Emarie Narcissa Malfoy
"Soy Amatista y al igual que la gema, soy muy serena, tengo muy buena memoria y muy buenos instintos. Elegimos nuestras gemas a combinación con nuestras personalidades"
—Interpratada por Cloe Bennett

Con los de la Orden del Fenix y los amigos de Harry, Ron y Hermione:

A los chicos ya les habían explicado sobre la inocencia de Sirius y ahora conversaban de lo más normal.

—Yo sigo sin poder creer que mi prima esté con Snape—dijo Sirius con una mueca.

—Y yo no puedo creer que mis padres se sacrificaron y no huyeron de ser torturados—dijo Neville, todavía mareado por las primeras dos presentaciones.

—Se que es mucha información que procesar—dijo Tonks, quién junto a Hermione, estaban intentando suavizar las cosas—, pero son cosas que pasan. Y todo pasó por algo.

Mientras que Hermione tenía que lidiar con las preguntas de sus compañeros apareció su salvación.

—¡Hermione!—dijo Adelaia sentandose a su lado y apareciendo de la nada, como solía hacer siempre.

—Casi me matás del susto, Lilliane—le dijo dandole un leve empujón—¿y? ¿Les sacaste algo de información a tus hermanos sobre el futuro?

—Literalmente nada, hicieron un pacto de silencio con sus amigos y no piensan hablar sobre el futuro de nadie—dijo la pelinegra rodando los ojos.

—¿Y vos, Hermione? ¿Cómo entrás en la historia?—le preguntó Ginny y después miró a Adelaia—, supongo que vos sos una de las hijas del profesor Snape.

—Sip, la mayor—asintió Lilliane con orgullo y miró a Neville—. Nev... Neville, tengo algo para vos. Te lo tendrían que dar mis padres, pero considerando que no te llevás bien con ninguno de ellos...

Le entregó un sobre que decía "para Neville de mamá y papá". El chico miró con sorpresa a la mesa de las serpientes, buscando con la mirada a Bellatrix y a Snape, quienes hablaban animadamente con Daphne y Milicent. Pero por un segundo creyó ver que Bellatrix le sonreía, pero después no vió nada más.

—Gracias Lilliane—dijo el chico.

Ya desde la perspectiva de todo el Gran Comedor...

Al escenario se subió una hermosa chica rubia platinada y de ojos marron oscuro. Sacando por los ojos cualquier persona diría que aquella chica era una Malfoy hecha y derecha. El pelo lo tenía bastante largo y ondulado, era hermosa. De ropa llevaba una remera blanca de manga corta suelta y un short de jean azul, era hermosa.

—Hola—saludó la chica con una sonrisa encantadora, a lo que muchos suspiraron al ver lo hermosa que era.

—¿Malfoy mujer?—se confundieron muchos.

—Exacto, pero no soy la primera ni la última Malfoy mujer—dijo con una sonrisa, sonrisa que ya muchos conocían.

—Hija de Andry—dijo Draco con un gruñido al saber que su hermana se casaría.

—Exacto, pero yo no voy a decir quien es mi padre—aclaró la rubia, haciendo que su madre se decpcione.

—¿Por qué no?—le preguntó la chica Malfoy.

—Porque mi hermano menor me lo ganó, soy Emarie Narcissa Malfoy, la primera hija de Andrómeda Malfoy—dijo con una sonrisa hacia su madre.

—Felicidades—le dijo Helena con una sonrisa a su mejor amiga.

—Gracias Hele, vos seguro sos su madrina—dijo guiñandole el ojo.

—Exacto, mis padrinos son Elena Tonks y Charlie Weasley—dijo con una sonrisa hacia los mencionados.

—Gracias Andry—dijeron ambos, Elena abrazandola ya que estaba al lado suyo.

—Tengo 20 años y cuando estaba en Hogwarts fui a Slytherin como mis abuelos—la casa estalló en aplausos y vítores.

—Al final de las presentaciones la casa que más integrantes tenga recibirá 150 puntos—dijo una encapuchada.

—Me sigue pareciendo injusto, lo hacen solo para ganar—dijo otro encapuchado.

—¿Admitís que somos mejores?—le preguntó otra voz con burla.

—Nunca de los nunca—dijo el mismo chico molesto.

—¿Les recuerdo que quién tuvo la idea fue Lia?—los interrumpió Emarie, cansada de no poder presentarse.

