.- cuanto tiempo sin verte, hana-chan.- le dijo aquel joven con una voz gruesa.

.-¿Quién eres?.- pregunto Hanako, mas seria de lo que jamás había estado, desdé que había llegado a konoha. De seguro, si alguien que la conocía la viera en ese momento se sorprendería.

El joven miro hacia los lados y frunció el ceño. No paso mucho tiempo antes de que le hiciera una seña a la albina para que lo siga. Ella, al principio dudo un poco, pero al final seguirlo. Después de todo, necesitaba averiguar quien era y no hablaría en un lugar repleto de gente.

Caminaron un poco, entre los pasillos, hasta llegar a una habitación vacía. Ambos entraron en ella y Hanako se quedo a una distancia prudente de aquella extraña persona.

.- si lo que querías era estar solo, ya lo estamos. Así que responde a mi pregunta,¿ quien eres?.- hablo Hanako, observando cada movimiento de aquel individuo. No podía bajar la guardia, nadie le decía que aquel joven no la atacaría.

.- sonrió.- me sorprende que no recuerdes este aroma. La verdad, creía que lo recordabas bien y al notarlo huirías o lago así, pero al parecer tuve suerte.- comento el joven, sentándose en la cama. El comentario confundió un poco a la albina, sim embargo eso no duro mucho.

El joven, desapareció entre una bola de humo, la cual cegó un poco la vista de la mizushima. El humo, llegando donde se encontraba ella, pero comenzó a abanicarlo con la mano para así disiparlo. Cuando el vapor desapareció por completo, ella pudo ver al fin a un hombre ya de unos 30 años de edad.

Él, era de tez blanca y de complexión delgada. Tenia un poco de musculo, pero no los suficientes para que se viera corpulento. Su cabello era laceo y le llegaba un poco mas debajo de las orejas, de un marrón oscuro. Sus ojos no eran muy expresivos, pero detonaban por lo menos unos pocos brillos. Eran de un color grisáceo con alguno que otro destellos negros.
Su vestimenta era la misma que tenia cuando estaba transformado, no habían tenido ni un mínimo cambio.

.- Yuu-san...- susurro.- creía que tardarías mas en aparecer. viniste para llevarme de regreso, ¿cierto?.-comento Hanako, sin apartar la vista al hombre que estaba sentado en la cama.

.- no exactamente. Quería ver como ibas con esa estupidez de ser libre.-comento Yuu.

.- no es estúpido. No quiero pasar toda mi vida teniendo que hacer lo que quiera, solamente cuando ustedes me dan permiso. Además...

.- si, si, como digas. Solamente es otro mas de tus caprichos. La verdad, ya me estoy cansando de ellos. Pero que se le puede hacer, el capricho ya esta echo.

.- ¿de que estas hablando?, ¿dejaras que me quede?.- pregunto Hanako.

.- se podría decir que si. Dejare que sigas con este tonto capricho tuyo. De seguro, como todos los demás, lo olvidaras en uno o dos meses y volverás con nosotros. Sin embargo, este será el ultimo, ya me di cuenta de que tan lejos puedes llegar, no dejare que sigas siendo tan malcriada.- se incorporo de la cama y camino hasta donde se encontraba la albina.- Tienes solo dos semanas para regresar. Te daría un mes, pero por las circunstancias en las que nos encontramos, necesito a mi niña favorita a mi lado lo antes posible.- comento pellizcándole los cachetes a la neko.

.- no importa cuanto tiempo me desuno regresaré.- dijo Hanako seria.

.- eso dices ahora, pero veras que en dos semanas te aburrirás de esto, como siempre haces con todo. Y si no es asa, no tengo otra opción que llevarte a la fuerza y te tomare represaría por escaparte. Asa que se buena niña y hazle caso a Yuu-san.- dijo sonriente, mientras ebria la puerta de la habitación.- espero que nos veamos en dos semanas, hana-chan.- se despidió, saliendo por fin de la habitación y dejando sola a la albina.

" solo dos semanas... esto no es bueno."

