Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPITULO XXXVIII


TREINTA Y OCHO.

VIOLENCIA, LEER BAJO RESPONSABILIDAD.


HADLEY.

Todo estaba en completa oscuridad apenas y se lograba ver algunos puntos de luz que traspasaban las cortinas. Era inevitable parar de temblar cuando logré ver su figura a un costado de la cama, intenté moverme pero mis manos estaban esposadas por encima de mí, al parecer se percató que desperté.

—Niña, ha pasado tanto tiempo. —su asquerosa voz lograba erizar hasta el último vello de mi cuerpo, no podía verlo a los ojos y ni siquiera lograba distinguir su rostro.

Su manos comenzaban a acariciar mi cabello mientras lo olía, esto era tan repugnante que sentí nauseas, sus manos pasaron por debajo de mi camisa tocando mi abdomen, subiendo cada vez más y oprimiendo mis pechos.

—Déjame...

—Has crecido tanto —de un salto estaba sobre mí —. Ahora te hare mi mujer.

—Suéltame. —traté de detenerlo, pero era imposible, quería salir, despertar de esa pesadilla tan horrible.

Esa vez se tornó diferente, sentía claramente como mi cuerpo dejaba de recibir mis órdenes y volvía a ser una espectadora dentro de mi mente, no hice nada y solo observé como mi cuerpo fue tomado, otra vez mi mente se desconectó y volvió a conectarse; nuevamente volví a ser una espectadora y ahora miraba como las patadas que daba para detenerlo eran más fuertes que antes. Mi cabeza se volvió como una batería, mis cables estaban chocando y las personalidades comenzaban a chocar entre sí con desesperación, y yo, Hadley, solo miré como cada una de ellas actuaba.

No pasó más de media hora cuando por fin deje de sentir su peso sobre mí, y poco a poco comenzaba a tomar el control de mi cuerpo, me dolía ahí abajo y mis brazos estaban muy heridos. La luz continuaba siendo nula y las pisadas volvían a sentirse más cerca.

—Niña ahora seremos una familia. —imbécil soy tu hija.

Con una caja de fósforos enciendo una vela, quise gritar, ya no queria ser tocada por él.

—No, detente por favor.

—¿Detenerme? —rió —. Estoy comenzando a recuperar el tiempo perdido, quiero plasmar todo mi ser en ti niña, quiero quitarte del lado de esos ingenuos que pensaron que te tenían.

Dejó pasar un tiempo hasta que la cera de la vela comenzaba a diluirse al máximo, se acercó con una sonrisa en su rostro, parecía una escena siniestra de una película de terror.

—Para—

Ardió y ardía aún más, trazó un camino de cera caliente por mi abdomen y cuando llegaba a mis pechos dolía como mil infiernos.

—¡Para!

—Grita para mí. —esto era asqueroso.

No quería gritar más, cada vez que lo hacia su sucia boca chocaba contra la mía y era inevitable no sentir su asqueroso sabor.

—Niña, me vuelves loco. —su risa inundaba toda la habitación.

—¡Detente!

—Grita mi niña, ¡hazlo más fuerte!

—Por favor...

Sentí mi límite, todo comenzaba a ser dispersado, su voz cada vez se escuchaba más lejana, sus toques cada vez se sentían menos, mis fuerzas comenzaban a disminuir junto con las ganas de detenerlo.

Otra vez volví a despertar y mi cara estaba empapada de agua, creí que escape por un tiempo de esta pesadilla.

—No niña, no dormirás esta noche.

— Ya por favor.

—Te mataría para no volver a compartirte. —sus manos nuevamente estaban donde no debían.

—Hazlo ahora, ¡mátame maldita sea!

—Ahora no te estoy compartiendo, no mataría a mi juguete favorito.

Golpee su entrepierna en uno de sus descuidos, pero seguía esposada a esa maldita cama. Mi rostro se sintió aturdido por una fuerte bofetada de su parte.

—Yo no crie una niña malcriada —su tono se volvió más severo y por un instante tuve miedo de lo que pudiese llegar hacer —. Te enseñare algunas lecciones.

Sus embestidas fueron brutales e incluso sentía como comenzaba a sangrar por el dolor que me causaba.

—¿Te duele? Eso es lo que les pasa a las niñas malcriadas como tú.

Nuevamente comencé a salir del ambiente, mi mente comenzaba a colapsar por el dolor que me provocaba, creí ver ahora más cerca su rostro, tenía arrugas más marcadas y su cabello al parecer había sufrido el paso de los años, y sus ojos iguales a los míos comenzaban escanearme, por favor ya no me despiertes.

Mis plegarias no fueron escuchadas y nuevamente mis rostro estaba completamente empapado; aunque ahora mi mente ya no podía mantenerse más despierta, solo duré unos segundos más para volver a dormirme y ahora si para largo.

—Tengo muchos juegos preparados para cuando estén aquí —susurró a lo lejos —. Juegos que nos divertirán tanto niña mía, tú también reirás ya lo veras. 



SIGUE>>>>>>>>>>

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro