4.- Plática con amigos.
Peter Parker
He estado relativamente tranquilo desde que me despedí de Tony el día de ayer. Fue algo incomoda la despedida, no supe si tomarle la mano, abrazarlo o besarlo, pude ver su mirada divertida al ver mi confusión y debate mental.
Por lo cual sentí su mano tomarme por la cintura para acércame y besarme. Recuerdo la sensación tan satisfactoria y el sabor a café en su beso. Su respiración lenta al terminarlo, aun sin separarse de mí.
—Espero no te incomoden las demostraciones públicas. —susurró, su voz ligeramente ronca.
—No si a ti no te molestan. —le respondí, tratando de sentirme seguro.
El sonrió y dándome un beso más, esta vez rápido y corto, se alejó de mí dándose la vuelta. Ya era pasado de medio día, habíamos despertado algo tarde y demoramos un poco en el desayuno, su forma de hablar era muy encantadora, siempre mostrándose seguro, no podía decidirme si me encantaba eso de él o si le tenía envidia, yo con suerte podría hablar con la mitad de seguridad.
Suspire y decidí caminar hasta el café, por suerte mi turno era vespertino. El resto del día, estando más animado, fue más normal. Recibí varios mensajes de texto de Harry y Louis, sentí vibrar decenas de veces el móvil, esperando que alguno hubiera sido de Tony, pero no fue el caso.
Al terminar el turno, ya entrada la noche. Camine hasta mi departamento, extrañando la compañía de la noche anterior. Cuando llegue hice lo que usualmente hacía: cenar, ducharme, ver una película y dormir. Oh, y claro, responder los insistentes mensajes de mis amigos ingleses.
Es como ahora me encuentro a solo una calle de su departamento, aceptando su invitación a pasar el rato, lo cual soy lo suficientemente listo como para saber que será un interrogatorio sobre Tony.
Cuando toco la puerta de su departamento, el primero en saltar a la vista es Louis. Quien siempre con su característica sonrisa me hace pasar, busco a Harry con la mirada pero no lo encuentro.
—¿Dónde-
—Dándose una ducha, se sentía algo sucio después de-
—No, no me digas nada. —Le digo, tratando de quitar cualquier imagen mental de mi cabeza—. No quiero saberlo.
—No idiota. Después de cocinar, mal pensado. —Se burla.
Yo niego avergonzado.
—Lo siento. —digo suavemente. Me dejo guiar por el hasta su pequeña sala. El departamento pese a ser pequeño es muy cómodo, es ligeramente más grande que donde vivo.
—No te preocupes, eso si pasó antes de que cocinara.
Me guiña un ojo, y su risa vuelve a inundar el espacio en el que estamos, y yo lo sigo de igual forma riéndome. Tiene una risa bastante divertida, la asocio con un corderito, no lo digo en voz alta, porque apuesto que me botaría de su departamento si lo hiciera.
—En fin, gracias por invitarme.
—Nada de gracias, debes contarnos todo.
Suspiro, ¿por dónde empezar?
—¿Todo de qué? —Me hago el desentendido, recibiendo una mirada molesta de mi amigo—. Pues he tenido un buen día.
—No te hagas el tonto, Parker.
—Oye amor-
Me giro, mirando a Harry con el cabello empapado y con una toalla alrededor de su cintura, lo miro con la boca semi abierta. Los tres quedándonos en silencio durante algunos segundos.
—Tú deja de ver a mi hombre. —Suelta Louis, lanzándome una almohada—. Y tú vete a cambiar.
Me rio mirando a Harry correr hacia dentro.
—Quizá deberías invitarme más seguido. —le digo, molestándolo.
—Imbécil.
—Es broma, es broma. —Le regreso la almohada golpeándolo—. Y no me golpees con tu almohada.
Ambos nos reímos y nos recostamos sobre el sofá, esperando que Harry vuelva a aparecer para probablemente entre ambos interrogarme. Me divierto mucho estando con ellos, si los hubiese conocido tiempo atrás, probablemente la vida universitaria no me habría sido tan solitaria.
—Volví. —Anuncia Harry, entrando. Esta vez vestido con un pantalón de chándal negro y un suéter rojo.
—Me gustaba como te mirabas con la toalla —Lou se voltea con intención de volver a golpearme masivamente con la almohada. —Es bromaaaa, ya, no diré nada.
Harry se ríe, acercándose quitándole la almohada y sentándose en el sillón frente a nosotros con ella entre sus brazos abrazándola.
—¿Ya le preguntaste? —cuestiona Harry, mirando a Louis.
—Ya, y no quiere abrir la boca.
—¿Qué quieren saber? —les pregunto.
—Yo le vi parecido al millonario de la gran torre, Tony Stark, pero Lou dice que estoy mal.
—No te lo tomes a mal, pero ese hombre probablemente sea bastante inalcanzable. —Comienza a decir—. Es arrogante, rico, sarcástico, bastante atractivo la verdad —escucho a Harry gruñir ante lo último—, ¿Qué? Si lo es.
El ojiverde rueda los ojos. Yo rio y niego.
—Pues, déjame decirte que...
—¿Qué?
—Si es Tony Stark.