Pensó Hanako, saliendo ella también de la habitación, para así ir donde se encontraba Obito esperándola. Camino por los pasillos de la casa, olvidándose por completo de la música a todo volumen del lugar. Solo se estaba concentrando en una cosa, en Yuu y la conversación que había tenido con él hace apenas unos minutos. Después de eso, todo a su alrededor no existía, era transparente para sus ojos.
Después de un tiempo, llego a la puerta de entrada, donde Obito la estaba esperando. Este, al verla le sonrió radiantemente, como siempre lo hacia.

.- si que tardaste mucho, ya estaba a punto de ir a buscarte.- le dijo Obito.

.- lo siento, me perdí camino aquí.- se excuso, intentando estar lo mas relajada posible, para que así, Obito no sospechara.

.- tranquila, ya me parecía que era algo como eso. Creo que con tanta gente no es extraño que te pierdas. En fin, vámonos a casa, de seguro kakashi ya estará dormido y nos costara despertarlo cuando lleguemos. A haya.- dijo el uchiha caminando rumbo a la casa del hatake, seguido de Hanako.

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Hanako y Obito se encontraban en la puerta del departamento de kakashi, intentando hacer que él les habrá. Ya habían golpeado varias veces, pero nada, no había ningún signo que el peliplata les vaya a abrir.

.- intentemos otra vez .- dijo el uchiha.

Obito golpeo tan fuerte la puerta que parecía que la tiraría en cualquier momento. Hanako se sobresalto por el sonido del golpe, no se esperaba ese volumen del toque.

Ambas personas, después de aquello, pudieron escuchar unos pasos adentro del departamento. Obito sonrió orgulloso de por fin despertar a kakashi, mientras que Hanako no estaba segura de que eso era algo bueno.

La puerta se abrió. Kakashi, se encontraba a simple vista cansado y al parecer malhumorado.

.-¡por fin!, ya me estaba cansado de golpear.- dijo Obito sin sacar su sonrisa.

.- la puerta se encontraba abierta, no tenían porque despertarme.- les informo kakashi con una voz rasposa, provocado de haberse despertado de repente.

.- lo siento.- se disculpa Hanako.

Kakashi, se hizo a un lado para dejar pasar a Hanako. Ella sin reusarse, entro y se recostó en el futon. Necesitaba descansar, esa conversación la había agotado. Sin decir, el constantes estrés de saber el enorme problema que se avecinaba.

" solo son dos semanas, no me volveré lo suficientemente fuerte para poder derrotar a Yuu. Se lo tengo que decir a kakashi, él me ayudara. Además, dijo que era fuerte, ¿no?. Él podrá contra Yuu-san."

Pensó en su inconsciente Hanako, cerrando sus ojos para así dormirse. Sabiendo, que kakashi aun se encontraba en la puerta charlando con Obito. No paso mucho tiempo antes de que ella cayera dormida, teniendo como ultimo pensamiento lo que le había dicho Yuu.

Kakashi cerro la puerta y giro sobre sus talones, para así volver a la cama.

.- oye, Hanako.- la llamo, pero no recibió ninguna respuesta. Volteo a verla, encontrándola dormida con solo la ropa que llevaba puesta como abrigo.

Kakashi abrió el closet y saco una manta azul un poco gruesa. Con esta, tapo por completo el cuerpo de la joven, sintiendo la piel fría de Hanako. Aun asa, su piel se encontraba suave y sin ningún indicio de tenerla como gallina.

" esta comenzado a hacer frio, no es bueno que vaya con ese vestido. Quizás mañana pueda comprarle algo mas abrigado"

Pensó kakashi, en el momento que se acostaba en la cama.

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Kakashi entro en el departamento con una bolsa con ropa en la mano. Se dirigió al escritorio y dejo la bolsa arriba de este. Se volteo a ver a Hanako. Esta, se encontraba aun dormida, babeando la almohada. Kakashi no le hizo mucho caso a esto y tomo su libro, para así leerlo acostado en su cama.

Media hora mas tarde, Hanako se despertó con un inmenso dolor en las orejas y cabeza. Ella no sabia cual era peor, el de las orejas que le dolía todo el tiempo o el de la cabeza que se intensificaba cada vez que se movía.

