Tal y como indicaron por la megafonía, Shade tenía que esperar en aquel mismo pasillo a que fueran a buscarla para hacer la prueba que determinaría si era o no apta para quedarse allí estudiando, aunque si se quedó sorprendida al ver que, del grupo con el que había hecho el examen, solo ella y un chico pelinegro que, a juzgar por sus orejas ligeramente puntiagudas y los colmillos afilados que le había visto, se trataba de un vampiro, habían pasado la prueba escrita.

Durante el camino, este iba con las manos en el bolsillo de la sudadera roja que llevaba, mirando de reojo a la chica -Así que tú eres la famosa demonio, ¿no? -comenta fijando en ella su mirada rojiza.

Esta por su parte suelta un ligero bufido rodando sus ojos -Ya empezamos con esa mierda... -dice en un tono más bajo -Sí, ¿y eso qué? -le pregunta frunciendo su ceño mientras lo miraba de reojo.

Ante su agresividad, el vampiro se ríe levemente -Oh nada, era genuína curiosidad -comenta ofreciéndole luego una de sus manos para un apretón -Me llamo Malcon, un gusto conocerte al fin -le dice con una sonrisa ladeada.

En cuanto a Shade, esta se lo queda mirando con desconfianza, dirigiendo su vista al frente -Ya, seguro que si -no se fiaba nada de esa "encantadora" sonrisa del contrario, ni siendo un vampiro, otra de las razas que solía ser mal vista en ciertos lugares, podía fiarse de que aquello era algo genuino.

Al notar que ni con esas se fiaba, el vampiro deja de insistirle y solo se encoge de hombros, continuando así su camino junto a ella sin decir nada más.

Finalmente, ambos llegan al final de aquel largo pasillo, encontrándose de frente una puerta metálica.

-"Bienvenidos a la parte práctica de su prueba de admisión jóvenes" -se escucha desde la megafonía, haciendo que ambos alcen su cabeza hacia el altavoz -"Como ya se les explicó, todos los años cambiamos esta parte del examen, y este año solo hemos pasado a los dos mejores de la parte escrita."

Aquella revelación sorprendió bastante a la pelinegra, ¿tan poco necesitaban gente nueva que iban a ser tan selectivos ese año?

-"Como son solo dos por aula, la mecánica de este año será que, en cuanto pasen por esta puerta, serán compañeros de equipo." -al decir eso, una pantalla sobre la puerta metálica frente a ellos se enciende, mostrando un mapa esquemático de la zona en la que estaban por entrar con un par de muñecos en lo que sería la entrada -"Su objetivo será llegar al punto de reunión en el límite de una hora, y aunque ambos logren llegar juntos, no querrá decir que ambos pasen, los estaremos observando en todo momento para determinar si pasarán ambos, uno o ninguno" -aclara el altavoz.

Si bien la idea de hacer equipo no era algo que la emocionara especialmente a la demonio, solo suelta un ligero suspiro para tratar de tranquilizarse y concentrarse en lo que venía.

-"Bien jóvenes, adelante" -dice la megafonía, empezando así a abrirse la puerta metálica para permitirles el paso -"Oh, y una cosa más. Cuidado con las trampas aspirantes" -comenta en cuanto ambos chicos pasan la puerta y esta se cierra tras ellos.

-Bueno, eso era algo obvio creo yo -comenta Malcon soltando una ligera risa -En fin, tú tranquila, yo me encar... -iba a avanzar mientras decía eso, pero ella lo detiene.

-Espera, no puedes meterte en terreno desconocido a la ligera... Y menos aún tratando de hacerte el fuerte solo por ser un chico -le dice Shade rodando ligeramente los ojos -Los vampiros tendeis a ser relativamente frágiles por el día, ¿me equivoco?

-Agh, que aburrida -comenta Malcon dandole una patadita a una piedra frente a él -Bueno, si a fragilidad le llamas no estar al 100% en fuerza, podría decirse, ¿pero eso qué?

-Que habrá trampas, y seguro algún que otro monstruo, y sea como sea voy a pasar este examen, así que no puedo permitirme que tu carita de porcelana se estropee lo más mínimo -comenta ella mirando al frente para concentrarse.

-Vaya, si que tienes lengua cuando quieres -le responde este con una risa seca -¿Y bien? ¿Tienes un plan sombrita? -pregunta con una nueva sonrisa ladeada.

-Ha ha, que gracioso -responde ella rodando sus ojos -Pero si -continúa diciendo mientras daba un paso al frente, empezando su propia sombra a moverse por separado de ella y avanzando, atrayendo hacia esta las sombras de los árboles, rocas y demás cosas que hubiera cerca.

Tras unos segundos en los que el vampiro observa en silencio con curiosidad, nota como los pequeños cuernos de la chica ahora sobresalían de su cabello unos cinco centímetros aproximadamente, notando así tambien que su mirada ahora era más oscura incluso que antes al haber cambiado sus escleróticas a un tono más grisáceo.

-Ahora ambos estamos seguros, puedo ver todo lo que pasa en un radio de 5 metros -le anuncia dejando de lado el hecho de que su apariencia era algo más demoníaca y se la "mostraba" a alguien más.

Por su parte, a Malcon no parecía importarle, sonriendo ampliamente al escucharla -Perfecto, lo que no veas, entonces lo escucharé, y ahora andando -le responde yendo delante de ella, siendo pronto seguido por esta misma.

Mientras la prueba pasaba, para algunos más fácil que para otros, los que se encargaban de evaluar a los aspirantes iban anotando cada uno lo que consideraba que podían mejorar o que directamente los descalificaría, siendo ya varios equipos los que habían logrado llegar pasada la mitad del tiempo de la prueba.

Al haber pasado ya la primera mitad de la prueba, Kaleb entra a la sala para comprobar que todo iba bien -Bueno, ¿cómo va la cosa?

-Bastante bien señor Kaleb, todos prometen bastante, incluída su recomendación -comenta uno de los encargados con un ligero tono despectivo al final.

-Si se refiere a Shade, que deduzco que sí, mejor no lo haga de esa forma. Esa jovencita ha vivido con toda la tranquilidad que le han permitido, y su condición nunca afectó negativamente su comportamiento -le responde con seriedad, escuchándose al poco de terminar de hablar una alarma.

-¡Señor! Hay un demonio en el área de pruebas -dice el de seguridad al ver el código de la alarma.

-Eso ya lo sabía... -el examinador que le iba a responder termina siendo cortado por el encargado.

-No señor, hay al menos OTRO demonio más de lo que debería -recalca con urgencia, tenían que localizarlo o localizarlos cuanto antes, y sobre todo, poner a los aspirantes a salvo.