Desperte de aquel ¿extraño? Sueño, estos días estoy soñando cosas ¿sin sentido? No lo sé. Hoy por fin Pandita y yo salimos del hospital, ella no podia utilizar mucho la mano donde se quemo, y yo por mi parte tengo que tomar algunos medicamentos, hibamos caminando de la parada del autobús hasta su casa agarrados de la mano, algunas personas nos quedaban mirando con curiosidad, y algunas tenían cara de desaprobación (mas que todo las chicas y los mayores de edad) miraban a pandita con desaprobación por su físico, una chica delgada, cabello negro y maquillada hasta la lengua, paso a un lado de nosotros y miro arriba de su hombro a pandita y me guiño un ojo a mi (que desgraciada) Pandita no le prestaba atención a todo esto y sólo seguia caminando, pero cuando ella se sentía mal, sólo me apretaba más la mano.

-pandita...¿sabes que te quiero verdad?

-si tae, me lo has dicho unas 20 veces de caminó a casa- le di un beso en la frente y seguimos caminando agarrados de la mano sin importar lo que digan las personas de nuestro alrededor (es imposible quedar bien con las personas) siempre que uno intenta ser mejor y cambia los aspectos por los cuales lo habían criticado antes...ahora también lo critican por las nuevas cosas, pero así es el mundo, nunca le vas a caer bien a todos, pero es mejor enfocarse en el lado positivo de las cosas y no ver toda la basura que le hechan a uno. Unas calles atras las personas miraban a pandita con desprecio y a mi me miraban con curiosidad como queriendome decir ¿de verdad estas con esa chica? Pero esas personas no conocen a pandita, y seguro y se ponen a platicar unos 10 minutos con ella se darán cuenta de que no hay que juzgar a un libro por su portada, y ahora que estamos sólo a una cuadra de la casa de pandita, una señora mayor estaba sentada en su jardín observando a las personas pasar, y cuando nos miro ella nos dio una sonrisa y nos dijo "adios tortolitos" Pandita le devolvió la sonrisa y se despidió de ella al igual que yo.

-la señora Margaret es muy linda.

-¿quien?

-la señora Margaret, ella a estado viviendo aquí en esta ciudad al mismo tiempo que mi madre y yo, ella es muy linda con mi madre y conmigo, sólo que desgraciadamente ella casi ya no puede escuchar muy bien, pero supongo que ya son los años.

-que mal...¿y se le llevamos algo?

-¿qué?

-si porque no, aveces es bueno dar regalos a las demas personas.

-esta bien...¿y si le cocinamos algo? Los familiares de ella no viven en este país, supongo que no le han hecho una comida casera desde hace tiempos.

-entonces...¿vamos al mercado a comprar?

-claro que si pero...¿con que dinero?

-no te preocupes por eso, yo lo pagaré.

-pero...me sentiría mal que sólo tu pagarás.

-no te preocupes por el dinero Pandita.

-ok...pero la siguiente vez la pagaré yo...no se como pero yo la pagaré.

-a ver si me ayudas en el trabajo, así te ganas algo de dinero.

-¿como se puede ser ayudante de un detective? ¿Hay que buscar casos?, ¿o hay que llevar tus cosas? U ordenarte la oficina...

-¿oficina?

-en tu casa habia una puerta misteriosa, pero en realidad era tu oficina o algo así ¿verdad?

-eres muy curiosa Pandita, me gusta pero también me asusta.

-¿eh? ¡¡¡Tae el bus!!!

(...)

-¿pandita estas bien? ¿No te golpeaste en el autobús? ¿No te duele la quemadura?

-Tae calmate, ya se que tengo que cuidarme por mi mano quemada pero tampoco estoy tan sensible- en el autobús Pandita y yo hibamos un poco apretados, la verdad es que en la hora del almuerzo no se llenan mucho los autobuses, pero creo que gracias a nuestra divina suerte esto no fue así, y por lo tanto hiba pendiente de Pandita, pero cuando nos bajamos del bus, un chico con cara de odio al mundo paso empujando a Pandita donde tenia su mano quemada, ella soltó un quejido a lo que el chico sólo se voltio y siguió con su camino, pero en el momento que nos voltio a ver, pandita y yo lo fulminamos con la mirada, por eso ahora mismo estoy al lado de su mano quemada para que no se tope con nada que le pueda hacer más daño.

-bueno...¿que vamos a hacerle a la señora Margaret?

-¿y si le hacemos un pastel?

-antes me habias dicho que le haríamos una comida casera.

-es verdad...tendríamos que buscar ingredientes para hacer una comida japonesa.

-¿porque? ¿La señora Margaret es japonesa?

-si, te dije que ella se había mudado al mismo tiempo que mi madre y yo, y pues ella venía de Japón, me a contado muchas cosas de su cultura y me a parecido interesante, tanto así que como un objetivo en mi vida es dar un paseo a Japón.

-algún dia Pandita...

-sólo que tengo una regla para mi misma si quiero ir a Japón.

-¿enserio? ¿Y cuál es si se puede saber?

