" Miradas"

LUCAS

— La cafetería va a cerrar — les informo a Emma y Sam que se han pasado toda la tarde entre cafés y panes haciendo algún tipo de trabajo.

— Que?! — grita Sam mirando alrededor del lugar notando como todo esta completamente vacío.

— Que hora es? — pregunta Emma mirándome a lo que miro la hora en mi reloj para informar que son las ocho de la noche — Sam apenas terminamos el trabajo y falta la maqueta.

— No me lo recuerdes.¡¡Me voy a volver loca!!

—  ¿falta mucho?— pregunto

— ¡Si! — contestan al unísono mirandome unos segundos para volver a su conversacion.

— Tu hermano nos puede ayudar, es arquitecto? Cierto? Nos puede hacer la maqueta — Resuelve Sam pero Emma niega.

— Esta estudiando arquitectura Sam, no es arquitecto y esta noche no esta en la casa para que nos ayude.

— ¡Joder!

— Terminamos el trabajo en tu casa? O vamos a la mía.

— En cualquiera pero hay que terminar el trabajo escrito y hacer la maqueta.

En un momento siento la mirada del señor Ortiz de que ya es tarde a lo que decido interrumpir a las chicas.

— Chicas — la llamo interrumpiéndolas y centran su mirada en mi con ganas de matarme con la mirada — Es tarde tenemos que cerrar....

— Pero Lucas, necesitamos...

— Yo les ayudo, si? — interrumpo a Sam antes de que siga hablando y me llame la atención el señor Ortiz de nuevo.

— Sabes que es una...

— Si.Una maqueta — la interrumpo para comenzar a recoger sus cosas de la mesa — Solo terminen el trabajo en mi apartamento y una vez que terminen las llevo a sus casas, sí?

Asienten y solo se encarga de recoger todo cosa que agradezco ya que muero del cansancio.

Media hora después nos encontramos de camino a mi apartamento luego de pasar por una tienda a comprar todos los materiales que necesitan para su maqueta.

En el momento que me toco pagar todo ya me estaba arrepintiendo de haberme ofrecido de ayudarlas.

Una vez que llegamos al apartamento agarramos el ascensor y presiono el piso  donde queda mi apartamento, un par de minutos después las puertas se abren en el piso correspondiente así que salimos hasta llegar a mi apartamento.

Ingreso mis llaves para abrir la puerta y dejar pasar a las chicas.

Prendo las luces del living y de la cocina para darme cuenta de una nota que se encuentra en el refrigerador.

" Me quedo en casa de Steven para terminar un trabajo " Pdst: No me esperes el fin de semana en casa porque saliendo de clases me quedo en casa de Steven para la fiesta de mañana en la noche.

Idiota.

Saco un par de refresco del refrigerador para llevárselo a las chicas en el living mientras se encuentran ya instaladas trabajando en sus laptop.

Aprovecho y camino hasta mi habitación para darme una ducha rápida.

Cambio mi ropa por una mas cómoda para devolverme al living dispuesto a ayudarle a las chicas hasta que un mensaje por parte de Elliot en mi celular llama mi atención.

"Fiesta en casa de maddie, llégate en cinco minuto"

Por un momento me tienta la idea de aceptar la invitación pero miro a las chicas concentradas en su trabajo y en especial a Emma así que niego la invitación de inmediato para unirme a las chicas.

— En que les ayudo — digo tomando asiento en el living a lado de Sam a lo que esta suspira.

— Comienza a pintar los arboles

Señala un grupo de pequeños arboles que están al lado de Emma y suspiro un poco.

Va hacer una noche larga...

Pasan un par de horas en los que solo he sido pegamento y pintura.

No puedo creer que un jueves por la noche me encuentre haciendo una maqueta de preparatoria y no este en la fiesta de Elliot bebiendo hasta perder la conciencia.

Carajo! Que me esta pasando

Alrededor de las doce de la noche ha caído profunda Sam en uno de los sofás del living dejándonos el resto del trabajo a Emma conmigo.

Lo único que puedo apreciar es que la maqueta la estamos por terminar solo falta colocar los últimos arboles del diablo ya que me costaron hacer, en estos momentos es donde recuerdo porque preferi estudiar Negocios internaciones en vez vez algo relacionado con arquitectura.

