Capítulo 16
Jimin miraba por los pasillos desiertos, estos se encontraban así ya que todos los estudiantes se encontraban en sus respectivos salones. Cuando se aseguró de que nadie lo estaba viendo caminó rápidamente hasta encontrarse a unos pocos metros de la salida, pero en el momento en que estuvo a punto de salir, paró abruptamente cuando escuchó unos pasos. Se ocultó y miró al profesor de Literatura caminar frente a él.
—¿Qué haces?
Jimin brincó asustado cuando escuchó una voz a sus espaldas, se volteó encontrándose con Yoongi y soltó un suspiró de alivio. —Jodido susto que me has dado... —dijo llevándose una mano a su pecho intentando normalizar su respiración.
—¿Qué tratabas de hacer? —el chico preguntó con el ceño fruncido.
—Voy a escaparme. —respondió con un poco de nerviosismo.
—¿Y por qué ibas a hacer eso?
—Se me antojó un pedazo de pastel con galletas.
—Pero puedes esperar a la salida.
—¡No puedo esperar! Ya sabes lo que dicen: "si te aguantas un antojo capaz el bebé sale con cara de pastel".
Yoongi relajó sus facciones conteniendose para no reírse. —¿Qué cosas lees en internet?
—Lo vi en una página sobre embarazos para padres primerizos.
—Bueno, en la cafetería venden varios tipos de pasteles...
—¡No! —Jimin hizo una mueca de asco— Ya los probé y son realmente malos.
Yoongi lo miró confundido, los pasteles que vendía en la cafetería no estaban tan mal, él mismo ya los había probado; se preguntó si al rubio le sabrían mal por el embarazo. —Entonces espera a la hora de salida —miró su teléfono—. Falta dos horas, tomas eso o nada.
—Síp, tomaré la opción de escaparme. —Jimin respondió empezando a caminar hacia la gran puerta.
Yoongi se tomó de los cabellos con frustración. —¡Espera! Okay, vámonos antes de que nos vean.
• • •
—No puedo creer que nos hayamos escapado. —Yoongi musitó después de hacer sus pedidos.
—Pensé que ya te habías escapado antes.
—Lo he hecho, pero dije que ya no lo volvería hacer, y mira, aquí estoy.
Jimin rió mirándolo. Siempre había pensado en lo atractivo que era Yoongi, y ahora más que nunca lo podía confirmar. Amaba la sonrisa del chico de tez pálida cuando aparecían esas encías rosadas haciendo que se le viera tierno. Lo que no sabía era lo protector y dulce que podía llegar a ser hasta ese momento que le dijo que estaban esperando un hijo.
—No dije que me siguieras. —le dijo en un tono burlón.
Después de unos minutos, los ojos de Jimin brillaron cuando la mesera llegó con sus pedidos.
—No quería que te pasara nada. —Yoongi soltó, mirando cómo el rubio comía su pastel con felicidad.
—Pues no te preocupaba cuando me golpeabas —dijo Jimin ahora con seriedad—. Yo no te importo, solo te importa nuestro bebé.
—No sabes lo que dices.
—No, estoy muy seguro con lo que digo. Y no te culpo, yo tampoco quiero que le pase algo. Tal vez al principio era un descuidado, pero ahora...
—Claro que me importas —Yoongi lo interrupió tomándolo del mentón para que lo mirara a los ojos—. Tú y el bebé son importantes para mi.
—Yoongi...
—Son sumamente importantes —musitó juntando sus frentes—. Cuando me preguntaste por qué te molestaba, ¿yo qué te respondí?
—Prácticamente que querías llamar mi atención. —dijo Jimin sintiéndose sonrojado.
—Y es verdad, era un inútil en ese tiempo… porque me daba miedo admitir que me sentía atraído por ti.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro