La razón por la que había invitado a Melanie, a escucharme tocar el piano es porque quería acercarme más a ella.

Tal vez algo en mi estaba cambiando y apenas me estaba dando cuenta.

Estando en clases, las cosas cambiaron cuando llegó el recreo.

-Un momento, ¿a dónde van todos? ¿a poco yo dije que podían salir? Se me regresan todos a sus lugares.

Joder.

Justo cuando al profesor se le dió la gana dejarnos salir, salí del salón después de haberle guiñado el ojo a Melanie.

Un instante después, llegué al salón de música y visualice a los lejos a una rubia muy peculiar.

Ivonne Hadson.

¿Qué demonios hace ella aquí?

No obstante, me acerqué y abrí la puerta del salón de música. Pero sin querer golpee con mi codo la cara de la peliteñida.

-¡Auch! -se queja Ivonne y un instante después agrega: -¿No te vas a disculpar, Allison?

-¿Por qué lo haría? -repuse.

-Porque me golpeaste -dice obviando.

-¿Y qué ganas con eso? Si el daño ya está hecho.

-Está bien, te perdono Allison.

Posteriormente llega Melanie y las tres entramos al salón de música, yo voy en medio mientras que a mi lado derecho se encuentra Melanie y en el lado izquierdo Ivonne. Casualmente, nuestras manos en más de una ocasión se han rozado. Y ante eso, Melanie busca acercarse aún más hacia mi.

-¿Melanie, por qué estás tan cerca? -le pregunté.

-Emmm... Yo...

-¿Y eso qué importa? La sana distancia Melanie, aléjate, aléjate -Ivonne de un segundo a otro se encuentra a su lado moviendola y jalandola para que se quite de mi lado.

-Ivonne sólo tengo una pregunta -dijo Melanie cuando Ivonne se detuvo. -¿Qué haces aquí?

Clavé mis ojos en Ivonne a la espera de una respuesta.

-Vine por mi guitarra -respondió y en los varios instrumentos que hay en este salón, la peliteñida cogió una guitarra acústica.

-¿Es tuya? -preguntó Melanie con curiosidad admirando la guitarra y tomándose el atrevimiento de tocarla.

-No toques, solo mirar -dijo Ivonne alejando su guitarra. 

-¿Tocas la guitarra? -respondió Melanie.

-Sí, desde que estoy pequeña lo hago, hacerlo me tranquiliza, solía tocarle canciones a mi abuela. ¿Y por qué te estoy contando todo esto? Metiche.

-Sólo quería saber...

-¿Estás en el grupo musical de aquí, Ivonne? -pregunté.

-No, me gusta tocar más en solitario -contestó Ivonne.

-¿Vas a tocarnos una canción, o me vas a ver limpiar mi piano? -agregué esperando a que nos diera privacidad.

Descubrí mi piano, y dejé la manta negra en la mesa chiquita posterior de color madera oscuro.

-Tengo voz fea -dijo Ivonne.

-La otra vez me cantaste una canción con la voz desafinada, pero la intención es lo que cuenta -añadí. 

-Ya no te volveré a cantar una canción, sólo te burlas de mí.

-Nunca te pedí que lo hicieras -respondí con frialdad.

-De cualquier forma ya me voy -al fin.

Fue hacia la puerta pero antes de irse, se regresó y nos miró a las dos.

-¿Van a estar solas?

-Sí -contestamos las dos.

-¿Solas sin nadie más? -asentimos. -Entonces me quedo.

-Ivonne, ¿por qué quieres estar aquí? Allison solamente me va a enseñar una canción, ¿qué tiene eso de malo? -espetó Melanie.

-Eso no tiene nada de malo, lo que está mal, es que se van a quedar solas. -insiste.

-¿Y qué? -dijo Melanie.

-De cualquier forma, aquí voy a estar -asegura y procede a sentarse en el suelo a afinar su guitarra.

Melanie me miró y yo suspire cerrando los ojos. No puede ser.

Un instante después, saqué a Ivonne y suspire con tranquilidad.

-Ivonne sí que es terca y necia -comentó Melanie y yo asentí.

Posteriormente, limpie un asiento y después mi piano. Y cuando termine, le indique a Melanie que se levantará.

-Siéntate -le dije.

Melanie hizo caso a mi petición y se puso a mi lado.

Un segundo después, comencé a tocar en el piano una melodía que para Melanie debería ser muy conocida. Es "Photograph" de Ed Sheeran. 

-Loving can hurt, loving can hurt sometimes, but it's the only thing that i know... -empecé a cantar.

Melanie me inspiraba muchas cosas.

-So you can keep me, inside the pocket of your ripped jeans... Holdin' me closer till our eyes meet. You won't ever be alone, wait for me to come home...

Dejé de cantar, pero no de tocar el piano. Mi ánimo había bajado considerablemente. Algo me atormentaba en silencio. Algo me lastimaba más de lo que esperaría. Pero todo pareció cambiar, cuando Melanie sujeto mi mano y me miró. Ante eso, yo deje de tocar el piano en seco,

-T-Tus manos son cálidas... -me dijo Melanie. 

-La mayor parte del tiempo son frías. -dije sin darle importancia.

-Me gustan tus ojos -confesó.

-Gracias.

-Y tu... Y tu cabello castaño también me gusta... -miró con detalle y detenimiento mi rostro.

Dashton ligandome era algo nuevo para mí. Nunca antes nadie me había coqueteado como ella lo hace. Pero no era malo. Era nuevo e increíble.

-También me gusta... Tu voz es muy bonita... -para estos puntos Melanie ya era un tomate andante.

-Gracias, la tuya también es bonita.

Antes de que Melanie respondiera, comencé a tocar el piano y le dije:

-Está canción es para ti.

-Yo también tengo una canción para ti... -dijo tímidamente.

-¿En serio? -pregunté inclinando mi cabeza para atrás.

-Sí...

Así que la deje tocar mi piano, y ella torpemente y con timidez, tocó el piano. Presionó las primeras teclas que vió, y aunque no sabía tocar el piano, trataba de parecer alguien experta y segura de si misma. Pero todo empeoró con mis miradas insistentes, la estaban poniendo más nerviosa.

-Para Melanie -le ordene entre risas. Mis manos buscaban frenar sus movimientos pero Melanie no estaba dispuesta a ceder.

Mis manos lucharon para que parará, pero no quería detenerla porque no me gustara su canción, sino porque quería saber que significaba su canción. Entre medio del forcejeo, Melanie se dió la vuelta y yo aproveché para tomar sus manos.

-¿La canción qué expresa, Melanie?

-Nada...

-Dímelo Melanie, porque me ha parecido que la canción, expresa bastantes cosas y una de ellas es....

Que yo te gusto, ¿verdad?

La campana sonó.

Bonita la hora en la que suena.

[...]

Salimos del salón de música, y en el camino me mostré emocionada. Pues mañana podré ver la segunda parte de mi película favorita.

-¿Va a salir la temporada 7 de Teen wolf? -me preguntó Melanie sacándome de mis pensamientos.

-Nope, es mucho mejor -contesté sin dejar de ver mi celular con una boba sonrisa.

-¿Va a haber tercera temporada de Sekaiichi Hatsukoi?

-¡Es aún mejor! -expresé. 

-¿Beso Malec?

-Nop -respondí. 

-¿Entonces? -preguntó.

-Prepárate, porque esto es algo increíble, algo que jamás has visto en la vida, hasta apenas hoy, lunes deciniueve de octubre...

-¿Qué es? -cuestionó emocionada.

-Se estrena Millonarios en Apuros 2 -respondí emocionada y ella frunció el ceño-. Es mi película favorita, he estado esperando tres años para ver la segunda parte y hasta apenas hoy. Después de tres años, hoy diecinueve de octubre, se estrena y anuncian el tráiler.

-Qué increíble -dijo y después agregó: -¿Cuándo vas a ir a verla?

-Este viernes -afirmé con una gran sonrisa en mi rostro-. Tengo que verla si o si, no me la puedo perder por nada del mundo.

-¿Puedo ir contigo al cine? -cuestionó.

-Seguro.

Estoy tan feliz.

Tanta espera valió la pena.

Finalmente llegamos al salón y yo entre al salón, pero ví a Melanie tan absorta en sus pensamientos, que estaba apunto de golpearse.

-Hey -le dije tomando su brazo.

Ya adentro del salón, una señora entró de la nada al salón y nos dijo:

-Buenas tardes jóvenes. ¿Cómo están?

Preguntan eso pero ni siquiera les importa realmente como estamos.

-¿Alguien de aquí me conoce? -pregunta la señora.

-No -contestan algunos a coro.

-Yo trabajo aquí, soy la orientadora María Elena -dice y nos saca de dudas y un instante después agrega: -Cómo sé que están en temporada de exámenes, estos muchachos -señala a los muchachos que están a su lado y ellos nos saludan por educación-. Y yo, les vamos a dar una actividad para que despejen su mente, desconecten un poco de la preparatoria y se diviertan, pues han tenido una semana ajetreada y llena de exámenes por lo que he visto. Ya varios muchachos han publicado en su facebook "alguien salveme de los exámenes" , "tengo mucho estrés por las tareas y exámenes" y no me voy a quedar de brazos cruzados, por lo que yo y mi grupo hemos hablado con el director y él ha estado de acuerdo. Ahora les diré de que va su actividad, la actividad consiste en decorar un pastel. ¿Simple, no? Pero lo mejor de todo, es que vamos a premiar a los tres mejores pasteles con un punto extra en una materia a escoger, será por parejas. Ahora todos en orden, vayan con precaución y cuidado a...

Y sin más, salí del aula.

-¿No lo quieren, verdad? -preguntó la profesora.

-No -responde fríamente el profesor de matemáticas.

Yo estaba cruzada de brazos, mirando a la nada, hasta que la señora María Elena dijo: 

-Formen dos parejas y después les daremos un pastel a cada uno -da las indicaciones posteriores.

Suspirando, miré a mi alrededor, hasta que Lucía apareció de la nada y acercó a Melanie conmigo.

-¿Qué os parece si vosotras os ponéis juntas? -habla Lucía.

-Sí, es una buena idea -dijo Melanie emocionada.

-Cool -dije yo.

-Ahora les darán un pastel a cada uno y deberán decorarlo. Recuerden, la creatividad no tiene límites. Las tres parejas que lo hagan mejor, tendrán un punto extra en cualquier materia.