Una chica de 23 años aproximadamente se encuentra con su marido el se encontraba dormido mientras ella leía un rato y en eso la chica distingue en unos ojos que en particular, ella los conocía muy bien.

Ella solo le sonrió al ver a su pequeña niña de 5 años de edad, esta se escondía entre las sombras.

-¿Que haces despierta a estas horas?- Le pregunta Rachel a su niña

La niña solo se dejo de esconder y miro a su mama.

-¿Puedo dormir con ustedes?- Fue la respuesta de la pequeña.

-¿Y porque?- Pregunto su madre.

-Es que hay muchos monstruos en mi cuarto y tengo miedo- dijo la menor.

Su madre trato de pensar en como tratar de que su hija dejara de tener miedo.

-¿Y como son esos monstruos?, ¿son peores que los ronquidos de tu papa?- Dijo divertida.

-Si y mas fuertes- Dijo la niña riendo.

-Bueno vamos a tu cuarto para espantarlos- Dijo su madre.

La pequeña solo se limitó a asentir y las dos fuero al cuarto en la búsqueda de esos monstruos.

-Y donde se esconden?- Pregunto la chica

-Debajo de la cama, en el armario, en la caja- Dijo la niña algo asustada jugando con un peluche de un mono color verde.

-En serio en todos esos lugares- Dijo su madre,

-Si mama Monkie y Yo los vimos- Dijo la niña refiriéndose a ella y su peluche.

-Muy bien vamos a ver que hay aquí- Dijo Rach observando debajo de la cama de la niña y dentro del armario- Pero no hay ningún monstruo.

-Es que tu los espatas mami ellos te tienen miedo- Dijo la niña.

-Entonces vamos a dormir- Dijo su madre mientras cantaba.

-Mama esta aquí a ver
Y protegerte
No hay que temer
Miedo restante

Y hay que disfrutar
De tus sueños
Jugar, Correr, saltar
Y recordar de ellos

No hay monstruos
Que nos puedan atacar
Si estamos juntos
Porque sabemos amar-

La canto una y otra vez hasta que su hija se comenzó a quedar dormida ella le dio un tierno beso en la frente.

-Mama podrías no apagar la luz los monstruos van a venir- Dijo la niña adormilada.

-Claro cariño y recuerda el miedo es algo natural, solo podemos enfrentarlo- Dijo su madre acariciando la mejilla de la niña

Serró la puerta y se fue a acostar con su esposo trato de no despertarlo pero su intento fallo.

-Por fin vas a dormir- Pregunto su marido.

-Si estoy cansada de espantar monstruos- Dijo Rachel.

Garfield se acomodo abrazando a su esposa para poder dormir.