más específicamente cuando tenía 4 años vivía en el apartamento 318 —dijo un poco nervioso, no se acostumbraba a estar sin playera o algo que lo cubra por eso estaba algo nervioso.
Nadie dijo nada la mayoría estaba más que sorprendido y algo emocionados los nuevos no entendían mucho de porque estaban emocionados por una simple persona, hasta que el apellido Midoriya volvió a sonar en sus mentes, y eso desato uno que otro recuerdo de cuando llegaron a mudarse a esta zona departamental.
Resulta que antes existían o Vivian unas personas de cabello color verde espeto por el padre que era negro rizado, estos eran conocidos como los vecinos más amables y bondadosos que pudieran existir. Y en cada navidad todas las personas iban afuera ya que los del apartamento 318 hacían una cena y entre todos comparaban y llevaban sus distintos platillos para comer en las noches frías de navidad con música, pero también cálidas noches de navidad. Esas personas tenían como apellido Midoriya.
Suzuki: e-enserio e-eres un Midoriya —dijo con algunas lágrimas de emoción no se lo podía creer que estuviera un miembro de la familia más amable que allá visto ya que pudo conocer a esa familia por dos años.
Midoriya: si, tal vez no me vieron mucho, la razón, no salía mucho de casa jeje —dijo un poco nervioso y poniendo su mano en su cabello desordenado.
???: yo recuerdo a un niño de cabello verde oscuro... —una señora de tal vez 60 años cabello negro con algunas canas y muy pocas arrugas, ojos de color negro y un poco bajita al promedio normal, empezó a activar su quirk el cual consistía en tener información con solo verlo a los ojos, pero solo era el nombre de ahí no podía más— si es un Midoriya.
Todos sabían cuál era el quirk de la señora Nakamura muchos estaban felices tal vez por fin terminarían las rachas de mala navidad.
Aunque ellos trataron de mantener esa luz de alegría y felicidad que los Midoriya habían dejado, pero simplemente no pudieron, se sentía tanto vacío sin la presencia de dos personas sumamente amigable y generosas. Tanto que poco a poco fueron dejando la zona departamental y solo quedaron los que querían mantener el legado de esa familia. Además, como Hisashi fue policía ese incendio a la escuela que claramente lo hizo cuando no había nadie presente, solo lo hizo para desatar su furia, hizo que muchos policías vallan a esa zona para destrozar el lugar donde antes vivía o sacar información de una forma para nada civilizada a muchos de las personas que vivían en la zona departamental. Y a medida que pasaban los años los policías simplemente dejaron de venir, pero igual uno que otro criminal iba a hay. La felicidad poco a poco se acababa y la navidad solo unas pocas personas lo festejaban la navidad. La poca luz y felicidad que quedaba en este lugar se iba apagando poco a poco... hasta que llego una vez más Izuku.
Suzuki: debemos llamarlos a todos, hay que ver que comida está en mi apartamento, al igual que los Tadano y los demás, de seguro están despiertos —sonaba muy emocionada y fue rápido a la concina a ver que comida había.
Midoriya: esperen necesito de su ayuda —eso hizo que todos le prestaran atención— hay alguien que necesita toda la ayuda —este empezó tirar de sus látigos para que vieran dos capullos negros.
Ahora todos estaban sorprendidos, bueno la verdad ellos sabían que el chico era un Quirklees o gente sin don, ya que una semana antes de que los Midoriya se fueran escucharon por parte de Hisashi como estaba muy triste por no poder pasar su don a su hijo y se sentía horrible por romperle los sueños a su hijo. Ahora viéndolo aquí casi desnudo sin temblar por el frio y con dos capullos negros. Si era de extrañarse de eso.
Pero de repente se empezó a escuchar como un capullo empezó a emitir un sonido de una persona forcejeando, vieron como Midoriya empezó a mostrar un rostro de enojo y empezó a recoger los látigos negros, bueno solo volvían a su piel, dejando ver como un hombre salió del capullo con un poco de nieve hecha agua fría y se dio un fuerte golpe en el piso. Todos lo vieron.
Midoriya: es una larga historia, el no necesita ayuda — apuntado al señor que lanzo un sonido de dolor.
Hombre: mi e-espalda... esperan —moviendo su cabeza para todos lados— y mi regalo —pregunto.
Kenjil: el quien es —pregunto con cierto asco.
Pero antes de que el peliverde le pudiera contestar, el hombre con apariencia de vagabundo se acercó mucho a Suzuki.
Hombre: veo que mi premio mejoro, gracias Kami-Sama —digo al techo con suma felicidad.
Suzuki ya sabía cómo era, también un chico de la edad de Midoriya con una flor en su cabello. Ella siguiendo un poco el juego se acercó a el hombre moviendo sus caderas, como si estuviera provocándolo, Kenjil por alguna razón quería matar de una forma para nada humana al hombre. Los demás no sabían que hacer o que estaba haciendo Suzuki. Ella tomo las manos del hombre el cual se veía muy emocionado.
Suzuki: lo siento tesoro, pero no eres mi tipo —dijo con una sonrisa, el hombre sintió un pinchazo en su mano izquierda.
Hombre: p-porque sentí un... —este de la nada se sentía muy cansado y empezó a marearse— que me h-hiciste z-zorr-zo —puso su mano en la pared, le empezó a dar sueño.
Suzuki: yo no te hice nada tesoro... pero tal vez mi gas de la risa controlado si te allá hecho algo —Midoriya vería eso con mucha sorpresa y se emocionó mucho por ver más Quirks, las demás personas suspiraron de alivio al ver que la mujer ya tenía toda la situación bajo control desde un principio.
Kenjil rápidamente le dio un fuerte golpe en el cuello, de milagro no lo mato y eso que se veía enojado y ¿Sonrojado?
Kenjil: quien ese este sucio vago Midoriya-Kun —dijo muy enojado, ahora si unos tenían un poco de miedo, pero no era para tanto.
Midoriya: el responsable de que vuelva aquí, con permiso —hizo una reverencia mientras veía a la señora Nakamura como pidiendo permiso para entrar más a la casa. Ella dio la aceptación de que el peliverde pueda entrar más en la sala.
Midoriya atrajo más el capullo hacia él y estando ya cerca extendió sus manos y los látigos negros decidieron el capullo mostrando algo de nieve y agua fría, pero de ese capullo salió una hermosa chica de la edad de Midoriya, pero más bajita que él, sus manos estaban ligeramente azules al igual que sus rodillas, vieron que la vestimenta de la chica la cual solo consistía en una corbata roja, una playera de mangas cortas y una camisa de botones y unos inusuales tenis/zapatillas rojas. La chica no se movía mucho además de estar extremadamente fría.
Extra: rápido hay que traer sabanas, ropas calientes, algo de fuego —una chica de 18 años era la que más preocupada estaba.
Señora Nakamura: llévala al sofá mientras nosotros buscamos unas cobijas gruesas y algo de comida —dijo también muy preocupada y en eso las 20 personas empezaron a buscar y unas hasta se fueron para buscar en sus departamentos y traer algo caliente para la pobre chica menos Kenjil. Él se quedó viendo todo esto, viendo que todo marchara bien, además de empezar a amarar al hombre que quería pasarse de listo con Suzuki.
Midoriya con mucho cuidado de no tumbar nada la dejo en el sillón y empezó a quitarle la poca nieve que tenía con algo de vergüenza y un ligero sonrojo ya que se podía ver un poco los pechos de dicha chica ya que no abotono la camisa, luego vio que poco a poco empezó a temblar muy poco.
Midoriya: tranquila, ya paso lo peor, relégate un poco tu cuerpo esta agarrado un poco de calor, las cobijas no tardan en llegar si —poniendo su mano en la frente de la chica la cual está muy fría... demasiado helada.
???: fue una gran suerte que te la encontraras —se escuchó detrás de él, pero Midoriya seguía viendo a la chica, quería asegurarse de que este bien.