— ¡Terminamos! — grita Emma pegando las ultimas figuras en la maqueta para dejarse caer en el piso de espalda muerta de cansancio.

Son las palabras mas bellas que he podido escuchar en toda la noche.

— No quiero saber nada sobre maquetas por un buen tiempo.

— No cantes victoria porque aun faltan los trabajos de la universidad que son mas complicados — le informo a lo que hace un puchero

— No me puedes dar siquiera cinco minutos de descanso. Por dios!— se queja brindándome una mirada de pocos amigos — no quiero pensar en la universidad — Reprocha a lo que me echo a reír

— Lamento decir que en unos meses van hablar todos de este tema — digo para acostarme al lado de ella — Sin una carrera profesional no tendrás un buen futuro....

— Es la decisión mas importante de tu vida ya que de eso depende tu futuro — Finaliza la frase a lo que sonrió con cierto sarcasmo.

— Palabras de padres — murmuro para verla asentir.

El coronel White siempre nos exigía ser los mejores en todo.

No aceptaba que tuviéramos una nota por debajo de diez en la casa ya que nota inferior a diez era mediocridad.

— Los colegas de mis padres pensaban que sus hijos iban a seguir su legado.

— Legado? — cuestiono

— Mis abuelos maternos y paternos también son cirujanos — informa con la voz baja — Los padres de mi abuelos paternos también fueron cirujanos.

— Familia de cirujanos —Murmuro.

— Si, pero a mi hermano no le gusta y a mi tampoco.

— ¿Que te gusta? — Me atrevo a preguntar ya que me parte me recuerda un poco a mi hace unos años

— No lose. Bueno pero...no tengo idea que me gusta

— Enserio? Piensa en que eres buena o donde destaques — propongo — Arte, idiomas, defensa personal — menciono algunas de cualidades que he podido apreciar de ella.

— Esos son hobbies. No son una carrera, no quiero equivocarme y empezar de nuevo.

— Emma, te vas a equivocar porque es parte de crecer y si la primera opción para estudiar no resulta puedes cambiarte e iniciar de nuevo. Nunca es tarde para hacer algo.

— Hablas como un anciano, sabes?

— Los años traen sus beneficios querida.

— Solo eres unos años mayor que yo, no te creas superior — murmura

Me acerco un poco mas a ella y puedo notar como se incomoda un poco.

— Tranquila — digo mirándola unos segundos— No hare nada.

— Tampoco te iba a dejar que hicieras algo.

La sonrisa triunfante en sus labios me hace sonreír como un tonto.

Me gusta esa parte de ella.

Que no se intimida con nada y lo independiente que puede ser.

— No serias capaz de hacerme daño Emma Cloud — la reto

— No soy una de tus amiguitas de una sola noche, delincuente — contesta mirándome a los ojos de forma retadora a lo que sonrió ya que es cierto ,ella no es como esas chicas.

Ella ese sencilla y hermosa.

Tiene esos bellos ojos verdes que me hipnotizan por unos segundos dejándome sin aliento.

La miro a unos segundos contemplando su rostro como de un momento a otro el tono rojizo sea apoderado de su rostro y para mi sorpresa se encuentra mirándome.

Sus labios carnosos captan mi atención y por unos segundos quisiera besarla pero lo mas seguro es que termine con mi nariz rota si me atrevo a tocarla.

— Eres hermosa — susurro sin esperar nada a cambio de ella solo acaricio su rostro por un momento pienso que va a rechazar mi caricia pero no lo hace.

Sus ojos se encuentran cerrados y yo no puedo dejar de mi mirarla.

Quiero besarla.

Me acerco mas a ella con cuidado hasta sentir como nuestras respiraciones se mezclan.

Emma abre los ojos y me mira con cierta ternura para darme cuenta que ella también quiere besarme.

Nuestras narices se rozan unos segundos y una sonrisa tonta sale de sus labios volviéndome loco por un instante siento como mi corazón late a mil por horas.

— Eres tan bella — susurro acariciando su mejilla dispuesto a besarla.

