—¿Por qué rayos no me dijiste? ¿Cuándo pasó? ¿Le rompiste la cara? Jamás pensé que pasaría.— preguntó Jeongin sorprendido, pareciera que en cualquier momento iba a caer desmayado.

Le había contado todo a Jeongin, porque prefería decirselo él a que lo escuchara de otra persona cuando el rumor se haya expandido.

—Basta, ya te lo conté.— respondió irritado.

—Lo sé, es solo que aún no lo puedo creer, mi cabeza no lo asimila.— dijo.

—Estaba borracho, si hubiera estado en mis cinco sentidos no me habría acostado con él.— dijo con un semblante serio. Frenó al ver a Hyunjin con Karina, ella se acercó un poco más cerca del mayor cuando se dio cuenta que Felix los miraba.

—Pues eso lo he estado dudando.

—¿Qué quieres decir?.— Se giró hacía Jeongin mirándolo interrogante.

—Cada vez que Hyunjin te observa, te come con la mirada, también te mira en clases.— Felix río tan fuerte que Hwang volteó a verlo.

—Que buen chiste.— felicitó. Jeongin se pegó la frente con la palma de su mano.

—No era broma.— sonrió —Aquí viene.— susurró. El rubio se volteó encontrándose con Hyunjin, este lo miró con un gesto serio. Espera ¿Esta molesto?

—Feli- — Hyunjin no terminó de decir cuando Jeongin lo golpeó directo en su entrepierna, soltando un gritó ahogado. Felix rió bajita. —¿Por qué mierda fue eso!?— lloriqueó con las manos en la entrepierna.

—Sabes porqué, imbécil.— informó antes de irse y dejarlos solos.

—Que agradable es tu amigo.— dijo entre dientes tratando de retener las lágrimas.

—Sí, tal vez te lo merecías.— el rubio se encogió de hombros.

—Tenemos que hablar, vamos.— habló Hyunjin.

—Tú no me dices qué hacer, además tengo clases en diez minutos.— informó Felix con los brazos cruzados.

—No me interesa.— con su mano en la espalda de Felix lo guió hacia el patio de la universidad, donde la mayoría de los estudiantes ya habían entrado a clases, así que no se encontraba nadie.

—Siento arruinar tu vida con un hijo.— dijo por fin el ojimiel. Sentía que debía disculparse con Hyunjin, quien lo miró, pero no dijo nada.

Hwang hizo que Felix tomara asiento para luego el sentarse a su lado.

—No tienes la culpa de nada, no quiero que te disculpes, no arruinaste mi vida.— dijo sin dudarlo en ningún momento.

Hyunjin habia pensado en su futuro tener hijos, sí, pero jamás se imaginó que seria con Felix. Le atemorizaba que las cosas no funcionaran. Felix lo odiaba, al principio el rubio le caía mal por el carácter que tenía por la forma en que se conocieron, pero luego ese odio se convirtió en algo más y él lo sabía.

—Tengo miedo.

—No tienes porqué tener miedo, y voy a estar todo el tiempo contigo.— Felix levantó su mirada sorprendido, Hyunjin estaba siendo dulce.

—Gracias.— susurró, sintiéndose mareado de repente.

—¿Estás bien?

—Eh, sí.— se limitó a decir, recordó cuando Karina estaba cerca de Hyunjin y le entraron unas ganas de vomitar —Odio esto.— dijo con los ojos aguados —¿Cómo se lo voy a decir a mi madre?

Sintió pena por sí mismo, él tampoco sabía cómo decírselo a su madre, seguramente Jisoo lo tomaría de la oreja y lo regañaría como cuando era niño para luego hablar de como sería una gran abuela.

—Puedes esperar hasta ver que las cosas vayan bien con tu embarazo.— sugirió,

él haría lo mismo.

—Sí, eso haré de hecho, tengo una cita en unos días con mi doctor, ¿Te gustaría ir?— preguntó tímido, mirando hacia otro lugar, sonrió en dirección hacía Jisung, quien estaba siendo abrazado por Chan, ellos empezaron a salir desde la fiesta que había organizado Karina. Estaba feliz por Jisung.

—iClaro! Me encantaría, podemos ir en mi auto.— sonrió en dirección a Felix cuando este volteó.

—Esto es raro.— rió, poniéndose de pie de frente a Hyunjin

—¿El hecho de que estemos hablando y no nos estamos matando?— asintió —Estoy de acuerdo contigo.

—Sí pero no por mucho, tendrás que soportar mis cambios de humor, cabeza hueca.— sonrió burlón.

—¿A dónde vas?

—A clases, tonto.— golpeó a Hyunjin, quien ni se quejó en lo absoluto.