Se escucharon bufidos y comentarios sarcásticos hacia la tal Lia.

—Sigue, Malie—dijo una voz femenina.

—Gracias Lilu, en fin. Mis materias favoritas eran Transformaciones y Encantamientos, no me gustaba Herbología, era un desastre.

—Es de familia—se rió Pansy, recibiendo una mala mirada de los Malfoy presentes.

—Lo sé, nosotros solemos tener grandes habilidades en Pociones y no en las plantas—se rió la rubia y la pelinegra se rió, sabiendo que era verdad—. Jugué al Quiditch como cazadora hasta mi quinto año que decidí concentrarme en mis estudios.

Su madre y su abuela sonrieron orgullosas, felices de que la chica no haya hecho bromas.

—No fui prefecta ni premio anual porque alguien me ganó los puestos, pero fui de las mejores de mi generación—su familia sonrió con orgullo.

—Esa es mi hija—le dijo su madre orgullosa—¿tenés novio o esposo, cariño?

—No digas tonterias, Andry. Mi sobrina no va a tener esposo hasta los 50—dijeron Draco, Blaise, Theo y Gregory a la vez.

—De hecho... tuve novia hasta hace poco pero cortamos, no quiero hablar de eso—dijo la chica con una mueca.

—¿Puedes realizar un patronus?—le preguntó Hermione.

—Si tía Herms, mi patronus es un pavo real como el de mi abuelo Lucius—dijo sonriendole.

—¿En que año vas nacer?—le preguntó Blaise.

—Naceré el 13 de enero de 1998—dijo la chica rodando los ojos— ¿más preguntas? Abu Vir.

—¿De qué trabajás?—le preguntó la mujer.

—Soy modelo, pero lo hago por hobbie. No necesito trabajar para mantenerme—se encogió de hombros—aunque la mayoría de mis primos sí trabajan. Yo no lo necesito y no quiero, hago modelaje porque me gusta y ya.

—Definitivamente una Malfoy—confirmaron muchos.

—¿Nos podés dar una pista sobre tu padre?—se impacientó Terrence.

—Soy sangre pura, es lo único que puedo decir—se encogió de hombros la rubia, haciendo que varios se decepcionen. Esa no era una pista en lo más mínimo relevante.

—¿Tenés de mascota un dragón?—le preguntó Bella, a lo que la chica le sonrio.

—Por supuesto, todos lo tenemos. ¿Pongo una foto?—y así lo hizo.

—Él es Chihiro, mi dragón. Ya se que es pequeño, pero bueno—se encogió de hombros—. Y ahora las comidas

Emarie estaba en su habitación con sus amigas, a quiénes no se les veía la cara.

—Em, estoy nerviosa—dijo una joven rubia de mirada y porte elegante.

—Serps te ama, Clari. De eso no hay dudas, y además tu madre lo adora ¿no?—le preguntó otra chica rubia a la que no se le veía el rostro.

—Exacto, como dijo Apo—le dió la razón Em, mientras se preparaba.

Estaban preparandose para tomar el té con la alta sociedad de Inglaterra, con las familias más influyentes de la alta sociedad. Como los Higgs, Black, Zabini, Nott, Malfoy, Scamander, Flynt, todos los Weasley, Crewey entre otras.

—¿Weasley y la alta sociedad?—preguntó Daphne con sorpresa y muchos la miraron mal—. No me mal entiendan, no tengo nada en contra de los Weasley, pero a la mayoría le faltan los modales y la ciase que un sangre pura de alta sociedad debería de tener.

—¡hijas, chicas! Ya llegaron los invitados—se escuchó el llamado de Andry.

Las chicas bajaron las escaleras con elegancia y con un abanico en la mano. Todas llevaban vestidos largos y muy elegantes del estilo viejo para seguir la tradición del té.

Esa tradición se remontaba a siglos de antigüedad, aunque después de la guerra varias familias habían empezado a ser invitadas a aquellas cerrmonias. La anfitriona era Andrómeda II ***** y el salón de té de la mansión era el elegido.

Había muchas personas, las jóvenes estaban separando de las mujeres y estaban tomando el té con elegancia.

—Bueno, eso es todo de mi. Adiós—dijo bajando con elegancia del escenario y se sentó junto a su madre en la mesa de las serpientes.