Llevo todo el día intentando contenerme para no abalanzarme sobre ella... Cada vez que mi mente recuerda mi sueño me Dan ganas de hacerlo realidad.

He tenido que irme con la escusa de salir a comer. He estado a punto de decirle que viniera conmigo, pero me he reprimido porque necesito alejarme de ella todo lo posible.

Estoy tecleando en mi ordenador y de pronto escucho como esta recogiendo sus cosas. ¿Ya es la hora? No puede ser...necesito un rato más...

-Greta, ¿ya te vas?

Las palabras salen de mi boca sin pensarlo y ella me mira atónita sin dar crédito a mis palabras
- Si, si no me necesitas son las seis y me iré al apartamento a terminar los informes...
- No, está bien, no me di cuenta de la hora. ¿Has traído el coche? sino puedo acercarte.
Mantengo la esperanza que acepte la propuesta, todos mis intentos de mantener las distancias se han ido a pique al ver que ya se iba. Me mira extrañada, cosa que veo normal, parezco un acosador detrás de su presa...
- No gracias, tengo que ir a un par de sitios a comprar y quiero ir paseando así me despejo.
- Como quieras, pero no me cuesta nada.- Insisto, pero no funciona. Me mira y niega con la cabeza.
- Bueno, hasta mañana Miguel!
- Hasta mañana Greta.

La observo salir del despacho, ahora a esperar hasta mañana para volver a tenerla en la misma estancia... A no ser que se me ocurra algo para volver a verla hoy... ¿Pero que narices estoy diciendo? ¿Me estoy volviendo loco? ¡Ni se te ocurra!

Recojo mis cosas ya son las ocho y ya no queda nadie en la oficina, voy a dar un paseo necesito pensar...

Salgo del edificio y camino por las calles colindantes a la editorial pensando como puedo hacer para ver a Greta simplemente como lo que es, mi empleada.

Algo llama mi atención, un grupo de chicas están hablando en la puerta del Restaurante Italiano enfoco mi mirada y... No, ¿no puede ser verdad...? Es...es Úrsula con...¡Greta!... esto debe ser una p... broma...

Me escondo, no quiero que me vean, pero yo las observo desde la distancia.

Cuando entran en el local, tengo la genial idea de ir al mismo sitio y así la puedo seguir viendo...(Miguel definitivamente estás enfermo)...

Ellas se sientan a cenar al fondo del local y yo me siento en la barra lo que me facilita ver sin ser visto...

Al cabo de media hora me arrepiento de comportarme como un maldito acosador y salgo del restaurante. Me dirijo al parking del edificio para coger mi coche e irme a mi casa a darme una ducha helada, a ver si así se me aclaran y refrescan las ideas.

Llego a casa, me doy una ducha me pongo algo cómodo y voy a la cocina para servirme un bourbon con dos hielos, necesito ahogar mis pensamientos en alcohol...

No dejo de dar vueltas por el salón... Intento coger el ordenador y ponerme a trabajar un rato, pero mi mente no para de recordar la imagen de ella con ese corto vestido rojo y esos pendientes golpeando su cuello en cada uno de sus movimientos.

De pronto me doy cuenta que hoy no la he oído reír en todo el tiempo que hemos estado juntos. Sólo la escuché desde la distancia, se veía tan feliz con Úrsula y las otras, eso hace que se me encoja el corazón, ayer sus carcajadas eran para mí...

Noto que me falta el aire, necesito salir de aquí...

Voy a mi cuarto y elijo un traje, ¡esta tensión tiene que terminar pero ya! Voy a salir, voy a beber hasta que se me olvide el día en que Greta entro a mi despacho y voy a entrarle a una tía y saciaré mis instintos.

En vistas de que esta noche no voy a acabar en plenas facultades para coger mi coche será mejor que vaya andando.

Camino y camino pero no hay ningún local donde poder entrar a tomar algo, así que sigo mi búsqueda.

Diez minutos más tarde veo un local pero no me suena que lleve demasiado tiempo abierto, debe ser nuevo...

Entro ya que es el único que he conseguido encontrar.

Me siento en un taburete en la barra y pido otro bourbon con dos hielos. Acerco el vaso a mi nariz e inhalo el olor de mi licor, le doy un trago y miro alrededor.

Nunca había entrado en este local, no es muy grande pero se ve espacioso por la buena distribución de sus mesas y su decoración, sigo el recorrido visual del lugar y me paro en un pequeño escenario con 2 micrófonos y una pantalla, justo cuando la miro se enciende y proyecta las primeras imágenes un video clip y veo que es para hacer karaoke...

- ¡No me jodas! -exclamo al ver que salen al escenario un grupo de cuatro chicas y reconozco que son Greta, Úrsula y las otras dos chicas que estaban junto a ellas... Esto tiene que ser una p... pesadilla.

Admiro la actuación, no puedo quitar mis ojos de ella, esta espectacular con esa blusa y esos pantalones de cuero que se ajustan perfectamente a su precioso cuerpo... No para de sonreír y está disfrutando la canción de Cindy Lauper.

Termina la canción y ellas bajan del escenario entre aplausos y vítores, la verdad es que lo han bordado...

La sigo con la mirada, se van a la pista de baile y no pasan ni dos minutos que ya hay un grupo de tíos a su alrededor... Mi mano derecha se cierra de forma involuntaria preparada para actuar. No puedo contener mi rabia de ver a esos tíos cerca de ella.

De pronto uno de ellos se acerca a Greta por detrás y la coge de la cintura... Mi cuerpo reacciona como si fuera un resorte y me situó detrás del maldito hijo de p... que se ha atrevido a ponerle la mano encima. Lo agarró, lo separó de ella, lo giro hacia mi y con una mano lo enganchó del pecho y con la otra lo señaló con el dedo a modo de advertencia.

- ¡Ni se te ocurra volver a ponerle una mano encima porqué serás lo último que hagas! - La sangre hierve en mis venas y sólo tengo ganas de partirle la cara.
- ¿Y tu quien coño eres?- me suelta el muy cabrón, (creo que es bastante evidente que soy el que te va a romper todos lo huesos por tocarla)
- ¡Tu peor pesadilla como no te largues de aquí! - le contesto en tono amenazante.
- ¿Miguel?... -oigo su voz de asombro, la miro, tiene la mirada de desconcertada...

Mierda...