Mientras camina hacia la habitación del rubio, puede ver como algunas personas salen bien vestidos.

Algunos que otro con una rosa en su mano o una caja de chocolates.

El tiene una bolsa de las gomitas favoritas de Namjoon y una declaración que esta atorada en el fondo de su garganta y sabe que tiene que vivir con eso, tal vez para siempre.

El ha estado pensándolo y por mucho que sepa que Namjoon es la persona mas amable tal vez del todo el mundo.

No quiere decirle acerca de sus sentimientos, no cree aguantar un rechazo.

Pero a veces piensa que hay una posibilidad de que sea mutuo el sentimiento.

No puede pasar de desapercibido los sonrojos cada vez que lo halaga o cuando sus rostros están juntos o cuando le da un beso en la mejilla de despedida, y sin duda las miradas y risas que Namjoon le da cuando dice algo gracioso y el es el único que entiende sus chistes, porque ellos pasan demasiado tiempo juntos que ya tiene como un sentido del humor que sólo ellos comparten.

Suspira indeciso, debatiéndose si era buena idea ir a la habitación de Namjoon sólo para verlo por unos cuantos minutos antes de que salga por aquella puerta y pierda una oportunidad.

Tarda unos pocos segundos cuando toca y inmediatamente Namjoon abrre la puerta.

Justo como lo pensó, el cabello de Namjoon se encuentran bien arreglado y  trae puesto un lindo traje.

—Jin, ¿qué estás haciendo aquí?

Pregunta confundido, pero aún así se hace un lado para que Jin entré a su habitación.

Se sienta aún lado del peli negro cuando este pasa.

—Sólo no tenía nada que hacer.

Dice Jin. Namjoon lo mira indeciso.

—No te voy a decir que te quedes conmigo sólo quería desearte suerte antes de que te vayas, aunque estaba pensando si no es problema que me quede a dormir contigo.

—Siempre eres bienvenido.

Sonríe con ternura. Aún está un poquitito molesto con Jin por no decirle sobre su enamoramiento con quién sabe quien.

Pero es más que la presión en su pecho de tristeza al saber que alguien que no es el ocupa los pensamientos de su amigo.

—Perfecto.

Dice. Sabe que no tendría que estar haciendo esto porque esto no ayuda a apagar los sentimientos hacia su amigo, pero eso no lo detiene y toma la mano de Namjoon y lo jala hacia el.

—Te traje gomitas y quería decirte que te ves muy precioso y que hablar de tus ojos, este día brillan más.

Namjoon se muerde su labio muy sonrojado antes de dejarse caer en el regazo de Jin y dejarle un beso en la mejilla antes de abrazarlo de los hombros.

Lo único que puede escuchar es el sonido de su propio corazón latir con mucha velocidad y espera que no se escuche.

Jin inmediatamente le devuelve el abrazo mientras le susurra miles de halagos.

Los amigos no se tratan como ellos lo hacen.

Minutos después, Namjoon termina de arreglarse, mientras Jin está acostado mirando su teléfono y de vez en cuando mira de reojo a su amigo.

—Bueno, ya me tengo que ir.

Dice dejándose caer frente al peli negro con un puchero en los labios, acción que causa ternura en Jin.

—No quiero dejarte sólo aquí.

—No te preocupes por mi, ve y diviértete...y tráeme algo de comer.

Bromea Jin. Por mucho que quiera pedirle a Namjoon que se quede con él y que no vaya en aquella cita no quiere ser egoísta.

Namjoon no se mueve y Jin le da un golpe en el hombro.

—Vamos, se te hará tardé.

—Te quiero mucho, Jinnie.

Susurra y Jin no puede evitar que una sonrisa se extienda en su rostro y terminé envolviéndolo en un abrazos cálido y con sus corazones latiendo a más no poder.

En cuestión de segundos Namjoon se separa con las mejillas pintadas de rosa.

Una vez que Namjoon sale por aquella puerta sabe que ya no hay vuelta atrás, así se permite tirarse a la cama y pasar sus manos por su rostro.

Por un momento se había sentido lo suficiente valiente para confesar sus sentimientos, pero cuando Namjoon le dijo que no tenía tiempo para hablar porque se le estaba haciendo tarde aún cuando faltaba medía hora para llegar al lugar acordado.

Toda esa valentía se fue.

Sus manos tomaron su teléfono, esperando que Jungkook no esté muy ocupado para contestarle la llamada.

Pasan unos segundos antes de que su amigo contestara.

—Hey, Jin.

Dice a través de la otra línea.

Puede escuchar como camina de un lado a otro moviendo cosas y si como se imaginó, está ocupado.

—Veo que estás ocupado. Llamaré mañana

Jungkook lo detiene pidiéndole un momento que sólo hará algo y que luego le pondrá toda la atención.

Pasa esos minutos en la oscuridad de la habitación de Namjoon.

Su nariz puede percibir el ligero olor de Namjoon combinado con su perfume.

—Listo, ¿Qué paso?

Habla por fin Jungkook.

Jin juega con el borde de las sabanas.

—Es algo importante por lo que veo para que me llames. Tu nunca llamas Kim.

—Sí, algo así.

Muerde su labio. No sabe si es necesario decirle acerca de lo que siente por Namjoon porque sinceramente no sabe que hará.

—Como que estoy enamorado de Nam y el acaba de irse a una cita con alguien cuando esperaba invitarlo primero. Tal vez llegue tarde y no fue una invitación como tal.

—¿¡Como que no lo invitaste como se debe!? Allí esta el problema. Debiste de hacerlo bien y tal vez aceptaba.

Reprende de manera fuerte que Jin tuvo que apartar su teléfono y aún así podía oír las acusaciones.

—¿Cómo lo invitaste? ¿Qué le dijiste exactamente?

—Pues llegué y le dije "Estaba pensando que puedo pasar este san Valentín contigo, ya sabes, como antes ¿Qué dices? " ¿Crees que no debí pedírselo así?

Pregunta rodando sobre si y enterrar su rostro en las almohadas. Un suspiro se escucha a través de la otra línea.

—¡Por supuesto que no! Con razón no te tomo ¿En serio que no aprendiste del regaño que Jimin me dio por no invitarlo como el quería? Era algo cursi pero funciona.

Exclama indignado.

Se siente mucho mejor ahora que le contó acerca de sus sentimientos hacia Namjoon, y de la forma en que Jungkook no dijo nada acerca de ello y que le haya prestado mas atención a otra cosa.

—Es que...

Gruñe en las almohadas antes de levantar el teléfono.

—Namjoon no sabe que estoy perdidamente enamorado de el y no sabía como preguntar. En cambio tu y Jimin se gustaban mutuamente.  Es diferente kook.

—Pero asistieron al baile de Navidad juntos. Con razón no llevaste a otra persona, ya se me hacía raro.

Dice divertido. Jin inmediatamente se sonroja al escuchar a Jungkook

—¿Sabes que? No me digas, no pierdas el tiempo, mueve ese trasero y ve por tu chico antes de otra persona se lleve ese puesto.

—Creo que prefiero quedarme aquí acostado que ir y ser rechazado y humillado. Si eso suena como una gran idea, ¡pero gracias por las palabras, adiós!

—¡Kim Seokjin, si cuelgas te mato! Mira que voy al gimnasio.

Exclama indignado. Suspira antes de soltar un sonido de derrota.

—Bien, te voy a decir esto solamente una vez y si aún tienes tiempo y valentía, que yo en el fondo sé que tienes, levántate y ve por el jodido amor de tu vida, y cuando lo hagas envíame un mensaje, de lo contrario te estaré esperando con un buen regalo en la habitación. Así que no seas cobarde.

Antes de que pudiera decir algo Jungkook cuelga la llamada, se queda perplejo por lo que le acaba de decir.

En ese momento mira la hora en su teléfono y abre los ojos y toma las llaves que Namjoon le había dejado por si acaso iba a ir a comprar algo.

Sale corriendo esperando que no fuera demasiado tarde.

Cuando sale de los dormitorios y el viento le azota el rostro se percata que no sabe donde va, nunca le preguntó a Namjoon donde va hacer su cita y ya no hay oportunidad, no puede llamar a Namjoon y decirle donde era su cita.

Cuando pensó que todo estaba perdido escucha pisadas detrás de el e inmediatamente se da la vuelta, abre en grande los ojos cuando se encuentra con Yoongi que parece estar apurado.

—¡Tienes que ayudarme!

Toma al chico de los hombros y no busca parecer un loco o parecer desesperado, pero por la forma en que el chico abre los ojos y pone resistencia ciertamente cree eso, pero eso ahora no importa.

[Adaptación♤♡]