Capítulo 27: Caminos cruzados...
Cómo cuando Shòukǔ y Siu hacen el delicioso.
"Ni en Chernobyl hay tanto toxicidad, como entre estos dos"
Si, digamos que los dos están en una 'relación', si es que se la puede llamar así.
Pero bueno, al menos uno la moja.
Muchas gracias a todos por su apoyo y comentarios gente, como siempre de aprecian, tanto en Fanfiction como en Wattpad.
Ahora, disfruten del capítulo.
Disculpen los errores ortográficos.
"hablar" personaje hablando.
"Hablar" personaje pensando.
"Hablar" nombres de las técnicas.
(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.
############ Cambio de escenario o lugar.
Capítulo 27: Caminos cruzados…
"¡Oye Toph! ¡¿No vas a entrar?!"
"…"
"El agua está increíble, y podemos seguir practicando para que aprendas a nadar" El grupo había llegado hasta un pequeño rio y se tomaron un descanso del viaje, dónde todos entraron a darse un merecido baño.
En qué Sokka era cargado por un clon del shinobi, que lo ayudaba a querer derribar a una Katara cargada sobre los hombros de Aang, cabe decir que ambos chicos estaban en desventaja contra dos usuarios del elemento agua.
En cuanto al original, se acercó hasta la orilla donde estaba la maestra tierra, que apenas y si mojaba sus pies.
Toph por su lado, podía sentir que había otra copia de chico, al otro lado del río, correr sobre el agua a toda de velocidad haciendo de motor para el esquí acuático, para una alegra Yoru que iba abrazada de una corteza usada como deslizador.
"No quiero" Ella no quería unirse a la diversión, no se sentía cómoda en el agua, al menos esa era la excusa que se ponía a sí misma.
"Vamos, no seas aburrida, no tienes que tener miedo, todos estamos aquí, no dejaremos que te ahogues, incluso puedo sostenerte de la mano para que estés más tranquila, ¿Recuerdas mi promesa? Siempre estaré a tu lado"
El rostro de la chica se ensombreció y de forma brusca saco sus pies del agua, "Vete a la mierda Naruto"
Naruto no espero esa respuesta ni mucho menos que ella se levantara, para darle la espalda e irse dejándolo solo en la orilla.
Y antes que pudiera salir del agua para seguirla, y preguntarle qué demonios le pasaba, sintió una suave mano sobre su hombro.
"Quédate, yo voy hablar con ella"
El chico nunca podría contradecir a la maestra agua, que con una sonrisa suave salió del agua para ir detrás de la bandida ciega.
Que estaba en el bosque, golpeando el suelo con sus pies un par de veces, para levantar discos de tierra compactada y arrojarlas contra los árboles, que terminaban partidos a la mitad.
"Los árboles de no tienes la culpa de tu mal genio Toph"
"No quiero hablar con nadie" La chica ciega ni siquiera se molestó en darse la vuelta, le siguió dando la espalda a Katara, que puso sus ojos en blanco.
"¿Enserio estás tan celosa?"
La roca que iba a lanzar fue reducida a polvo, en un incremento de fuerza que hizo que Toph, diera un bufido.
"Yo no estoy celosa"
"Vamos Toph, desde que esa simpática familia se unió y esa chica tiene la atención de Naruto, has estado más enojada y gruñona que de costumbre"
"¿Por qué me tiene que importar lo que la niñita haga?"
"Porque él es tu primer amigo" Ella sabía que había acertado, al ver cómo la niña parecía ponerse aún más rígida, "No es solo tu primer amigo, es tu mejor amigo, verlos a los dos jugar y bromear, verlos divertirse tanto hace que yo también me sienta celosa, Naruto es el tipo de chico que siempre hace que todo sea más divertido y brillante"
"…"
"No puedes hacer que se centre solo en ti, no… sería su forma de ser, el quiere ver a todos felices, lo hace con esa chica muda, ¿Has notado lo feliz que es? Es maravilloso ver esto en tiempos tan difíciles"
"¿Y qué?" la maestra tierra era terca y no admitiría que todo lo que dijo su amiga era cierto, "Solo tengo que ver cómo por cada persona nueva que conoce, se lanza a ser su mono de circo para divertirla, suena estúpido"
"Tal vez, pero así es el"
"No me gusta"
Dando un suspiro, Katara negó con la cabeza, vaya que la bandida ciega era difícil de tratar, más que los niños que solía cuidar en el polo sur.