Midoriya: si, fue una gran suerte poder encontrarla, pero aquí me doy cuenta que no podemos salvar a todos, que hubiera pasado si no estuviera ahí —dijo preocupado y un poco apagado, aprontado su puño en la mano libre, no quería aceptar la realidad de que no se puede salvar a todos.
???: es malo no poder salvar a todas las personas que en este momento deben de estarla pasarla mal, pero podemos intentar salvar a las personas que están en un lado de nosotros no crees —dijo tratando de animarlo— lamentablemente no podemos salvar a todos en este mundo, pero si intentar salvar a las personas que tenemos enfrente, mejoramos para poder salvar a más personas —dijo poniendo su mano en el hombro del peliverde.
Midoriya sonrió un poco, recordó la vez en que Bakugo casi fue secuestrado en el campamento y gracias al golpe de adrenalina que él tuvo, sumado a todo el dolor y odio hacia su persona que llevaba desde los 6 años logro despertar por un momento los látigos negros logrando salvar a Bakugo y siendo el peliverde capturado. Siempre se preguntaba que hubiera sentido si hubiera fracasado, si no se hubieran activado los látigos negros, se hubiera sentido muy frustrado por no poder salvar a alguien que está relativamente cerca de él, es imposible salvar a todos, ya se lo había dicho All Might, no quería aceptarlo, pero era la realidad, no se puede salvar a todos. Pero puede mejorar y salvar a más personas incluso las que no quieren ser salvadas.
Volteó su rostro para verlo, un chico de su edad unos 6 cm menos que el, además de que no se veía con mucho musculo estaba en lo normal, cabello negro al igual que sus ojos. Se veía bastante normal, excepto por la flor en su cabeza que por alguna razón no se marchitaba o algo por el estilo.
Midoriya: gracias... —dando una seña con su mano de decirle su nombre ya que no se lo sabe.
???: o cierto, me llamo Tadano Hitohito —dijo con una sonrisa mientras extendía su mano.
(Solo que iba a más abrigado créditos cr o que en la foto)
Midoriya: bueno creo que ya sabes quién soy, pero igual lo repetiré, Midoriya Izuku, un placer —estrechando su mano con la de Tadano.
Tadano: una pregunta ¿No tienes frio? —desde que vio que entro semidesnudo por solo llevar un pantalón se preocupó un poco de que tuviera frio.
Midoriya: ¡O! bueno la verdad...
En eso llegaron otra vez todas las personas con cobijas, ingredientes para hacer comida, ropa para abrigarla bien, entre otras cosas más.
Señora Nakamura: Hitohito-Kun, porque no van a tu departamento, Midoriya-Kun debe tener mucho frio —Tadano acepto con una sonrisa, mientras su hermana los veía.
Midoriya: n-no se preocupe yo estoy bi... *la verdad me siento súper incomodo no llevar una camisa* —pensó lo último y Tadano empezó a sentir un aura de incomodidad en Midoriya, desde que llego, pero no dijo nada.
Suzuki: es lo mínimo que podemos hacer por ti, tu familia nos ayudó mucho a la mayoría de nosotros aquí presente *en donde esta Kenjil, no es momento de pensar en eso* —pensó lo último.
Midoriya: no q-quisiera a-abusar de s-su confianza —dijo ahora si sacando su lado nervioso, además de seguir preocupado por la chica.
Tadano: tranquilo no pasa nada, vamos dejemos que ellas se encarguen de ella —dándole un poco de confianza, tomo su mano y empezó a avanzar hacia la puerta para salir.
Suzuki: bien ahora a encárganos de esta chica, además ¿alguien ha visto a Kenjil-Kun? —pregunto, para después escuchar como alguien gritaba ayuda en una habitación, luego unos golpes— olvídenlo, ya sé dónde está —dijo y a todos les salió una gota de sudor en su cabeza.
Una vez afuera vieron que la nieve ya no caía rápida, sino que esta era más lenta, el piso principal estaba cubierto de un gran color blanco, aunque también estaba una brisa muy fresca, y esta vez sí que sintió frio el peliverde. AVE seguía en su modo incognito.
Tadano: veo que ahora si te dio frio —dijo con un ligero tono de burla amistoso.
Midoriya: b-b-bueno digamos que t-toda la a-adrenalina que t-tenía se fue jejeje —riendo un poco nervioso— igual gracias por sacarme del departamento, aun no me acostumbro a estar en un lugar con muchas personas y menos ser el centro de atención —rascándose su cabeza, para luego abrasarse a sí mismo.
Tadano: bueno pude ver un aura alrededor de tuya con emociones diferentes como, miedo, incomodidad, nerviosismo —este digo eso en un tono demasiado normal.
Midoriya: espera como que aura —pregunto aun abrazándose a sí mismo, ni sabe cómo es que antes no sentía el frio y ahora sí.
Tadano: digamos que es por mi quirk, me permite leer la mente o sentir la atmosfera de las personas, por eso las puedo entender muy bien —dijo mientras empezaban a subir unas escaleras.
Midoriya: ¡O! que quirk tan asombroso —dijo muy emocionado y de la nada su atmosfera cambio a una de emoción, Tadano juro ver un sol detrás del peliverde y sus ojos tenían estrellitas en sus pupilas.
Tadano también sintió como la atmosfera en el departamento en donde antes estaba, se iba apagando y generando uno de suma tristeza, pero una vez llego el peliverde, cambio a uno de confusión, incluso pudo ver signos de interrogación en el aire, luego uno ¿Vergonzoso? Y para después ponerse uno de felicidad al saber la identidad del peliverde.
Ahora mismo podía sentir que Midoriya disparaba uno de Asombro al mismo tiempo. Parecía feliz y emocionado cuando le dijo una muy breve descripción de lo que hace su quirk. Así que supuso algo. Pero ya habían llegado al departamento en donde él está junto a su familia.
Lo malo es que sus padres tuvieron que salir, o bueno solo su mamá ya que su padre murió tratado de salvar a una persona junto con la mascota, en donde antiguamente vivía. Logrando conservar la ropa que su padre una vez usaba.
Al entrar al departamento en donde vive la familia Tadano, era demasiado normal una pequeña sala principal, televisión, una cocina pequeña dos habitaciones, baño, tenían lo esencial.
Midoriya: *me pregunto si la chica está bien, ya no pude habar con sus padres o poder tener el número de ellos para que no se preocupen por ella* —pensó un tanto preocupado.
Tadano: tranquilo, ellos la van a cuidar bien ya tiene ropa cómoda, sabanas para calentarse y personas muy amables. Está en buenas manos —le dijo mientras entraba a la habitación de su madre.
Midoriya: juau, eres bueno —dijo algo sorprendido.
Ellos siguieron hablando mientras Tadano veía la ropa de su padre... mentiría si digiera que no lo extraña. Buscaba una que le quedara a Midoriya, también le prestaría un gorrito, además de cambiarse y ponerse algo más para el frio. Luego sintió algo, parecía que Midoriya aún se sentía incómodo o que no estaba acostumbrado a esto.
Tadano: ¿no te acostumbras a esto? —le pregunto sorprendido al peliverde.
Midoriya: la verdad no, estoy más acostumbrado a ayudar sin recibir nada a cambio, además siento que estoy abusando de tu...
Tadano: confianza —definitivamente Midoriya tiene que preguntarle de su quirk, además el joven Tadano se ve que es muy amable, empezó a relajarse un poco. Tadano logro encontrar una playera de color negro con un poco de cuello extra —toma, creo que tu pantalón si te lo vas a dejar. Además, creo que combina. Ahora a buscarte unos zapatos, creo que eres de mi talla o sino aquí debe de haber otros —empezó a ir a su cuarto le dijo que no tardaría mucho que se valla poniendo la playera.
Aún seguía procesando toda la información que le habían dicho y tratando de no sentirse mal por ser el causante de que todas estas personas dejaran de sonreír. El no salía mucho de casa cuando era pequeño, ni a jugar en el parque más cercano, prefería estar viendo videos de héroes o gente sin quirk armando autos y explicando una que otra pieza. Si una infancia distinta a la de todos, pero él era feliz hasta que llego el día en donde se enteró que es un Mu kosei.
Midoriya: no merezco la ayuda de estas personas, no solo les quite la felicidad a mis padres... sino también a una gran cantidad de personas —este veía la playera que le acaban de entregar, no se merecía esta clase de amabilidad hacia él.
Tadano: te encuentras bien, tu ambiente cambio drásticamente —había regresado de su habitación, donde encontró unos tenis de color rojos con decorados verdes y algo de algodón blanco en las puntas, le quedaban grande como por 2 tallas y también llevaba un gorrito de Santa Claus.
Midoriya: no me merezco, yo alegue a mis padres de este lugar... este bonito lugar con gente muy amable —dijo triste y extendió la playera para que la agarrara.
Tadano solo dio una media sonrisa y se acercó un poco más a Midoriya y le volvió a dar la playera:
Tadano: no debes de atormentarte algo del pasado, porque eso es lo que es... un pasado que ya paso valla la redundancia y como todas personas cometemos errores porque no somos perfectos, volteamos a ver el pasado y decimos porque hicimos eso, pero gracias a esos errores que nos dejan marcado también podemos aprender de ellos y conseguir un presente o futuro mejor ¿no crees? —moviendo una ceja— no te culpes por algo que ya no se puede cambiar, ya está hecho, solo procura no hacer lo mismo dos veces y si tú crees que aquí la pasamos mal, estas equivocado Midoriya-Kun —eso sorprendió a Midoriya— tal vez la pasaron mal un tiempo, pero gracias a lo que tus padres les enseñaron, siempre se sentía un ambiente cálido y todos se ayudaban y daban una gran bienvenida sabes porque, porque ellos hubieran hecho lo mismo.
Era cierto, con recuerdos escondidos en su subconsciente recordaba muchas veces que le decían que sus padres eran muy amables y que harían lo posible por sonreír a la gente, sobre todo a las personas que lo rodean.
Midoriya: gracias, c-creo q-que me enfocado mucho en el pasado y no he podido avanzar de desde... —tocando su cicatriz del cuello— ese momento y no sé cómo hacerlo.
Tadano: comienza con aceptar que ya no puedes cambiar lo que te paso, trata de aprender de los errores del pasado —poniendo una mano en el hombro de Midoriya.
Midoriya: creo que tienes razón, eres bueno Tadano-Kun —dando una media sonrisa, se pudo relajar un poco y en su mente estaba la palabra no cambiamos el pasado, aprendemos de ello— ¿E-E-Estas seguro de que n-no se eno-enojara tu padre? —pregunto un poco nervioso de estar abusando tanto de la confianza de Tadano.
Tadano: tranquilo, el aria lo mismo si estuviera aquí —dijo con un poco de tristeza, Midoriya no detecto ese sentimiento triste.
Midoriya: ¿Esta trabajado? —fue lo primero que se le ocurrió.
Tadano: sí, fuera del país —digo tranquilo luego vio como Midoriya soltó un decreto suspiro pensado que había tocado un tema muy personal, luego dio una reverencia y empezó a ponerse la playera de color negro.
(Solo que con más ojeras y un parece en su mejilla y como 8 pecas la imagen tampoco es mía)
Tenía que admitirlo, estaba caliente y le quedaba extrañamente bien.
Tadano: te queda bien —extendiendo el gorrito, el peliverde lo acepto con gusto y se lo puso, tapando un poco sus rizados cabellos color verde oscuro.
Midoriya: y eso que este tipo de playeras le gustan a un amigo, y esto es mejor que una liga o recogerme el cabello, muchas gracias Tadano-Kun —dijo para después dirigirse a la puerta con los tenis en mano, cuando ya estaba cerca se sentó en la escalera y se puso los tenis rojos con detalles verdes y un poco de algodón blanco en las puntas.