.- Hanako, ¿estas despierta?.- escucho la voz de kakashi, como si le estuvieran clavando una aguja en el cerebro.

.- mas o menos.-contento sentándose en el futon.

El lugar volvió a estar en silencio después de ese pequeño cambio de palabras. En si, Hanako lo agradecía, por lo menos su dolor de cabeza no iba a empeorar. Sobre sus oídos, vería mas tarde como seguía estando y si ese dolor podía estar avisándole sobre algo malo en ellos.

"solo tienes dos semanas "

Resonaron las palabras de Yuu en su cabeza. No era algo que le gustaría recordar, mucho menos tan temprano, solo quería olvidarlo y poder relajarse un poco. A Hanako, no le gustaba estar todo el tiempo preocupada y estresada por ese asunto. Tampoco sabia como resolverlo, ella no tenia la fuerza suficiente para enfrentarse a Yuu.

" ¡como si fuera a volver, prefiero estar muerta antes que eso!"

Pensó la albina, volviéndose a acostar en el futon. Ya en ese momento, kakashi se había levantado de la cama, un poco cansado de leer.

.- no te duermas de nuevo. Ya levántate.- le dijo kakashi, tomando la bolsa con la ropa y dejándola al lado de la albina.

.-¿ que es eso?.- pregunto la albina abriendo uno de sus ojos, haciéndole caso omiso al peliplateado.

.- ya esta comenzando el otoño y en las tardes refrescan mucho, así que te compre ropa mas abrigada.- respondió relajado.

.-¿en serio?, muchas gracias.- dijo Hanako. No estaba acostumbrada a que le compraran ropa nueva muy seguido. Siempre usaba un conjunto hasta que ya no le entraba o estaba demasiado gastado. Kakashi sonrió en forma de respuesta.

- te esperare afuera, llámame cuando te hayas terminado de cambiar.- dijo kakashi, antes de salir del departamento, dejando el lugar en completo silencio.
Hanako saco todas las prendas de la bolsa y se cambio.

El conjunto consistía en una remera grisácea, que le quedaba un poco ajustada. Una sudadera también gris, exceptuando las mangas que eran negras. Le quedaba un poco suelto, pero no se vea mal en ella. Por ultimo y no menos importante, un pantalón azul obscuro, que al igual que la sudadera, le quedaba suelto.

Miro el conjunto como pudo, para verificar si le quedaba bien y le gustaba. Se sentía ahora mucho mas abrigada que los días anteriores, de los cuales ya empezaban a hacer fríos.
Tomo su collar, que por alguna razón, lo llevaba siempre consigo. Este collar, lo único que tenia era una piedra azulada que a veces cambiaba dependiendo de la luz que había.

.- ¡kakashi-kun, ya puedes entrar!.- le aviso la albina, acomodándose un poco mejor el collar.

Pudo escuchar la puerta del departamento abrirse y vio como kakashi se acercaba a ella. Él la miro de pies a cabeza y le sonrió, lo cual Hanako le devolvió.

.- ¿y?,¿me queda bien?.- le pregunto Hanako, tocando la sudadera con sus dos manos.

Kakashi no dijo nada y simplemente asintió. Hanako le sonrió y, dejando al hatake sorprendido, le abrazo repentinamente. Él se quedo estupefacto unos segundos, hace mucho que no recibía un abrazo, menos uno tan repentino. Además, si se ponía a pensar, era la primera vez que Hanako le abrazaba.

Kakashi sin saber que hacer, le rodeo con sus brazos en la altura de los hombros. Hanako lo miro y le volvió a sonreír, cosa que por inercia kakashi le devolvió. Él sintió como la albina apretaba el abrazo y escondía su cabeza en su pecho.

.- oye, kakashi. ¿Me puedes rascar atrás de la oreja?.- dijo Hanako.

.- ¿ porque me preguntas eso?, si tienes picazón ráscate tu.