"Pues que pena, si vas actuar así cada vez que Naruto tenga una nueva amistad, tal vez no merezcas su amistad, esto no es algo que se mezquine, es algo que se comparte para que todo sea más fácil y divertido…"
"…"
"Solo… piénsalo, ¿Quieres?"
"…"
"Bien, te dejo sola"
"¿Ella es bonita?"
"¿Eh?" Katara no espero que ella hiciera una pregunta cómo esa.
"¿Esa chica es más bonita que yo verdad?" en todo el tiempo Toph siguió dándole la espalda a su amiga, para que no notará la expresión de duda y preocupación que tenía.
"Tú también eres era una chica hermosa Toph"
"No lo sé, nunca me pude ver, nunca pude ver a nadie, pero aún sin mi vista se que en este mundo la belleza lo es todo, amistades y progreso, todo está en la apariencia de las personas y el carisma que tienen… hay quienes no tenemos ninguna de las dos, no entiende lo que es… sentirse diferente y raro ante los demás"
"Toph, eso no es cierto"
"No seas ingenua Katara, ¿Tú crees que esa chica miraría de la misma forma a Naruto si fuera alguien muy gordo o demasiado delgado, ser feo o tener marcas que lo hagan parecer grotesco ante los demás?"
"…"
"Para mí sería igual, por qué no me importaría como se vea, por qué no tengo que verlo para saber que me gusta, me gusta reír con él, me gusta pelear con él, me gusta todo de el… tu no lo entiendes… no eres… fea"
"Toph no eres fea"
"¡No seas condescendiente conmigo! Mira mis manos, son tan secas y rasposas como las de un chico, mis pies sucios, soy pequeña y mi temperamento es una mierda, lo sé…" sentía su garganta apretarse y sus nervios de punta, estos sentimientos los había guardado toda una vida y era la primera vez que se lo decía a otra persona, "¡¿A quién le gustaría despertar cada día y ver esto?!"
Katara frunció el ceño con tristeza, al ver cómo la chica levantó el flequillo que siempre cubría su frente y ojos, dejando ver esos ojos completamente blancos y vacíos.
"A mí me gustaría"
Toph sintió su corazón casi saltar de su pecho, cuando se había dado cuenta que el Uzumaki estaba a posos metros detrás de ella.
"¿Qué tanto escuchaste?" pregunto tratando de sonar lo más tranquila posible.
"No mucho, pensé que Katara tendría todo bajo control, pero igual quería venir a ver si estaba todo bien… aunque no esperaba venir y escucharte hablar de tus manos y pies"
"¿Te molesta que no tenga manos de princesa?" murmuró entre dientes, escondiendo sus manos en sus bolsillos.
"La verdad no" Respondió sin dudar Naruto, que seguía sonriente, hasta se tomó el tiempo de mirar de arriba a hacia a Toph, "Te hace ver más ruda… y me gustan las chicas rudas, como tú"
"…" La maestra tierra sentía que todo el mundo se sacudió, y no daba gracias a los espíritus que le estaba dando la espalda al chico ninja para que viera su rostro, y el intenso sonrojo en sus mejillas.
"¿Eh?" Katara no espero que el chico fuera tan atrevido, o solo poco consiente de lo que decía, tal vez lo último.
"¿Enserio?" Toph había encontrado muy interesante el suelo, con su cabeza moviéndose de un lado a otro.
"¡¿Enserio?!" La maestra agua no creía ver en su vida, a una tímida Toph, que movía sus pies de un lado a otro, fingiendo desinterés.
"¡Claro!" Al parecer el captar las indirectas no era el fuerte de Naruto, que, como todo hombre, o adolescente era lento para captar las señales de que la charla, se estaba saliendo del contexto que creía.
"¿No te importa esto?" preguntó en voz baja, acariciando los mechones de cabello sobre su frente, mostrando sus ojos blancos ante el Uzumaki, que la miraba a los ojos.