Tadano: ¿Quieres una sudadera? —preguntándole.
Midoriya: n-no gracias así estoy bien de verdad —por alguna razón solo se sentía ajusto con lo que llevaba puesto.
Tadano al recibir esa respuesta igual fue por tres bufandas, una para él, otra para su hermana y una para Midoriya.
Tadano: ten, te trague una porque te puedes resfriar —extendiendo la bufanda.
Midoriya: n-no puedo aceptarla ya han hecho mucho por mí y la chica, así estoy bien de verdad —intentado no ser mal educado.
Tadano: no hay problema, pero no quiero que te enfermes, sería muy malo que la luz de esta zona departamental se enfermara ¿no crees? —dijo con una sonrisa mientras seguía extendiendo su mano para que Midoriya tomara la bufanda.
Midoriya: creo que tienes razón, solo esta vez Tadano-Kun —aceptando la bufanda y poniéndosela.
Ya cambiando, pero menos abrigado salieron... y otra vez por extraño que parezca el peliverde no sentía tanto frio, y eso que le llego un mensaje de AVE que ahora están como a -8 grados centígrados o 17.6 grados Fahrenheit, por su parte Tadano le dio un escalofrió y empezó a hacer ficción con las manos y volvió adentro para traerse unos guantes y de paso abrigarse bien y traerle una sudadera a Midoriya.
Midoriya no sabía cómo se sentía, tanto paso en tan pocas horas que ahora no sabe en qué pensar. Descubrir que hay una gran cantidad de gente que te hubiera apoyado, pero por ser muy tímido no salía mucho de casa no logro conocer a todas estas personas. Darse cuenta que sus papás eran muy respetados y hasta queridos en esta zona fue mucho para él, además de tener un pequeño momento de tristeza por haber alegado a sus padres de estas buenas personas. Pensaba en que hubiera pasado si no se encontraba a esa chica.
Él no tenía pensado volver a donde una vez lo llamo hogar, tal vez más adelante cuando se gradué de la U.A o cuando su madre despierte. Que ese es otro gran miedo que está en su corazón... que su mamá no despierte nuca más y nuca haga las pasas con su padre.
Pero ahora tenía que hacer algo... mientras veía las pocas luces encendidas de los departamentos ya que son 4 edificios juntos simulando un cuadrado, y en un lado de todas las puertas de los departamentos hay una pequeña ventana donde se puede ver muy poca luz, entendiendo que están despiertos.
Miro al cielo, los copos de nieve caer más lento, aunque aún estaba una brisa helada, por alguna razón se estaba tranquilizando y acomodando sus ideas con el silencio tranquilizador.
AVE: ¿Qué va a hacer amo Izuku? —saliendo de su modo de camuflaje.
Midoriya: lo que le jure a All Might y a mi mamá... hacer sonreír a las personas, pero esta vez no con Quirks... are lo que mi padre me estuvo enseñando desde pequeño y que poco a poco fui perfeccionado con el paso del tiempo y hacer que todos aquí sonrían y se diviertan —sonriendo con determinación AVE se volvió a ocultar ya que escucho la perilla significando que Tadano ya estaba saliendo.
Tadano salió con unos guantes de color negros, muy normales a la vista de cualquiera mientras traía un poleron para Midoriya, pero sintió como ahora se veía más determinado.
Tadano: ¿paso algo? —pregunto mientras le extendía la prenda, el peliverde con una sonrisa y esta vez sin protestar agarro la prenda.
Midoriya: ¿Sabes tocar un instrumento? —dijo muy animado, Tadano juro que otra vez podía ver estrellitas en los ojos del peliverde.
Tadano: ¿HEE?
Fin del capítulo
(ufff creo que ahora va el desenlace que tal vez sean 3 o 2 capítulos, lo malo es que no lo pude terminar antes de navidad, pero aquí estará esta historia, en fin. Espero que les este gustado esta historia mal escrita ¿Qué te esta pareciendo?)
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