-conseguir el dinero por mi misma, siento que si lo hago así me sentiré muy orgullosa cuando este en Japón, ya que estoy ahí por mi esfuerzo y no sólo por que la suerte me acompañe y me regalen un boleto.

-¿enserio no aceptaría un boleto a Japón si te lo regalarán?

-no e dicho que no lo aceptaría, dije que si consigo ir por mi esfuerzo me sentiré orgullosa de ese logro.

-entonces ¡animos pandita! seguro y lo vas a conseguir, pero ahora lo que tenemos que conseguir son ingredientes para un almuerzo.

-por como van las cosas, creo que sera para la cena, ya casi pasa la hora del almuerzo y todavia tenemos que ir a la casa y cocinar.

-entonces...¡¡Google ayuda!!

(...)

-¡¡TAEHYUNG CUIDADO!!

-Perdón....

-hay Tae...¿y ahora que vamos a hacer con la verdura en el suelo?

-perdón...

-¡ya! No pongas esa carita de niño siendo regañado- no se que me pasó, por un momento mi mano dejó de funcionar y dejó caer todas las verduras, era como si toda mi fuerza se hubiera marchado, pero por lo menos pandita sólo piensa que fue un momento de torpeza, pero en realidad no fue eso.

-bueno mejor sigamos con lo que tenemos- pandita fue a buscar las demas bolsas de la compra para sacar mas ingredientes, yo por mi parte estaba un poco asustado ya que mi mano no respondía, intentaba levantarla pero no se movia ningún centímetro, estaba empezando a sudar y eso pandita lo noto.

-¿Tae? ¿Estas bien? Si quieres yo puedo seguir con la cocina...

-pero...yo quiero ayudarte...

-ya me has ayudado con bastamtes cosas, ya sólo falta estar pendiente de que no se queme la comida, así que mejor ve a descansar- me sentí un poco mal, se supone que ella se tiene que cuidar la quemadura y yo sólo la estoy haciendo trabajar más, pero también mi manos seguía igual, me fui al sofá esperando que mi mano izquierda se le de la gana de hacerme caso. Pandita término de cocinar en unos minutos más, ella me dijo que podiamos ir ya a la casa de la señora Margaret, yo le dedique una sonrisa y le dije que si, pero en realiadas estaba empezando a frustrarme.

(...)

Todo fue de maravilla...excepto por mi mano, Pandita me estuvo preguntando si estaba bien, yo seguia intentando mover mi mano que estaba paralizada o estancada, no podia mover ningún dedo y eso me preocupaba, pero por otra parte. La señora Margaret nos estuvo contando historias y leyendas urbanas de su país, y también nos contó que ella era la hija de un productor de cine, ella contaba que de pequeña le gustaba ir al trabajo de su padre y ver todo tipo de historias y personajes ficticios, ella contaba emocionada parte de su niñez, pero también habló de lo hermoso y difícil que es nuestra edad, ella no sólo nos comentaba las cosas bonitas de su vida si no que también nos contaba la parte mala de su vida, ella nos contó como perdió a su segundo hijo en un accidente de automóvil, ella se sintió culpable por haber matado a su hijo que aunque no había nacido ya lo queria y amaba como si ya estuviera en sus brazos, pandita y yo la animamos y le dijimos que un accidente automovilístico le pude pasar desgraciadamente a cualquiera, luego ella nos dijo que ojalá hubiera tenido unos nietos tan amables como nosotros.

-fue un placer haberla conocido señora Margaret- hice una reverencia hacia la señora Margaret quien nos acompañó a la puerta a pandita y a mi.

-el placer fue mío joven, y gracias por la comida, no recordaba la ultima vez que me hicieron una comida tan deliciosa.

-no fue nada Margaret, en la siguiente ocasión traeré a mi madre, ella a querido venir a visitarla pero el trabajo se lo impide.

-su trabajo...aveces los trabajos lo consumen a uno, dile a tu madre que se cuide y que espero platicar con ella.

-se lo diré, tenga una linda noche-

(...)

Sueño

Me encontraba débil y con mucha hambre, todo mi cuerpo estaba inmóvil, escuchaba a lo lejos a dos mujeres hablando entre ellas, pero ahí estaba esa voz misteriosa de mi sueño anterior, fui abriendo los ojos y sólo pude ver humo y muchos árboles.

-¿sigues escapando de el? Por que el no esta aquí, pero sin embargo tu tampoco estas aquí, ¿como es eso posible? Estas siendo prisionero de ti mismo y no puedes moverte, pero sin embargo sigues escuchando, no estas vivo, estas durmiendo, esto es posible porque...

"Los sueños se hacen realidad"

Pero esta no es la realidad, ¿pero como le puedes decir sueño a algo que se siente tan real? No estas muerto, sigues respirando, estas entrando en un lugar que tiene salida pero no para ti, estas sonriendo pero no por estar aquí si no que es alguien la causante de esa sonrisa, pero ella no sonríe, ¿porque tu si lo haces? Ella no merece eso, ella es mala para ti, deja de mentirle pues ella ya sabe la verdad, y la verdad es que tu mientes, la verdad es que ella no recuerda, y tu tampoco.

Escuchaba y escuchaba, era todo lo que podia hacer, miraba a todas partes y por mas qué buscará entre todo el humo y los árboles no había señal de nadie, sólo se escuchaba la voz de alguien a quien conozco a la perfección.

Padre...

Sin duda esa era la voz de el, mi mente no podia procesar nada, sentia mis mejillas completamente mojadas por mis lagrimas, esa voz tan cálida, siempre oculte mis lágrimas que eran para el por mi madre, ella me decia que dejara de llorar por mi padre porque ella ya lloraba por los dos y yo tenia que ser fuerte, pero una vez más esa voz se fue para no volverla a escuchar. Sentí un nudo en la garganta cuando empecé a gritar para volverlo a ver, imagenes y recuerdos de mi niñez llegaron a mi cabeza como si fuera una película.

"La clave es una mariposa"

(...)

Estuve por lo menos 3 horas despierto en mi cama mirando al techo y pensando en mis sueños, se supone que cuando uno tiene un sueño y se despierta ya no lo recuerda completamente, pero las pesadillas son mas fáciles de recordar, ¿entonces son pesadillas? Porque recordaba cada detalle de esos sueños si se pueden llamar así, ahora en la mañana que desperté ya mi mano no estaba inmóvil, había regresado a la normalidad, pero lo que no regresará a la normalidad es mi salud mental si sigo así.

Despues de estar pensando bastante llegue a una conclusión, "tengo que investigar", escribí en un cuaderno todos los sueños y pistas que tenía a lo largo de este mes, habían frases que resaltaban entre todas las cosas, y también habían muchas preguntas por mi parte, esa voz distorcionada no me quiere ver feliz por lo que puedo deducir, ¿y porque mi padre apareció en este último sueño? Y lo mas importante, "Pandita no recuerda", ¿pero recordar el que? Y también yo estoy igual por lo que mi padre me dijo, me estaba empezando a frustrar por todo esto, incluso mis dos mejores amigos tienen alguna similitud con todo esto. En estos momentos me acorde de algo, pandita de pequeña, ella me conoce, pero siento que la pandita de ahora no recuerda muchas cosas, cuando le digo algo del pasado es ahí cuando lo recuerda, pero de lo contrario ella no lo sabe.

Fui a mi oficina donde tenía aún muchas fotos de mi niñez, recuerdo que en un final de año cuando tenia unos 6 años, mi madre había tirado todas las fotos de mi pasado, sólo que yo las saqué del basurero y las conservó aun, siempre e tenido miedo de entrar en una foto de estas porque no se que me voy a encontrar, si va a ser malo o va a ser bueno, tengo miedo de volver al pasado, pero si el pasado me ayudara para el presente no tengo otra alternativa.

(...)

Estaba en un jardín lleno de tulipanes y no muy lejos de ahí pasaba un río, y justo enfeente de lo estaba yo de pequeño en medio de mi padre y mi madre, era un dia soleado y muy hermoso, estábamos sentados en una manta tipica de cuadros y una canasta llena de comida (no veo nada raro aquí) miraba a mi padre con curiosidad, ¿tanto me parecia a mi padre? Tenía la misma sonrisa que el, la misma figura. Ni madre empezó a servir la comida, y yo por mi parte me puse a la par de mi padre para compararme con el, y da miedo ver como nos parecemos, aunque obviamente hay características y cosas en nuestro físico que no son iguales y nos hacen diferentes, mientras tomaba fotos del paisaje y de mi familia, mi yo pequeño intentaba seguir una mariposa y atraparla, me dio risa verme a mi lleno de mermelada en la cara y con una camisa de bob esponja corriendo de un lado a otro, me dio ternura mi yo pequeño, me ponía a la par de mi mismo de pequeño y tenía un presentimiento que el podia sentirme, pero de ahí recorde algo, en la naturaleza soy como cualquier cuerpo, puedo mover y dejar huellas, me di un golpe en la cara por no ser cuidadoso con eso, y ahora mi yo pequeño se fue asustado donde mi padre diciendo que le da miedo el campo.

El pequeño tae estaba durmiendo en los brazos de mi padre mientras mi madre recogia los platos, yo mire al rededor y me fije en la mariposa que mi yo pequeño seguía, esta mariposa se fue a unos arboles que habían por ahí, yo la seguí con curiosidad, "la clave es una mariposa", la mariposa me llevo a un campamento de adultos (o eso pensaba) pero mi gran sorpresa fue ver a la señora Min aquí, y a Pandita al lado de ella, mire a todos lados y habia algo que me llamó la atención...

"El padre de Pandita estaba besándose con otra mujer"

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AHRE :V
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Mil años despues aquí esta el nuevo capítulo de pandita y tae.

Pero hoy gracias a que ya estoy en vacaciones no voy a tardar tanto en subir nuevos capítulos.

Espero no les este aburriendo la historia :( por que aún faltan muchas cosas.

#teampandita🐼