.- no es eso, me gusta que me rasquen atrás de la oreja. ¡anda hazlo, si lo hago yo no es lo mismo!.-dijo Hanako, separándose un poco de él y tirándole de la camisa.

.-... no.- respondió kakashi, después de pensarlo un poco. Y sin decir mas, corto el abrazo.
Aunque fuera solo rascarle detrás de la oreja, se le hacia algo muy raro y incomodo. Quizás solo fuera porque apenas y la conocía, pero ni siquiera lo haría si alguno de sus amigos se lo pidiese, era... extremadamente incomodo.

" si me lo pongo a pensar,¿ que se de ella, además de su nombre?... Prefiere las cosas saladas y le gusta un poco las cosas dulces, le gustan que le rasquen atrás de la oreja. ¿Eso es todo?, de verdad no se nada de ella."

Pensó el hatake, sentándose en la cama.

Hanako lo miro y sin ser consiente de su acción, bajo las orejas. Poco después, la albina decidió hacer lo mismo que kakashi, pero en el futon. Y sin mas, el lugar quedo en silencio, un poco incomodo para Hanako.

"quizás no estuvo bien decir eso ,pero ,¿Por qué?"

Se pregunto en su mente la adolecente, mirando de reojo al hatake.

.-kakashi-kun.- le llamo desde los pies de la cama. El nombrado volteo a verla.- etto, lo siento. Creo que no estuvo bien preguntarte aquello, por alguna razón. ¿esta mal preguntarlo?, a mi me parece muy normal.- dijo Hanako, mirando al hatake con sus orejas bajas.

" es muy inocente, no sabe diferenciar entre lo que esta fuera de lugar y lo que no. Ahí ya tengo 5 cosas sobre ella, no esta tan mal."

Pensó kakashi.

.- No, no lo esta. Pero la verdad es que no nos conocemos tanto...

.- otra vez con lo de conocer a una persona, ¿es tan importante eso?. ¿no sabiendo su nombre ya la conoces?.- interrumpió la albina, con el ceño fruncido.

.- si, así es. Pero lo que digo, es conocer mas cósase la otra persona, además del nombre.- respondió relajado kakashi.

La conversación prosiguió por unas horas mas, en las que kakashi intentaba hacer entender a Hanako, la importancia de conocer verdaderamente a una persona. Pero eso no le resultaba tan fácil, Hanako no entendía muy bien lo que decía o ponía objeciones sin sentido. Todo esto, le llevo a kakashi preguntarse donde había estado Hanako para no saber cosas tan primordiales. Aun así no dijo nada, no era de su incumbencia saber el pasado de las personas, aunque las este cuidando.

.-... lo que me estas diciendo no tiene sentido.- sentencio la albina acostándose en la cama, al haberse pasado a esta mientras sucedía la conversación.
Kakashi simplemente se rindió, nunca lograría hacer que deseche esa idea errónea.

Además, ya le estaba cansando esa conversación, prefería invertir su tiempo en otra cosa.
El sonido seco de los tejados siendo golpeados, se podía escuchar débilmente desde adentro de la habitación. Hanako, al percibir aquel sonido, observo por la ventana.

A fuera, se podía ver como las gotas de agua golpeaban los tejados y cualquier superficie mínimamente solida. Como el viento soplaba cada vez mas fuerte y también, la forma en que de a poco el cielo se volvía mas grisácea.

.- esta lloviendo.- manifestó Hanako, sin quitar la mirada del exterior.

Kakashi contesto con un ligero ruido de boca, mie tras se sentaba en el escritorio. No le interesaba como se encontraba el clima afuera, mientras que él eetub8era en su casa. Hanako por otra parte, no le agradaba mucho eso. Aun cuando le gustaba el olor a tierra mojada, quería que aun siguieran esos días soleados, eso si, sin ese calor insoportable. Además no era solo eso, a ella no le agradaba mucho estar encerrada, ya había estado demasiado tiempo de ese modo.

.- oye, kakashi-kun.- lo llamo la albina, sentándose en la cama.

.-¿Qué?.

.- estoy aburrida.

.- puedes leer uno de mis libros si quieres. A excepción de los que están en la ultima estantería, esos no los toques.- le propuso kakashi, pasando la pagina del libro que estaba leyendo.