"No me importa nada de eso" él se encogió de hombros indiferente, "Son mis amigos al final del día, si me importara el cómo se ven o son, sería una idiotez de mi parte"
"Si, lo sería…" sintiéndose más tranquila, Toph dio un suspiro, "Lamento haber actuado como una tonta…"
"Oye no hay problema, es normal sentir celos, yo también lo tendría si viene un chico extraño y te vuelves muy cercano a él, soy lo suficientemente maduro para admitirlo"
"No creo que maduro sea la palabra"
"No empieces Toph"
Katara viendo que todo entre ambos parecía calmarse, decidió dejarlos solos, tal vez tenían mucho de qué hablar y no quería estar en el medio, lentamente volvió al campamento, mientras que los otros dos seguían discutiendo.
"Sabes Toph, yo sé cómo te vez ¿No quieres saber cómo me veo yo?"
"¿…?" la chica espero curiosa por el chico, que se acercó hasta ella para estar cara a cara, y se sintió tensa cuando el tomo sus manos en un agarre muy suave y llevo sus manos hasta su rostro.
Recordaba por unos segundos esto, su madre solía hacerlo con ella, aunque su percepción por sus pies le permitía tener una visión de 360° a distancias que el ojo humano jamás alcanzaría, y le daba una imagen en su cabeza de cómo eran las personas.
No era lo mismo.
"Sus labios…" Ella fue un poco brusca al tocar con sus dedos los labios del Uzumaki, para subir un poco, "Su nariz…" poco a poco una imagen más clara se formaba en su cabeza, mientras sus manos seguían explorando su rostro, "Ojos… frente…" era extraño notar como la piel de otra persona era tan suave al tacto.
"…" Naruto tuvo que agacharse un poco, para que ahora la chica pudiera pasar sus manos por su cabello dorado, que se enredaba entre sus dedos.
Él no podría negarlo, sentir como una chica acaricia tu cabello, era una sensación increíble, que calmaba su interior.
"Mejillas" Toph no sabía cuándo tiempo paso, mientras sus manos acariciaban con más cuidado las mejillas, que extrañamente tenían tres marcas en cada lado, no pudo resistirse a la idea de rascarlas un poco, esperando que el chico ronroneara.
Pero el solo sonrió divertido, las personas no ronroneaban.
Lo último que sus dedos tocaron, fueron sus labios, queriendo memorizar el cómo se vería esa sonrisa que siempre tenía en su rostro.
Toph de un momento a otro se quedó rígida, cuando sintió las manos del chico tocar sus mejillas, apretándolas entre sus dedos.
"Es aburrido, que tú seas las única que me pueda tocar" con una sonrisa juguetona el chico, estiró las majillas de la bandida ciega.
Y tuvo que contenerse para no reír al ver cómo ella trataba de poner una mala cara, pero el tener sus mejillas rojas y apretadas hizo que fuera difícil tomarla en serio.
No fue hasta un minuto completo después, en que los dos se separaron, para ir caminando de nuevo al campamento con los demás, uno junto al otro, con sus manos casi rozándose de vez en cuando.
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Zuko bajo del ave gigante, para mirar atentamente un largo rastro dejado en el medio de un prado verde, al parecer solamente llevaba unas horas por ver la tierra removida aún un poco húmeda.
El príncipe desterrado tenía una muy buena idea de que era lo que había pasado.
Volviendo a subir a su transporte, siguió el rastro, con una mirada de determinación en sus ojos.
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Las nubes de tormentas se asomaron por el horizonte, una tormenta se avecina.
Algo que al tío Irho, hizo que se preocupara, parecía un mal augurio.
Pero no quería pensar en eso, estaban solamente a pocos días de llegar a su destino con toda la caravana de refugiados, con quienes habían formado fuertes lazos de confianza, al ser su princesa Azula la peleadora que evito que tuvieran problemas con los ladrones y mercenarios.
Ella y su fiel adepta amazónica, que podría usar los huesos de los hombres como palillo de dientes, era una imagen bastante perturbadora para el viejo dragón del oeste, que daba gracias a los espíritus que Yoko fuera tan leal a su sobrina.
Que tenía una extraña manía de tener amistades raras.
Una chica de circo, que tenía la habilidad de inhabilitar a los mejores dobladores.
Una chica de alta sociedad, que tenía una puntería perfecta.
Y ahora una mujer gigante de dos metros y medio, que podía romper rocas con sus manos.
¿Había mencionado que tenía una relación rara y posiblemente romántica con un chico de 13 que tenía poderes mágicos?
"Eres única Azula" sonriente el anciano dio un sorbo a la sabrosa sopa de lagartija, fue todo un espectáculo ver a la mujer amazona luchar contra un lagarto de ocho metros y matarlo con sus manos, dándole una cena digna a los refugiados.
"¿Qué hará cuando llegue a Ba sing se mi Lady Zu?" Preguntó curiosa la mujer gigante sentada sobre la cabeza de su cena, sería un buen trofeo para colgar en la pared de su futuro hogar.
"No lo eh pensado" Azula dejo que el suave viento acariciara su rostro, mientras miraba el bello paisaje de montañas y árboles, antes ni si quieres se hubiera molestado en ver algo como esto, pero ahora que sentía su corazón mucho más tranquilo, disfrutaba de hacerlo.
"¿Por qué?"
"Porque simplemente no sé qué hacer con mi vida, mi futuro, ahora mismo solo hago caso a mi tío dejándome llevar por la corriente, y tal vez… solo tal vez encontrar mi destino"
Por unos segundos el rostro de la chica se ilumino por los rayos del sol, pero su rostro se oscureció por las nubes de la tormenta que estaba cada vez más cerca.
"Eso fue bello Lady Zu, yo creo que lo harás" por su lado, la guerrera gigante se monstro conmovida por las palabras de su Lady.
"¿Y tú?" Azula antes no se hubiera molestado en preguntarle eso, pero tenía curiosidad de saber qué hará su nuevo guarda espaldas.
"Servirla Lady Zu"
"No, no quiero saber qué harás, quiero saber que quieres, ¿Cuál es tu sueño?"
Yoko no esperaba una pregunta cómo esa, y miro a su alrededor, solo estaban ellas dos, nerviosa se froto su brazo abultado lleno de músculos.
"¿No te vas a reír?"
"¿Tengo cara de alguien que ríe?"
"…" la mirada intensa de la princesa fue suficiente para la guerrera, "Yo… pase toda una vida lastimando y peleando, desde niña mi padre me enseñó que solo los fuertes sobreviven y que la fuerza lo es todo, sin poder no eres nada, si no peleas no sería nada… y cuando el murió, me tuve que hacer cargo de la pandilla" todos los hombres que lo acompañaban tenían la misma fe y lealtad que tuvieron por su padre, ella era su líder.
Y ahora lady Zu era la suya, la única mujer que la venció en un combate.
"¿Por qué me suena tan familiar?" Se preguntó casi con ironía la princesa desterrada, que no podía evitar comparar su vida con la de ella, "¿Sino te gusta pelear? ¿Qué te gustaría hacer con tu vida?"
"¡Quiero cantar!"
"…"
"¡Mi mamá me decía que tengo la voz de ángel! Solía cantar para ella cada noche antes de dormir, y ahora… solo lo hago cuando estoy en el baño"
"Ok…" Azula tuvo que forzar una sonrisa ante la mirada tan ilusionada de la mujer gigante, que tenía unos ojos que casi brillaban de felicidad al hablar de su sueño, "Es… un bonito sueño"
"¡¿Enserio?! ¡Gracias lady Zu!"
"¡Ahg!" la princesa apenas pudo reaccionar cuando fue envuelta por los brazos gigante de la mujer acorazada, que parecía que le iba a romper la espalda con este abrazo de oso.
"Me alegre que usted crea en mí, sé que es un sueño tonto, en cada pueblo y bar que eh visitado, todas las mujeres que cantan son tan pequeñas, elegantes y bonitas, y yo… parezco la fusión de una ninfa y un troll"
"He visto mujeres más feas que han tenido éxito, ¿Por qué tú no?" dijo como pudo entre los enormes senos de la guerrera, que la soltó y pudo respirar más tranquila.
"¿Enserio crees que no soy tan fea?"
"He visto gente más fea, tú te vez bien junto a ellos"
Azula no servía para alentar a las personas, sin terminar insultándolas, era una suerte que la Yoko estuviera demasiado feliz por los 'halagos' de su Lady.
"¡Jefa! ¡Lady Zu!" el momento entre ambas chicas se terminó, cuando escucharon el galopar de una lagartija gigante, montada por uno de los tantos seguidores de Yoko, que tenía una mirada de pánico.
"¿Qué sucede Kezu?"
"¡La Nación del fuego!" Esa sola frase fue escuchada por todo el grupo de refugiados, que obviamente se alteraron, sería una broma del destino, que al estar tan cerca de un lugar seguro, ahora sean atacados.
"Explica" Azula se mantuvo impasible, no era momento de perder la cabeza.
"Es un transporte extraño Lady Zu, es como un gran carro de metal, es enorme y avanza a toda velocidad, viene directo a nosotros"
"¿El tren acorazado?" era una de las creaciones más recientes de la nación del fuego, un tren a vapor acorazado que podría avanzar a velocidades increíbles, por todo tipo de terreno, y ya tenía una idea de quién era el que lo usaba.
"¡¿Qué haremos Lady Zu?!"
"¡Por favor, no podemos toparnos con ellos ahora!"
"¡Tiene que hacer algo! ¡Se lo ruego!"
¿Por qué se lo pedían a ella?
Azula veía a los cientos de personas que se juntaban a su alrededor, granjeros y campesinos, ancianos y ancianas, hombres y mujeres con sus hijos pequeños, todos ellos la miraban a ella como si fuera su salvación.
Ella no estaba obligada a ayudar a nadie, estaba segura de poder tomar uno de las tantas lagartijas gigantes e irse a Ba sing se, estás personas serían una buena distracción, para que ella pudiera llegar sin problemas.
"¿Qué harás hija?" fue la única pregunta que la princesa escucho, por parte de su tío que la miraba a los ojos.
Lentamente la princesa desterrada se dirigió hasta una de las tantas lagartijas gigantes, de los mercenarios, para subirse a una de ellas y mirar unos segundos a todas las personas a su alrededor.
"¡Todo mundo escuché!"
Su potente grito fue escuchado por cada persona de lugar, con una expresión dura la adolescente apunto a lo lejos.
"¡Todos tienen que ir hacia Ba sing se! ¡Si pueden correr! ¡Háganlo! ¡Si pueden cargar a los niños y ancianos! ¡Háganlo! ¡Si tienen que dejar sus pertenencias! ¡Háganlo! ¡Sus vidas están en juego ahora y al otro lado de esa montaña esta la paz y seguridad que tengo desean!"
La respuesta de las personas fue inmediata.
El caer de las bolsas y soltar los carros para llevar sus pertenencias más necesarias, dejando todo el peso muerto, los más jóvenes juntaron a los ancianos y si no tenían un animal que tire, ellos mismos lo harían.
La organización llevo solo pocos minutos y todos estaban listo.
"¿Lady Zu?" Yoko vio confusa que su Lady, no apuntaba a ir con ellos, en cambio miraba a la lejanía el humo negro del tren acorazado que estaba cada vez más cerca.
"Cuida de estas personas"
"¿Qué?"
"Te ordeno que te quedes con estás personas y los protejas hasta llegar a Ba sing se"
"¡Pero… pero… pero… y usted?!"
"Alguien tiene que hacer de distracción" murmuró con sequedad, mientras movía su cuello hasta tronarlo, esperaba no estar tan oxidada como para no dar una buena pelea.
Además, si estaba la persona que creía hay, sería la pelea que ha estado esperando mucho tiempo.
"¡Déjeme acompañarla mi Lady!" Yoko estaba más que lista, con un fuerte agarra en su garrote ir a enfrentarse con quién sea.
"No" la discusión entre ambos peleadoras, era escuchada por todos los presentes, que se mantuvieron al margen.
"Podría morir"
"Lo sé" murmuró con frialdad Azula que agarro con fuerza, las amarras del gran lagarto.
Tenía muchos enemigos entre las fijas del ejército de la nación del fuego, ahora al ser una princesa desterrada, no desaprovecharían la oportunidad de no intentar quemarla viva.
Era algo que siempre tuvo en cuenta.
Con un suspiro miro hacia el horizonte, antes de avanzar, sintió un peso extra y no tuvo que darse la vuelta para saber quién era.
"Nunca se le debe dar de la espalda a una batalla, por una buena causa ¿No?" dijo sonriente el dragón del oeste, que ya estaba sentado en la montura junto a su sobrina.