— ¡Oh, por dios! — la expresión de asombro de la voz de Sam me hace separarme de un respingo del lado de  Emma de inmediato y miro de inmediato a Sam que minutos antes se encontraba dormida en uno de los sofás

Maldita sea! Tenia que interrumpir.

Sam comienza a reír a carcajadas en su sitio y solo le brindo una sonrisa algo irritado.

— ¡Por Dios!  Iban a besarse?!! No lo puedo creer!! — chilla en medio de risas y carcajadas.

— ¡Estas loca! Lo debiste de soñar. Estas dormida  Sam — exclama Emma tratando de cambiar el tema a lo que agradezco ya que no tengo idea que decir.

— ¡Oh, mi vida! El sueño no me quita lo que vi — se burla — Tranquila, iré al baño. Sigan haciendo lo suyo.

Sam se coloca de pie para abandonar el living con una sonrisa burlona en los labios y Emma me mira unos segundos para sonreír algo avergonzada.

*******

El ruido de la alarma suena haciendo que suelte un gruñido en desaprobación ya que estoy que me muero del sueño.

Joder.

Me levanto para apagar el despertado e iniciar mi día.

En un momento reacciono que me encuentro en la habitación de mi hermano ya que Sam y Emma se quedaron dormidas en mi habitación.

Busco la ropa que aparte hace unas horas para poder salir a correr.

Guardo las llaves de mi apartamento en los bolsillos de mi sudadera y salgo del edificio.

Me echo a correr en dirección al gimnasio son las cinco y media de la mañana cuando llego.

Una vez que ingreso noto como Elliot se encuentro dando un par de indicaciones a un grupo pero se encuentra de muerte lenta con las ojeras que trae.

Una vez que me ve me saluda.

— Nos hiciste falta anoche en la fiesta de Maddie— masculla con una sonrisa

— Estaba ocupado — me excuso

— Follando con alguna chica? Repetiste con Nicole — Pregunta sin parar pero niego

— Tengo últimamente mas turnos en la cafetería.

— Te he dicho que dejes ese trabajo de mierda y trabajes en el gimnasio conmigo.

— Sabes que no me gusta ser instructor.

— Eres guapo, sabes las rutinas y las chicas te amaran. Tienes todo para ser entrenador.

—  Lo pensare — Me limito a contestar y me giro para coger una maquina para comenzar a calentar antes de seguir hablando con Elliot.

Una hora después me encuentro hecho un mar de sudor y antes de que Elliot venga a insistir en el mismo de tema de trabajar en el gimnasio me retiro para ir de vuelta a mi apartamento.

El aire fresco de la mañana me coloca de buen humor una vez que estoy de camino hacia mi apartamento

Justo cuando estoy por llegar comienzo a sentir hambre.

Abro la puerta del apartamento una vez que llego y el olor a comida recién hecha hace que me abra mas el apetito así que camino hacia la cocina para escuchar risas de parte de Emma con Sam en la cocina.

Emma se encuentra haciendo lo que parece ser un par de huevos revueltos mientras Sam se encuentra en unos de los bancos de la isla de la cocina con una sonrisa de oreja a oreja.

— Mañanero — escucho Emma a lo que asiento

— Salí a hacer ejercicio — explico y no puedo parar de mirarla se ve jodidamente hermosa con su cabello suelto junto con esa sonrisa en su rostro.

Podría acostumbrarme a tenerla mas tiempo en casa.

— Romeo,  podrías tomarle una foto a mi amiga para seguir mirándola sin que se te caiga la baba  — dice Sam a lo que Emma la fulmina con la mirada algo apenada.

—Sam — la reprime pero la sonrisa tonta en mi rostro no desaparece.

— ¿Que? Él esta loco por ti, ya cásense, por dios!

— ¡SAM! — chilla Emma y suelto una pequeña risa por su pequeña discusión.

— Van a clases, cierto?— cambio el tema a lo que asienten — ¿Las llevo?

—Si, por favor — contesta Emma mirándome unos segundos.

— Me ducho y las llevo.

Camino hacia mi habitación para darme un baño rápido.

