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28. Regreso

He vuelto banda

Espero que disfruten el capítulo y disculpen la demora.

<3

ALLISON POV

Hay muchas cosas que decir desde mis salidas con Melanie. 

Hay tantas cosas que decir...

Ahora veo a Melanie diferente.

Ya no la veo como al principio.

                                  ***

Finalmente ingresé al salón de clases y lo primero que hice al ver a Melanie entrar con sus amigas, la saludé con la mano, mientras sonreía con los labios cerrados.

Ella al verme, se quedó como estatua, mientras me sonreía con una boba sonrisa moviendo su mano de arriba a abajo repetidamente.

-Eh Melanie -la llama Lucía-. Melanie, venga muévete.

-Ya la perdimos -dijo Camila.

Acto seguido, me levanté de mi asiento y caminé hasta dar con Melanie. Nuestras miradas se interceptaron, y me pareció que nos volvimos una misma. Pues nuestras reacciones se volvieron exactamente idénticas.

-Hola -dijimos al unísono.

-¿Qué haces? -le pregunté.

-Bien ¿y tú? -contestó y yo me reí dulcemente-. No, es decir... nada. No hago nada.

-Que lindo el techo, ¿verdad?

-Sí.

Más sonrisas.

-¿Cómo estás? -me preguntó mientras se ruborizaba.

-Nada, ¿y tú? -respondí con una sonrisa.

-Bueno, nos vemos -dijo y se dió la vuelta dispuesta a irse. Pero en su defecto, a mi también se me ocurrió lo mismo y, terminamos chocando y riéndonos.

Yo por otro lado, sostuve sus brazos mientras le preguntaba: "¿Estás bien?" Mientras nuestras tímidas sonrisas hacían acto de presencia.

-¡Venga, moveos! -nos acarrea Lucía-. Par de tortolitas.

Melanie y yo miramos a Lucía, y después nos miramos la una a la otra, con una timidez acompañante. Ante eso, Lucía suspiró y finalmente se rió.

-¿Qué os pasa a vosotras? -preguntó Lucía.

-Tienen sintomas de estupidez, osea de enamoramiento -contesta Camila.

-¡¿Ehhhhhh?! No, no -dice Lucía con la boca entreabierta-. Eh tú Allison, reacciona, tenemos que hablar.

Lucía un momento después me mueve de un lado a otro mientras me habla, a lo que yo le respondo que no quiero hablar de eso con ella.

Y todo seguía así, hasta que llegó el profesor Marcos al aula.

-Buenos días muchachos -nos saluda-. ¿Por qué están a medio camino?

-Reaccionad -nos susurra Lucía y salimos del trance del que nos encontrábamos.

Posteriormente Melanie y yo observamos al profesor, quien lucía cruzado de brazos esperando por algo.

-¿Por qué está parado a medio camino? -cuestionó Melanie.

-Estoy esperando a que me dejen pasar -respondió. 

-Perdone -dijimos y posteriormente nos fuimos del lugar para ir a nuestros asientos.

El profesor Marcos finalmente pasa como es debido y deja su mochila en el escritorio. Seguido de eso, comienza a anotar ejercicios matemáticos en el pizarrón. Los cuales al verlos, los comencé a anotar en mi libreta.

[...]

Finalmente llegó el recreo.

Estando afuera del salón con Melanie, la miré detenidamente durante unos segundos mientras retrataba su belleza.

Un segundo después pronuncié:

-Melanie.

-¿Si? -respondió tímida.

-Tienes algo en tu cabello -le dije tras verla con atención, y posteriormente quitarle la hoja que yacía en su cabello.

Un momento después, comencé a contarle una anécdota triste a Melanie mientras hacía ademanes con mis manos.

-Y entonces abrí el refrigerador y ya no encontré mi flan.

-Chale -dijo con tristeza. -Eso es lo peor que nos puede pasar en la vida. Por cierto, ¿ya te conté la vez en la que...?

Melanie como siempre, y sorprendiendome, me contó una anécdota similar a la mía. Solo que aquí las víctimas son ella y su Gansito.

Seguido de eso, nos invadió un silencio acogible a las dos. Y si, me gustaba este silencio. Porque nos miramos en silencio, y en medio de mis pensamientos, decidí lanzarme a Melanie y hacer algo que deseaba hacer. Poner mi mano en su hombro. Así que toqué su hombro y con una sonrisa le dije mis sentimientos.

-Eres una gran amiga para mí, Melanie.

Melanie sonrió y finalmente agregué:

-Tengo que ir con Lucía. Nos vemos Melanie.

Acto seguido, me despedí de Melanie chocando los puños y después me fui en busca de Lucía, la cual me debía dinero, pero como siempre estaba perdida.

                                    .

                                    .

                                    .

Una vez que se terminó el recreo, regresamos al aula, y le mandé mensaje a Melanie a través de Whatsapp.

Yo: Hola Melanie.

Yo: ¿Cómo estas? 🖤

Melanie: Hola, hola bien ¿y tú? <3

Yo: También, por cierto, ¿crees que puedas pasarme los apuntes de historia?

Melanie: Sí, claro.

Un instante después, Melanie me pasó un archivo que eran los apuntes de historia.

Yo: ¡Gracias! Eres la mejor. :)

Melanie: De nada. :)

√√

Iba caminando casualmente afuera de los salones, pero de pura casualidad me tope con Melanie, pero no estaba sola. Estaba acompañada de un chico de tez blanca, con pecas y de cabello pelirrojo. 

Ví que Melanie le susurro algo, pero no pude escuchar que era.

Me acerque y noté como Jeremy se reía de todo lo que Melanie decía y la miraba como si fuera la única sobre la tierra. ¿Mmm? 

-¿Cuál es la única letra que puede comerse? -preguntó y Jeremy se encogió de hombros-. La g-latina, ¿entiendes? 

-¿Me tengo que reír por lo malo que es el chiste o por obligación?

-Aqui viene otro -dijo y noté como Jeremy blanqueo los ojos. -¿Cuál es el lápiz que mata? Lapiz-tola.

-Me haces llorar -espetó.

-¿No te gustan los chistes de Melanie? -dije apareciendo frente a ellos-. ¡Son buenísimos!

-¿Ya escuchaste el "¿cuál es la salsa favorita de Barbie?" -pregunta Jeremy y yo ante eso, negué con la cabeza. -La Barbie-Kiu y eso que es el primero que me dijo.

-Uy, malísimo.

-Pensé que te gustaban, Allison -dije.

-Claro que me gustan tus chistes, pero de los malos que son, Lanie -dije.

No hubo respuesta por parte de Melanie. Ella le indicó a Jeremy con su dedo índice que se acercará y él lo hizo tras agacharse.

Melanie le susurro algo al oído, que no pude escuchar y después Jeremy la abrazo.

No dije nada al respecto, solo los mire sin decir nada al respecto. Pero solo sé que quisiera estar en el lugar de Jeremy...

Jeremy se separó de Melanie y ella recostó su cabeza en su hombro mientras me sonreían. Ante eso, los miré con el ceño fruncido y con una mueca.

-¿Qué pasa, Allison? -me preguntó Jeremy con una sonrisa burlona.

-No pasa absolutamente nada -respondí cortante.

-Si tú lo dices -contestó tocando su cabello.

Y yo cometiendo un impulso, llegué con ellos y los separe.

-No la toques -dije yo.

-¿Por qué? 

-Porque sí -contesté cruzandome de brazos.

-¡No me digas! -exclama Jeremy-. ¿Estás celosa?

Melanie me miró sorprendida y yo la miré fuzgamente. Posteriormente desvíe la mirada hacia Jeremy y un sonrojo cubrió mis mejillas.

-¿Qué? Claro que no -respondí-. No estoy celosa.

-Estás celosa -me señala Jeremy-. ¿Quién lo diría? Allison Rodríguez celosa.

-UFFFFFF me voy -sentencié y me fui.



Ya lejos del lugar, me encontraba recostada debajo de un árbol, mientras miraba el dibujo que me hizo Melanie.

Ella es tan única.

Estas cosas nunca antes la habían hecho para mí las chicas que decían estar enamoradas de mi.

Si, ella es realmente especial.

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