Azula se tomó el momento de mirar por último vez a las personas, con las que había convivido durante… casi un mes, todos ellos eran personas que alguna vez consideraría como mera escoria, solo campesinos que servirían como mucho solo para mano de obra.
Ahora tenía las miradas de todos ellos puesta en ella, mirándola como si fuera la última esperanza en sus difíciles vidas.
"Te lo encargo Yoko"
"Lo haré mi Lady" viendo que no podría conversarla, lo único que podía hacer era cumplir con su orden, "Tiene mi palabra"
La princesa desterrada hizo avanzar al lagarto y pronto se vio avanzando a toda velocidad, hacia el tren acorazado junto a su tío.
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"Hay algo…"
El equipo Avatar y la familia de refugiados se detuvieron al escuchar a la bandida ciega, que se había arrodillado para poner apoyar sus manos contra el suelo y tener una mejor idea de que era lo que se estaba acercando a ellos.
"¿Sabes qué es?" Sokka no podía ver nada a la distancia que pudiera parecer una amenaza, pero el humo negro que se veía en el horizonte era una mala señal.
"Sea lo que sea, es grande y muy rápido, más que tu pies locos"
"¿Tal vez un vehículo?" Naruto era rápido a la hora de correr en línea recta, pero con todo lo que vio de la nación del fuego, no le sorprendería que hayan creado algún vehículo que pudiera superarlo.
"¿Aang?"
"Si" el monje entendió la mirada del hermano mayor de la tribu agua, y desplegando su planeador despegó hacia lo alto del cielo, para pocos segundos después volver de nuevo, "Es muy grande y viene muy rápido, en pocos minutos ya podría estar aquí"
"Eso es malo" murmuró Katara que estaba preocupada, ahora mismo ya estaban en un pequeño pueblo abandonado, en medio de tierra desértica, y pensar que estaban tan cerca de llegar a su destino, tal vez en medio día más de caminata llegarían del otro lado de la montaña y finalmente a Ba sing se.
"¿Qué haremos?" Pregunto temeroso la mujer embarazada en los brazos de su esposo.
"Primero llevarlos lejos de aquí" convocan a cuatro clones de sombra y tomando una vieja carreta que está en el pueblo abandonado, lo rompieron quitándole las ruedas, para que cada clon tomará uno de los extremos y lo levantara sobre el suelo.
"Suban" los adolescentes ayudaron a subir a la pequeña familia de refugiados al transporte.
"¿Y ustedes?" Pero Yoru había notado que los demás ni subieron, solo su familia.
"No sabemos a dónde van…" Sokka ahora podía ver el humo cada vez más cerca, el enemigo se estaba acercando, "Ellos pueden venir por nosotros y no podremos dejarlos estar en el fuego cruzado, y tampoco podemos solo irnos, ellos podrían estar dirigiéndose a Ba sing se, tenemos que al menos saber a qué nos enfrentamos"
Los demás miembros del equipo Avatar, le dieron la razón a su compañero.
"Muy clones lo llevarán hasta allá, no se preocupen por nosotros" la sonrisa de confianza del Uzumaki, le dio esperanza a la pequeña familia, "Todo estará bien…"
"¿Lo prometes?"
"Lo prometo" respondió usando las señas de manos que ella la había enseñado, con una última sonrisa la chica muda se despidió del shinobi, que se quedó junto a los demás para ver cómo los clones corrían a toda velocidad.
"No tengo que poder ver, para saber qué hubo un momento muy cursi aquí" se quejó Toph que podía escuchar los fuertes latidos de esa chica antes de irse, seguro se tomaron de la mano o quién sabe, odiaba el lenguaje de señas.
"Deja de ser amargada Toph"
"Y tu deja de ser tan estúpidamente noble y amable, da miedo, nadie puede ser así todo el tiempo"
"Te sorprendería"
Aliviando la tensión en el aire, los cuatro adolescentes se miraron entre ellos, ya podían sentir la vibración del suelo, mientras su enemigo se acercaba cada segundo más y más.
En un fuerte chirrido, vieron como un gigantesco tren acorazado, hizo que sus ruedas rechinaran en una lluvia de chispas, mientras lentamente se iba deteniendo ante ellos, liberando vapor de varios conductos el tren descendió un poco, cuando una gran compuerta fue abierta.
Y dos personas bajaron.
La general Siu y Shòukǔ habían llegado.
"Bueno, bueno, bueno" sonriente la mano derecha del señor del fuego, miro a cada uno de los adolescentes, tomándose el tiempo de verlos y al final sonreír, "Pensar que un grupo de adolescentes energúmenos pueden causar tantos problemas, chicos de su edad deberían estar saliendo en citas, estudiando o masturbarse todo el tiempo"
"Y usted tejiendo un suéter para su nieto, abuela"
"¿Eres la graciosa del grupo niña?"
"¿Tu qué crees anciana?" Toph aún si no pudiera ver, sabía que ese comentario había molestado a la general.
"Me divertiré, cortando tu garganta y darte una nueva discapacidad"
"Que miedo, ¿Lo harás con tus agujas de costura?"
Si las miradas matarán, Toph ya estaría seis metros bajo tierra, por una mirada asesina que tenía la maestra fuego, que no esperó que su mirada hiciera el trabajo, moviendo sus manos, hizo que la electricidad iluminara sus manos y un relámpago fue directo hacia la bandida ciega.
Que fue empujada por Naruto, que no tuvo más remedio que prepararse para recibir el ataque.
Pero antes que este lo tocará, sobre su cabeza paso otro relámpago que al chocar contra el ataque de Siu, haciendo que se cancelaran.
"Si alguien tiene el derecho de matarlo, soy yo"
Todas las miradas se dirigieron hacia atrás, hacia una sería Azula que lentamente bajo su mano derecha, detrás de ella un igual de serio Iroh la acompañaba, ambos maestros fuego caminaron para quedar junto al equipo Avatar, que no sabían que pensar.
"Veo que has caído bajo Azula, ¿Enserio te uniste a esta clase basura?" Se burló la general, al ver cómo su sobrina se ponía en guardia.
"No me compares con ellos" las manos de la princesa desterrada se iluminaron con fuego azul, "Lo odió…" murmuró con furia contenida mientras le daba una leve mirada a Naruto, "Pero…" su mirada volvió hacia Siu, "¡Mi odió hacia ti es más grande!"
Con ese grito de furia, la chica disparo una llamarada gigante, que fácilmente cubría todo el tren acorazado, fue la llama de fuego más grande y potente que Azula jamás haya lanzado en su vida.
Sin embargó, el fuego fue disipado como si solo fuera polvo.
Por un impasible Shòukǔ, que con solo un movimiento de su brazo disperso el fuego como si fuera neblina, no había dicho una palabra, por el simple hecho de que no le interesaba los problemas familiares entre los maestros fuego, hizo que todos se estremecieran cuando dio el primer paso.
Su mirada estaba dirigida a una solo persona.
Su objetivo estaba ante el.
"¿Tu eres Uzumaki Naruto?"
"Si…" Naruto tenía un muy mal presentimiento, este sujeto no era normal, lo sentía aún sin ser un sensor, apretando sus puños, trago saliva y se preparó, "¿Y quién eres?"
"Mis enemigos me llaman Shòukǔ…" lentamente el fue bajando por las escaleras, sin dejar de mirar a los ojos al Uzumaki, que de la misma manera camino hacia el, este último cauteloso y listo para cualquier cosa, "Pero mi madre… me llamo Nozumo"
"¿Y debo de considerarte mi enemigo?"
"Para tu desgracia, si"
El viento soplo suavemente entre ambos peleadores, que ignoraron todo a su alrededor, mirándose mutuamente y como si fuera una señal, ambos escucharon el suave caer de una hoja entre ellos.
La batalla había comenzado.
.
.
.
.
Chan
Channnnnn
Channnnnnnnnn
Channnnnnnnnnnnnn
Que capítulo más intenso papu.
Pero bueno, acá estamos en el final de un capítulo que promete lo que todos ustedes han estado esperando.
Naruto vs Shòukǔ.
La batalla que toda Latinoamérica a estado esperando.
¿Qué les parece si hacemos esto?
Si llegamos a los 100 comentarios en Fanfiction y 300 en Wattpad, voy a publicar el siguiente capítulo, para el día Domingo 7 de marzo.
Sin más CHAAAAAAUUUUUUUUU y que les vaya bien.
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