Una vez terminado busco mi ropa para comenzar a cambiarme me enfundo en unos Jeans cuando estoy por elegir una camisa la puerta se abre para ver a Emma y ver como su rostro cambian de inmediato algo sorprendida al verme.

— Lo siento, pensé que estabas en la ducha — se disculpa  — Solo venia por mis tenis.

Tiene la mirada cabizbaja y puedo jurar que esta sonrojada.

— Tan sexy soy que no puedes mirarme — menciono dando un par de pasos acercándome a ella.

Ella parece notar mis pasos y alza un poco el rostro para mirarme.

Esta sonrojada.

— Porque no reconoces que te gusto Emma  — digo confiado porque puedo notar en su mirada que también le gusto.

Me acerco a ella lo suficiente para acariciar su mejilla y como se deja llevar ante mi caricia.

— Eres hermosa  — susurro con una sonrisa tonta en el rostro.

— No lo soy.

— No miento — admito ya que ella es hermosa.

Su cabello

Sus ojos

Esos labios que muero por besar.

— Eres hermosa Emma — murmuro y miro como en un acto muerde su labio inferior con picardía.

Por un momento dudo si me aceptara robarle un beso pero no aguanto las ganas.

— Juro que si no me detienes te besare — inquiero pero ella no parece detenerme rozo nuestras narices sintiendo como nuestras respiraciones se mezclan entre ellas y puedo apreciar como ella entre abre los labios. Quiere que la bese? Joder, muero por hacerlo pero necesito que ella me lo diga.

— Quieres? — insinuó — Quieres que te bese? — pregunto y asiente pero quiero que me lo diga ella, quiero escucharla de sus labios —Dime, que quieres? — pido a lo que ella me mira con los ojos dilatados en forma de suplica pero eso no es suficiente. Necesito que ella me lo diga.

Rozo nuestros labios un poco notando como se entre abre los labios para besarme pero en ese momento me separo de ella.

— Bésame — dice al notar mis intenciones tomándome por sorpresa unos segundos  — Por favor, bésame. Lucas — pide y es como música para mis oídos.

Corto el poco espacio que nos separa y la beso. Es un beso intenso sin pausa alguna solo puedo sentir como sus labios se mueven juntos con los míos en forma de necesidad nuestras lenguas comienzas a encontrarse y todo en un sin fin de emociones formándose cada vez mas intenso puedo sentir como las manos nerviosas comienzan acariciar mi abdomen y yo solo quiero tenerla mas cerca de mi.

Mis manos comienzan a buscar entre los pliegues de su blusa hasta que puedo sentir la piel caliente de su abdomen noto como se sorprende un poco pero no se aparta de mi incluso se acerca mas de un momento a otro por instinto aprovecho y la cargo un poco para llevarla sobre mi regazo hasta mi cama quedando ella a horcadas sobre mi mientras nos seguimos besando.

No me canso de esta chica simplemente es hermosa.

Un par de golpes en la puerta nos hace separarnos y maldigo internamente

— Emma, por dios! vamos a llegar tarde! — Urge la voz de Sam y gruño un poco ya que no quiero dejar de besar a Emma.

la respiración de Emma es completamente irregular puedo notar como su rostro esta sonrojado y de como se encuentra tratando de contener una sonrisa tonta en sus rostro.

— Como lleguemos tarde y el maldito señor Brown nos coloque un cero es tu culpa!! — Exclama Sam desde afuera y Emma aprovecha para levantarse sobre mi.

Se agacha un poco para coger sus tenis que se encuentran al lado de la cama.

— No tardes — dice mirándome a los ojos — Recuerda que eres nuestro chofer el día de hoy.

— Lose, mejor ve con tu amiga antes de que me tumbe la puerta.

— Exagerado — exclama y antes de que se vaya la agarro del brazo para tirar de su cuerpo hacia mi para darle otro beso que responde de inmediato.

— Necesito irme — pide entre mis brazos pero no quiero que se vaya — Sam terminara tumbando la puerta y nos descubrirá.

— Esta bien! Te dejo ir —  digo en un gesto indignado  para verla salir de mi habitación con una sonrisa tonta en los labios.

Amo a esta chica.

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Adjunto imagen de inspiracion de Sam