—¡Te lo dije! —Exclama Harry lanzándole la almohada a Louis, quien lo ignora y me mira sorprendido.
—Y no, no es como tú dices. Es decir, si es rico y atractivo, pero es muy lindo. Al menos lo fue conmigo. Tendremos una cita pasado mañana.
—¿Qué? —preguntan los dos al mismo tiempo.
—Verán. El entro al café, yo lo atendí, me dejo una propina que es más de mi sueldo de tres días. Mi turno ya había terminado, así que salí, lo alcance para agradecerle y-
—Espera, ¿ahora serás sugar baby? —pregunta Louis, y esta vez soy yo quien quiere arrojarle algo.
—Lou. —Lo regaña—. Sigue hablando, Peter.
—Me iba a ir a mi departamento, pero me tomo del hombro, pregunto si tenía algo en mente, y la verdad es que me sorprendí bastante, tuve que ocultar mi emoción, pero lo maneje perfectamente. Después de eso los encontramos, y como ya saben, lo lleve al puente iluminado, y volvieron aparecer.
—Yo le dije a Lou que no gritara nada. —me dice Harry, su voz es tranquila. Entiendo por qué ambos se complementan tan bien.
—La verdad es que no se si golpearlo por ser imprudente o agradecerle y decir que fue prudente. —Lou me mira sorprendido y sonriendo, seguro suponiendo lo que diré a continuación—. Sí, me beso, lo bese, nos besamos.
—!Maldición, si! —Exclama emocionado.
—Termina de contar. —pide Harry.
—Fuimos a mi departamento y-
—¿Qué fueron a dónde? —esta vez es el rizado quien me interrumpe—. Perdón, perdón, continúa.
—Vimos una película o algo así, porque no pusimos mucha atención y no la terminamos, y no, no por lo que piensan. Hablamos un poco y después dormimos.
—¿Durmieron?
—Si Louis, dormir, la acción de cerrar los ojos y dejar que el cuerpo descanse. Seguro la conoces bien.
Harry ríe y Louis rueda los ojos.
—Dormimos. Y al despertar me invito a desayunar, volvimos a hablar un poco de nosotros, me sentía extraño, pero dijo cosas que me hicieron sentir más tranquilo y me invito a salir.
—Dios, nos sacaras de la pobreza. —El tono de Louis es entre la sorpresa y la felicidad.
—¿Nos llevaras a conocer esa torre?
—Chicos. —Niego—. Estoy preocupado porque no sé qué esperar de él y ustedes salen con esto.
—Sí, lo siento mucho, Peter.
—¿Por qué te preocupas? —pregunta el ojiazul, lo veo jugar con sus manos.
—Ni siquiera me ha enviado mensaje. —digo, desanimado.
—¿Por qué no lo haces tú? —Me pregunta.
—Porque-
Callo al sentir la vibración en mi móvil.
—¿Por qué te callas?
Lo miro e ignoro su pregunta, sacando mi móvil del pantalón, sonrió cuando veo el nombre Tony Stark en mi pantalla.
—Me ha enviado mensaje.
—¿Qué? Muéstranos. —dice Harry acercándose.
—Solo dice "Hola", ¿Qué le respondo? —pregunto. Moviendo el celular nervioso, sobre mi mano.
—Dile lo mismo. —Sugiere Harry y lo hago.
—Pregúntale como esta, déjame hacerlo —dice Louis, arrebatándome el móvil. Forcejo con el tratando de quitárselo, haciendo que se envíe un mensaje inentendible.
—Louis. Ve lo que haces.
—Fue tu culpa.
—No conocerán la torre si me cancela la cita. —les digo, en tono de advertencia.
Vuelvo a escribirle, tratando de sonar casual.
—Que quiere cambiar la cita. —les digo, comenzando a sentirme desanimado—. Lo ven, es solo el primer paso para cancelarla.
—Mira, envió otro mensaje. —Dice Harry.
—Tendré algunas juntas....—Comienzo a leer suavemente—. Dice que quiere esperar el año nuevo conmigo.
—Dios, este hombre va muy rápido, Peter.
—Harry, seguro así funciona la mente de los genios millonarios.
Trato de ignorar sus comentarios, me ponen más nervioso de lo que quiero demostrar. Comienzo a escribir mi respuesta. Le digo que no se preocupe, que estoy de acuerdo con su idea.
—Si yo fuese él, me hubiera asustado con el primer "No" que escribiste.
—No todos escribimos todo en un mensaje como tú, Harry. —Louis lo mira—. Tardas años en escribir uno solo.
Los miro a ambos detenidamente.
—Ustedes desprenden mucha tensión. Parece que tendrán otra ronda de sexo después de que me vaya.
—A ti te hace falta sexo.
—A ambos les hace falta comer. —Harry se pone de pie, frente a nosotros—. Vayamos a comer, pronto se enfriara todo.
Louis se pone de pie siguiendo a su amado rizado. Y yo sonrió al ver la respuesta de Tony. Si esto sale mal, vendrá a refugiarme aquí, si sale bien de igual forma vendré aquí a soltar mi alegría.
Quizá iniciare el año con el pie derecho.
Deseo que sea así.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro