
Capitulo 3: Escape
Todo durante los siguientes dos meses se sentía con una calma casi abrumadora, Alemania se dedicaba a limpiar y a leer su libro, ya lo habia leido tres veces, le gustaba mucho, ya que, aunque le diera vergüenza admitirlo, le parecia interesante y hasta romantico los sucesos que aquella obra rusa presentaba, pero de hecho, lo que ocurria en su unico alcance hacia entretenimiento entre aquel ambiente frio y blanco, eran un manojo de comportamientos que para una mente joven como la suya, resultarian dañinos a futuro si se normalizaban.
URSS prestaba atencion a cada detalle de su compañero, apezar que nunca estaba en la cabaña no habian señales de que no hubiera echo más de lo que se le ordenaba, es así, que ante su buen comportar, decidió cumplir lo que le habia prometido, un día llegó con una mochila en brazos, bastante simple y hasta barata, pero el aleman no se olvidó de ser agradecido ante tal regalo.
En cuanto obtuvo aquel objeto en brazos, rápidamente se le ocurrió sacarle provecho, estaba harto de aquella aburrida rutina y dejarse pisotear por alguien, que segun su misma definición, no era más que un grandulon inferior y prepotente que lo trataba como si fuera un niño, y aunque realmente lo fuera, le era vergonzoso que lo vieran como tal.
Es así, como una noche mientras el soviético no estaba, empacó un par de cosas utiles para la supervivencia en aquella mochila, no olvidandose de un cuchillo por si se le presentaba una amenaza, y salió de aquella cabaña, no sin antes reflexionar si era una buena idea o no, pero despues de mucho pensar, se le vino a la cabeza que, era mejor morir en aquel bosque que de viejo en esas cuatro paredes, así que tomó valor, y se adentró en aquel enorme lugar donde lo esperaba la liberatad o las garras de la madre naturaleza, que muy piadosa no era.
Sus botas marcaban donde pisaba, para su suerte la noche era calmada aunque oscura y fria, tenia una linterna como unica fuente de luz, su corazon latia con fuerza a medida que se adentraba cada vez más en aquel aterrador bosque que había sido protagonista de sus pesadillas, pero él mismo trataba de convencerse que no tenia miedo, él era aleman, los alemanes nunca tenian miedo, o eso se suponia.
Despues de unas cuatro horas caminando, decidió que era momento de descansar, caminar en la nieve era dificil y no sabía donde estaba, a su alrededor no habia más que arboles, miraba a su entorno mientras respiraba agitado, tratando de decidir a donde ir, aunque le era dificil determinar cual camino le podria asegurar su supervivencia sin un mapa o algo que lo guíe, estaba perdido.
De repente se escuchó un ruido entre los arboles, se sobre saltó y rápidamente agarró la linterata, apuntando directamente hacia el origen del ruido.
Un oso, considerablemente más grande que él, giró hacia su direccion en cuanto sintió la iluminacion de la linterna.
Alemania se quedó congelado, el enorme animal se quedó mirándolo fijamente un momento antes de hacercarse lentamente hacia él.
__no, no...por favor alejate..__dijo, mientras temblaba de tanto frio como miedo y trataba de alejarse, aquellos movimientos llamaron más la atencion del oso, el cual rugió de forma feroz para luego correr hacía él.
Alemania intentó pararse para poder huir, pero antes de siquiera lograr dar un pasó, sintió como algo lo agarraba de la pierna con tal fuerza que pudo escuchar como sus huesos se desgarraban, el animal lo tiraba violentamente hacía atras, gritó con desesperó mientras se sujetaba de forma inutil de la nieve.
__¡sueltame! ¡Por favor que alguien me ayude!__sollozó, se dió cuenta en ese momento que había cometido una estupidez, nunca debió salir de la cabaña y ahora estaba pagándolo de forma muy cara. El oso sacudió más su cabeza, logrando casi arrancarle la pierna, la nieve se tiñó de un rojo carmin muy fuerte mientras el aleman lloraba y gritaba pidiendo ayuda.
No queria morir.
De repente, escuchó un ruido fuerte venir de entre los arboles seguido de un atemorizante grito que exclamaba su nombre, miró hacia atras y vió como el enorme animal que lo estaba atacando soltaba su extremidad al ser derribado de una forma brusca.
Como pudo se alejó de la escena hasta chocar de espaldas contra un arbol, fue en ese momento cuando se percató de la presencia de URSS, el cual estaba sometiendo al oso en el suelo.
Tras un tiempo de forcejeó, el gran animal por fin pudo liberarse y huir, adentrandose al bosque hasta que su figura desapareció entre los arboles.
Alemania miró como el oso se iba, pero no pudo respirar tranquilo gracias a la presencia del soviético, este con pasos firmes y que retumbaban dejando en evidencia su enojo, se direccionó hacía él.
__eres un niño eatupido...__le dijo con un tono aspero y frio, Alemania normalmente se defenderia ante tal insulto, pero casi no podía concentrarse gracias a la perdida de sangre que ya le estaba cobrando factura__mereces que te deje semanas sin comer o que te deje pudrirte aqui por tal idiotez, pero creo que tuviste ya suficiente castigo.__apuntó a la pierna del más joven, la cual estaba ya a tan solo un par de ligamentos de salirse.
El joven solo se apoyó contra el arbol donde estaba mientras respiraba agitado, miró el cielo estrellado y pudo escuchar como URSS le hablaba, pero no podia entender lo que decía, era como si estuviera lejos a pesar que estaba literalmente enfrente de él, lo siguiente que sintió fue como el soviético lo agarraba y lo cargaba, poco despues terminó desmayandose.
Despertó un par de horas después, confundido y con un gran dolor, su vista se dirigió hacia toda la cabaña mientras trataba de procesar lo que pasaba, vió a URSS en la mesa mientras tomaba un té, esa escena hizo que recobrara un poco de sentido.
__buenos días__saludó el gran soviético con indiferencia, Alemania no pudo contestar durante unos segunos, simplemente tragó duro.
__buenos días...__contestó, para luego intentar pararse de la cama, pero justo en ese momento se cayó al frio suelo de madera, despues de procesar durante un corto lazo de tiempo, se dió cuenta que no sentia la pierna, con miedo de lo que podria encontrarse, miró hacia abajo y pegó un grito.
__tuve que cortartela__dijo el mayor dejando la taza de té en la mesa para luego hacercarse al más joven__si la dejaba iba a infectarse y hubiera sido peor para ti__lo ayudó a levantarse y a colocarse de vuelta en la cama__espero que esto sea una leccion para que no vuelvas a intentar escaparte.
Alemania lloraba mientras miraba su nuevo muñon cubierto por vendas donde antes se encontraba su pierna, no podía creerlo, hubiera preferido morir antes que eso.
__¡soy un maldito invalido!__lloriqueo mientras se tapaba la cara.
__ya lo eras antes de perder la pierna__gruñó, molesto por los gritos de su compañero__ya calmate, no es el fin del mundo.
Alemania continuó llorando un rato más, haciendo que URSS deseara haberlo dejado morir antes que soportarlo, pero despues de un rato se calmó un poco, el soviético suspiró y se hacercó a la chimenea, sacando un par de papeles de uno de sus bolsillos.
__¿q-que es eso?__preguntó el más joven, mientras se limpiaba las lagrimas que no paraban de salir.
__iba a inscribirte a una escuela...__confesó, mirando los papeles fijamente__pero ahora creo que no te lo mereces__finalmente los tiró al fuego.
Alemania se angustió al escuchar eso, hacia un mes que las clases habian empezado en el pueblo que estaba a un par de horas de la cabaña segun le había contado URSS, le pidió durante un buen rato ser inscripto ahí para tener algo más que hacer, pero el soviético se lo negaba al no confiar en él todavia, rápidamente su arrepentimiento de haberse escapado se perpetuó aun más de lo que ya estaba, ni siquiera se atrevió a exigir nada, de todos modos ya le daba verguenza su apariencia al ser oficialmente discapacitado, no queria mostrarse ante nadie luciendo así.
__voy a ser más duro contigo de ahora en adelante__dijo de repente el ruso con un tono mucho más agresivo, llamando la atencion del aleman quien rápidamente levantó la cabeza__se terminó ser amable contigo, niño malcriado, no podras salir de esta cabaña sin que yo este presente, e instalare una cerradura en la puerta ¡¿está entendido?!__gritó lo ultimo.
El aleman asintió enseguida con miedo, sabía que de ahora en adelante las cosas no serian tan faciles. Aquello le recordó una frase de su libro.
"Y desde entonces, la joven perdió toda esperanza de libertad"
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