Cuando escuchó esas palabras salir de aquellos labios, sintió una presión en su pecho y un cosquilleo en el estómago. Jimin no sabía qué decirle, y es que aún no asimilaba que Yoongi se sintiera atraído por él, no después de todo lo que habían pasado.

Al final no pudo responderle algo porque el sonido de su teléfono con una llamada entrante de Hoseok lo interrumpió, y en parte sintió alivio por eso.

Ahora Jimin se encontraba en la cama, con el control remoto en su mano izquierda, cambiando de canales sin intención de mirar algo porque en su mente solo rondaba el preguntarle a Yoongi si todavía se sentía atraído por él o solo fue en esos meses.

De pronto su teléfono vibró sobre la cama, y lo tomó encontrándose con un mensaje de aquel paliducho.

Yoongi 🐱:

Voy a pasar por ti en unos minutos para ir con los chicos a un restaurante. Nos despediremos de Namjoon como se debe.

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—Pensé que no vendrías —dijo Hoseok acercándose al rubio—. Ya sabes, pensé que te encontrabas cansado.

—No lo estaba, quería despedirme de Namjoon.

Jimin miró por todo el interior del local y, finalmente, encontró a Seokjin y Namjoon, ambos abrazándose como si no quisieran soltarse nunca.

—Están tristes. —Yoongi comentó cabizbajo, ya que él y Namjoon eran mejores amigos.

—Se nota. —Jimin respondió haciendo puchero.

—No vayas a llorar.

—¡No puedo evitarlo! —exclamó con la voz rota mientras lágrimas ya rodaban por sus mejillas.

Yoongi rodó los ojos y abrió sus brazos para que Jimin lo abrazara.

—Esto es raro. —Hoseok habló mirando la escena.

—¿Estás mejor? —Yoongi le preguntó al rubio después de un par de minutos, alejándose un poco para poder mirarlo.

—Sí —contestó, y miró a Hoseok que lo veía con una pequeña sonrisa, por lo que bajó la mirada sintiéndose sonrojado y dijo—: Creo que hay que ir con los chicos.

Los tres jóvenes se acercaron a la pareja, quienes seguían abrazados. Yoongi hizo que Jimin tomara asiento para luego sentarse a su lado, mientras que Hoseok se sentó enfrente de ellos apoyando sus codos en la mesa para recorrer con la mirada todo el menú de la carta.

—Vamos a ordenar —dijo Namjoon tomando la carta frente a él—. ¿Qué van a pedir ustedes?

—Yo quiero una hamburguesa y una gaseosa. —respondió Hoseok dejando la carta en el mismo lugar donde la encontró.

—Jimin y yo pediremos ensalada y jugo de naranja natural. —Yoongi habló.

Jimin abrió la boca sintiéndose indignado. —¡Pero yo quería una rebanada de pizza! ¡No puedes decidir por mí!

Namjoon y Seokjin se dieron una mirada para optar caminar hacia la mesera para ordenar la comida, mientras que Hoseok decidió sacar su celular y hacer como si estuviera viendo la cosa más interesante en el mundo.

—¡Claro que puedo! —Yoongi exclamó— Estamos esperando un bebé, tienes que cuidarte. 

—¡Bien! —Jimin finalizó cruzándose de brazos.

—Hey, no te molestes…

—Cállate.

—¿Jimin? ¿Park Jimin?

El nombrado alzó la mirada, y se encontró con una vieja amiga. Era su mejor amiga de la secundaria.

—¿Soyeon? ¡Soyeon! —Jimin se levantó para poder abrazarla— ¿Cómo has estado?

—Bien, bien... —lo abrazó de vuelta por unos minutos y luego se alejó— Wow, mira lo guapo que te has vuelto —bajó su mirada y notó el vientre abultado del rubio—. ¡¡No lo puedo creer!! ¡¡Estás embarazado!!

—Lo estoy. —soltó una risita.

—¡¿Y quién fue el hijo de la gran puta que te embarazó?!

Jimin apoyó su mano en el hombro del chico de tez pálida. —Te presento a Min Yoongi.