Me he despertado sudado e intranquilo. Cada noche lo mismo… sueños calientes y recurrentes y luego nada… ningún rastro de ella, ni una sola llamada.

No sé qué me coño me está pasando, no dejo de pensar en ella, hasta percibo su envolvente olor, ese perfume avainillado, dulce y seductor.

Nunca había pensado en nadie así que no fuera Greta, sólo ella ha logrado meterse en mi mente de esa forma, sólo ella ha conseguido que sea capaz de cualquier cosa por tenerla junto a mi.

Me doy una ducha para ver si así aclaro mi cabeza. Pero aún con agua helada nada hace que Leyla salga de mi mente, la imagino aquí, cayéndole el agua por su melena rubia mientras jadea y me pide más…

Hace casi una semana desde nuestro ultimo encuentro, cuando la hice mía, no he vuelto a verla y aunque la he llamado no hemos hablado sobre  nosotros sólo de negocios.

Necesito calmar esta necesidad, tengo que encontrar un pretexto para que venga a mi encuentro y tirármela hasta saciar mi deseo.

Suena mi teléfono, es Thiago.

- Buenos días Hermanito…
- Buenos días Thiago, ¿qué pasa?
- En principio, todo bien, pero quería saber si hoy  vas a venir por el local. Ernesto me ha preguntado por ti.
- ¿Y qué quiere?
- No sé,  no me lo dijo. Y otra cosa se supone que este fin de semana es la apertura de los dos locales. Tendríamos que reunirnos con las chicas para ultimar detalles. – y ahí está mi pretexto, gracias Hermanito.- ¿Puedes ocuparte tú? Yo tengo que ir a ver a unos proveedores si queremos servir copas…
- Está bien yo me ocupo.
- ¿Entonces vienes para aquí?
- Si, en una hora iré para allí.
- Perfecto, pues nos vemos entonces.
- Hasta ahora. – cuelgo.

Me visto para ir al local. Antes de salir cojo mi teléfono y llamo a Leyla.

- Hola Matheo. Dime.
- Te llamaba, para que te pases por mi despacho para ultimar los detalles para la apertura de los locales.
- ¿A qué hora?. Le diré a Zoe que también tiene que venir
- Si… claro…-¡ joder!- Venid cuando estéis libres…
- Sobre la una, a la hora de comer. ¿Te parece?
- Si, pediré algo y comemos mientras hablamos. ¿ok?
- Por mi perfecto.
- Pues perfecto entonces. Hasta luego.
- Hasta luego.- cuelga

¡Mierda!... Tengo que buscar una

Salgo de casa y cojo mi coche para ir al local. Cuando llego veo a Thiago fuera hablando con los que están colocando el letrero.

- Buenos días, ¿Todo bien?
- Buenos días hermano,  sí, están conectando el letrero y me estaban comentando que a parte de las letras luminosas han puesto luces de neón por el borde del cartel.
-¡ Ah! Perfecto. Oye Thiago, Cuando puedas ven a mi despacho.
- Vale, ahora iré.

Me dirijo a mi despacho a esperar que venga Thiago. Entro y me preparo un café. Me siento a tomármelo mientras reviso en el ordenador los gastos de la obra del local.

Llaman a la puerta, se abre y entra Thiago.

- Dime, ¿Qué necesitas?
- A la una vendrán Zoe y Leyla para hablar de la inauguración.
- Genial.
- Si, necesito que te lleves a Zoe con alguna escusa y nos dejéis solos.
- No te andas por las ramas…
- No, necesito quedarme a solas con ella.
- Está bien algo ideare para llevármela… a mi también me viene bien estar a solas con Zoe.
- Entonces todos contentos…
- Eso parece… Una cosa, podrías venir conmigo a revisar el local, a ver si falta algo… yo ya lo veo todo igual…
- Si vamos.

Salimos del despacho y echamos un vistazo a cada una de las zonas y estancias. Llegamos a los reservados VIP.

- A ver, este es el recados más grande ¿verdad?
- Si ¿por?
- Está completamente desaprovechado. La zona de sofás esta genial pero pasémosla para adelante y en ese lugar pongamos una cama balinesa con dosel y cortinas tupidas para dar privacidad.
- ¡Excelente idea!
- Gracias, y en esa Zona poned un billar y una Diana de tiro y algún que otro juego.
- ok.
- Y en los otros reservados también.  Pero la cama balinesa solo en este.
- Está bien. ¿Algo más?
- Si, en la zona principal hay que poner una zona más privada y tranquila para aquellos que quieran beber y charlar sin tener que gritar.
- ¡Genial!
- Otra cosa más… La terraza, poned zonas chill out y una barra de cócteles.
- ok. ¿Algo más?
- Si, quiero entrar en la puerta esa…
- No se puede hermano… ya te lo dije… es la única zona vetada de todo el local…
- Si viene una inspección se nos puede caer el pelo por esa puta puerta… así que quiero saber que hay ahí dentro.
- Para empezar sólo se puede abrir por el otro lado y tenemos totalmente prohibido indagar…
- Entonces que es esta puerta… ¿una vía de escape?
- Pues ni lo sé ni quiero saberlo, cuanto menos sepamos mejor para nosotros…
- Mira tío, he invertido mucho en esto y no me voy a jugar mi futuro por una puta puerta prohibida… Así que ya puedes ponerte las pilas e indagar hasta saber que coño hay tras esa puerta…
- ¡JODEER!

Me doy la vuelta y vuelvo a mi despacho.

Me siento en mi mesa crispado, se que esa puerta me va a traer problemas a corto – largo plazo, y no puedo permitírmelo, este local es mi billete de lotería para mi nueva vida, si pierdo todo esto, perderé la oportunidad de ser Matheo y seré otra vez un don nadie como fui siendo  Diego. Matheo me da la oportunidad de ser alguien  respetable al que no miren por encima del hombro…

Pican a la puerta y entra Thiago.

- Oye Matheo,  ¿Podemos hablar?
- Si es para buscar excusas para no hacer lo que te he dicho mejor no…
- Entiendo perfectamente lo que dices y tus razones… - ¡no, no entiendes una mierda!- Pero estos tíos no se andan con tonterías, la  condición para que nos cedieron el local era esa puerta y la total desinformación sobre lo que ocurría tras ella. Voy a hablar con ellos para camuflarla al máximo para que nadie vea una puerta. ¿te parece?
- Pues no, no me parece… para nada…
- Tío, intenta entrar en razón, y no remover la mierda. Nos vas a buscar un problema.
- Está bien, pero por ahora… ¡haz que esa puerta desaparezca de la vista!
- Vale, veré que puedo hacer…
- ¡NO!...¡HAZLO!

Sale del despacho y yo me siento totalmente frustrado… ahora necesito más que antes hundirme en el cuerpo de Leyla… Si hoy no consigo tirármela tendré que buscar otra presa para desfogarme…

Son las doce, el tiempo no pasa, la mañana se me está haciendo eterna…

Me vuelvo a poner en mi ordenador a ver si logro matar el tiempo y suena mi teléfono, es Leyla

- Leyla, dime.
- Oye Matheo, sé que es pronto, pero nosotras ya estamos libres ¿te va bien si vamos ya a tu local?
- Si, claro… ya podéis venir si queréis…
- Ok, pues en  diez minutos estaremos allí. Hasta ahora.
- Hasta ahora. – por fin…

Llamo a Thiago para avisarle que ya vienen y que esté atento a la puerta.

Pasan quince minutos empiezo a perder la paciencia… Ya tendrían que haber llegado…

Se abre la puerta y ahí está ella, tremendamente sexy, con una falda vaporosa, una camiseta de tirantes finos y su larga melena rubia cayendo libremente por su espalda, es lo que me faltaba para tener más ansias por poseerla sobre mi mesa.

- Hola Matheo.
- Hola Leyla…- presiento que mi voz ha sonado más oscura de lo que pretendía…pero veo que ella me sonríe. Creo que sus intenciones también son igual de oscuras.
- ¿Qué tal estás? He estado días que no sabía de ti…- noto su voz juguetona
- Pienso lo mismo…
- ¿Bueno empezamos con la reunión o os dejamos solos?- dice Zoe y yo solo puedo pensar en que esa es idea principal…
- Sentaros y hablemos…