Hanako se quedo pensativa un momento, sin saber que hacer. Miro la biblioteca llena de libros por unos segundos y posteriormente a kakashi. En el medio de esas dos acciones, inconscientemente sus orejas se bajaron y sus ojos se tornaron de un azul marino, aun así no perdieron aquel brillo característico.

.- no se leer.- declaro al final, un poco avergonzada, la neko.

No le gustaba revelar eso, pues le daba un poco de vergüenza. Pero como antes kakashi estaba con lo de "conocer a una persona", se lo dijo para que por lo menos él sepa algo. Además, cabía la posibilidad de que le enseñara a leer.

Kakashi miro a Hanako sorprendido. Era muy poco usual conocer a alguien de la edad se Hanako que no supiera leer. Escribir y leer eran dos de las cosas que primero se les enseñaba a los niños en la academia, después estaban los números y sumar y restar, pero lo mas esencial era lo primero. Encontrarse a una persona de 15 años que no supiera algo tan esencial, era poco usual. Aunque si lo pensaba, todo de Hanako era poco usual.

Además de enterarse del echo de que ella no supiera leer. Kakashi, vio por primera vez como los ojos de Hanako se encontraban en otra tonalidad de la usual. Mientras que su color de ojos siempre era de un azul cielo, esta vez que la vio era de un azul marino. Era extraño y a la vez cautivador, pues esta tonalidad oscura hacia resaltar aun mas sus ojos.

Todo esto, solo lleno de mas dudas al peliplata. Pues no solo Hanako tenia una apariencia extraña, sino que también carecía de los conocimientos necesarios. En otras palabras, se podría decir que Hanako era un enigma.

.-entiendo... Aquí no hay muchas cosas para hacer, además de leer. Puedes dormir una siesta, si quieres.

Hanako lo pensó por un momento, no era mala idea. Podía dormir todo lo que quisiese sin que nadie le diga nada, simplemente porque ella quería.

Sus orejas volvieron a la forma que las tenia naturalmente y así, se acostó en la cama del hatake. Cerro los ojos para relajarse y dejar que su cuerpo caiga en las manos de Morfeo. Sin embargó, un fuerte ruido hizo que los pelos se le pusieran de punta y que su cuerpo se pusiera en alerta. Poco tiempo después, el mismo sonido se volvió escuchar pero un poco mas débil.

.- k-kakashi, hay truenos.-manifestó Hanako, tapándose con las sabanas, sintiéndose así un poco mas segura.

.- si, ya los escuche.-respondió kakashi, empezando a cansarse de que Hanako le interrumpiera en su lectura.

Otro trueno se pudo escuchar, pero esta vez fue mucho mas fuerte que el anterior, haciendo saltar a la albina. Ella, ya se encontraba con las oreja bajas y mínimamente, temblando. Odiaba los truenos, no le agradaba para nada el sonido que hacían y lo peor era que no lo podía controlar.

Miro a kakashi por alguna razón, notándolo extremadamente tranquilo con aquellos fuertes sonidos. Para Hanako, eso no era algo nuevo, conocía a muchas personas que no tenían miedo cuando los truenos se hacían presentes. Envidiaba a esas personas, ella también quería estar tranquila en tormentas de ese tipo, pero no podía aunque lo intentase.

El sonido de otro trueno, obligo a Hanako a esconder su cabeza bajo las sabanas, convirtiéndose en un boyo en el medio de la cama. Ahí se quedo un tiempo, sobresaltándose cada vez que un trueno se hacia presente. Mientras que kakashi ni se enteraba del sufrimiento que pasaba la albina por esos fuertes sonidos. No hasta que le pregunto:

.- ya casi es hora de cenar, ¿Qué quieres...- se quedo con la pregunta a medio hacer, al ver como Hanako se había echo un bollo con todas las sabanas de la cama.-¿Qué demonios estas haciendo?.

.- me estoy protegiendo de los truenos.- respondió.

.- ¿eh?.¿le tienes miedo a los truenos?. Sabes que eso es solo sonido, ¿no?.

.- si, lo se. Pero no me agrada para nada ese sonido.
Kakashi se levanto de la silla y camino hasta la cama. y, de un segundo a otro, destapo por completo a la albina.

.- déjate de tonterías y haz mi cama.- le ordeno, en el momento en que Hanako se sentaba en la cama.

Fue en ese instante en que kakashi se dio cuenta del estado en que se encontraba Hanako. Sus ojos estaban irritados e hinchados. Sus mejillas se encontraban de un tono rojizo y completamente mojadas, mientras que sus orejas se encontraban bajas y su cola apenas y se movía un poco.

.- ¿estas bien?. Solo son truenos, ni siquiera pueden tocarte.- dijo kakashi como modo de consuelo, revolviéndole con delicadeza su cabello.

Hanako se seco las lagrimas que comenzaban a salir de nuevo. No le gustaba mucho que la vieran en ese estado, por eso mismo creaba aquel refugio de sabanas. Sin embargo ya no había nada que hacer.

.- lo se, pero lo que me asusta es... es... no se porque le tengo miedo, solo me asustan y ya. Lo oído.- dijo Hanako, antes de que se escuchase un trueno y que ella se aferrase a la cintura del peliplata, en busca de protección.

Kakashi miro entristecido a Hanako, de verdad que no la estaba pensando bien. Ni se quería imaginar cuando sea otoño y las tormentas con truenos sean mas frecuentes.

.- tranquila, solo intenta ignorarlos.

.- Es lo que trate de hacer todo este tiempo.- respondió la neko, sin soltar al hatake.

Kakashi, se sentó en la cama como pudo, ya que Hanako no tenia la mas mínima intención de soltarlo. Poco después de que él hiciera esto, Hanako le clavo las uñas al escuchar otro de los miles de truenos que sonarían ese día.

.- se que tienes miedo, pero intenta no clavarme tus uñas, ¿quieres?.- dijo kakashi.

.- lo siento, no lo hice intencionalmente.
Kakashi en forma de respuesta, le volvió a revolver el cabello, quizás y de esa forma se relajaba un rato.

"me gusta que me rasquen atrás de la oreja."

Por alguna razón recordó lo que le había dicho esa mañana la albina. No parecía ser mala idea en ese momento, aun cuando a la mañana se había reusado. Quizás con eso Hanako se podía calmar. No por completo, pero si lo suficiente para que dejase de llorar.

Kakashi, aun con la mano en la cabeza de Hanako, le rasco detrás de la oreja de la misma forma que lo avía con los perros. La oreja de Hanako, se movió levemente por aquel contacto tan repentino, aunque después volvió al lugar en donde estaba.
La cola de Hanako, se movió de un lado para el otro en forma de reacción hacia el signo de " afecto "de kakashi.

.- ¿Por qué me rascas la oreja ahora?,¿ que no apenas nos conocíamos?.- pregunto Hanako, sorbiendo su nariz.

.- creí que esto te relajaría un poco, pero si quieres lo dejo de hacer.- propuso kakashi indiferente a la situación.
.- no, sigue.

Y hasta acá llega. La verdad seria mas largo, porque falta una parte, pero seria mejor que la ponga al inicio del próximo capitulo.

Pues no sucedió mucho en este capitulo. En si fue Hanako y kakashi relacionándose entre si. En otras palabras, un capitulo tranquilo de hanakashi, en donde esta pareja pues se conoce mejor. En especial kakashi, descubrió mucho acerca de hana-chan.

Eso si, no podemos olvidarnos del principio. Al parecer Hanako tiene una marca, además de que le pertenece a un tal Yuu. Todo esto lo profundizare y explicare mas adelante en la historia.
En fin, eso es todo. Pero antes, quiero preguntarles algo. Voy demasiado rápido?, porque no estoy segura, cuando quiero hacerlo lento siento que voy rápido y cuando lo hago rápido, siento que la historia va lenta. Estoy insegura, así que quiero su opinión. ¿ voy rápido o muy lento?.

Eso es todo, bye bye.